By Tenshi Lain
Cap. 1
Está muy oscuro... me cuesta respirar... el humo y el polvo que hay en el aire me obstruyen los pulmones y me resecan la garganta. Y ese peso... no sé que puede ser pero duele. Me siento aprisionado, no me puedo mover. Creo... creo que me ha caído parte del techo encima...
No sé que ha pasado exactamente. Todo iba bien y de pronto... todo empezó a moverse, las luces fallaron y algunos focos estallaron. La gente empezó a gritar, un tremendo estruendo y... oscuridad.
Esto es el fin, se acabó, punto final. Aquí termina mi vida, lo sé, pero... No quiero.
No quiero morir, no quiero dejarle solo, no ahora que tanto me necesita. Si desaparezco sería capaz de hacer cualquier tontería y no quiero que eso ocurra.
Le amo demasiado para dejarlo solo en estos momentos...
Frío y oscuridad...
Es lo único que siento. Ya no hay dolor, ya no me importa el aire cargado, no me importa no poder respirar, ni el calor que indica que cerca hay fuego, no me importa sentir la sangre bañando mi rostro... no me importa nada, porque ya no siento...
Soledad y silencio...
Nunca me gustaron ninguna de las dos. No es que les tuviera miedo, no era eso. Simplemente no me gustaban y siguen sin gustarme ahora que soy mayor, pero ahora... ahora no me importan. Estoy demasiado cansado para sentir aversión por ellas...
¿Que es eso que siento¿una presencia? Hay alguien más aquí conmigo... pero no sé lo que es, no puedo explicar con palabras los sentimientos que despierta en mí. Paz, serenidad, confort... no habla, no la veo, pero la siento... Me pide que le acompañe que vaya a su lado. En verdad me gustaría ir y olvidar todo. El dolor, la soledad, el sufrimiento, la oscuridad, el... ¿amor? No. No puedo olvidar el amor, no quiero olvidarlo... no quiero olvidarle.
Me pide de nuevo que le siga, pero no me muevo. Si me voy ya no volveré... ya no le veré... no quiero alejarme de él.
Por tercera vez me pide que le siga y yo le contesto...
-
¡Hey! Aquí hay otro cuerpo - dijo uno de los bomberos mientras la cuadrilla de rescate escarbaba entre los escombros con la ayuda de los perros.
- Mierda ya van ocho - masculló el jefe de cuadrilla secándose el sudor de la frente con la manga -. Ponle una tarjeta negra y déjalo. Tenemos que encontrar a los supervivientes, ya vendrán después a recoger los cadáveres.
- Es una pena, se ve muy joven... - dijo el hombre mientras colocaba la tarjeta sobre el pecho del cadáver.
De pronto, la mano del que el creyó muerto se cerró sobre su muñeca, causándole el susto más grande de toda su vida. Del grito que dio, todos sus compañeros se volvieron para ver que ocurría.
El muchacho abrió los ojos lentamente, pero su mirada estaba desenfocada, perdida...
- Oye chico ¿me oyes- llamó el bombero intentando captar la atención del chico ¡deprisa traed una camilla- gritó a sus compañeros - Venga chico, aguanta. Mírame ¡eh! Mírame, quédate conmigo.
Vio como los labios del joven se movían, pero no escuchó lo que dijo. Acercó su oreja hasta su boca intentando comprender el murmullo que escapaba de sus labios.
- aun no puedo morir...
CONTINUARÁ.
Nota: cuando hay un accidente con muchos heridos, los sanitarios establecen un código de colores para atenderlos. Verde para los heridos leves, amarillos para los que están peor, rojo para los que están graves y negro para los que ya están muertos o no tienen salvación.
Sé que este capítulo es un poco extraño. Pero es el monólogo de una persona que está a las puertas de la muerte. Claro que la identidad de este personaje no será revelada hasta casi el final del fic :P
Si tenéis alguna idea o sospecha de quien puede ser, mandadme un reviw. Aunque de momento es imposible que alguien acierte XD
