¡Hola todo el mundo! Les presento mi nueva historia, en ella pienso utilizar todo lo referente a este universo incluyendo Akito the Exiled y Oz the Reflection. La premisa en sí es muy utilizada pero pienso llevarla de manera algo diferente, espero lo disfruten.

Update: Hice algunos arreglos menores, también decidí utilizar una versión traducida del English dub de las palabras que Lelouch le dijo a Suzaku antes de "morir" en vez de la versión del subtitulada por fans del japonés debido a que la lengua materna de Lelouch es el inglés y por tanto su doblaje debería ser la opción a elegir por default.

Descargo de responsabilidad: No poseo absolutamente nada de este grandioso universo, Code Geass: Lelouch of the Rebellion y todas sus historias les pertenecen a Goro Taniguchi, Ichiro Okouchi y estudios Sunrise.


Prologue: "The Day a Demon was reborn"


Lelouch Vi Britannia… Ese es mi nombre, el nombre que me fue concedido el día de mi nacimiento y el nombre que había negado usar por siete años optando por el apellido de soltera de mi madre Marianne. El nonagésimo noveno Emperador del Holy Britannian Empire era el Titulo por el que se me conocía mundialmente… nunca en mi vida pensé que llegaría a obtener este puesto, después de todo yo era el décimo séptimo heredero en la línea al Trono, lo cual era muy lejano para que sea de alguna forma posible, además cuando tenía diez años yo renuncie a ese derecho en frente de decenas de nobles importantes en la corte de Britannia… sin embargo acá estoy, sentado en lo más alto del mundo, luego de haber asesinado al Emperador anterior Charles Zi Britannia y obtenido el poder por la fuerza.

Todas las personas vivas en este mundo me odian, eso lo sé muy bien, puesto que yo me aseguré de ello. En la anterior guerra, o para ser más específico en la batalla sobre el Monte Fuji, tomé control absoluto sobre todas las ojivas existentes del arma estratégica "F.L.E.I.J.A" y con la detonación de una de estas sobre el espacio aéreo japonés declaré mis intenciones a todo el planeta en trasmisión internacional.

El mundo entero se encontraba en mis manos… Todos estaban bajo mi control, todos debían obedecerme, no tenían otra opción. Ningún ejército podría hacerme frente ahora, ni los Black Knights, ni Peace Mark, ni La Estrella de Madrid y mucho menos los países sobrantes de la E.U. y la ahora extinta Wyvern Squad tendrían la más mínima oportunidad contra mí y mi igualmente inteligente e ingeniosa mano derecha Marrybell Mel Britannia al mando del colosal Sky Fortress -Damocles-

Aquellos idiotas que tuvieron la osadía de rebelarse en mi contra terminaron probando en carne propia el inigualable poder del arma estratégica más destructiva de todos los tiempos. Eso sólo ocurrió un par de veces, los rebeldes al menos fueron lo suficientemente cuerdos como para dejar de intentarlo en vez de perder más vidas sin ganancia alguna.


Hoy era un día especial. Por fin se estaría efectuando la ejecución pública que estuve planeando durante más de tres meses… Sí, el día de hoy sería recordado por siempre como el día de mi muerte a manos del Caballero Enmascarado, Zero… El héroe que salvó al mundo.

Extraño, ¿No es así? Que piense tan tranquilamente sobre mi propia muerte, podría ser algo espeluznante o perturbador para otras personas… pero no lo es, no para mí, ya estoy preparado, lo he estado desde el momento en que tomé el trono del imperio, o tal vez incluso antes de eso… Desde el fracaso de la segunda Black Rebellion, ¿quizás? O todo el camino de regreso hasta la muerte de mi amada hermana Euphy y el comienzo de la primera Rebelión Negra… probablemente.

Estoy cansado de esta vida, he perdido tanto y he cometido tantos errores que ya vivir no tiene ningún sentido… Seguro, yo podría haber gobernado correctamente este imperio, no tengo duda acerca de eso, puesto que el estar al mando de una súper potencia mundial no es especialmente complicado para alguien como yo, después de todo por un tiempo compartí con mi -esposa- Kaguya Sumeragi, el mando de la U.F.N. de la cual soy cofundador y durante mis primeros meses como gobernante lidere a Britannia por un buen camino… Sin embargo eso ya no es para mí.

Mi querida hermana Nunnally Vi Britannia, como mi pariente vivo más cercano, heredará el trono del imperio y llevará al mundo entero a una época brillante de paz y armonía con la ayuda de Schneizel El Britannia como su Primer Ministro y Zero como su guardia y líder militar.

No soy necesario para este mundo, no más… Sólo soy una mente brillante que únicamente es útil en tiempos de guerra para llevar a un ejército a la victoria.

Es posible que Marry quede limitada a ser una simple Viceroy para España nuevamente y que su influencia en la corte imperial se pierda en su mayoría por apoyar abiertamente mi causa, pero estoy seguro que se las arreglará para sobresalir de alguna forma y regresar al lado bueno de la corona… Eso es lo mínimo que espero para alguien con una mente que rivaliza con la mía y mi odiado hermano mayor.

