NOTAS DE LA AUTORA
Hola…
Mucho tiempo sin escribir algo y este es el primero de muchos, eso espero.
Esto me llego a la cabeza cuando vi la película de El perfume: historia de un asesino y después leí el libro que es demasiado explicito, como a mí me gusta pero dejemos eso de lado.
Se supone que es un One-shot pero hay demasiadas dudas ustedes ya las sabrán con el paso de una jugosa lectura y espero este muy bien relatada. Algunas cosas se aclararan allá abajo entonces los veré al final.
Ok, empecemos.
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Kuchiki Rukia Muere
9 de Julio 7:50 am Ciudad Sakurami
La mañana caía de forma suave en el rostro de una pequeña chica, no de edad, si no de estatura ya por decirlo más formalmente: Kuchiki Rukia era gran profesionista a sus 21 años en su carrera de arquitectura llevando a cabo dicha carrera gracias a los esfuerzos de su cuñado Kuchiki Byakuya un comerciante de altas expectativas en la industria del comercio de su empresa de motocicletas y a su hermana Hisana ya que le debía muchas cosas demás de ser una persona de gran calidez de corazón, al haberla aceptado como una hija en su hogar y no como una chica que solo buscaba refugio y como su espíritu creció como un globo al lado de su amado Abarai Renji anterior corredor de autos… actualmente como shinigami del cielo de los muertos a causa de la fama se llevó una parte importante de su vida cuando cayó en las drogas para pasar todas las peleas que siempre surgían sin motivo en la gran familia Abarai y murió cuando intento acrobacias drogado y tomado su estupidez lo llevo a lo peor. Siempre se culpó de la muerte de su amado por no ayudarlo cundo más lo necesitaba, tal vez pudo ayudarlo, si las cosas en su escuela no se hubieran tornado tan complicadas.
No se sentía con tantas ganas de levantarse pues ese día tenía que entregar los planos de su próxima edificación en el parque Guadiana, una estatua para la conmemoración de los hombres que murieron a causa de un tiroteo que se había presentado la noche anterior y la llamaban para hacerle un esculpido del monumento que se celebraría ese día con todos los nombres de los fallecidos y todos esos mediocres asesinados por un solo hombre conocido como el "silencioso" la causa del nombre tan original se dio pues su nombre no se mencionó nunca en noticieros y eso, ella los miraba de vez en cuando antes de correr a su escuela por las mañanas, ese asesino loco tenía un buen trabajo ya que su oficio ya tenía años en curso y no paraba. No era que los odiara pero no le interesaba el caso que se mencionaban día a día de los secuestros, los ahogados, los muertos, incendios, peleas, drogas, narcos, no desde la muerte de sus padres a causa de los más maliciosos y malditos asesinos en serie, y así fue que paso toda la noche desarrollando los planos, pues su paga no iba a ser tan mala y tampoco se podía negar a hacerlo pues el procurador era el mismo que se lo había pedido personalmente y lo decía ya que nunca se daba a conocer de rostro, es decir, frente a frente ya que ella lo consideraba un gato mierdecilla.
Si la mentalidad de Kuchiki Rukia se volvió una basura solo mantenida por lo que quería su hermana y su cuñado, cumplir el deseo de sus padres era su deseo o tal vez ya no desde todas esas trágicas muertes y rompimientos de corazón mal planeados para su vida y fue cuando se dio cuenta que no estaba llena de vida si no se sentía como una bolsa de plástico si de esas que van volando por sus sueños y terminan tapando un puesto que les causa una bazofia, los poco trabajos mejor pagados y deteniendo el curso de los que si tenían ganas de mejorar su calidad de vida.
Con pocas ganas se vistió de forma de albañil para que arreglarse si iba a trabajar no a modelar apenas iba a empezar a construir, se vistió comió un pan tostado bimbo con nutella, cargo su maletín su libreta de costos y los planos, salió en camino sin antes apagar la tele de la sala pues escuchaba el noticiero para saber los nombres de los fallecidos y escucho algo muy curioso:
"… y en ultimas noticias esta mañana se confirmó que el asesino en serie mejor conocido como "el silencioso" no murió como algunos creían en el tiroteo de anoche en las afueras del hospital "paso al infierno" los testigos afirman que "el silencioso" con heridas de bala perforaron su cuerpo pero este no cedió a la muerte y que sigue con vida si usted lo ve por favor llame a los nume…"
Apago el televisor realmente no le importaba, y se fue directo a el trabajo que tanto la esperaba.
Un verso sin esfuerzo.
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9 de Julio 7:37 pm Ciudad de Sakurami "Parque Guadiana"
Realmente no tenía hambre pues su gran desayuno le quito todas las ganas de comer o beber algo opto por seguir supervisando la obra mientras sus trabajadores cotorreaban sobre el partido de anoche del chivas contra el américa.
