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Justicia indiferente

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Ya atardecía y las cigarras despedían el día con su música hipnótica. El calor de un día de verano comenzaba a disiparse y la luz rojiza pintaba el mundo con su belleza primordial.

Sasuke caminaba sin prestar atención a su alrededor. Ignorando a las cigarras, al frescor de la noche que se avecinaba y al rojo atardecer. Estaba cansado después de un largo día de caminata y sólo le preocupaba encontrar un lugar cómodo donde dormir.

—¡No!¡Alguien… ¡Por favor! —Un grito de ayuda. Una mujer salió del bosque que rodeaba el camino. Descalza, con la ropa rasgada y la cara sucia.

Cuando vio a Sasuke sus ojos se abrieron y corrió hacia él. El cabello largo ondeándole al aire.

—¡Por favor! —gritó desesperada— ¡Alguien quiere…

Un hombre sucio, vestido de negro y con apariencia de bandido salió del mismo lugar de donde había salido la mujer. Esta se sobresaltó y corrió a la espalda de Sasuke. Se aferró de su capa y hundió su cara en la negra tela.

—Por favor —dijo en un susurro desesperado.

Sasuke miró a la mujer de reojo y luego al hombre.

—¡Hazte a un lado! Tengo asuntos pendientes con la bruja que se te ha pegado a la espalda —dijo el hombre con desprecio.

—¿Qué clase de asuntos? —preguntó Sasuke.

—Creo que es bastante obvio —dijo el hombre maniobrando el largo cuchillo que cargaba en la mano izquierda—. La verdadera pregunta aquí es ¿Por qué te interesa? ¿Quieres hacerte el héroe? Pues déjame decirte que estas del lado equivocado. Esa chica en tu espalda puede que parezca mona e inocente pero es una víbora. Créeme, nadie la extrañara, nadie llorara, nadie lamentara su perdida.

Sasuke guardo silencio pensando en lo que debería hacer —la chica temblaba en su espalda con la lengua congelada—. Su primer impulso fue seguir andando e ignorar a aquellos dos, no era su asunto después de todo. Si aquel hombre quería venganza, justa o no, ¿Quién era él para negársela?

Pero no parecía correcto.

No es que quisiera hacerse el héroe. Aquel asunto no debería importarle en lo más mínimo. ¿Entonces que era?

—Mira, ninguno aquí quiere desperdiciar fuerzas innecesariamente ¿Me equivoco? —dijo el hombre al ver el silencio de Sasuke—. Se nota que has viajado por muchas horas. El pueblo aún está a un par de horas siguiendo este camino. Se nota que necesitas un baño y un buen descanso —el hombre se guardó el cuchillo en su cinturón. Sacó un pequeño saco con dinero y lo arrojó en medio del camino— ¿Por qué no te das un merecido descanso? Yo invito.

Sasuke miró el dinero. La chica se aferró con aun más fuerza a su capa.

Eso molestó a Sasuke. Toda indecisión que hubiera tenido antes desapareció. Por supuesto que no iba a tomar el dinero. Pero tampoco iba a salvar a la chica. Él no era un héroe pero definitivamente se iba a inmiscuir en el asunto. Nadie compraba, manipulaba, robaba o tomaba por idiota a Sasuke Uchiha.

En un movimiento grácil se quitó la capa, cubrió con ella a la aterrada chica y la miró a los ojos.

—Todo estará bien—le dijo con una ligera sonrisa.

La chica se sonrojó ante la galantería de Sasuke. Le sorprendió lo guapo que era. Sus pupilas se dilataron al quedar atrapadas en la profundidad de sus ojos negros. Le pareció que mientras más los veía estos cambiaban de color, que uno se volvía rojo y el otro morado, pero debió ser su imaginación porque parpadeo y volvieron a ser jemas negras.

Sasuke le acarició la cabeza como si fuera un cachorro abandonado en la lluvia y desapareció. La chica volteó confundida en todas direcciones buscándolo. Entonces lo vio peleando con su perseguidor. Pero decir que era una "pelea" era ser demasiado generoso. Su salvador golpeó e inmovilizo tan rápido a su agresor que cuando volvió a parpadear, él, ya se encontraba boca abajo con el pie de su príncipe sobre la espalda.

—Entonces nena. —Sasuke mostró una sonrisa seductora y traviesa propia de un gigolo— ¿Quieres mancharte un poco las manos o solamente lo mato y ya? —el hombre se resistía en vano.

—¿Eh? —soltó la chica que aún no salía de su sorpresa.