La procesión que llevaba a los altos mandos de los Black Knights y la U.F.N, Schneizel, Nunnally y a mí mismo, entró en la avenida en la que todo llegaría a su fin. Estaba todo preparado. La deliberada falta de seguridad y la enorme cantidad de ciudadanos asistiendo… Bien, todo era correcto, incluso la presencia de Cornelia y sus subordinados los cuales se escondían en uno de los edificios a los lados.

Al poco tiempo los Knightmares modelo Vincent Ward que lideraban la caravana se detuvieron por una inesperada -completamente planeada- intervención. Era la Hora.

Zero corrió hacia la plataforma en donde me encontraba, esquivando a los soldados con una facilidad que sólo el -fallecido- Royal Knight, Kururugi Suzaku tendría, pasó por Jeremiah sin que mi fiel caballero pudiera hacer nada y con tres saltos se encontró justo delante de mí.

Saqué la pistola que siempre llevo conmigo en un amague de defensa. Él la desechó con absurda facilidad con su espada ornamental y con un suave movimiento la incrustó en mi pecho, atravesando mis pulmones y mi corazón para luego salir por el otro lado.

Je… No dolía tanto como pensé que lo haría, fue nada más que un sentimiento extraño de adormecimiento el que recorría mi cuerpo.

Me recosté sobre él para mantener mi equilibrio, con lo débil que me siento ahora, terminaría cayendo sin remedio si no estuviese la espada alojada en mi pecho. "El castigo por lo que has hecho será este…" Murmuré para que nadie más que Zero escuchara mis últimos deseos.

"Vivirás llevando siempre esa máscara, sirviendo como un caballero de la verdad y la justicia" Llevé mi brazo derecho hasta tocar su -rostro- con mi mano ensangrentada por haber estado sosteniendo la parte de mi pecho cerca de donde me había apuñalado. "Dejarás de vivir como Suzaku Kururugi… Sacrificaras los placeres ordinarios de tu vida por el beneficio del mundo… Por toda la eternidad"

"Este Geass, Lo acepto solemnemente" Zero estuvo de acuerdo cerrando así nuestro -contrato- dejándolo a él como el encargado de hacer realidad los sueños de mi hermana por un mundo donde las personas puedan ser amables unas con las otras y donde las guerras sean sólo un horrible recuerdo del pasado.

Deje caer mi brazo, ya no tenía fuerzas… me costaba respirar, la sangre inundaba mis pulmones y esta se escapaba ligeramente por mi boca.

Zero sacó la hoja incrustada mi cuerpo, y perdí mi punto de apoyo. Con toda la fuerza de voluntad que me quedaba di unos pequeños pasos hacia adelante, llegando hasta el borde de la plataforma y caí por ella.

Me deslicé, manchando con la sangre que se desbordaba por mi espalda la bandera del país que yo mismo gobierno, este será mi último acto de rebelión contra la Britannia de mi padre, la Britannia que siempre odié. Terminé justo al lado de mi linda Nunnally, mi razón para pelear y el mayor motivo por el cual diseñé lo que es mi mayor apuesta en este decisivo e irreversible juego que es la guerra, el Zero Réquiem.

Ella se acercó diciendo algo, pero no pude escucharlo, apenas estaba consiente… Moriré pronto. La sensibilidad de mis extremidades ya estaba perdida, no sentía absolutamente nada y mi visión estaba terriblemente oscurecida… Me pareció ver que Nunnally se cernía sobre mi cuerpo, pero no puedo estar muy seguro de eso, es más, tal cosa sería imposible, ella me odia después de todo…

Yo soy un demonio…

El Emperador Demonio…

Algo que ella, Kallen, Kaguya y todos en este mundo desprecian.

"Sí…" Logré a duras penas que saliera por mi garganta.

"Yo… yo destruí…" Mis parpados me pesan.

"El mundo…" Estoy cansado. Tengo sueño

"Y creé…" ¿Finalmente podré descansar?

"Uno nuevo…"


Es… es extraño.

No siento nada, ningún dolor, ni tampoco el calor insoportable con el que tradicionalmente es asociada la imagen del infierno.

A decir verdad, aun no entiendo plenamente la muerte, porque aparentemente luego de morir terminaría yendo directo al C's World para unirme al inconsciente colectivo… Pero, en este punto me es imposible saber a ciencia cierta si a las personas como yo se les da el privilegio de unirnos al cumulo de pensamiento de la humanidad.

De lo que puedo percibir, de alguna manera todavía conservo mi cuerpo puesto que soy capaz de sentir mis extremidades con claridad, no las puedo mover muy bien, pero por ahora mismo no es necesario.

Estoy acostado sobre mi espalda, siempre creí que luego de fallecer me sentiría como si flotara o algo parecido a como lo retrataban las historias que alcance a leer mientras aún iba a Ashford, sin embargo no era así, también la textura del suelo debajo de mí era parecida a la grama, de eso estoy seguro, por lo tanto tampoco estoy en la espada de Akasha ya que el suelo de esa monstruosa edificación estaba hecha netamente de piedra.

