Hola! Este es el primer fanfic que escribo… espero les agrade y se diviertan :)

La historia involucra a 5 de los miembros de Super Junior y 5 chicas japonesas comúnes y corrientes.

Agradezco todos sus reviews, comentarios, sugerencias y lo que quieran decir ;)

Disclaimer: Super Junior no me pertence

PERSONAJES.

Siwon

Donghae

Yesung

Eunhyuk

Leeteuk

Chise

Suzume

Akane

Tamiko

Shao


CAPÍTULO 1.

Chise una vez más no era capaz de conciliar el sueño, sabía que era algo tonto pero simplemente no podía sacarse de la cabeza la imagen de aquel hombre que tantas veces había visto, ese hombre que no sabía de su existencia y que sólo era una imagen en una pantalla.

Eran las tres de la madrugada, estaba recostada en la cama, sólo con la luz del computador iluminando débilmente su habitación, a través de los audífonos que tenía puestos se podía escuchar "Wooriga naireul muhguhdo wooseumyuh saragago shipuh"* [Aunque envejezcamos quiero vivir cada día sonriendo] y ella con los ojos cerrados recreando una imagen perfecta de él, un IDOL COREANO!

Habían pasado casi 8 meses desde que una amiga suya le había mostrado una boy band de K-pop y sin saber porqué, desde el momento que los había visto su mirada y su atención se había dirigido a uno de ellos en particular, Choi Siwon, el caballo de Super Junior.

Chise era una chica de 21 años había vivido desde siempre, con sus padres en la ciudad de Sapporo. Era una joven alegre, entusiasta, soñadora y bastante impulsiva; con un gran gusto por la comida, la música y las películas, era de esas chicas que tienen amores platónicos con cantantes y actores y que se aficiona fácilmente no sólo por las cosas sino por las personas.

Fue precisamente así que comenzó su afición por aquel coreano, esa afición que ya no la dejaba dormir y ese coreano que nunca se iba de su mente; al principio sólo se dedico a conocer más sobre la banda y sus integrantes, poniéndole un poco más de atención a Siwon, y sin saber cómo dos meses después era lo único de lo que hablaba, y lo único de lo que quería saber.

Mientras tanto en el extremo oriental de la ciudad de Sapporo se encontraba Suzume bastante aburrida, luego de haber terminado sus deberes, decidió entrar por primera vez (más cómo juego que por otra razón) a una de esas páginas de las que su amiga Tamiko alguna vez le había hablado, podría hablar con gente de cualquier parte del mundo y podría distraerse hablando de sus cosas con personas que nunca conocería y que nunca la juzgarían o le reprocharían nada.

Entre los nombres de usuarios encontró uno que le llamaba la atención, talvez era porque le gustaban los dulces o solo porque desde hacía rato era uno de los pocos usuarios que no saludaban con una propuesta indecente, por la razón que fuera Suzume llevaba ya más de media hora hablando con "Crumble"** y por alguna razón no quería dejar de hacerlo, después de hablar con él durante poco más de dos horas decidió pedirle su correo personal para hablar con él nuevamente.

Suzume y Chise eran buenas amigas, se conocían desde hacía poco menos de 10 años cuando Suzume entró al colegio de Chise y descubrieron que ambas compartían un gusto excepcional por la música. Suzume de 20 años, dedicaba la mayor parte de su tiempo a estudiar y, a diferencia de su amiga, no le prestaba tanta atención a los amores platónicos con famosos, no podía negar que tenía un actor y cantante favoritos, pero nunca había llegado más allá de la admiración y gusto artísticos. Era una chica bastante sería y amable, esa clase de persona que no hace nada sin antes pensarlo cuidadosamente.

Otra amiga de Chise y Suzume era Tamiko. A diferencia de sus amigas, Tamiko no estaba en casa, eran las tres de la madrugada y recién acababan de salir a vacaciones, no podría estar en otro lugar que no fuera uno de los clubes más reconocidos de la ciudad. A sus 20 años Tamiko se gastaba todos sus fines de semana en fiestas y clubes, amaba la música, bailar y pasar un buen rato con gente divertida. Generalmente llegaba a un club sola y dentro formaba un grupo de amigos d personas, con las que seguía hablando y viéndose en otras fiestas; sin embargo, después de un tiempo siempre terminaba alejándose y nunca volvía a saber nada de ellos.

Tamiko al igual que Chise era bastante alegre y soñadora, siempre estaba buscando un chico agradable y guapo con quien pasar el rato, pero tenía mala suerte y siempre resultaba rodeada de desconsiderados y tontos. Su última relación había terminado debido a un engaño que la había dejado muy adolorida y había hecho que perdiera la confianza en la gente.

