Era una fresca tarde de Domingo, Septiembre se acercaba y con él se acercaba el inicio de clases en Hogwarts; eso era lo que pasaba por la mente del famoso mago y director de dicha escuela, Albus Dumbledore, justo en aquél momento previo a que la profesora de transformaciones McGonagall interrumpiera sus pensamientos –Discúlpame, Albus, tengo una extraña noticia para darte.

-¿China ataca Kamchatka?

-¿Qué?

-Nada, nada… Dígame ¿Qué noticia?

-Al parecer, con la llegada de Harry Potter, las lechuzas que llevan las cartas a los futuros alumnos de nuestra escuela se emocionaron mucho y creyeron que sería conveniente no dejar que los estudiantes extranjeros vengan a nuestra escuela.

-¿Por qué?- Preguntó confundido sin entender

-Para no causar tanto revuelo…

-¿Cómo es posible que las lechuzas decidieran eso?

-Al parecer fue una legión de lechuzas rebeldes…

-Ya veo…- Se levanta de su asiento y se acerca hasta la ventana para ver a través de ella – ¿De qué países eran estos alumnos que nunca les llegaron sus cartas?

-De Estados Unidos y Argentina.

-¡Pamplinas! ¿Tenía que ser justo de esos dos países? ¿No podía ser Canadá y Suecia?

-¿Qué haremos ahora? – El director hace unos segundos de silencio, en los cuales medita la situación.

-Envíales sus cartas esta misma tarde.


Esa mañana parecía muy tranquila en Ohio, las clases transcurrían con normalidad, ningún profesor fue victima de bromas, era un día demasiado normal en la secundaria McKinley, pero, ignorando aquello, los chicos del Club Glee cantaban como era ya costumbre - Muy bien, chicos, desde el…- Se vio interrumpido el señor Schue, por el director Figgings que se hacía presente en el lugar.

- Disculpa la interrupción, Schue, pero necesito comunicarle algo a los chicos- Anunció Figgins

- Adelante.

- Chicos, necesito verlos mañana cuando finalicen las horas de clases en el auditorio

- ¿Pasó algo malo?- Preguntó Rachel y todos se voltearon para ver con una mirada asesina a Puck

- No se preocupe, señorita Berry, les aseguro que es algo bueno, y sorprenderá a más de uno… Me retiro así pueden seguir con su ensayo, hasta mañana.

Después de aquello, el Director, fue hasta su oficina con la decisión de hacer cuatro llamadas, que no tenían que ver con alumnos de su escuela. Discó el primer número, una voz arrogante lo atendió desde el otro lado, continuó con el segundo número y esta vez lo atendió una voz de un hombre amable, el tercero fue un sociable muchacho, y para el cuarto número, lo atendió una simpática voz femenina. Les comunicó la situación, los vería a todos al día siguiente.

Al otro día, cuando terminaron las horas de clases uno a uno, cada grupo familiar se sentaba en los asientos del auditorio, intrigados, se saludan y se preguntaban unos a otros qué ocurría y de repente, las cosas se pusieron tensas: Jesse entraba al auditorio con sus arrogantes padres, las expresiones de desprecio en sus caras eran evidentes

-¿Qué carajo hacés acá?- Gritó Puck, al tiempo que él y sus compañeros del coro se levantaban de sus asientos mirándolo de manera desafiante

-¡Noah!- Dijo su madre aterrorizada, él, simplemente la ignoró. Jesse se rió y sus padres simplemente miraron al joven con el mo-hawk con repulsión.

-No te preocupes, muchas ganas de estar acá no tengo, simplemente recibí un comunicado de su director…- La familia Saint James se sentó, un poco apartada de las demás

En medio de ese clima de tensión llegó Kurt, con su uniforme de Dalton y corrió a darle un gran abrazo a su amiga Mercedes

-¿Qué hacés acá?- Replicó ella, separándose extrañada

-Figgins me llamó, y dijo que quería que venga, supuse que era algo de mi nueva escuela, pero ahora que veo a Jesse… me da la sensación que se trata de algo más- Burt y Carole que llegaron detrás de él se sentaron juntos, muy extrañados.