Poco a poco mis sentidos van regresando hasta su máximo punto, en un principio, cuando mi conciencia despertó, estaba completamente desorientado y mi mente no podía captar lo que ocurría a mí alrededor con eficiencia, cosa que ya no ocurría… Mi oído y mi sentido del tacto ya habían regresado a la normalidad…

"Your Majesty" Esa voz que resonó en mis oídos, yo la reconozco… La he conocido por mucho tiempo de hecho. La dueña de esa suave, amable y leal voz es la misma que estuvo a mi lado por más de siete años sirviéndome fielmente, cumpliendo cada uno de los caprichos que le pedía sin discusión alguna.

Estaba muy cerca, casi sobre mí.

"Sé que estas despierto, your majesty, por favor abra sus ojos."

Lentamente cumplí con su pedido sin molestarme en pensar en porque aún soy capaz de hacerlo.

Poco a poco la brillante luz del sol golpeaba con fuerza en mis retinas obligándome a utilizar una de mis temblorosas manos para alejar el maldito resplandor.

"¿S-Sayoko?" cuando pude enfocar bien mi campo de visión me encontré con el rostro sereno de la mejor asesina que he conocido durante mis dieciocho años de vida, que a la vez resultaba a ser mi maid también.

"Me preguntaba en que momento iba a despertar your majesty." Ella comentó mientras jugueteaba cariñosamente con mi cabello. Yo actualmente me encontraba acostado sobre su regazo, aparentemente.

"¿Qué está ocurriendo Sayoko?" Intenté levantarme para ver mi entorno y así poder analizar bien la situación pero mi cuerpo no me estaba respondiendo como debería, apenas pude elevar unos centímetros mi torso antes de que un molesto dolor se extendiera desde mi pecho recorriendo todo mi cuerpo como un rayo.

"Tómeselo con calma mi lord." Mi siempre fiel sirvienta personal me ayudo a alzar la parte superior de mi cuerpo en una posición sentada.

Habiendo superado mi desorientación inicial, comencé a pensar con claridad y me di cuenta de algo muy importante, si Sayoko, que estaba viva, se encontraba a mi lado entonces sólo pudieron ocurrir dos escenarios:

El primero y el que espero que sea cierto, es que ella haya muerto por alguna razón que desconozco… Sería lamentable que una mujer joven y con un gran futuro por delante como ella muriera tan rápidamente, pero el segundo escenario es infinitamente peor, porque por nada del mundo yo podría estar vivo, la lesión que Zero me infringió tendría que ser mortal, él se aseguraría de ello y el que yo no me encuentre en el infierno en estos momentos supondría un enorme peligro para el objetivo del Réquiem.

Si bien esta última era muy poco probable… existen realmente posibilidades de que ocurra, pero esa única manera de que yo sobreviviera a ser apuñalado justo en el corazón era…

¡Maldición, no puede ser!

Con prisa y nerviosismo eliminé el guante que cubría mi mano derecha y miré con angustia la superficie de mi palma.

Je… el karma es realmente una perra.

Allí, cubriendo gran parte de la extensión de mi piel estaba esa endemoniada marca que una vez V.V. y Charles compartieron y que C.C. lucía en la frente… El símbolo del Geass.

Clara como el agua del lago del Exelica Garden ella denotaba la inmortalidad… Sí, yo, Lelouch el Demonio, de todas las personas me había convertido en un ser que es incapaz de morir o ser asesinado.

"… ¿Cu-Cuanto tiempo ha pasado?" Pregunté haciendo referencia a -ese- momento. Necesitaba desviar mi mente de este bache enorme en mis planes.

Sayoko se colocó frente a mí en posición seiza y respondió con una expresión de orgullo adornando su rostro. "De lo que puedo recordar, alrededor de dos meses." Me mantuve en silencio indicándole que continuara con su relato.

"Lady Nunnally se montó en el poder a los pocos días de tu muerte mi Lord, en ese instante todos los prisioneros de guerra fuimos liberados y perdonados por nuestros delitos, Lady Nunnally incluso dejó ir a Sir Orange con la condición de que trabajara el resto su vida en una plantación de naranjas." Sayoko soltó una risita ante la ironía del -castigo- implantado a Jeremiah.

"Además Lady Nunnally comentó en una entrevista para la BBC que deseaba realizar un acuerdo con la United Federation of Nations, Australia y los países neutrales en un futuro próximo con la finalidad de establecer un acuerdo de paz entre todas las naciones que participaron en la anterior guerra así como acordar las fronteras oficiales de ambas súper potencias, según se ha comentado, la reunión y la firma se llevarán a cabo en el Palace of Versailles, Francia."

Conque así han sido las cosas con Nunnally al mando, Huh?

Me alegro de haberme sacrificado para alcanzar la paz que ella siempre deseó.

Escuchar a mi leal sirvienta hablar sobre las increíbles acciones tomadas por mi hermosa Nunna hizo que mi corazón manchado de obscuridad se llenara de orgullo, ella lo está haciendo bien.

