Podía ver un hermoso día despejado, podía ver las grandes maravillas de la naturaleza, podía ver la gran paz que había conseguido al reunir finalmente las cartas Clow una por una hasta la última, con la perseverancia que me caracterizaba, a pesar de los fallos y errores que había cometido.

Por un segundo, sentía que mi vida estaba llena de satisfacción, autoestima, y valor.

"¡Sonríe a la cámara, Sakura!"

Esa voz femenina familiar interrumpió mis pensamientos... aunque no la culpo, puesto que ya había tenido un momento a solas con esos pensamientos míos anteriormente...

"¡Sonríe a la cámara!" Tomoyo Daidouji, mi mejor amiga, me repitió cuando yo le miraba a la cámara un par de segundos después.

"Ay..." Nunca me había gustado demasiado ser filmada en las cámaras de vídeo o de foto, pero estaba empezando a acostumbrarme desde hace mucho tiempo...

Saludé a la cámara agitando la mano -qué remedio-, y Tomoyo dejó de grabar y me miró preocupada. "¿Qué te ocurre, Sakura?" me preguntó.

"Nada en especial..." Le respondí "Sólo es que estaba pensando un poco..."

"¿Sobre qué?"

"Pues..." Le susurré a Tomoyo "Sobre las cartas Clow, y todo ese asunto... Que todo terminó finalmente."

"Entiendo." Tomoyo volvió a recuperar su sonrisa "Pues te gustaría saber que dentro de poco estamos llegando hacia Las Montañas del Pico, así podrás relajarte después de todo lo que ha sucedido."

(Nota del autor: Las Montañas del Pico es un paisaje ficticio; basta decir, que no existe en la vida real, es producto de mi imaginación.)

"Tomoyo... Que esta excursión no es un anti-estrés..."

"Ya, pero, ¿no resulta maravilloso estar rodeada de tantos árboles que la Madre Naturaleza entregó a este mundo desde los siglos de los siglos?"

"Bueno... Ahora que lo dices, supongo que debería alegrarme."

¿Dónde estábamos? Estábamos en un autobús, en marcha hacia Las Montañas del Pico, debido a una excursión en clase para la materia de Ciencias de la Naturaleza. El viaje estaba durando unas 3 horas, y estábamos a punto de llegar -tal y como dijo Tomoyo.

Uno de mis amigos en la escuela, Takashi Yamazaki, que estaba detrás de nuestros asientos en el autobús, estaba escuchando nuestra conversación y se puso a hablar con nosotras.

"¡Eh!" Yamazaki dijo "¿Sabéis que en Las Montañas del Pico se tiene que realizar varias volteretas antes de entrar ahí? Si no hacéis esas volteretas, entonces recibiréis una maldición que duraría hasta años."

"¿EEEEHHHH?" Yo me quedé petrificada al oír aquello "¿Y qué volteretas tengo que hacer?"

"Tienes que hacer 3 volteretas laterales, 7 volteretas hacia atrás, 5 saltos de león..."

Entonces, la amiga que estaba al lado de Yamazaki, Chiharu, le dio un pequeño golpecito en la cabeza de Yamazaki.

"No le hagan caso, eso es mentira." Chiharu dijo, con el puño sostenido en la cabeza del chico.

"Ah, ¿que no es cierto?" Pregunté yo, toda desconcertada.

"Sí. Os tengo dicho que Takashi se inventa muchas historias, y aun así seguís escuchándole."

"¡Je, je!" Tomoyo se echó a reír "¡Deberías haberte visto la cara, Sakura!"

"¿Sabéis incluso que la risa provocada por una hist...?" Yamazaki iba a decir, pero Chiharu la interrumpió.

"No nos cuentes más, Takashi, no quiero que tu estupidez se me contagie con mi personalidad..." Dijo Chiharu con tono frío.

Curiosamente, Yamazaki y Chiharu siempre estaban juntos el uno con el otro; a pesar de que a veces hacían discusiones tontas, se llevaban bastante bien. Son impredecibles...

Miré al otro lado del autobús y vi un par de asientos de los cuales uno sólo estaba ocupado por un chico que, durante todo el viaje, estaba en solitario y con la vista fija frente a su ventana -pareció admirar el paisaje. Ése era Shaoran Li. Estuvo conmigo ayudándome a capturar las cartas Clow y es un buen chico, pero desde que capturábamos la última carta Clow y acabar con esta historia, noté que él estaba como preocupado, quizá demasiado.