Al rato llegó Blaine y con un tímido 'Hola', se sentó junto a su familia. Por último, llegó Sunshine, quien imitó a Blaine bajo a las curiosas miradas de los chicos de New Directions, todos se miraban intrigados e incluso, algunos, se miraban con rencor, había un silencio que parecía que en cualquier momento estallaría en una fuerte discusión contra el protagonista de Vocal Adrenaline, pero hubo un sonoro 'crack' en el que todos dieron un respiro, y se dieron cuenta que Figgins había aparecido en el medio del escenario.

-Buenas tardes, algunos tal vez estén sorprendidos, otros tal vez no- Una soberbia sonrisa se dibujó en la cara de Jesse y Mike soltó un 'WOW' muy evidente- Es un tema muy complicado de abordar… Empecemos por el principio, como bien se diría- Hizo una pausa de unos segundos para preparar lo que iba a decir a continuación -Todos los adolescentes en esta sala son magos- Una mezcla de risas y susurros llenaron el lugar.

-Oh, por favor ¿Qué te fumaste, Figgins?- Dijo Santana con una expresión indignada y cruzada de brazos, no podía creer que el director la estuviera haciendo perder tiempo en el que podría estar convenciendo a algún chico que la invitara a comer a Bredstix en esa locura.

Pero nadie le hacía caso a la Cheerio, muchos confundidos, muchos con cara de culpable, otros miraban con reproche a sus padres, quienes con vergüenza no se atrevían a mirarlos. Figgins soltó un suspiro pesado, a pesar de que se esperaba dicha situación, apuntó su garganta con una varita, y dijo –¡Sonorus!- Su voz se elevó por sobre los murmullos -Por favor, todos, cálmense -Murmuraron unos segundo más y miraron al frente -Yo sé que esto puede parecer disparatado, pero créanme ¡Esto es verdad!

-Sim claro, tan verdadero como los pechos de Santana- Dijo entre risas Mercedes

-Discúlpeme, Director Figgings- Lo interrumpió Rachel poniéndose de pié –Pero no puedo creerle, porque si yo fuera maga, ya lo sabría, mis padres me lo hubieran dicho- Con esto, sus padres se miraron y luego bajaron sus miradas con algo de pena, la chica notó esto y se volteó a verlos indignada -¡¿Es verdad?

-No sé de los padres de Rachel, pero estoy segura de que mi mamá nunca me ocultaría una cosa así…- Dijo muy seguro Finn, a pesar de que la idea de ser mago le parecía muy genial; su madre suspiro y pasó su mano sobre el hombro del chico con delicadeza para llamarle la atención.

-De hecho, Finn, es cierto…

-¡¿Qué?

-Me siento terrible por habértelo ocultado, pero cuando tu padre murió, sentí que debía guardar el secreto

-¡Mamá! ¿Por qué nunca me dijiste que había más familias de magos en Ohio?

-¿Ya lo sabías, Puck?- Preguntó confundida Quinn.

-Puck no es el único, yo también lo sabía, de hecho mi papá siempre me enseña trucos nuevos- Irrumpió Kurt con un tono de voz tranquilo –Aunque mi mamá solía enseñarme más.

-Yo también lo sabía- Dijo Tina ante la extrañada y exagerada mirada de Mike, nerviosa se dedicó a explicarle –Siempre lo supe, pero mis padres no me dejan usar la magia- Hizo una pausa en la que miró a Figgings y bajó su tono de voz –Y mi tío es un vampiro.- De la nada se escuchó un órgano tétrico qué llamó la atención de todos.

-¿Están todos locos?- Preguntó Santana aún incrédula interrumpiendo el organo -¿Cómo pueden creerse semejante cosa?

- Santana, yo le creo- Dijo Quinn -De hecho así puedo explicar esto… -Cerró sus ojos con fuerza y cambió su color de cabello, ahora era rosa y enrulado, pero para arriba, como si un fuerte viento la hubiera dejado así y todos la miraron sin poder creer lo que estaban viendo –No podía encontrarle una explicación a esto –Miró a su madre con enfado por haberle ocultado aquello- Creí que era extraordinariamente anormal…

-Hija, lo siento, pero, queríamos que pusieras toda tu fé en Dios, no en ti misma y tu magia…

-¡Y yo hablo Pársel!- Comentó emocionada Brittany.

-¿Qué es eso?- Preguntó Sam

-No tengo idea, pero yo lo hablo.

