Hola a todos, luego de un par de días de escritura continua pude moldear correctamente este proyecto que tenia en mente desde hace mucho tiempo. Sinceramente fue un desafío armar todo pero lo importante es que ya esta hecho.
Algo importante que debes saber sobre "Más allá de todo"
Esta es una historia dentro de otra historia, pero no se alarmen, ya que el Negitoro estará presente en la mayor parte del fic. Solo aveces escaseara por temas que entenderán pronto (por no decir ahora mismo).
El mundo en el que se desenvolverán nuestras protagonistas es nada mas ni nada menos que el universo Vocaloid en su modo más "original". Lo que quiero decir con esto es que la historia que hará de "esqueleto" para la otra es la narración cronológica de lo que hoy conocemos como Vocaloid. Por lo mismo, en el prologo no las encontraran ya que ellas dos son de "Vocaloid2".
Aclaración especial sobre el contenido del fic.
La cronología respecto al universo de Vocaloid se mantiene en el tema de las fechas de salida. A diferencia de las canciones que se irán nombrado por uno u otro motivo en la historia que no poseen un orden fijo. (Solo algunas emblemáticas como Magnet...o Magnet...bueno, por ahora solo Magnet saldrá en la fecha original en la linea de tiempo)
Los personajes que no pertenecen al universo de Vocaloid fueron inventados por mí. Sus nombres fueron tomados al azar de diversas partes (incluida mi imaginación por uno en particular) y algun parecido con algun otro personaje es pura coincidencia.
Aclaración sobre la propiedad.
Ninguno de los personajes de VOCALOID me pertenecen, ellos son propiedad de Crypton Future Media y Zero G.
Si leyeron todo esto les doy las gracias. Espero les guste la historia.
Atte. Interval
Prólogo: De humano a Vocaloid
‹‹Y comenzamos la cuenta regresiva para despedir al 2002: en tres, dos, uno… ¡Feliz año nuevo!›› La chirriante sintonía de la radio provocó que el mensaje no resonara completamente en la fría habitación de la clínica, pero eso no impidió que quienes se encontraban en esta se perdieran el "emocionante" momento que anunciaba el cambio de numeración en el calendario anual.
—¿Puedes ver los fuegos artificiales, Mirai? —Preguntó una voz ronca, el dueño de esta permanecía sentado a un lado de la cama, mirando hacia la ventana donde se apreciaba un evento pirotécnico.
—Sí, puedo verlos, papá… —Dijo en un susurró casi inaudible una chica que yacía sobre la cama, restringida por una serie de tubos y artefactos médicos— ¿En qué año estamos ahora?
—2003 —Respondió suavemente el hombre, tomando la delicada mano que descansaba sobre las pulcras sabanas entre las suyas.
—2003 —Repitió con voz cansada— Han pasado muchos años desde que estoy aquí.
—Pronto saldrás de aquí, después de todo te lo prometí…te prometí que te sacaría de aquí, así que…espérame un poco más…— En medio de aquella frialdad, un par de lágrimas comenzaron a descender en silencio por el rostro afeitado del hombre.
—No llores, papá. —Con gran esfuerzo la adolescente movió su cuerpo lo suficiente para que la mano que tenía libre llegase hasta donde estaban las de su padre— Esto…esto no es culpa tuya…no es culpa de nadie.
—Ya es muy tarde, sera mejor que descanses, volveré mañana a la misma hora de siempre. —Levantándose con cuidado el hombre dejó libre la pálida mano de su hija y se acercó para besarle la frente.
—No creo que tengas que volver, papá —Dijo con una sonrisa conforme al tiempo que cerraba sus ojos y se recostaba por completo en los almohadones de la cama.
—¿Mirai? —Completamente congelado se quedó frente a su hija, a una distancia suficiente como para oír sus últimas palabras.
—No es tu culpa, papá, así que no te sientas mal. Te quiero. —Sin molestarse en abrir nuevamente sus ojos, Mirai le entregó sus últimas palabras de cariño.
—Mirai, Mirai...no me dejes, por favor, espera un poco más…solo un poco más… —En medio de la negación y la resignación Shido Saigo abrazó con fuerza el cuerpo de su hija, consciente de que este ya había exhalado su último aliento de vida.
Luego de muchos minutos de sollozos silenciosos Shido llamó a las enfermeras para anunciarles lo que había sucedido, retirándose en silencio del lugar tras hacerlo. Días más tarde volvió a reencontrarse con su hija, cuando la ceremonia funeraria se estaba llevando acabo. Respetando los deseos originales de Mirai, convirtió su cuerpo en cenizas luego de que el acto simbólico hubiese finalizado. Al funeral de su hija habían asistido más amigos de ella que familiares de los dos, después de todo estaban prácticamente solos. Su esposa había fallecido muchos años atrás de la misma enfermedad que se había llevado ahora a su hija. Muchas personas lo llamaron frio por su reacción ante la pérdida, sin embargo, nadie comprendía que él había comenzado a invertir en un proyecto que podría salvar al menos una parte de su hija: su voz.
Al igual que su madre, que en vida fue una exitosa cantante, Mirai contaba con un amor excepcional por la musica. Si bien no se le podía llamar un prodigio, ella se esforzaba como nadie para vivirla, sentirla y amarla. Y ese amor fue el que había llevado a su padre a tomar la decisión de emprender como financiador principal en aquel proyecto, sin imaginar que este tardaría tanto en consumarse. Irónicamente, un mes después de la muerte de su hija, la empresa que se encargaba de consumar la idea que había tenido le anunció que el proyecto estaba listo.
El veintiséis de febrero, Yamaha lo invitó al centro experimental donde había estado desarrollando el proyecto por tres años. Como sus asesores se encargaban de llevar la empresa que le había dado todo el dinero y reputación que tenía Shido realmente no hacía mucho, simplemente se limitaba a asistir a las reuniones más importantes o donde se necesitaba obligatoriamente su presencia. Al tener tiempo libre y nada más que perder aceptó la invitación. Una vez que estuvo en la recepción del edificio de la empresa fue guiado hasta el laboratorio principal en medio de explicaciones científicas que no podía comprender. Una vez dentro de la extensa habitación, en donde el pulcro blanco parecía tragarse a los demás colores, el representante de los jefes de la empresa volvió a darle las condolencias con sinceridad y respeto. Él las acepto con un leve movimiento de cabeza y pidió que comenzaran con su explicación mientras tomaba asiento frente a una enorme pantalla que ocupaba prácticamente toda la muralla del final de la sala. Frente a esta, más de veinte escritorios con computadores se encargaban de amueblar el extenso espacio. En los costados restantes del laboratorio había varias máquinas de distintos tamaños y formas que de vez en cuando producían chirridos extraños o lanzaban hojas con números y códigos impresos.
