Título: Estrella fugaz
Descargo de responsabilidad: No poseo nada del mundo de Harry Potter creado por J.K. Rowling, claro, a excepción de una insana obsesión con los personajes
Beteo: El único ser viviente que ha revisado esto… es mi perro y mi bella persona
Resumen: El pensamiento no era nada nuevo, eran varias las ocasiones en las que su mente se dejaba llevar al estar junto al joven Potter. Y es que era difícil no perderse en sus pensamientos cuando los ojos verdes, grandes e impresionados, veían todo a su alrededor con completa adoración.
Número palabras: 399…. Pues lo de siempre
Este fic participa en el reto de Marzo para la copa de la casa 2018/19 del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black
Me gustas, Albus.
El pensamiento no era nada nuevo, eran varias las ocasiones en las que su mente se dejaba llevar al estar junto al joven Potter. Y es que era difícil no perderse en sus pensamientos cuando los ojos verdes, grandes e impresionados, veían todo a su alrededor con completa adoración.
—Scorpius, ¿me estás escuchando?
La magia del momento se rompió cuando el ceño fruncido de su mejor amigo (por el momento) le dejó notar la molestia que le causó el ser ignorado. Y debido a que era un orgulloso Malfoy incapaz de reconocer sus errores, respondió con la más obvia de las mentiras.
—¡Por supuesto, Al!
—¿En serio? Entonces dime de que estaba hablando— cuestionó Albus divertido.
Touché, querido Albus.
—¿De lo increíble que soy al haber sido capaz de preparar esto? —preguntó tanteando su suerte.
Modestia aparte, sabía que Albus jamás podría negar lo impresionante que era el que hubiese logrado encontrar el mejor punto en el castillo para observar la lluvia de estrellas. El chico Potter simplemente era un nerd incorregible que tenía que saber cada pequeño detalle disponible en sus libros de Astronomía.
¿Y que si parecía el lugar ideal para una cita con la cesta de picnic, la luz de las estrellas y la vacía torre? Scorpius era débil.
—Casi—confesó Al— solo decía que le hacías honor a la constelación que salvó a Artemisa. Eres realmente genial.
Albus se dio la vuelta y se dirigió a la pila de almohadas previamente instaladas sin darle tiempo de responder. Al menos no había visto el sonrojo que le había provocado.
Scorpius no tardó en unírsele con un pequeño tablero de ajedrez, aún faltaban un par de horas para el evento y nada mejor que ver a Albus exudando competitividad.
Con el caer de las primeras estrellas llegó también el asombrado y raro silencio, Albus siempre estaba murmurando algún hecho o información fuera útil o no. Era adorable.
Al caer la última estrella, viendo como las gemas esmeraldas se cerraban y la cabeza azabache se recostaba en su hombro, no pudo evitar desear estar siempre junto a él.
Sin embargo, antes de confesar sus sentimientos, aún tenía algo que hacer. Tomando un mechón de su cabello simplemente susurró al silencio nocturno.
—¿Sabes, Al? Sé que te enfadarás, pero le hice una promesa al idiota de James, así que tendrás que esperarme solo un poco más.
N/A: ¡Yay! Lo he logrado :3 para mi esta historia tiene lugar poco antes de mi fic "Haciendo el tonto por amor" pero creo que es posible leerlo y entenderlo sin necesidad de leerlo. Y ¿Cuál es la promesa que le hico Scorpius a Al? Pues el que solo saldría con su hermanito cuando ganase la copa de Quidditch para su casa XD