—¿Qué si quieres un poco de venganza mujer? Parece que te hizo pasar un mal rato, así que pensé que te gustaría divertirte un poco con él antes de mandarlo al infierno.

La chica sonrió con incredulidad.

—Bueno, que caballeroso resultaste ser —El tono de su cara cambio a clara alegría como si no pudiera creer su suerte—. Y ya que preguntas, sí, me gustaría divertirme un poco. —Caminó lentamente hacia su plato de venganza fría, tarareando como un ruiseñor. Se agachó y tomó entre sus manos el rostro de su ejecutor.

—Maldita hija de puta —dijo con rabia el hombre condenado.

La chica sólo se limitó a sonreír. Bajó sus pulgares por su rostro hasta que llegó a los ojos y lentamente enterró sus uñas. El hombre comenzó a retorcerse y gritar. La sangre corrió por sus mejillas como lagrimas rojas. Y entre los gemidos, los insultos y la sangre, la chica no dejo de tararear alegre como si aquellos gritos de agonía fueran la fuente de su felicidad.

Cuando sus pulgares estuvieron hundidos hasta los nudillos los retorció una última vez y los retiró con un rápido movimiento. Se levantó de un brincó, se chupó los pulgares con deleite y se relamió los labios.

—Es todo, ya puedes soltarlo.

—¿Soltarlo? —preguntó Sasuke sorprendido— ¿No quieres que lo mate?

—Por supuesto que no. Quiero que sufra —dijo como si Sasuke no viera lo obvio—. Ya no tiene a nadie y ahora que está ciego no podrá hacerme nada. Si lo matas no podre verlo sufrir.

—Eres una chica mala —dijo Sasuke con una sonrisa— Me gustas.

La chica le devolvió la sonrisa y caminó hacia la bolsita con el dinero.

—En ese caso porque no vamos a una posada y pasamos una noche agradable —dijo con voz sugerente.

La mujer parpadeó y se encontró hablándole al aire. Volteó a los lados confundida. Sasuke al parecer no se había movido de su lugar. Su verdugo tampoco parecía haberse movido y cosa curiosa aún conservaba sus ojos.

—¿Qué pasa aquí? —dijo con miedo en la voz.

El hombre comenzó a reír a carcajadas.

—Te la han jugado estúpida. Ahora que este hombre ha sacado a flote tu verdadera cara no va a ayudarte —Saco de nuevo su cuchillo del cinturón y se acercó a la chica con una sonrisa desquiciada. La mujer se encogió y se arrebujo en la capa de Sasuke como si esperara que esta la protegiera. Estaba a punto de echarse a correr, cuando Sasuke se interpuso entre los dos.

—Pero que demonio… —El hombre se quedó con la boca abierta escurriendo baba y con la mirada perdida como si le hubieran arrancado el cerebro de repente.

Sasuke volteó a ver a la asustada chica. Esta soltó un chillido de terror cuando volvió a ver esos ojos. Uno rojo, el otro morado. No tuvo mucho tiempo de permanecer asustada. Sus ojos se apagaron y la boca se le abrió como si se hubiera quedado idiota.

El silencio cubrió el camino del bosque.

—¿Ahora qué? —se dijo.

Aquel asunto seguía sin importarle. Pero seguir su camino seguía pareciéndole poco correcto, sobre todo después de haber llegado tan lejos.

—Caminen hasta llegar al pueblo, vayan con la policía y confiesen todos sus crímenes. Si no han cometido ningún crimen dense la espalda y caminen hasta el amanecer.

Obviamente Sasuke no creía que unos psicópatas como aquellos dos no hubieran cometido un crimen. Pero así es como funcionaba el jutsu que les acababa de lanzar. Una vez cumplieran la orden que Sasuke les había dado, el genjutsu desaparecería y recuperarían la conciencia.

Y justo como creía, tanto el hombre como la mujer comenzaron a caminar hacia el pueblo con paso torpe como dos zombis que salen a caminar por la tarde.

Sasuke los vio alejarse. Entonces reparó en la bolsita de dinero y la recogió. La observó un momento y luego la guardo entre sus ropas. Después de todo necesitaba el dinero. Las posadas no eran baratas.

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Llevo mucho tiempo queriendo hacer este proyecto. Quiero publicar una historia corta diario, igual que todos los dibujantes de twitter que hacen un dibujo diario en octubre por razones que me son desconocidas. Todas las historias serán de Sasuke porque para mí es el personaje de Naruto en el que mejor me puedo proyectar. Y eso es todo. Empiezo siete días tarde, lo que no es un muy buen augurio, pero espero poder completar el reto, hasta mañana.