—Bien, ahora que Shido-san y el resto de nuestros colaboradores están aquí me gustaría explicar el resultado final de este proyecto— Dijo un hombre joven vestido con un traje negro. Junto a él dos personas más vestidas con batas blancas comenzaron a pasar las páginas de un catálogo. El mismo que otros ayudantes habían repartido a las nueve personas que se encontraban sentadas además de Shido.
—¿VOCALOID? —Leyó con confusión, pasando con lentitud las paginas hasta llegar a la que se les había indicado en la pantalla gigante.
—Luego de tres años de intensa investigación y experimentación hemos logrado crear un nuevo software que revolucionara al mundo de la musica, este es: VOCALOID —Explicó a modo de introducción el joven del traje.
—¿Software?, ¿no es eso algo virtual? —Preguntó desconcertado Shido, pensando en lo absurdo del asunto. ¿Cómo un sistema virtual habría podido salvar a su hija?
—Sí y no. —La respuesta llego rápidamente de la boca de uno de los científicos de bata, que mantenía sus manos dentro de los bolsillos de esta.
—¿He estado invirtiendo mi dinero en un programa musical?, ¿Qué pasó con lo que pedí explícitamente hace más de tres años? —Poniéndose de pie, volvió a interrogar un poco colérico.
—Por favor no se apresure a sacar conclusiones, Shido-san. —Se atrevió a decirle el joven de traje, calmándolo con la mirada.
—Permítame aclarar sus dudas, Saigo-san. —La otra persona de bata, una mujer bastante joven en comparacion a todos los que llevaban el proyecto principal, dio un paso al frente y se preparó para hablar.
—La escucho. —Dijo tomando asiento nuevamente, juntando sus manos en un gesto ansioso.
—La explicación anteriormente dada por Haru-kun es el resumen de un complicado proceso científico que revierte la ley natural sobre lo físico y lo virtual. Vocaloid es el resultado de la alteración, separación y posterior unión de la composición interna de un ser humano con el software. En palabras simples, Vocaloid es el resultado del envió de información "física" a un sistema artificial que lo almacena.
—Un contenedor artificial… —Dijo Shido luego de analizar con dificultad la información.
—Supongo que es una buena forma de ponerlo, aunque crearlo no es algo simple. —Expresó la mujer con calma.
—Usted nos pidió que creáramos algo que fuese capaz de trascender en el tiempo y eso es lo que hicimos. Aunque Vocaloid es el esqueleto que sostiene todo. —Haru habló con cierta frialdad mientras tomaba un vaso plástico con agua de una mesa cercana.
— ¿Qué quieres decir?
—Para que esta creación que va en contra de las leyes naturales pudiera concretarse se puso como base el fin musical. Así, la "MTO"[1] colaboró entregándonos las bases para la creación de un motor de síntesis de voz. Vocaloid es lo que hace funcionar al "cantante artificial" que es contenido previamente usando la otra faceta. —El científico de la bata sacó por primera vez sus manos para hacer ciertos gestos mientras le explicaba.
—En otras palabras, el Vocaloid científico es el que crea los cantantes y el Vocaloid comercial es el que los hace funcionar— La mujer redujo todo a palabras que hicieron asentir con conformidad a todos los presentes.
—Entonces, si mi hija hubiera estado viva…
—La hubiéramos transformado en un avatar de Vocaloid y de esa manera habría podido seguir viviendo. —El científico volvió a meter las manos a los bolsillos de su bata luego de decir esto.
—Pero de esa manera no la hubiese podido tener nunca más junto a mí.
—Sí y no. —La misma respuesta vaga de antes volvió a inundar a todos los que no habían tomado parte en el proyecto en un mar de dudas.
—Si el cuerpo a convertir resiste el proceso de transformación entonces se convierte en una especie de eslabón libre. Un ser que no está sujeto ni a lo físico ni a lo virtual. Cabe aclarar que este avatar puede estar en miles de lugares virtualmente, por medio de la voz, pero solo en uno de manera física. Sé que incluso con estas simplificaciones puede resultar complicado pero el punto es que la voz de la persona a transformar se convierte en una librería musical capaz de cantar que es ejecutada por el motor de Vocaloid.
—Increíble. —Fue todo lo que pudo decir Shido antes de ponerse de pie y comenzar a aplaudir conmocionado por tal creación científica. El resto de los presentes lo imitó.
—Agradecemos el apoyo de todos los presentes, especialmente de usted Shido-san. —Haru hizo una pequeña reverencia y los científicos a su lado lo imitaron— Muchas gracias por aprobar la continuación de este proyecto a pesar del fallecimiento de su hija.
—Ella amaba la musica y si hubiera estado viva le hubiese encantado esto. Espero que pronto encuentren personas para iniciar este esplendido programa. —Dijo Shido, indicando su retirada del lugar. El mismo par de asistentes que lo había traído se encargó de llevarlo hasta la salida.
Meses después de la presentación privada del software el mismo equipo que se había encargado de darle vida a Vocaloid comenzó una búsqueda de posibles cantantes para así poder inaugurar el programa públicamente. Como en ese momento no se había creado nada similar a lo que estaban a punto de mostrar el reclutamiento fue estricto y limitado. Luego de una serie de negociaciones fallidas con distintas empresas del área musical obtuvieron un contrato con Zero-G, una compañía europea. Esta accedió al contrato, que la dejaba prácticamente restringida de reclamos en caso de algún resultado inesperado, ya que estaba interesada en "la revolución musical" que anunciaba el software de Vocaloid. Así, a fines de noviembre, dos cantantes de soul fueron enviados como sujetos de prueba.
—Es un gusto contar con su disposición para este nuevo proyecto. —Anunció Haru frente a las puertas del laboratorio con una breve reverencia y un inglés que se entendía a medias más por el nerviosismo que por la falta de práctica.
—Estamos felices de poder ser los primeros en formar parte de esto. —Respondió una voz masculina mientras obedecía a los asistentes y entraba en la habitación.
—Muchas gracias por tenernos en consideración. —Agregó una voz femenina al tiempo que entraba.
—Bien, iré a buscar las planillas para realizar el informe que ira a la central, lo dejo en tus manos Manaka. —Haru se despidió, obteniendo como respuesta el sonido de cierre de las puertas herméticas del laboratorio— Así que hoy tambien está de mal humor… —Susurró para sí mismo, sin notar que estaba a punto de impactar de frente con alguien que venía caminando en su dirección.
—Ha-ru-kun —Escuchó su nombre siendo pronunciado por silabas y se detuvo, quedando a centímetros del hombre que venía con una taza de café en su mano derecha y un informe en la otra.