"Marry… ¿Cómo se encuentra ella?" Me siento mal por mi media hermana prodigio, es posible que a pesar de la amabilidad de mi Nunna, Marry termine encerrada por unos años antes de retomar su antiguo puesto como Viceroy.

"Your Majesty…" Sayoko inesperadamente parecía un poco melancólica y dudosa, como si quisiera disculparse por algo… N-no es cierto ¿verdad?

"Lo siento mi lord, her highness Marrybell fue hallada muerta junto a las costas de la U.S.J. a las pocas horas del incidente con Zero."

Eh?


Esa revelación fue un golpe devastador para el corazón de Lelouch, en su mente el antiguo emperador creía que la única baja que el Zero Réquiem traería sería nadie más que él mismo…

Nunca, ni en el más loco de sus momentos durante su gobierno sobre Britannia, el demonio llegó a pensar que su media hermana sería una víctima también, uniéndose ella a la lista ya enorme de aquellos que Lelouch amó y que por su culpa tuvieron que dejar el mundo muy precipitadamente.

"E-eso no es posible…" Negó incapaz de procesar la noticia. "Ella… En ese momento ella estaba resguardada en la seguridad del Damocles ¡era intocable! no existen asesinos que pudieran colarse en una fortaleza como esa y hacerle daño, aún menos con Lyre a su lado…" El antiguo emperador detuvo sus palabras repentinamente como su mente llegó a la conclusión de lo que había pasado.

"Lyre!" Escupió con veneno su apodo. "Orpheus Zevon! Ese bastardo la traicionó, ese maldito se atrevió a apuntar su arma contra Marry!"

La llama del odio se prendió en su ser.

-God dammit! Ella debió obedecerme y doblegar la voluntad de esa basura con su Geass.- Siseó en su mente.

Él nunca confió en Oz, en ninguno de ellos. Su desconfianza aparentemente fue bien justificada pero debido a su falta de actuar había perdido a una de sus más queridas hermanas, otra vez.

Un dolor terrible comenzó a expandirse por su pecho, sentía como si este era abierto a la fuerza desde adentro, como si su corazón se partiera en dos muy lentamente, tenía un nudo en su garganta y sus pensamientos eran un revoltijo de tristeza, odio e intención asesina.

"Mi lord… master Lelouch por favor cálmese… no soporto verlo de esta manera." la heredera de la academia Shinozaki envolvió a su maestro en un apretado abrazo en un afán por sacarlo de su miseria.

"Mi lord, sé que es duro de escuchar pero no podemos permitirnos que usted sucumba al cólera… es necesario proteger el secreto del Zero Réquiem y si your majesty, decide ir en búsqueda de venganza contra Lyre y es descubierto… ¡Todo su arduo trabajo y sacrificio serán en vano!"

Ella mantuvo un férreo control sobre su amo por lo que asumió que eran horas, todo el tiempo susurrándole al oído palabras tranquilizadoras y recordándole continuamente lo bien que lo hizo durante este último año, alabando sus acciones para con el mundo a la vez que lo consolaba por sus pérdidas obtenidas a lo largo de su rebelión.

"Sayoko." Habló por fin, después de haber logrado estabilizar su la furia que ardía en lo más profundo de su ser.

"¿Dónde estamos?" Decidió preguntar, él había muerto en Tokyo, pero ahora se encontraban en medio de un claro en alguna montaña.

"No estoy segura mi lord, pero creo que aún seguimos en territorio de la U.S.J." La maid japonesa respondió a la vez que ayudaba a llevar hasta sus pies a su maestro.

-¿No está segura?- esa frase desconcertó al demonio.

"¿Cómo llegamos hasta aquí?"

"Cuando me desperté ya estábamos acá, your majesty." Ella dijo suavemente, un poco decepcionada por no poder ayudar más a su señor.

-Esto es malo, el que Sayoko no tenga idea de cómo llegamos a este claro quiere decir que alguien más nos arrastró hasta acá… Por lo que hay al menos una persona que sabe que estoy con vida-

Lelouch teorizó a la vez que comenzaba a descender por la montaña, adentrándose en el bosque, necesitaba mantenerse alejado de la vista de posibles observadores, ya sean seres humanos, drones o satélites -pertenecientes a Britannia o a la U.F.N-


Habían pasado unas tres horas desde que el emperador regresó de la muerte y a partir de entonces se ha mantenido oculto junto a su siempre leal sirvienta.

Lelouch gastó ese tiempo en desarrollar planes ingeniosos y varios más que servirían como contingencia que lo ayudarían a permanecer en la clandestinidad y evitar ser visto con vida nuevamente.

En primer lugar el demonio se deshizo de los extravagantes ropajes blancos repletos de joyas que usó durante su reinado, quemándolos y manteniéndose únicamente vestido con sus pantalones blancos, una camiseta negra sin mangas ceñida al cuerpo que usualmente llevaba bajo su traje y conservó sus zapatos para no incomodarse a la hora de caminar en el terreno accidentado de la montaña.

