Con una actividad en el blog Ichigo and Rukia stories se me ocurrido una idea para un fic. No pensaba hacerlo hasta haber acabado con alguno de los fics que tengo, pero no podía evitar escribir esta historia. Y a eso hay que añadir el hecho de estar escuchando una canción que me ha inspirado para este prólogo.
Yo os recomendaría escuchar la canción Monster de Imagine Dragons, ya que es la canción que estado escuchando mientras lo he estado escribiendo.
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Monster
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Año 2034.
El mundo tal y como era conocido se había acabado.
Antes nadie hubiera creído que las criaturas nocturnas realmente existieran, y mucho menos que llegarían a dominar hasta el último extremo de la tierra. Hoy en día, nadie está a salvo. Todos y cada uno de nosotros estamos destinados a una muerte segura.
No importa dónde intentes esconderte, ellos te encontraran tarde o temprano, y seguro que lo que harán contigo no será nada agradable.
Es estúpido correr, intentar huir o ponerse a salvo. Todo eso es una completa gilipollez. Lo único que podemos hacer es luchar contra todo eso que hay allí afuera.
Por eso, yo y unos cuantos más nos hemos unido para luchar contra todos ellos.
Si eres un sobreviviente, por tu bien deberías unirte a nosotros. Nosotros nos ayudamos los unos a los otros para intentar sobrevivir y acabar con ellos.
Si eres una de esas asquerosas criaturas. Que sepas que vamos a por ti. Os daremos caza y acabaremos con vosotros de igual forma que vosotros lo hicisteis con nosotros.
No importa si morimos en el intento, muchos de nosotros ya lo hicieron. Estamos preparados para morir si hace falta. ¡Pero lo que no queremos hacer es quedarnos de brazos cruzados viendo como acabáis con nuestra raza!
Mi padre me dice que antes el mundo no era así. Antes las calles, las ciudades, las casas no estaban destruidas. Dice que antes podíamos salir a la calle sin sentir temor de que tal vez fuera la última. O peor aún, que nos trasformemos en uno de los vuestros.
Por eso, porque quiero proteger a mi familia y amigos, y quiero que el mundo vuelva a ser un lugar pacífico ¡luchare! Pienso morir en el intento si hace falta. No me importa como acabe, lo único que me importa es acabar con vosotros.
Mi nombre es Kurosaki Ichigo y estáis avisados.
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Aquel era el mensaje que había conseguido trasmitir en las pantallas gigantes que se encontraban en los grandes edificios. A decir verdad, eran más bien pocas, ya que casi todas estaban destrozadas.
Por las calles era imposible andar cerca de veinte pasos sin encontrarse escombros, farolas tiradas, tiendas destrozadas, restos de sangre… Aquel era el nuevo escenario de lo que antes se conocía la ciudad de Karakura. Pero al igual que aquella ciudad, todo el planeta se encontraba en la misma situación.
Era la una de la mañana, por lo que las criaturas salieron a la calle en busca de caza, pelearse entre ellos, acostarse entre ellos, emborracharse… no les importaba que hacer. Tan solo querían buscar una distracción.
Una de estas criaturas con la piel blanca, el pelo igual de blanco y los ojos negros salvo su iris (que eran color amarillo) miraba a la pantalla que tenía frente a él con una sonrisa sádica.
-Con que Kurosaki Ichigo ¿eh? Te estaremos esperando. Y cuando vengas ¡Te torturare hasta que supliques que te mate por haberte metido con nosotros!- gritó a la pantalla. Todos los que le rodeaban, también habían visto aquel mensaje. Muchos de ellos lo veían divertido. Y al escuchar las palabras de aquel compañero gritaron mientras levantaban sus puños en señal de alianza.
-¡Acabaremos con ese asqueroso humano!- gritó uno.
-¡Si piensa que nos pisoteara está muy equivocado!- le siguió otro.
Y así siguieron aquellos hombres y mujeres gritando de júbilo. El que parecía ser el líder, comenzó a andar hacía uno de los bares que tenían como por costumbre frecuentar.
Pero no solo estaban ellos. Sino que había más criaturas en aquel lugar, pero no se querían juntar con aquel grupo. O bien porque no querían juntarse con seres tan problemáticas, o bien porque eran de otra especie.
En aquella parte de la ciudad, desde un pequeño callejón, se encontraban dos personas de piel pálida y de cabellos morenos. Uno era alto y tenía los ojos de color gris, mientras que la otra era de estatura baja y sus ojos eran de color violeta. Ambos miraban hacia la dirección en la que se había ido aquel grupo, que aparentemente no se habían dado cuenta de su presencia. Al igual que los demás, también habían visto el mensaje de aquel muchacho.
-Vámonos Rukia- dijo el hombre mientras comenzaba a andar hacia el callejón.
-Sí, nii-sama.- contesto ella dándose la vuelta, pero antes de comenzar a andar volvió su vista hacía la pantalla.
Espero que os haya gustado el prólogo, la verdad es que me ha gustado mucho el resultado. No sé cuándo actualizare, tengo muchos fics más para hacer, pero intentare hacerlo cuanto antes.
Y por curiosidad, ¿alguien lo ha leído escuchando esa canción?