-La lengua de las serpientes- Respondió Figgings mientras la rubia sonreía orgullosa.

-¿Lo sabías y nunca me lo dijiste?- Le preguntó dolido Artie.

-Creí que era normal, más que nada cuando ví a tu mamá volando en su escoba…- El chico miró totalmente sorprendido a su madre.

-Te lo íbamos a decir- Le dijo la mujer –Cuando cumplieras los 11 años, pero cuando tuviste el accidente, decidimos que lo mejor sería cuidarte como un chico normal…

-Ahora entiendo muchas cosas…- Se animó a hablar finalmente Sunshine.

-Yo también- Agregó Blaine –Siempre me sucedían cosas muy raras que no podía explicar.

-A mi me pasaba igual- Dijo Sam.

-Yo nunca pude entender como podía hacer levitar las cosas, así es como siempre preparaba los trajes que me tocaba hacer para nuestras presentaciones, es más rápido- Comentó orgullosa Mercedes.

-Cuando me asusté por lo de los vampiros, muchos pensaron que yo estaba loco, pero yo sé que los vampiros existen- Interrumpió FIggings con una sonrisa hacia Tina, quién se la devolvió con la cabeza un poco baja.

-Sí, de hecho, mi hermano es vampiro, fue convertido hace unos años por otro- Dijo el señor Cohen-Chang y Mike miró hacia su novia un tanto asustado

-Retomando, les cuento que el primero de Agosto, comenzaremos el entrenamiento avanzado, porque el primero de Septiembre se irán al Reino Unido

-¡¿Qué?- dijeron todos a unísono.

- "Oh, hell to the no!"- Replicó Mercedes.

- Oh, por favor, no sean ignorantes, debíamos haber recibido la carta de aceptación cuando teníamos 11, pero por un error, que el Ministerio nunca me quiso decir, no las recibimos- Dijo Jesse

- Así es, joven St. James, muchas gracias- Dijo el director- Como el muchacho dijo, el entrenamiento empieza en una semana, los que están informados acerca del mundo mágico, pueden retirarse- Dicho esto, Puck, Kurt, Tina, Brittany y Jesse hicieron lo encomendado, junto a sus familias.

- Muy bien, la situación es esta: por motivos que, hasta el momento, se desconocen, ustedes no recibieron la carta correspondiente, a su debido tiempo. Quiero que los padres que son magos, me digan quiénes son.

- Bueno, con eso tenemos un problema, porque ninguno de los dos somos magos.- Dijo uno de los padres de Rachel.- Su madre es la hechicera, y quería que supiera cuando cumpliese los once, o sea, cuando hubiese recibido la carta.- Los ojos de Rachel no podían estar más abiertos.

- El resto, me gustaría que ayuden a entrenar a sus hijos, cuando comience el entrenamiento, ¿Puede ser?-

-Claro que sí.- Dijeron los aludidos.

- Otro tema, es que deben ponerse al tanto de lo que ha pasado los últimos años en el Mundo Mágico, por eso, los que tengan información, les voy a pedir que se vayan así puedo explicar todo a los que no están familiarizados. Y expliquen en sus casas.- Y con esto, Finn, Quinn y Artie se retiraron luego de saludar a sus compañero, compartiendo las mismas miradas de confusión.

- Como ya habíamos comunicado, ustedes son magos. Así que creo que entienden por qué ocurrían cosas extrañas a su alrededor. Eso que hacían, o hacen, se llama magia accidental, y es cuando todavía no tienen la instrucción necesaria. ¿Alguna duda?

- Wow, esto es "Totally awesome", pero dónde podemos conseguir de esas, esas… ¿varitas?- Dijo Blaine aturdido.

- Sí, las varitas las van a conseguir cuando comience el entrenamiento, donde uno de los mejores fabricantes de varitas mágicas vendrá en persona y les hará una según cada persona.

- Ahora, bien, debo advertirles, como en todos lados, existe un lado bueno, y un lado malo…- Comenzó a explicar el Director.

Luego de terminar, concluyó: -Por lo tanto, los espero el 1° de agosto, a la misma hora en la que los convocamos hoy. El entrenamiento será de lunes a viernes, y no se suspenderá por nada. Muchas gracias, y espero verlos pronto.- Otro 'crack' y se esfumó.