Sayoko por su parte eliminó por completo su poco práctico atuendo de maid y su ropa interior de encaje erótica, vistiéndose en su lugar con traje de spandex de cuerpo completo de color negro ajustado que realzaba sus generosas curvas naturales, el cual llevaba oculto quien sabe dónde y a diferencia de él, su criada decidió viajar sin sus incomodos tacones que completaban su vestido, prefiriendo andar descalza.

Atado a su hermoso muslo derecho, Sayoko llevaba una pequeña bolsa de color beige donde según ella guardaba sus armas… Aunque para Lelouch era muy pequeña como para que entraran sus -cuchillos- y otros –juguetes-

-Cabe resaltar que el joven Vi Britannia la observó todo el tiempo mientras se alistaba, al fin y al cabo no tenían absolutamente nada que ocultarse en uno al otro, durante los siete años que vivieron juntos, él alcanzó a ver cada centímetro de su piel, cada curva, cada detalle, cada marca de nacimiento, cada lunar, incluso sus más preciadas partes numerosas veces así como ella lo ha visto a él-

Durante ese mismo tiempo sorpresivamente él se dio cuenta de que podía ocultar la marca de su Code mientras no lo estuviera activamente utilizando, cosa que aunque no muy útil, sí que era por demás interesante.

También, mientras ambos tomaban un baño en un rio con el que se cruzaron -él tenía que eliminar la sangre seca que cubría gran parte de su cuerpo y atuendo- descubrió que la herida que Zero le infringió, de hecho, se mantuvo en forma de cicatriz en vez de borrase por completo.

-Entonces la cicatriz en forma de tridente que C.C. tiene en su pecho fue la razón de su primera muerte…-

Asimismo al ver el reflejo de sus ojos en el agua descubrió que aún conservaba su Geass de la obediencia absoluta, Lelouch teorizó que al robar el Code de alguien que no sea su contratista original se evitaría la pérdida completa de su poder. Por lo que él se convirtió entonces en el primer y único portador del Code Geass de todos los tiempos.

Al cabo de un rato, cuando estaban completamente secos y vestidos, acordaron terminar de descender hasta la civilización y con una ayuda rápida de su pequeño -poder- pasarían inmediatamente a tomar prestado/robar un jet o un jate privado que algún personaje con dinero sería tan amable de facilitarles, para luego viajar directamente a un territorio neutro como Australia o a un sitio lo suficientemente alejado del imperio como para que sea posible que con un poco de –persuasión- hacerles creer que por casualidades de la vida, él se parecía mucho al Emperador Demonio.

En un par de horas de caminar sin parar -gracias al Code, Lelouch pudo mantener el ritmo- llegaron hasta el borde de un pequeño pueblo rural.

"Definitivamente estamos en Japón." La ninja murmuró ocultándose junto a su amo tras unos arbustos, a la vez que observaban a las personas que transitaban continuamente por las vías.

"No va ser fácil cruzar la ciudad para ocultarnos… Desde que mi rostro es conocido por, bueno, todo el mundo, el tratar de pasar desapercibido está completamente descartado." El demonio pensó en voz alta.

"¿Qué piensas hacer entonces mi lord?" Sayoko preguntó, ella haría absolutamente todo lo que su amo le ordenase, incluso masacrar a toda la aldea si era necesario para mantenerlo oculto.

"Podría intentar colocarlos a todos bajo el efecto de mi Geass, pero para eso necesito hacer algo para que toda su atención esté dirigida hacia mí." El emperador de ojos violeta colocó su inigualable mente a trabajar en búsqueda de una forma de llegar hasta un lugar seguro.

La -súper maid- asintió ante la sugerencia del dueño de su lealtad, esa era una idea bastante lógica. Oh! ¡Cómo le encantaba estar bajo sus órdenes!

"¿Debería atraer sus miradas utilizando el cuerpo de Sayoko?"

Ella se sonrojó un poco ante tal comentario, ella realmente no tenía reparos en utilizar su propio cuerpo para seducir a los hombres y conseguir lo que quería de esa forma, era sólo que el hecho de que su amo y señor siquiera considerara su cuerpo como encantador la colocó algo nerviosa.

"No… puede que sea efectivo, pero todos ellos estarían comiéndose con los ojos a Sayoko en vez de mirarme… eso tampoco haría algo con aquellos que estén detrás del vidrio reflectante de los automóviles."

Ella se decepcionó un poco… Quería ser de más ayuda.

Por su parte Lelouch, obligo a trabajar a su cerebro a su máxima expresión desarrollando, clasificando y eligiendo todas las rutas que no llevaran a ser posteriormente atrapados.

"Lo tengo." Habría sido más fácil si él portara el poder del rey de Lyre, no obstante jamás cambiaría su obediencia absoluta por poder convertirse en otra persona por literalmente cinco minutos.

"Sayoko."

"Yes, your majesty."


El señor Hyoudou era un simple ciudadano japonés de mediana edad que dedicaba su vida al arduo trabajo con el fin de llevar un poco de comida a su casa y de darle una relativamente tranquila vida a su mujer, a su hijo Issei -quien a su vez trabajaba en una construcción- su nuera Asia y su nieta de un año de edad, Airi.