—Ah, Mori… —Frente a él se encontraba el tercer científico que estaba a cargo del desarrollo de Vocaloid. Mori Negao, hermano mayor de Manaka y entidad irremplazable dentro del proyecto. Él, al igual que su hermana, poseía un indudable talento a la hora de comprender y descifrar el limbo que se producía entre la realidad física y la virtual.
—Deberías dejar esos comentarios sobre Manaka en tu mente. —Le dijo mientras avanzaba hacia la puerta.
—Lo siento, es solo que aveces no entiendo los motivos de su mal humor. —Agregó Haru al tiempo que avanzaba hasta el panel al costado de la puerta para pasar la tarjeta de identificación y abrirla.
—Ah, Gracias. —Indicó Mori al tiempo que entraba en el laboratorio. Una vez dentro se giró para dirigirle unas palabras a Haru antes de que este cerrara la puerta— Entiende esto: Ella nació de mal humor. No puedes cambiar la naturaleza de alguien que nace siendo un demonio.
—¿Quién dices que nació de mal humor? —Manaka estaba de pie junto al escritorio que le correspondía a él con los brazos cruzados y el ceño levemente fruncido.
—Jaja, no te enojes, solo estaba dándole un consejo a mi futuro cuñado.
—No es momento para bromas, los cantantes de prueba ya llegaron. —La joven científica arregló un poco su cabello negro, que le llegaba a los hombros, y comenzó a caminar hacia un par de camas encapsuladas que se encontraban debajo de la pantalla gigante. Estas estaban conectadas a diversas maquinas destinadas a monitorear cada parte de la persona que entrase y a un computador desarrollado especialmente para llevar a cabo el proceso de virtualización.
—Así que finalmente llegó la hora de probar nuestras teorías. —El tono de voz de Mori cambió a uno completamente serio. En un suspiro pasó una mano por su cabello, de igual color que el de su hermana, llevándolo hacia atrás.
—Solo espero que todo salga bien. —Susurró solo para ella y su hermano cuando ya estuvieron frente a los sujetos de prueba.
—Yo tambien. —Una respuesta rápida pero honesta salió de los labios de su hermano, quien tomó la iniciativa para darles las instrucciones a los cantantes— Hola, soy Mori Negao, tercer científico principal del proyecto. Espero contar con su disposición para esto —Su inglés, un poco mejor que el de Haru, logro que los cantantes asintieran de inmediato— Bien, veo que ya se les hizo entrega del uniforme de prueba (básicamente un pantalón y una camiseta gris con el logo de Yamaha), por favor entren en las capsulas y acomódense lo que sea necesario. Cuando se sientan cómodos presionen el botón que estará a su izquierda para cerrarla herméticamente. Tómense su tiempo, ya que una vez que presionen el botón la cámara solo podrá abrirse desde afuera.
—Entendido. —Ambos sujetos entraron en sus respectivas capsulas y luego de un par de minutos las cerraron al unísono. Entonces, Mori y Manaka se acercaron a la capsula del hombre y de la mujer respectivamente y presionaron uno de los tres botones que habían afuera.
—¿Puede oírme? —Preguntaron al mismo tiempo. Recibiendo por respuesta un asentimiento de cabeza—Comenzaremos en un minuto. —Dijeron con calma para luego quitar su dedo del botón y cortar la comunicación.
—El ritmo cardiaco de ambos se encuentra normal. —Dijo uno de los asistentes.
—La respiración de ambos tambien se encuentra normal. —Agregó otro asistente.
—¿Poketto-san no vendrá? —Preguntó Mori al notar que faltaba el científico que siempre llevaba las manos en los bolsillos de su bata.
—No. Está ocupado corrigiendo algunos errores menores de la teoría de virtualización. —Manaka le respondió rápido puesto que tenían que comenzar con la "creación" de los primeros cantantes virtuales.
—Era de esperarse, después de todo no es un hombre hecho para la acción. —Tras este comentario Mori se dirigió hasta la computadora especializada y escribió ciertos caracteres en la ficha del sujeto masculino—Vamos a ver…de ahora en adelante te llamaras… —Revisó el informe que le habían entregado, encontrando rápidamente el nombre. —LEON. El resto de los datos no está así que supongo que los dejare como no especificados. Y ahora el sujeto femenino...aaah, maldición, lo había visto hace un segundo… ¡aquí esta!...LOLA. Tampoco tiene más datos así que escribiremos no especificado.
—¿Terminaste? —Interrogó su hermana, posando su mirada azul oscura sobre él. A ella le correspondía activar la "maquinaria pesada" y a su hermano la transcripción de los datos que llegaran a estos para que así la computadora los procesara e intercalara con los virtuales. Mientras aquello sucedía el cuerpo de la persona hacía de puente emisor y receptor por lo que cualquier interrupción podría ser fatal.
—Ya casi, bien…ya están en la base de datos… —Anunció al tiempo que presionaba otra tecla para hacer aparecer los datos en la gran pantalla frente a ellos. En esta tambien se veía el estado de cada uno. —Comencemos.
—Bien, aquí vamos. —Manaka encendió a través de un panel frente a ella la primera sección de comandos de la capsula y está en respuesta comenzó a pasar una cuadricula fosforescente similar a un láser en su interior.
—Análisis físico iniciado y completado con éxito —Dijo Mori, tecleando a toda velocidad comandos y números que una persona normal no entendería aunque se esforzara.
—Bien, que comience el escaneo interno. —En el momento en que Manaka dijo esto presionó otra zona de botones del panel. Esta vez la capsula se polarizó y un arco metálico que se encontraba en la cabecera de la cama (aunque era más como un sillón reclinable) comenzó a descender rodeando sin tocar la cabeza de los que ahora eran llamados LEON y LOLA respectivamente— Escaneo interno iniciado, actividad cerebral normal.
—Traspasando datos del escaneo… ¿eh?, que extraño, tengo un punto de conflicto…—Murmuró Mori al ver el cambio de color en uno de los comandos insertados previamente.
—¿Con que parte?
—El cuerpo se está resistiendo, no está aceptando que lo encriptemos a la base de datos.
—Olvídate del cuerpo original, el contenedor artificial debería estar listo para funcionar.
—No, no está listo para funcionar, es el cerebro el que hace que el cuerpo se resista y si lo intentamos…
—Se creara una paradoja irreparable. Para traspasar todos los procesos físicos y psicológicos necesitamos que la actividad física esta activa, si no la detenemos no podremos traspasarla, pero detenerla significaría un traspaso nulo, sin mencionar que los sujetos morirían inmediatamente.
—¡Maldición!
