Tuve la necesidad de escribir sobre Deadman Wonderland, aunque sea una de mis paridas sin sentido y bastante ininteligibles, espero que sea aceptable.
Obviamente, una obra maestra como lo es Deadman Wonderland no me pertenece. En absoluto.
Jaula
La noria giraba y giraba, siempre, eternamente, brillando con luces de colores. A lo lejos se escuchaba música divertida que a veces, muy pocas, se le antojaban aterradoras. Pero ella nunca pensó que realmente alguien de ese lugar, alguien en esa prisión, fuera capaz de herirla.
Sentada de nuevo en un tejado cualquiera de la cárcel en la que siempre había estado, dejaba sus cabellos moverse al compás que la brisa marcaba.
Veía aquellas resplandecientes y brillantes luces que siempre rodeaban Deadman Wonderland. No la rodeaban, pero, a ella. Shiro era distinta a Ganta. Shiro era distinta a Crow. Y, bueno, si se ponía a llamar a la gente por su apodo, también era muy distinta del Woodpecker.
No por ser cómo era, sinó por pensar lo que pensaba.
¿Por qué escapar, si no era para subirse a la noria? Era lo que siempre rondaba su mente. Ganta no era capaz de entenderla, ni ella a él, aunque se esforzaba. Ponía todo su empeño en averiguar qué era lo que lo motivaba a salir de allí.
-Éste lugar es horrible.- Argumentaba.
Shiro sonreía ampliamente y le hablaba de los juegos, de los dulces, de la divertida vida que llevaba allí. Todos, absolutametne todos los que estaban allí, se habían vuelto locos poseídos por el deseo, por los pecados. Muchos ni siquiera anhelaban huir de esa maldita jaula.
Tal vez fuera por eso que Shiro era distinta: porque, para ella, Deadman Wonderland no era una jaula. Y ahora estaba con Ganta, y con Yoh, y también con Shinji aunque no hablaran nunca. Porque el cuervo ayudaba al pequeño pájaro carpintero a crecer y eso era del agrado de ella.
La noche. No era su jaula. Deadman Wonderland no lo era, para ella. Habia algo extraño que la carcomía. Ganta se lo decía a veces, sospechaba que sin poder creérselo, pero Shiro lo ignoraba.
-Yo no quiero salir. Estar con Ganta es divertido.- Y el nombrado se tiraba de los pelos sin comprender qué era tan difícil de comprender para la chica.
Para ella, si estaba con Ganta, ningún lugar era una jaula. Además, ella siempre se habia considerado libre.
Sé que puede carecer de sentido, admito críticas y, de hecho, las agradezco :))
