"y yo que pensé que nunca me enamoraría de ti…" pensaba cierta pelirroja mientras caminaba con dirección a su escuela, al ingresar se dirigió a su casillero cuando vio al chico que le había robado el corazón y se dirigía hacia ella.

-Hola linda – dijo él con una gran sonrisa mientras se recostaba en los lockers, ella recordó que así bromeaban antes, él le decía algún piropo y ella contestaba con algo parecido, como"hola guapo", aunque siempre terminaba sonrojándose pero el problema fue cuando ya no era un simple sonrojo, sino que su corazón comenzaba a latir mucho más rápido y se ponía nerviosa, y así terminó enamorándose de él.

-Hola-contestó ella con desgano

-¿estás bien?- preguntó preocupado-pareces algo triste

-solo estoy un poco cansada-justificó- tengo que irme a mi clase la Sra. Thomas puede ser no muy agradable cuando llegas tarde-el chico sonrió

-De acuerdo, te veo en Historia- ellos dos estaban en casi todas las clases juntos, de hecho la clase de la Sra. Thomas era la única en la que no estaban juntos.

-Tú también deberías irte se te va a ser tarde

-Voy a esperar a Megan- Megan era la novia del chico desde hace dos semanas, y es que él cambiaba de chica constantemente ya que por su aspecto físico era muy popular y hacía que cualquier chica caiga ante él, y no solo era el físico ya que por dentro también era todo un Don Juan.

-Ah-dijo ella tratando de disimular la tristeza que sentía por dentro-bueno, ya me voy, adiós.

La chica ingresó a su salón de clases y se sentó en una de las carpetas"por qué me tuve que enamorar de ti Matt" pensó con cierto disgusto en eso escuchó una voz.

-hola-dijo un chico también muy simpático

-Ah, hola Tai-dijo ella saliendo de sus cavilaciones.

-Estos días has estado muy pensativa-comento al verla- mmm…acaso nuestra pequeña Sora está enamorada- al decir esto la chica se sobresaltó.

-que tonterías dices-dijo sonrojada, él solo se rió; los tres: Matt, Tai y Sora eran los mejores amigos desde hace mucho tiempo.

-Está bien, no te haré más preguntas-dijo, Tai también era muy popular entre las chicas por ser el capitán de futbol del colegio, por eso a sus compañeras no le agradaba que ella este tanto tiempo con los dos chicos más guapos de la escuela, pero igual a ella no le interesaba mucho lo que dijeran los demás, además, ellos sola la veían como una amiga más.

-y que tal vas con Emily-preguntó Sora cambiando un poco de tema, el resopló antes de hablar.

-terminé con ella-dijo

-Qué sorpresa-dijo ella irónicamente, él arqueó una ceja mientras la miraba- Qué, solo digo la verdad-dijo con una pequeña sonrisa

-Por lo menos yo puedo estar con alguien más de un mes, no como otros-dijo refiriéndose a Matt y otra vez la tristeza inundó a la chica y Tai lo notó pero prefirió no decir nada.

Pasaron unos minutos y la clase transcurría como de costumbre hasta que Tai notó que Sora estaba un poco ida.

-Sora…-susurró el chico-Sora- dijo esta vez un poco más alto pero aún así ella no lo escuchó, así que decidió hablar con ella más tarde ya que si se les encontraba hablando seguro los sacarían del salón y Sora se molestaría con él.

-Estuviste muy distraída en clase

-Solo estoy algo cansada, no dormí bien anoche- se defendió la chica

-Pues yo sigo pensando que estás enamorada, me pregunto de quien será-dijo sonriente y frotándose el mentón como si lo estuviera pensando

-Mira Tai, aunque lo estuviera, lo que no es, tú y Matt siempre consiguen espantar a todos los chicos que quieren salir conmigo.

-Sora esos chicos no te convenían-dijo Matt apareciendo de pronto-todos eran unos idiotas, no merecen a alguien como tú.

-Estoy totalmente de acuerdo con Matt-dijo Tai lo cual hizo que la chica enfureciera, por qué ellos se tenían que meter en su vida, cuando ellos empezaron a salir con cualquier chica ella nunca los criticó, y le enojaba aún más el que se haya enamorado de Matt, no es que sea malo, todo lo contrario, él siempre ha sido un buen amigo, es su mejor amigo, pero si hablas de ser algo más…no es muy bueno ya que él hasta ahorita no ha tenido una relación estable.

-Saben, ya estoy harta de que se metan en mi vida, no necesito que me cuiden-dijo Sora molesta para luego salir de ahí dejando a sus amigos desconcertados; Sora trató de escabullirse entre los jardines del colegio hasta llegar a un lugar algo alejado donde se sentó en el pasto y se quedó unos minutos pensando en lo que acababa de suceder, en eso escuchó los pasos de alguien y supuso quien podía ser…