—Detendré el escaneo interno. Es mejor que cancelemos esto antes de que algo más salga mal…
—Me temo que hacer eso es imposible — Una voz ronca y apagada interrumpió el conflicto técnico de los hermanos Negao. Era Samui Poketto, el científico que solo sacaba las manos de sus bolsillos cuando era necesario.
—¡Poketto-san! —En los ojos azul oscuro de Mori una luz de esperanza se encendió. Si él había revisado los errores de la teoría de seguro podría hacer algo.
—¿Por qué no podemos detener la virtualización? —Preguntó Manaka al tiempo que bajaba la velocidad del escaneo para detener la ola de conflictos en la computadora.
—Porque sus cuerpos ya están en el modo de eslabón, si detienes esto probablemente regresen incompletos.
—¿Qué hay de los análisis de resistencia genética? —Volvió a interrogar, esta vez claramente frustrada.
—Es precisamente ahí donde está el error principal…al traspasar la mente de la persona todos los procesos son unidos a los datos referentes a la librería musical pero…como el cuerpo pasa a segundo plano, ciertos procesos se hacen innecesarios y generan un conflicto.
—En otras palabras, tenemos que crear un contenedor artificial idéntico al original.
—Sí y no.
—¿Entonces? —Intervino Mori, quien ahora tenía un mal presentimiento.
—Necesitamos que el cuerpo pase completamente a ser artificial, crear una copia perfecta nos tomaría más tiempo que volver virtual el original.
—Pero eso es totalmente absurdo, con los experimentos biológicos vimos que el cuerpo humano no es capaz de resistir la desfragmentación producto del alza de temperatura. —El joven peinó hacia atrás los mechones que habían caído sobre su frente producto de la reciente alteración.
—Tú lo has dicho, un cuerpo humano no es capaz de resistir…pero otro tipo de cuerpo si lo haría.
—¿Qué quieres decir?
—Si traspasamos todo a un "molde" diferente es posible. Solo tenemos que dejar intactos los sistemas básicos y traspasar la información referente a ella. Cosas como recuerdos y memorias deben ser descartadas. Haciendo esto es posible lograrlo, aunque la anatomía cambiaria y quedaría básicamente…así… —Poketto sacó de su bolsillo derecho un dibujo anatómico que tenía dos cuerpos.
—Esto es…
—Sí, es la anatomía de un personaje ficticio. —Luego de hacerles entender el concepto a los hermanos Negao, Samui devolvió el dibujo a su bolsillo, al igual que sus manos que habían sido sacadas de su "hábitat" para abrirlo.
—Así que la solución es transfórmalos en personajes similares a los del anime…extraño y curioso. —Manaka sonrió de lado al pensar en lo absurdo del asunto. —Bien, entonces solo tenemos que reprogramar todo y… —Cuando comprendió lo que eso significaba la pequeña sonrisa se esfumó de su rostro.
—Al fin lo entendiste. Tu tambien has comenzado a captarlo, ¿verdad, Mori?
—Sí, no podemos reprogramar la configuración de la computadora si no detenemos el proceso actual y como no podemos detenerlos significa que… ¿tenemos que matarlos?, ¿o quizás forzar la virtualización y luego repararlos?
—Sí y no. Lo único que podemos hacer ahora es salvar lo que en un principio nos pidieron salvar: sus voces. Déjame ocupar la computadora, yo me hare responsable por lo que pase de ahora en adelante. — Mori obedeció en silencio y camino hasta su hermana para darle ánimos. — Bien, es hora de hacer esto a mi manera.
Samui Poketto era un hombre serio de unos treinta años de edad con la reputación de ser un científico apático, siendo que era todo lo contrario. Él, al ser el mayor y más experimentado de los tres científicos, estaba dispuesto a responsabilizarse por los experimentos. Por eso concentró todo su intelecto para poder salvar las voces de Leon y Lola. Tras muchos minutos infernales la pantalla gigante anunció que la virtualización se había completado y que las librerías musicales estaban almacenadas correctamente. Sin embargo, el cuerpo de los cantantes no tuvo la misma suerte. En el momento en que creían que todo había salido bien, varios hilos de vapor comenzaron a emanar de la capsula. De inmediato comprendieron que los cuerpos habían llegado a su límite de resistencia mientras se extraían sus voces. Cuando los hermanos Negao presionaron el botón que correspondía a la abertura el sistema no reaccionó, indicando un error referente a los datos del cuerpo. No obstante, con la opresión en el botón de emergencia se anunció la abertura. Una vez que el intenso vapor se disipó los tres científicos apreciaron con horror el resultado final de la prueba. Dentro de la cámara hermética no había nada. No quedaban rastros del cuerpo, ni siquiera de los huesos.
—¿Q-que demonios hemos hecho? —Susurró Manaka mientras se alejaba de la capsula, conteniendo las ganas de vomitar.
—Nada que no hubiese estado previsto. Esto es la prueba de que convertir carne en datos sin que deje de ser carne no es fácil. —Dijo fríamente Poketto, sacando de su otro bolsillo una caja de cigarrillos y un encendedor. Luego de tener uno en su boca lo encendió en silencio, dando profundas bocanadas— Al menos salvamos sus voces.
—Yo no llamaría voz a esto. —Indicó Mori, que se había acercado a la computadora para ver las librerías de voz— Esto se parece más a un robot que a una persona— Agregó mientras insertaba caracteres al azar en el programa de Vocaloid, teniendo la libreria de Leon abierta en este. Cuando Manaka y Samui escucharon la reproducción de los caracteres no pudieron opinar diferente de él.
—Suena mucho más sintético de lo que pensamos, pero al menos eso lo podemos arreglar. — Samui, luego de apagar contra una pequeña placa de metal la colilla del cigarrillo, procedió a caminar hacia la puerta hermética.
—Poketto-san. ¿Dónde están sus consciencias y recuerdos?
—Perdidos, fundidos, eliminados. Puedes planteártelo de la manera que te duela menos, Manaka-chan —Dijo antes de seguir su camino hacia la salida.
—¿Realmente podemos llamar a esto una prueba exitosa?
—Los jefes van a enojarse mucho.
Tal como predijo Mori, el día en que debían presentar una exposición con los pormenores del experimento, los jefes de Yamaha y los representantes de Zero-G entraron en un estado colérico y desesperado al entender el "fracaso" en toda la situación. Finalmente, luego de una acalorada discusión sobre si continuar o no con el proyecto, se decidió que se le daría un nuevo rumbo a Vocaloid. Desde ahora se centrarían completamente en crear voces sin poner en riesgo el cuerpo del proveedor. Por otra parte, los procesos de virtualización volverían al área experimental hasta que se consiguiera un modelo estable. Con esto todos parecieron quedar conformes. Todos menos Shido Saigo, quien al enterarse de los resultados cayó en un severo estado depresivo, pensando que aquella petición egoísta que había hecho hace tres años se había convertido en un severo programa capaz de eliminar a una persona del mundo físico. Totalmente rendido, informó que seguiría financiando el proyecto, pero que no participaría directamente en él. Después de aquel anuncio nadie volvió a saber de su existencia.