Constantemente decía que sólo podía contar con su grupo de amigas y se había propuesto a sí misma no enamorarse en un buen rato, para así poder estar tranquila y feliz, pues no quería volver a sufrir de la misma forma, y ante todo, tenía miedo de abrirse a alguien nuevo, quería divertirse y por eso estaba esa mañana en ese club, sin saber lo que estaba esperando, no sólo por ella sino por todas sus amigas.

Tamiko vivía con Shao la mayor del grupo de amigas. Con 22 años era muy amable y organizada, aunque también era bastante graciosa y divertida; había llegado a Japón cuando tenía 13 años pues antes había vivido en Inglaterra y antes de eso en Corea, se había quedado en Sapporo luego que sus padres fundaran una exitosa compañía en Ishikari, ella no se había quedado con ellos pues aquella ciudad nunca le gustó demasiado y como Sapporo queda bastante cerca, podía ver constantemente a su familia.

Shao dormía plácidamente en su cama después de haber organizado un montón de álbumes fotográficos que sus padres le habían mandado hacía unos días, había fotos y recuerdos de sus años en Inglaterra, de su colegio y de un par de viajes a Irlanda, en otro álbum más viejo había encontrado las fotos de cuando vivió en Corea: en el jardín de niños y en el vecindario, con unas hermanas con las que todavía se hablaban de vez en cuando en las fechas especiales y un niño que había sido su mejor amigo pero del que no había vuelto a saber nada desde que dejó Inglaterra.

Aunque Tamiko había invitado a Shao a la fiesta, ella había preferido quedarse en casa, ver una película, ordenar su cuarto y acostarse a dormir temprano pues sus padres vendrían al otro día para hacerle una visita por su cumpleaños, además sabía que en algún momento Tamiko estaría tan ocupada bailando con alguien que ella se quedaría sola y no era tan buena para conseguir amigos de la nada.

En la mesa de noche estaba su celular, el cual comenzó a vibrar y a iluminarse anunciando una llamada, pero Shao estaba tan profundamente dormida que no se dio cuenta pues siempre mantenía su teléfono en silencio, desafortunadamente, la llamada perdida de un número desconocido no llamaría la atención de Shao cuando viera su teléfono a la mañana siguiente.

Por último al grupo de amigas lo completaba Akane, de 21 años a la que, si bien le gustaba la música, las películas y salir a bailar, generalmente prefería estar en casa o en algún lugar tranquilo leyendo un libro. Esa madrugada ella estaba totalmente absorta en un relato de Allan Poe, mientras comía chocolates recostada contra la cabecera de su cama.

Akane era divertida, y aunque de vez en cuando sus gustos eran diferentes de los de sus amigas, ella consideraba que eran una mezcla bastante interesante; generalmente Akane estaba sumida en sus pensamientos hasta que alguna de sus amigas apareciera con alguna broma o comentario salido de la nada.

Para quienes no la conocían podría parecer una persona un poco odiosa y arrogante, sus amigas sabían que sólo era así con la mayoría de las personas porque las consideraba gente aburrida; por eso mismo había veces en las que terminaba en discusiones con la gente y no le era fácil relacionarse con los otros, siempre había algo que no la convencía de que valieran la pena y muchas veces terminaba alejándose sin darse cuenta de la gente.

Vivía sola en un departamento hacia el norte de Sapporo y si agudizaba un poco la vista alcanzaba a ver en el horizonte la bahía de Ishikari, le encantaba esa vista y le fascinaba salir a caminar al caer la noche pues se sentía relajada y lo que más le gustaba era que no había nadie que la molestara, podía pasear durante varias horas dándole vuelta a sus pensamientos, antes de regresar a su casa, darse un baño y leer un buen rato hasta quedar dormida con el libro en sus manos.

Ellas eran pues, las cinco amigas a las que el destino les tenía preparada una sorpresa que nunca hubieran imaginado, y mientras amanecía ese domingo en Sapporo y todo se ponía en su sitio para dar lugar a una serie de eventos inesperados. En Corea un grupo de chicos llegaba al aeropuerto entre risas, aplausos y gritos; los amables saludos de los jóvenes a las fans, los comentarios entre ellos y el viaje en auto hasta su casa, les había tomado un par de horas bastante largas y los había dejado muy cansados, obligándolos a dormir profundamente durante ese día en el que comenzaba su periodo de descanso; se acercaban las festividades de navidad y fin de año, tendrían un total de 3 meses para descansar y tener tiempo libre antes de volver a sus actividades laborales y volver a ser Super Junior.


*Fragmento de la canción "Marry U" de Suju que canta Siwon.

**El Crumble es un plato dulce tradicional de Gran Bretaña su ingrediente principal es la fruta.


Gracias por leer, espero que sigan la historia y la disfruten.
No se olviden de los reviews ^.^