Ya era algo tarde y recién salía de su lugar de trabajo, cuando a un lado de la carretera vio a una joven, muy hermosa de unos veinte años, vistiendo casi nada de ropa y se encontraba realmente muy maltratada, llena de moretones y raspaduras, lucía como si hubiese sido atacada violentamente, carecía de equilibrio, parecía que de un momento a otro ella se desplomaría en el suelo.

Él inmediatamente condujo la vieja camioneta en la que iba hasta el lugar en donde la pobre chica se encontraba y con urgencia se bajó y corrió hacia ella.

"¿Estás bien?" Preguntó por pura inercia. "¿Qué te ocurrió?"

"F-fui atacada por unos maleantes" Ella contestó con una voz temblorosa, estaba llorando.

"Ellos me… me violaron y golpearon horriblemente a mi novio" la chica trago el nudo el su garganta que se generó por contar la terrible experiencia que había sufrido.

"P-por favor ayúdelo… está al borde de la muerte… n-no sé qué haría si llegara a perderlo."

Hyoudou salió de su shock momentáneo y con prisa le preguntó "¿Dónde está tu novio?"

Ella dio una verdadera sonrisa de alivio "por aquí señor", la muchacha fue tambaleándose lentamente hasta detrás de unos arbustos, el señor Hyoudou la siguió.

Cuando rodearon los matorrales él pudo ver a un hombre claramente un Britannian, de unos diecisiete o dieciocho años –un poco más joven que su hijo- sentado sobre una roca, su rostro estaba oculto por las sombras que los árboles proyectaban sobre él.

"¿Ese es tu novio?" Preguntó, no parecía estar para nada cómo ella lo había descrito, no tenía ninguna herida en su cuerpo tampoco y parecía muy saludable.

Esto no le daba para nada un buen presentimiento.

"Bueno, para ser más precisos, soy su amo, ella… Ella es mi sirvienta personal" el joven habló en japonés fluido.

En este punto, el instinto del señor Hyoudou comenzó a gritarle que huyera, que necesitaba llegar a salvo a su hogar.

"Además, ella es la mejor asesina que Japón ha visto nacer en toda su historia."

No tuvo ni siquiera el tiempo necesario para procesar esa declaración, cuando un rayo de luz roja invadió su campo visión.

"Lelouch Vi Britannia te ordena: se mi esclavo hasta que yo te diga lo contrario."


Lelouch se sentó tranquilamente en el asiento trasero de la camioneta junto a su criada, mantuvo la mirada perdida en las calles del pequeño pueblo que transitaban.

Él se rió mentalmente de si mismo por haberle dado demasiadas vueltas a todo en vez de irse directamente por el camino más simple y fácil como lo era atraer a algún desprevenido transeúnte utilizado a Sayoko para luego atraparlo bajo la influencia de su Geass…

Al parecer en algún punto del último año se acostumbró demasiado a la complejidad de sus planes habituales y olvido que habían momentos en que apelar a la simpleza era mucho más viable.

Hyoudou actualmente los estaba escoltando amablemente hacia la casa que compartía con su familia, la cual usarían por lo menos unos dos días, él necesitaba descansar correctamente, conseguir algo de ropa nueva y luego buscaría arreglar una reunión con alguien importante para financiar su huida del país.

"Sayoko" Decidió matar el tiempo de espera hablando con su sirvienta.

"¿Cómo reaccionaron Kallen y Kaguya con mi muerte?"

Lo más seguro es que se alegraran de que un malnacido como él haya dejado el mundo para siempre… aun así tenía curiosidad por saber.

"Ellas se lamentaron mucho mi señor"

-Un minuto, ¿Qué?-

"Al parecer ambas fueron capaces de deducir tus intenciones, master Lelouch… y si me permite decirlo mi lord, eso era algo natural, una fue tu esposa y la otra tu reina en la batalla, realmente me decepcionaría si ellas hubiesen sido incapaz de ver a través de ti."

Esas palabras lo alegraron un poco, aún quedaban personas que lo amaban -aparte de Sayoko, obviamente- y si eran solo dos los que sabían sobre el réquiem –sin contar a Suzaku- no representaría ningún daño, además sabía que ellas no dirían nada en honor a su memoria.


"Sigh… ¿Qué demonios está pasando aquí?"

Lelouch murmuró para sí mismo desde la comodidad de la cama que le había sido proporcionada por los Hyoudou.

Su mirada estaba perdida en el techo sobre él pero su cabeza estaba dando una gran cantidad de vueltas a los acontecimientos que tuvieron lugar luego de llegar a la residencia de sus nuevos aliados.

En primer lugar, cuando entró a la casa el resto de la familia no pareció reconocerlo en absoluto e incluso cuando los colocó bajo el efecto de su Geass y preguntó por ello, todos tres contestaron que no lo conocían en absoluto.