Así, el proyecto de Vocaloid continuo su marcha. Los tres científicos principales de la primera versión del proyecto se dividieron por órdenes de los superiores para así poder hacer avanzar de manera más eficiente las cosas. Manaka y Mori estudiaban por separado los errores y conflictos de la virtualización, centrándose en la parte psicología y física respectivamente. Samui Poketto, al ser responsable de la "versión final" de Leon y Lola, fue asignado a un grupo de tecnólogos informáticos para apoyarlos intelectualmente en la reconstrucción y afinación de las primeras librerías musicales de Vocaloid. Todos estos procesos hicieron que el año pasara sin que lo notaran.
Como una especie de deja vu, Haru se encontró parado sobre un escenario explicando lo que era Vocaloid. El anuncio pronto se extendió por los distintos medios de comunicación, aunque no pasaba de ser un software novedoso. Un mes después de la presentación del software de síntesis de voz las librerías de LEON y LOLA fueron lanzadas al mercado bajo la designación de "Vocalista Virtual de Soul". La recepción de los que ahora eran, oficialmente, los primeros cantantes virtuales fue más baja de lo que los estadistas de Zero-G y Yamaha habían previsto. Los cantantes no se popularizaban con el paso de las semanas y el golpe económico daba la alerta de la posible deserción de la única compañía que los había aceptado. Por suerte, en una asamblea general para debatir el siguiente paso a tomar, una solución dada por Poketto les devolvió la esperanza.
—Quiero ser breve y claro: La idea que les propondré a continuación no ha sido probada, por lo que un fallo similar al de la primera virtualización podría ocurrir.
—¿Cuál es la probabilidad de éxito? —Preguntó uno de los representantes de Zero-G.
—Menos del 50%. —Luego de la respuesta todos enmudecieron, murmurando frases para sí mismos.
—¿Qué diferencia hay entre este plan de virtualización y el anterior? —Esta vez uno de los asesores del jefe de Yamaha lanzó la pregunta.
—Esta vez realizare una virtualización de copia. No afectare el modelo de voz original y tampoco intervendré o modificare el cuerpo, solo contendré la voz sintetizada directamente en el modelo de librería musical.
—¿En palabra simples? —Preguntó un poco avergonzado el segundo representante de Zero-G.
—Tomare prestada la voz del dador y creare una voz nueva que estará contenida en la base de datos dentro de un modelo temporal. Así serán libres de darle la imagen que quieran.
—¿Es realmente posible hacer tal cosa? —El asesor principal de Yamaha, un escéptico hombre que poco confiaba en los científicos luego del accidente con Leon y Lola, habló con voz firme.
—Como respondí anteriormente, las probabilidades son menores al 50%.
—No voy a autorizar algo que suena tan simple. Porque el software de Vocaloid aún no es conocido los rumores sobre el fracaso inicial no repercutieron severamente sobre nosotros, pero ¿Crees que alguien del área musical no lo sabe? A pesar de que no nos dieron su apoyo estuvieron pendientes de nuestros avances y ahora, conscientes de nuestro fallo. Nadie querría colaborar con nosotros luego de lo que sucedió.
—De hecho, señor, hay alguien que contactó con nosotros para preguntar si el proyecto aún seguía en marcha. —Haru habló un poco temeroso, no podía sacar fuerzas cuando se encontraba frente a varias personas de carácter firme.
—¿Qué? —Ante tal información el hombre se desequilibró un poco de su silla.
—Miriam Stockley, una cantante que reside actualmente en Estados Unidos.
—Si aceptamos su propuesta ella sera asociada automáticamente a Zero-G, son ellos quienes tienen la última palabra. —Tras la aclaración, los representantes de la empresa comenzaron a considerar los pros y los contras de la nueva oportunidad que tenían frente a ellos.
—Aceptamos, a partir de ahora Miriam Stockley pasara a ser la tercera apuesta de Zero-G, y le dará vida a un Vocaloid que lleve su mismo nombre.
—Entendido, me pondré en contacto con ella. —Anunció Haru un poco más relajado.
—Con su permiso, debo mejorar el laboratorio para que todo salga expedito en la creación de la nueva librería musical. —Sentenció Poketto antes de salir de la habitación.
Exactamente un mes después de aquel anuncio, Miriam Stockley se presentó al laboratorio de Yamaha. Manaka la recibió y le explicó los procedimientos de la síntesis virtual, nombre que recibió la segunda versión del experimento original. El nuevo procedimiento consistía en una grabación dentro de una sub-cámara hermética que recaudaba varios procesos vocales del dador. La información vocal que se creaba mientras la persona grababa se encriptaba a través de la computadora con los comandos virtuales. Esa parte era la que marcaba el éxito o fallo, si la voz copiada no se enlazaba bien al comando virtual la original podía resultar con severos daños ya que sería parcialmente absorbida por el programa que buscaba mecánicamente los fonemas correctos. Afortunadamente, gracias a la disposición y tranquilidad que tuvo la cantante, todo salió bien. Todos en el laboratorio se sintieron aliviados al ver en la pantalla gigante el anuncio de "Procesos vocales completados con éxito". Luego de que Miriam Stockley pasara los exámenes para confirmar que su voz estaba intacta se retiró del lugar.
Los arreglos para el nuevo voicebank de Zero-G tardaron menos que la primera vez, por lo que a mediados de Junio Miriam ya estaba disponible para ser comprada. El profesionalismo que presentaba esta libreria musical, en conjunto con las mejoras en el funcionamiento de síntesis, hizo que superara rápidamente a Leon y Lola. Con este nuevo panorama Zero-G invirtió lo suficiente para popularizar el software. Cuando se decidió revelar la identidad del proveedor de voz de Miriam las personas, de alguna manera, comenzaron a presentar un interés mucho mayor que antes. ‹‹No se puede luchar contra el progreso›› Dijo cuando le preguntaron porque había aceptado participar de un proyecto que aún estaba en desarrollo. Pero mientras Miriam era comprada y utilizada nuevas quejas llegaron a Yamaha. Esta vez se trataba del idioma. Como el público que vio nacer el proyecto era japonés, una presión leve pero constante indicó el deseo de un Vocaloid nipón. Así, la búsqueda de un nuevo acuerdo con alguna empresa musical japonesa comenzó, teniendo resultados a finales de Junio.