"¿Qué pasa, Sakura?" Tomoyo captó mi atención hacia Shaoran.

"Es Shaoran..." Respondí "Desde que habíamos terminado con el asunto de las cartas Clow, no fue el mismo..."

"¿Qué quieres decir?"

"Pues... Bueno, no es que deba; pero en vez de estar así de tranquilo y feliz por haber terminado con las capturas de las cartas, está algo como distante, frío... ¿Sabes lo que quiero decir?"

"Mmm... Bueno, Sakura, deberías hablar con él. A lo mejor te saca de dudas."

"Sí, creo que debería... Dame un segundo."

Me levanté de mi sitio y me senté junto a Shaoran. Él seguía teniendo la mirada clavada en el cielo con una mirada de seriedad que no había visto antes en él.

"Li. ¿Te sucede algo?" Pregunté la primera.

"Es extraño..." Él hablaba sin desviar su mirada de la ventana del autobús "Hemos capturado las cartas Clow, pero... no dejo de pensar en que esto todavía no ha terminado."

"¿En serio? ¿Sientes la presencia de alguna carta Clow más?"

"No, no es eso... Es algo que nunca había sentido antes, que dudo si son mis propios pensamientos, o que no hemos terminado todavía."

"Qué dices, Li..." Pensé que Shaoran estaba nervioso, así que intenté calmarle "Kero me aseguró que tenemos todas las cartas Clow, no tenemos de qué preocuparnos."

"Ya lo sé, pero..." Shaoran tomó unos segundos se silencio, y desvió su mirada de la ventana "Quizá tengas razón; debería tranquilizarme."

"¡Vale, ya hemos llegado, tengan cuidado al bajar!" Dijo el profesor Terada, una vez que se detuvo el autobús.

Bajábamos del autobús, y nos reunimos con nuestros profesores Terada y Mizuki.

"Muy bien." Terada habló en alto para todos los chicos de la clase "La clase se separará en dos grupos: A y B. Los que pertenezcan al grupo A irán conmigo, los del grupo B irán con la señorita Mizuki."

Cabe decir que justo antes de ir a la excursión, el profesor nombró a diferentes alumnos para sus grupos, nombrándolos uno a uno. De todas mis amistades que tenía en la clase, sólo Tomoyo y Naoko iban conmigo al grupo B; el resto iba al otro grupo A.

En cuanto nuestros dos grupos se separaron, la señorita Mizuki dijo unas cuantas palabras:

"Chicos y chicas, en esta excursión diré muchas cosas acerca de la bella naturaleza que nos rodea en estas montañas, pero lo primero que estudiaremos son las cuevas, así que os aconsejo que tengáis mucho cuidado con separaros en ellas." Al decir esto último, la profesora me miró a mí de forma discreta, como si ella estuviera dándome una advertencia a mí y sólo a mí.

Lo primero que estudiaremos son las cuevas. En efecto, teníamos una cueva cerca, así que era evidente que eso era lo primero que estudiaríamos.

"Supongo que huelga decir que tomaréis los apuntes para una futura actividad teórica del día después de esta excursión, ¿me equivoco?" La profesora dijo además.

"¡Sí, señorita!" Dijeron los demás compañeros del grupo.

"Genial. Entonces vayamos a empezar."

Nota del autor: ¡Hola a todos! Éste es mi primer Fan Fiction de la famosísima serie de Sakura Card Captor (o Cazadora de Cartas, aquí en España), así que espero hacerlo bien...

¿Por qué digo esto? Pues porque había visto la serie hasta el capítulo 46, y sólo una vez (aunque estoy viendo de nuevo algunos capítulos para "analizar" la personalidad de los personajes). No me acuerdo demasiado de los detalles en la serie, pero afortunadamente tengo nuestra amiga la Wikipedia para ayudarme en el Fanfic.

Eso sí, si ven algo que no encaja con la serie (nombre equívoco de una carta, personalidad nula de un personaje...), pues háganmelo saber mediante un mensaje privado o una Review.

¿Qué sucederá en las cuevas de Las Montañas del Pico? Estén atentos al próximo capítulo...