Algo estaba fuera de lugar, si bien pueden no conocerlo, aunque era prácticamente imposible, lo que más lo desconcertó fue que cuando preguntó en que parte de la U.S.J. estaban no supieron cómo responderle, eso únicamente ocurría cuando el que estaba bajo su Geass no tenía idea de que era lo que estaba hablando o no sabía la respuesta.

Sin embargo cuando reestructuró la pregunta utilizando al antiguo nombre del país, ellos contestaron que en una pequeña ciudad llamada Kuoh cerca de las montañas de Narita, en el Área 11.

Y por último cuando pidió por un periódico, la rubia -de apariencia Europea, quizás provenía de algún lugar de Italia- le entregó uno fechado del 2017, cuando claramente era 2018. Él preguntó por uno más reciente pero según ella ése era el más reciente.

"¿No puede dormir mi lord?" Sayoko cuestiono suavemente mientras descasaba a su lado en la cama, sólo había una habitación de huéspedes, por lo que eso era lo único que podían obtener –Él no tenía intenciones de incomodar más de la cuenta a los Hyoudou-

"No te preocupes Sayoko… en estos momentos tengo mucho en que pensar…" Habló al mismo tiempo que se levantaba, tenía que ir al baño, el ser portador de un Code no eliminaba las necesidades físicas.

"Vuelve a dormir, ya regreso."


Al regresar del -Trono- y no precisamente el imperial, encontró a su sirvienta arrodillada sobre la cama esperándolo completamente despierta.

"Jeez… Te dije que me esperaras dormida."

"Lo siento mi lord, pero me pareció indecoroso descansar cuando mi señor aún no lo ha hecho." Respondió sin ninguna pizca de duda.

Lelouch no hizo sino suspirar… conociéndola como él lo hace, se alegraba de hecho que no lo hubiera seguido todo el camino hasta el retrete.

Resignado a la sobreprotección de su criada predilecta, el demonio decidió pasar su insomnio viendo la luna desde la ventana de su habitación.

La enorme roca que orbitaba la tierra estaba en su fase -llena- y brillaba enormemente, iluminando por completo cada esquina de su cuarto.

Él se perdió en sus pensamientos por un tiempo, divagando principalmente en conjeturas sobre lo que pensarían sus difuntas hermanas amadas sobre su personaje como el -demonio emperador- y del hecho que ahora fuera inmortal…

El pensamiento de querer verlas en C's World recorrió su mente también en ese momento.

"Master Lelouch" El Vi Britannia fue sacado de sus pensamientos sin embargo, por su leal maid.

Ella en algún momento se había trasladado desde su posición en la cama hasta estar hombro con hombro recostándose ligeramente sobre él y el marco de la ventana.

"¿Qué ocurre Sayoko?" Preguntó curioso.

Ella rara vez lo interrumpía cuando estaba deliberando profundamente… o para ser más precisos ella nunca lo sacaba de sus pensamientos, por lo general era bastante sumisa con él y esperaba a sus órdenes, incluso ella únicamente hablaba cuando se le hablaba a ella primero.

La joven criada señaló hacia un lugar en la lejanía fuera del hogar, eligiendo mostrarle a su emperador lo que había descubierto en lugar de decírselo ella misma. El portador del Code siguió la guía del brazo de Sayoko, pero en esa dirección poco o nada parecía digno de mención…

Hasta que Lelouch decidió buscar en la profundidad, el paisaje, era precisamente eso lo que carecía de sentido.

"¿C-Cómo es esto posible?" El Zero original farfulló incrédulo. ¿Estaba aluciando? A lo largo de todo el día no se había percatado de ese importante detalle

"¡Es imposible que el maldito Monte Fuji este intacto!"

Lo había hecho volar en la guerra contra Schneizel provocando que la Sakuradite dentro de él explotase, sin embargo allí estaba imponente, con la mitad de su superficie convertida en una base hecha plenamente de metal, justo como si la detonación interna de casi todo los minerales de la zona jamás hubiera ocurrido.

"¿Es ese el lenguaje que debería ser usado por un Emperador?"


Al escuchar esa voz desconocida Sayoko inmediatamente se colocó en guardia y con un movimiento rápido y fluido lanzó un Kunai hacia el lugar donde debería estar invitado sorpresa, al otro lado de la habitación, cerca de la entrada.

"Sayoko." Su maestro colocó una mano sobre su hombro derecho. "Relájate."

"Eh? Pero señor-" Ella intentó hacer hincapié en eliminar a esta nueva amenaza, su principal prioridad era la vida de su amo.

"Nada de lo que intentemos hacer funcionara con ellos." Lelouch declaró dirigiendo su mirada hace el sitio donde Sayoko había tirado su cuchillo.

Aún sin entender, la ninja obedientemente se hizo a un lado y 'bajó la guardia' aunque sólo en apariencia.

"Veo que conservas una buena cabeza sobre tus hombros Lelouch Vi Britannia."

De las sobras oscuras de la habitación la figura de una mujer fue apareciendo poco a poco. Ella estaba envuelta en un aura un poco brillante, vestida con un ominoso traje oliva-negruzco coronado por un encaje en forma del símbolo del Geass.