Crypton Future Media, una compañía que se dedicaba al desarrollo, importación y venta de productos para la industria musical, apareció para negociar con Yamaha la producción de una librería musical japonesa. En una nueva reunión Haru se encontró explicando lo que era Vocaloid con más nerviosismo del habitual. Los dos representantes de Crypton, un hombre y una mujer, parecían estar totalmente comprometidos con el tema. Tanto que sus rostros apenas si demostraban alguna emoción. Luego de un debate sobre las regalías y los derechos la mujer que llevaba el típico traje de oficinista se levantó para hablar.
—Ahora que el trato esta hecho nos gustaría ser claros con las personas que se encargan de la primera fase de creación de cantantes virtuales. —Manaka, Mori y Samui la miraron con un poco de molestia puesto que la mujer hablaba con aires autoritarios. —Queremos crear dos cantantes para el motor de Vocaloid, uno femenino y otro masculino. Ya hemos contratado a los proveedores de voz, y tambien contamos con un par de voluntarios para la virtualización.
—Señorita, el equipo científico de Vocaloid ya no realiza la virtualización, solo trabajamos con la síntesis virtual. —Dijo Mori con apatía.
—Lo sabemos. —La respuesta seca del representante de Crypton le generó un mal sabor en el estómago. Definitivamente, esta empresa no tenía escrúpulos con tal de incursar de manera exitosa en el mundo de Vocaloid.
—La virtualización se encuentra en una etapa experimental avanzada, por lo que las probabilidades de éxito son mucho mayores que antes. —Poketto se levantó de su silla, apoyando sus frías manos sobre la larga mesa de vidrio. Como estaba frente a la representante de Crypton no dudo en acercarse a ella mientras todo su ser parecía rodearse de un aura intimidadora— Pero tenga en cuenta que estoy trabajando con seres humanos y que un error me dejaría a mí y a ustedes con las manos manchadas de sangre.
—Eso tambien lo sabemos. —El hombre volvió a responder con tono seco y preciso— Sugiura, toma asiento, no hay necesidad de ponernos hostiles mientras negociamos.
—Nosotros solo estamos advirtiéndoles las posibles consecuencias. —Manaka tiró levemente de la bata de Samui para que se sentara. Este obedeció al tiempo que guardaba sus manos en sus bolsillos.
—D-de cualquier forma, si ustedes están dispuestos a todo, deberían indicarnos cuando quieren que comencemos. —Haru, que estaba cerca de la cabecera del asesor principal, habló con el temor escrito en la cara.
—Mañana.
—¿Eh?
—Mañana les traeremos a los proveedores y a los voluntarios. Esperamos que puedan desarrollar el voicebank femenino antes de que finalice el año.
—Ah, p-por supuesto.
—Bien, entonces sera mejor que preparemos todo, después de todo ahora tendremos que realizar los dos procesos. —Dijo Mori mientras se levantaba de su silla, Manaka y Samui lo imitaron. Así, los tres dejaron la sala luego de una forzada reverencia.
Tal como prometieron los representantes de Crypton Future Media, a la mañana siguiente dos jóvenes que no tendrían más de veinticinco años llegaron a las instalaciones de Yamaha. Como de costumbre, fueron guiados hasta la puerta hermética que resguardaba el laboratorio. Este había sufrido un par de modificaciones que habían tomado prácticamente toda la noche. Ahora, frente a la pantalla gigante estaban las capsulas herméticas y una cabina rectangular transparente. Esta contenía otro par de capsulas herméticas dentro. Ambos pares de capsulas estaban conectadas por un grueso cable compuesto del mejor material para el traspaso de información virtual. Sin perderse en introducciones largas, Manaka les entregó la ropa de pruebas y les pidió que se cambiaran en unos vestidores improvisados que habían ensamblado dentro de la amplia habitación. Cuando estuvieron listos, se les dio las mismas instrucciones que a Leon y Lola. La diferencia de la nueva versión de virtualización se dio justo después de que el escaneo físico finalizara.
—Bien, activen la primera sucesión de microchips, del uno al cincuenta, para el hemisferio derecho en la mujer y para el hemisferio izquierdo en el hombre. —Indicó Poketto sin perder la concentración que tenía puesta en la computadora. Mori y Manaka realizaron la activación para el hombre y la mujer en respectivo orden.
—Falla respiratoria en la mujer, si continuo con la inserción se hiperventilara. —Señalo Manaka a penas lo notó.
—Falla cardiaca en el hombre, se está produciendo una baja acelerada en su presión sanguínea. —Avisó a su vez Mori.
—Continúen, cierren la primera sucesión y apliquen inmediatamente el plan de reanimación para ambos sujetos. —Samui no dudó y continuó en su trabajo de activar los comandos de los microchips que sus compañeros estaban insertando en el cuerpo de los sujetos.
—Entendido. —Dijeron ambos sin dudar.
—Inserción del uno al cincuenta en ambos completada con éxito. —Dijo Manaka al ver la información pareada en una de las tres pantallas que tenía frente al panel de activación— Ambos se encuentran estables, el plan de reanimación los ha estabilizado lo suficiente.
—Bien, dejemos que terminen de estabilizarse por su cuenta. ¿Cómo va la transcripción de la voz?, ¿Sera posible insertarla sobre la que ya tienen sin que cambie? —Preguntó a los ayudantes que se encontraban viendo otra serie de procesos en los escritorios tras la pantalla y las capsulas.
—Transcripción al 60%, avance constante y sin errores hasta ahora.
—Análisis completo, 72,67% de que no ocurran cambios severos en los tonos y fonemas originales de los proveedores de voz.
—Bien, gracias.
—Es genial que hayamos grabado y sintetizado la voz por separado, de lo contrario hubiera sido un dolor de cabeza integrarla mientras hacíamos esto. —Dijo Mori para relajar un poco los ánimos.
—Desde un principio decidí que sería así, después de todo, nunca les dije a esos de Crypton que realizaría los procesos al mismo tiempo. —Poketto apoyó su peso en el respaldo acolchado de la silla y estiró sus cansadas manos.
—O que tendrías la voz primero y el cuerpo después. —Añadió Manaka en un suspiro.
—Lo bueno es que ahora tendrán las dos voces para la misma fecha, que mejor que eso.
—Tienes razón, realizar el proceso con ambos es lo mejor, así tenemos menos probabilidades de fallar. —Mori se pasó la mano por el cabello para arreglarlo.
—Bueno, suficiente descanso, vamos a continuar con esta abominación de creación de vida. Activen la segunda sucesión de microchips, del cincuenta al cien, hemisferio izquierdo en la mujer y hemisferio derecho en el hombre. —Los hermanos Negao obedecieron con determinación y así la segunda inserción comenzó presentando los mismo síntomas de antes.
—Estabilícenlos mientras insertan los microchips.
