PARTE 1

Las cosas son simples, si bien no son precisamente buenos amigos - y amigos es ya decir mucho- habían pasado demasiadas cosas como para que el trato que tenían antes siguiese siendo el mismo.

Sin quererlo se conocían completamente. Por un lado Gokú - o Kakaroto, como el le llamaba- alguien con un gran corazón e inocencia que aveces caía en lo ridículo; y del otro, Vegeta, un saiyajin de sangre pura, orgulloso y frío.

Se encontraban entrenando en la cámara de gravedad, como era costumbre después de comer, y pudo haber sido un día común y corriente; de no ser por algo inesperado.

Gokú: Oye Vegeta! Estaba pensando...

Vegeta: Tú?

Gokú: Si! - dijo con una sonrisa- que te parece si vamos a entrenar al aire libre para variar un poco... nose, me siento un poco encerrado aquí- dijo llevándose la mano derecha a la nuca.

Vegeta:Pues si quieres ve tu, yo necesito la gravedad de este lugar-dijo fríamente.

Gokú meditó un rato sentado en el piso con las piernas cruzadas, en realidad podía ir a entrenar solo, no era algo raro para el; pero después de todo lo que había estado sucediendo, sentía que funcionaba mejor con Vegeta cerca.

Vegeta: ¿Se puede saber que haces ahí mirándome? ¡ Si no vas a entrenar lárgate! ¡Estorbo!

Gokú: Es que - dijo al tiempo que se levantaba- prefiero entrenar contigo, enserio, solo que no quieres salir...- El no era orgulloso, así que no le costo nada admitir eso.

Vegeta: ...

Gokú: Oh vamos! Sera divertido! Y si quieres te dejare comer la mitad de mi ración de la tarde- dijo persuadiéndolo.

Vegeta: Aaaa Bien- giro la cabeza hacia un lado- pero ni creas que puedes convencerme siempre de hacer las cosas que quieras.

Era una tarde tranquila, aquello era algo nuevo, nunca salían de ese cuarto de entrenamiento. Cerca había un lago, a Gokú le trajo recuerdos de su infancia.

Gokú: ¿Sabes pescar, Vegeta?- pregunto volteando a verlo.

Vegeta: ¿Pero que estupideces estas preguntando? Hemos venido a entrenar- Dijo elevando su ki superficialmente- Vamos Kakaroto, no hagas que me arrepienta de haberte seguido hasta acá.

Gokú: Si! Eso me parece bien, Vegeta- sonrió.

Comenzaron a pelear, aunque era entrenamiento, Gokú siempre intentaba en lo posible no lastimarle el ego a su compañero, había aprendido a controlar sus fuerzas para evitar que este no se enfadara si el lo superaba en algún momento de la pelea.

Vegeta: Oye Kakaroto- dijo sonriendo de lado- apuesto a que puedo tumbarte con dos simples golpes.

Gokú: No dejare que lo hagas- dijo retándolo- aunque puedes intentarlo.

En algún momento de la pelea, Vegeta noto un desgaste de su energía bastante radical, su orgullo evito que se detuviera. La pelea transcurrió por unos minutos mas, hasta que un golpe de Gokú lo hiso tambalear y no paso desapercibido; este se detuvo.

Gokú: Vegeta te encuentras bien?- dijo algo preocupado.

Vegeta: No seas imbécil y pelea!- respondió notablemente agotado, apenas tenia aire y sin querer perdió el equilibrio.

Camino torpemente hasta Gokú con la intención de poner un puño en su cara en señal de que continuaran, que estaba todo bien; pero este resbalo y Goku recibió el puño en su mano.

Vegeta: Pero que haces insecto! Suelta mi mano!

Gokú: Lo siento, es que creí que te caerías- dijo medio riendo medio preocupado.

Vegeta:... ka.. ka-roto...

Finalmente se dejo caer, algo que al parecer Gokú no esperaba, porque no consigio retenerlo y termino recibiendo todo el cuerpo del saiayajin sobre el; le dolió, pero luego ya no.

Gokú: Vegeta?

Vegeta se había quedado dormido, con su puño aun dentro de la mano de Gokú; este miraba el cielo con su otro brazo bajo el cuello. Pensaba en que debía llevarlo a la corporación para que descanse, pero no se movía. Parecía que le agradaba estar ahí, bajó la mirada hacia Vegeta.

Nunca lo había visto así, dormido, sobre el, recordó muchas veces que lo vio débil, pero ahora era diferente, este estaba completamente indefenso. Para quien conoce bien a Vegeta sabe que este preferiría mil veces irse antes de quedar a merced de alguien, Gokú podría lastimarlo si quisiera; sus pensamientos fueron interrumpidos.

Vegeta: hmp..- levanto su cara y se topo con la de Gokú..

...

Sus caras estaban demasiado cerca y el rostro de Gokú adquirió una seriedad poco usual, Vegeta aun estaba medio dormido; y contra todo pronostico, se acerco mas hasta quedar a la misma altura de sus ojos.

Vegeta: Kakaroto... decidiste dormir justo ahora no?- hablaba cosas sin sentido sin dejar de ver los ojos negros y profundos de su rival- Pues te diré que hace falta mas que esto para intimidarme- se acerco peligrosamente y Gokú abrió mas los ojos y una mueca de miedo se dibujo en sus labios- No te voy a besar si es lo que piensas.

Se levanto de un salto y medio mareado camino hasta un árbol y se sentó; Goku se incorporo arrodillándose en el pasto sin entender lo que acababa de pasar "¿Besarme? ¿Porque pensaría Vegeta eso?; noto que este tenia la vista fija en el.

Gokú: Oye porque no vamos a comer?-dijo riendo nervioso mientras se levantaba del suelo.

Vegeta: Aaa- se cruzo de brazos- Nose porque lo mencionas, recuerda que me ofreciste la mitad de tu ración.

Gokú: AHY!- abrió la boca en señal de pena.

Se acerco a Vegeta e intento sentarse a su lado.

Vegeta: No te me acerques Kakaroto!

Gokú: Tus ojos son mas negros que los mios, verdad?

Vegeta: eh?

Gokú se acerco a Vegeta con un gesto de incredulidad, y este ultimo solo atino a no moverse...