"Por supuesto, puede que en este punto del tiempo no esté muy cuerdo que digamos, pero aún no he perdido mi capacidad de análisis y no espero hacerlo en por lo menos una eternidad más" Contestó completamente relajado e inclusive un poco burlón.

"Entonces ya dedujiste el por qué estás aquí, con vida, junto a tu maid y en este momento precisamente."

A medida que la fémina se acercaba parecía que la luz de la luna se iba apagando, siendo ella misma la única fuente de iluminación.

Sayoko no entendía que demonios estaba pasando pero su confianza en su maestro la mantenía serena, en ella no existía ninguna duda, si su amo decidió que podían mantener la calma ella lo creería.

"Seguro." Respondió con simpleza.

"Al principio pensaba que de alguna manera había sido sacado de mi tumba y llevado hasta esa montaña con mi sirvienta por algún gracioso como Zero o C.C. pero con lo que presencié a lo largo del día y con tu aparición me ha quedado completamente claro." Lelouch explicó regalándole una mirada seca a la extraña chica.

"Oh?" Cuestionó revelando una sonrisa irónica.

"Pero aún no soy capaz de entender por qué ustedes le darían una segunda oportunidad a un demonio desgraciado como yo." Al decir esas líneas el rostro de Lelouch se arrugó en un ceño fruncido.

"Quiero decir, hacia el final de mi vida fui el peor ser humano que podría existir, por lo que-"

"Nosotros te debíamos nuestra -vida- simplemente pagamos nuestras deudas."

"Ya veo…" susurró.

"¿En qué momento del tiempo estamos?" Concluyó que debía sacarle la mayor cantidad de información que pudiera antes de que ellos regresaran a C's World y su única conexión con estos absurdos sucesos desaparezca.

"Esto es alrededor de un trimestre antes de los acontecimientos del Gueto de Shinjuku."

-Así que tan atrás… lo entiendo, ahora voy a tener más tiempo para hacer mis jugadas, no soy iluso, sé que mi conocimiento sobre el futuro es prácticamente inútil desde que desperté pero ya que soy inmortal y mi Geass es perfectamente funcional aún voy a tener la ventaja desde el principio-

"¿Algún otro detalle que consideres pertinente para que yo sepa?" Ellos deberían darle por lo menos datos que le sirvan en este lugar y tiempo, después de todo es por ellos que está aquí en primer lugar y es por ellos que tendría que rehacer todo desde –cero-.

"Sí" Afirmó al mismo tiempo que comenzaba a retroceder lentamente a las profundidades de las sombras, perdiéndose de la vista poco a poco.

"El Lelouch de esta línea temporal todavía existe, así que no podrás tomar su lugar… A menos claro que lo mates."

"¡Un minuto!" Él trató de detenerlos

"¡¿Entonces cómo demonios me trajiste hasta acá?!"

"Esperamos que esta vez hagas las cosas bien Lelouch el Demonio… Porque luego ya no podrás hacer nada para corregir tus errores… Hasta pronto."


Eso es todo por ahora, ¿Qué tal les pareció el prólogo de esta nueva historia?, espero que les haya gustado. Sera un fic Time Travel pero asumiendo que nuestro protagonista no fue reescrito en su antiguo cuerpo, sino fue traído físicamente.

Para los que se pregunten, traje a Sayoko con él ya que el Lelouch del pasado estará con todos los personajes cercanos a Lulu y no quería hacer OC's desde tan temprano, además Sayoko es uno de los personajes más leales a Lelouch que aparecieron en toda la serie y… bueno, es un personaje que me gusta mucho.

Aquellos que sólo han visto el anime Lelouch of the Rebellion, déjeme decirles (y a la vez recomendarles) que deberían ver las OVAs de Code Geass llamadas Akito the Exiled, las cuales son completamente canónicas y están ambientadas entre R1 y R2 (les digo esto porque voy a enfocarme bastante en Euro-Britannia y la E.U.), asimismo también existe un manga canon llamado Oz the Reflection de donde voy a tomar muchos aspectos.

Referencias al mundo real y otros animes:

1) El tratado que Sayoko mencionó, de hecho existe realmente, el Treaty of Versailles fue un tratado de paz firmado en 1919 tras la finalización de la primera guerra mundial… En Code Geass la WW1 terminó con la victoria de Napoleón por lo que supongo que no fue firmado en esta realidad.

2) La BBC (British Broadcasting Corporation) es una cadena televisiva muy importante en el mundo real, en el Code Geass Universe será la Britannian Broadcasting Corporation.

3) El señor Hyoudou es el padre del protagonista del anime High School DxD, Issei, Asia la segunda chica de su harén y Airi es la hija de ambos (apareció en un Spin-off)… Si se preguntan porque la esposa de Issei es Asia y no Rias o cualquier otra de su harén, es porque en una Side Story se mencionó que Issei y Asia están destinados a estar juntos no importa en qué mundo sea, incluso en un mundo donde las tres grande facciones no existen, como en este caso.