—Entendido.
—¿Cómo están?
—Estables. —Respondió Mori, acomodándose nuevamente el cabello que caía y se humedecía con el sudor frio que poblaba su frente.
—Inserción del cincuenta al cien completada con éxito en la mujer, el hombre aun presenta conflictos.
—Remplaza los microchips con los repuestos alfa o beta.
—Conflictos desechos, inserción completa.
—Bien, déjenlos descansar un poco y preparen el moldeador "1 a 8"[2]
—Está bien. —Dijeron nuevamente ambos, intentando permanecer calmados. Estaban a escasos minutos de volver a realizar la virtualización, poniendo en práctica la teoría que Samui les había explicado hace un tiempo.
—Modelo masculino cargado y listo para funcionar.
—Modelo femenino cargado y listo para funcionar.
—Transcripción de voz terminada y lista para enlazarse.
—Análisis completo, dos de tres computadoras anuncian una alta probabilidad de mantención de los tonos y fonemas originales.
—Así que ya no hay vuelta atrás eh… —Poketto se masajeó las sienes en un intento de calmar la ansiedad y la tensión. Luego de revisar por última vez el programa de virtualización en el que había estado trabajando desde el incidente con Leon y Lola procedió a dar la señal para que se liberara la librería de voz hacia su computadora— Por separado debería resultar, pero aún tengo mis dudas respecto a lo que podría generar una unión. —Susurró para sí mismo.
—¿Poketto-san? —La voz de Mori lo sacó de su debate mental.
—Comiencen la virtualización para el hombre y la mujer, activen ambas secciones de microchips. —Manaka siguió las órdenes y activó las secciones. —Bien, Manaka-chan, abre los canales de información. Es todo o nada.
—Canales abiertos.
—Bien, es hora, activando el reseteado mental…amplificándolo en dos, en tres, en cinco…
—Error, la consciencia intenta resguardar recuerdos. —Anunció Manaka con un poco de miedo en sus ojos.
—Maldición, de seguro deben estar viendo sus recuerdos pasar y perderse frente a sus ojos, es normal que intenten recordar cosas valiosas. —Mori golpeó la infraestructura del panel con amargura.
—¿Qué probabilidades hay de que mueran por derrame cerebral si los fuerzo a olvidar con el reseteado?
—92% —La respuesta llegó rápida, pero fue digerida lentamente por los tres científicos.
—Así que sera un 8% eh… —Poketto suspiró nuevamente antes de tomar la decisión. —Bien, entonces convertiré este ocho negro en suerte[3]…amplificando en siete. —Luego de esas palabras el silencio invadió el laboratorio. Solo los chirridos y pitidos mecánicos de las maquina quedaron, como una extraña melodia de fondo. Minutos después el aviso de que la virtualización se había completado apareció en la computadora de Poketto y por consecuencia en la pantalla gigante.
—¿Lo logramos? —Preguntó Mori, con los cabellos desordenados y la cara más pálida de lo normal.
—Aun no, tenemos que transferirlos a la cabina para comprobar que pueden estar en ambas dimensiones. Si no aparecen en las capsulas dentro de esta significa que otra vez evaporamos sus cuerpos. —Manaka se acercó a su hermano para abrazarlo por el costado, este le dio ánimos envolviéndola con su brazo derecho al tiempo que se preparaba mentalmente para apretar el botón que abriría simultáneamente los dos pares de capsulas.
—Cuando tú quieras, Poketto-san.
—Dame un minuto, quiero ver de cerca esto. —Samui se levantó y camino hasta los hermanos Negao con las pocas fuerzas que conservaba. Una vez cerca de ellos se pasó la mano por su castaña cabellera y retiró las gotas de sudor de sus sienes— Ábrela. —Luego de que indicara esto, el resto de los ayudantes se reunió alrededor de la cabina transparente para poder ver los resultados. La tensión y ansiedad que se respiraba podía confundirse fácilmente con una especie de gas que dificultaba cada vez más el respirar.
—Aquí vamos. —Mori presionó sin dudas el botón y los pares de capsulas herméticas comenzaron a abrirse sin oponer resistencia o generar algún conflicto.
Una vez que estuvieron totalmente abiertas ninguno de los presentes pudo pronunciar palabra y pareció que todos, en una extraña sincronización, habían dejado de respirar al ver las capsulas del interior de la cabina rectangular. En esta, dos cuerpos desnudos que parecían perfectos modelos 3D de algún personaje de anime reposaban tranquilamente. Por otra parte, en las capsulas originales el vacío sepulcral indicaba el éxito completo. Cuando todos entendieron esto comenzaron a aplaudir y celebrar, todos menos los tres científicos. Ellos parecían estar absortos en su observación, pasados unos minutos Poketto dio las indicaciones.
—Preparare los voicebanks, tenemos que insertarlos antes de que despierten.
—Entendido.
Todos volvieron a sus posiciones. Mori cerró nuevamente las capsulas dentro de la cabina y Manaka se preparó para cerrar los canales de información de las capsulas externas y abrir las de las capsulas dentro de la cabina. Una vez que todo estuvo listo Samui inició el proceso de enlace de la voz virtual al cuerpo. Sin ninguna clase de error estas fueron encriptadas.
—Ahora si lo hemos logrado. Jaja, realmente lo hemos logrado. No puedo creer que realmente hayamos hecho un cuerpo que puede estar en dos dimensiones al mismo tiempo. —Dijo mientras se relajaba por completo— Espera, Mori, no las abras todavía. Hay una condición para que las voces se queden donde están y es que deben ser restringidas con un objeto virtual que no se puede quitar, casi lo olvido —Volviendo a sentarse correctamente en la silla Poketto comenzó a buscar los objetos que había preparado y los activó para que así llegasen a las capsulas de la cabina— Bien, ahora sí.
—¿Qué objeto les diste? —Preguntó con curiosidad Manaka mientras se acercaba a la cabina para mirar nuevamente al par de "Vocaloids" que ahora yacían en ella.
—Una cadena con la inicial de la empresa, es un objeto temporal. Cuando sus diseños definitivos lleguen los convertiré en los restrictores definitivos.
—¿Entonces ahora si podemos decir que todo está listo? —Preguntó Mori con tono cansado pero aliviado.
—Sí, ahora sí.
Pero tras esta consigna definitiva de éxito, Manaka notó un problema que a simple vista nadie hubiera descubierto. El hombre y la mujer que yacían dentro de la cabina habían despertado, pero no habían tenido ninguna clase de reacción de pánico, miedo o vergüenza al entender la situación en la que estaban. Como en sus mentes ahora solo estaba escrito el hecho de que eran cantantes virtuales, los recuerdos, las memorias y lo más importante: la personalidad, habían desaparecido. Rápidamente Poketto llamó a la calma, anunciando que ya tenía previsto algo como esto. ‹‹ ¿Alguien ha jugado "Los Sims"?›› Todos se miraron un poco extrañados ante tal pregunta. ‹‹Como no tienen personalidad pero son modelos virtuales puedo insertarles comandos de personalidad ilimitados así como gustos, fobias, color favorito, etcétera›› Explicó mientras abría el programa encargado de hacer tales cosas.
Sin embargo, aunque se podían hacer tales cosas con los Vocaloids, crear de cero una personalidad no era algo simple. De pronto, Mori preguntó si podía encargarse de eso. Poketto no se negó y le cedió el programa, que era bastante similar al que tenía el juego de simulación cuando se creaban los personajes. Después de más de cuarenta minutos de trabajo, el joven anunció que había terminado. Manaka les dio instrucciones a los Vocaloids para que volviesen a entrar en las capsulas. Por suerte sus sentidos de entendimiento no se habían dañado. Una vez que estuvieron dentro Mori confirmó sus creaciones y envió la nueva información a los cerebros semi-artificiales de los cantantes. Minutos después, cuando las capsulas se abrieron, el éxito de la inserción de personalidades e hizo obvio. Apenas la vista de ambos se encontró con el cuerpo desnudo del otro el hombre se tapó a medias la cara y la mujer sin perder un segundo le dio una patada en las costillas, haciéndolo caer.
—¡Hey, ¿Por qué rayos estoy desnuda?! — Fue lo primero que quiso saber la mujer mientras se cubría.
—¡Hey, ¿Por qué rayos hiciste eso?, ¿estas mal de la cabeza?! —Soltó con violencia Manaka al ver como el hombre se retorcía de dolor en el piso.
—¡¿Él me estaba mirando, que hubieses hecho tú?! —Respondió a su vez la Vocaloid con un tono igual de violento.
—¡Pues lo hubiese golpeado, pero…! espera un segundo…Mori… —Cuando la pelinegra de ojos azul oscuro cayó en cuenta la similitud entre ella y la "nueva" personalidad de la Vocaloid femenina se acercó hasta su hermano, preparando sus puños para golpearlo.
—¿Qué pasa, Manaka?, ¿No te agrada ver tu personalidad en alguien más? —Preguntó en tono bromista mientras se levantaba para guardar distancia, fallando ya que su hermana le dio un certero puñetazo en la cara.
—¡Ese no es el problema, imbécil!
—¿Es mi idea o el hombre tiene la personalidad de Haru-kun? —Soltó Poketto mientras contemplaba al pobre Vocaloid masculino que se había trasladado hasta un rincón de la cabina para ovillarse en silencio.
—Jaja, como se esperaba de Poketto-san, has adivinado muy rapi- —Otro golpe le impidió terminar su frase.
—¡¿Por qué tenías que usar nuestras personalidades?!
—Pues, porque se complementan y son graciosas de ver.
—¡Cámbialas!
—Lamentablemente, hacer eso no sera posible, Manaka-chan. Solo se puede realizar una inserción de ese tipo.
—¡¿Por qué no me lo dijiste antes?! ¡Si lo hubiese sabido no se lo hubiera dejado a este idiota!
—¡¿Cuánto tiempo más te quejaras de algo tan insignificante?! ¡Yo estoy pasando por un verdadero problema sabes!
—¡Cállate!
—¡¿Eh?, ¿Quién te crees que eres?!
—Una de las personas que te creo, ahora busca en el mueble de ahí una bata y deja de quejarte.
—Haberlo dicho desde un principio. —Tras la queja, la Vocaloid femenina procedió a buscar una bata y ponérsela. Luego busco otra y se la lanzo al Vocaloid masculino. —Ten, póntela rápido. ¡Y deja de llorar, no te golpee tan fuerte!
Semanas después de que el laboratorio de Yamaha trajera a la vida a los primeros Vocaloids completos Crypton reconoció el esfuerzo de los científicos y les propuso financiar gran parte del proyecto que buscaba actualizar el motor de Vocaloid. Con esto Yamaha obtuvo un fuerte socio que estaba dispuesto a correr riesgos con tal de asegurar el éxito del programa. En los meses restantes se perfeccionó la apariencia y librería musical de la mujer, que saltaría al mercado en noviembre bajo el nombre de MEIKO. Originalmente se pensó su salida junto a KAITO, nombre que obtuvo la librería masculina, pero este tuvo problemas con su cuerpo y voz por lo que su lanzamiento se aplazó.
Cuando Meiko finalmente fue liberada produjo una serie de ventas altas y consecutivas, al final, el recuento indicó más de tres mil unidades vendidas. Vocaloid se estaba convirtiendo al fin en un programa conocido gracias a la publicidad de Crypton y Nico Nico Douga, web de alojamiento de videos a la que eran subidas las canciones hechas con Meiko. Aunque con la salida de Kaito las cosas no fueron tan bien. Dos años después del exitoso lanzamiento de Meiko, Crypton lo liberó al mercado, consiguiendo un gran golpe a sus estadísticas ya que de él solo se vendieron, aproximadamente, quinientas unidades. La tajante diferencia lo marcó de inmediato como un fracaso comercial en el que no valía la pena seguir invirtiendo.
Con todo esto Crypton Future Media y Yamaha comprendieron una cosa de forma inmediata: el público quería voicebanks femeninos. Así, a principios de marzo, ambas compañías lanzaron en conjunto el "Vocaloproject" con el lema ‹‹¡Conviértete en un cantante que trascienda en el tiempo!››. Como no habían demasiados requisitos (el principal era no tener más de veinticinco años) las personas aficionadas a la musica y las idol entraban en la misma categoría, aunque claro estaba que Crypton y Yamaha tendrían muchos métodos para descartarlos cuando las audiciones comenzaran. Y es que de todas las personas que se presentarían pronto, solo una tendria el privilegio de ser "La primera idol virtual de Japón"
1: MTO es la abreviación de Music Technology Group (Grupo de Tecnología Musical), un grupo perteneciente a la Universidad Pompeu Fabra de Barcerlona, España.
2: 1 a 8 es la escala o canon que se utiliza para dibujar personajes de anime. El cuerpo es ocho veces la cabeza del personaje. Cabe destacar que no todos los personajes son dibujados con la misma escala.
3: Ocho negro es una analogía a la bola ocho de color negro utilizada en los juegos de pool o billar. En un juego llamado Bola Ocho, luego de haber embocar las siete bolas lisas o rayadas, la bola ocho debe introducirse para ganar. Pero si es golpeada y embocada antes de terminar con las de colores se considera falta y puede hacer perder al jugador.