Dando paso a un crepúsculo raro con brillantes colores se acercaba la noche después de una larga jornada de trabajo vio como sus trabajadores pasaban a retirarse con entusiasmo; pues era viernes por la noche un día en especial ya que podían estar en sus casa con su familia disfrutando de una vida que se ganaban con respeto, duro trabajo, sudor, lágrimas y pudor, ella solo miro lastimosamente la libreta de números generadores* y reviso el próximo concepto para el lunes. Recorrió el lugar con interés disimulo echando un vistazo a los desperfectos del parque de acuerdo a su cabeza le ordeno que se sentara en una banca blanca de metal para no llegar a casa temprano y sentarse en el sillón a ver tele hasta dormir.
Observo de nuevo la obra negra que supervisaba durante las tardes y desde dentro distinguió una extraña cabellera larga y naranja; era un hombre no mayor que ella y con heridas, sangrando. No sabía desde cuando había entrado al edificio.
—Le pido que se vaya— la firmeza en su voz daba un miedo contorno gris.
—Acaso estás loca no me estas mirando parezco un asquerosos vagabundo— hizo una mueca de dolor al terminar.
— ¿Y eso a mí en que me incumbe? Por tu apariencia debería decir que eres un asqueroso vagabundo y un prostituto.
—Deberías ayudarme enana del demonio, ¡puede que estés hermosa pero eres e-n-a-n-a!
— ¿A quién le dices enana?, cabeza naranja maldita verdulera de mercado.
— ¿Qué? Eres una inconsciente ena…— se desmayó por la gran cantidad de sangre perdida.
—Señor vagabundo— intento acercarse lo más rápido posible y trato de parar la hemorragia con un torniquete que se encontraba en el piso rompió un pedazo de la ropa sucia del chico y amarro el torniquete.
Termino llevándolo a un hospital cerca y ese era el hospital "paso al infierno" donde lo atendieron de emergencia, tan poco le importaba la vida de ese muchacho, al parecer si ni poca preocupación dio pasos a la entrada pero, un doctor muy bien parecido de cuerpo y su rostro tan bien formado no muy alto, pero con enormes ojos azulados la interrumpió de su perfecto escape, la entrada principal, quien le dio un documento para poder autorizar una operación riesgosa pues no conocía a algún familiar del chico, al terminar decidió irse pero, el doctor quien valía la pena coquetearlo un entretenimiento, un rato para pasar el aburrimiento.
10 de Julio 12:02 am Ciudad Sakurami "Hospital Paso al infierno"
—sí y yo le dije no esa es mi pierna ha, ha— reía de una forma tan fingida la chica por tan mal chiste pero tenía ganas de una noche movida.
Desde que tenía memoria como adolescente su vida sexual se activó con su primer novio tan injustamente la llevo a darle una reputación de la peor, ella prefirió utilizar a los hombres como juguetes sexuales además de verlos como amigos o conocido al único que respetaba era a Byakuya.
—ha, ha siempre es tan gracioso Doc.
—Bueno en ciertas ocasiones— su voz cambio a un acosador principiante con mirada tan obscena pero tremendamente excitante, aceptando tan falso cumplido.
—ha, ha siempre es tan gracioso Doc. — Un metiche con fachas de ropa vieja y llenas de sangre salió detrás la chica para sorpresa de ella.
—Cállate vagabundo de mierda— se tapó la boca para sorpresa del doctor que la miraba con cara de molestia. —perdón pero no me pude controlar— se levantó de su asiento.
—No te preocupes Kuchiki se te dan las malas palabras por personas como él— las miradas que se intercambiaban el chico peli naranja y el Doctor no eran para nada amistosas.
—No necesito esto— se dio la vuelta, dejo hablando solo al doctor como un completo idiota pero se llevó con él a la pequeña figura Kuchiki.
—Yo no iré contigo— se soltó del agarre del peli naranja con fuerza.
—Tú me ayudaste, tú me vas acompañar— se las arregló para cárgala recibiendo algunos golpes en su cara.
—¡Oye! Tú el grandote deja a la dama en paz — su voz se retorció y con mirada firme con los tremendo ojos azulados.
—Tu no me asustas— y de un irremediable golpes en sus partes bajas como para dejarlo sin hijos por una temporada. Un buen peleador y con un tremendo cuerpo.
10 de Julio 12:36 am Ciudad Sakurami "Calles de Sakurami"
Salieron del hospital como si nada hubiera pasado, uno caminaba del lado del otro, el aura se sentí pesada por las constantes miradas matadoras por parte de Rukia y por su despreocupado acompañante.
—oye ¿porque me sigue todavía? — desacelero un poco para poder caminar a la par con su acosador. —vete a casa vago.
—casa. — se paró y observo los pocos automóviles que pasaban por las calles a altas horas de la noche. —Es lo que me propuse a buscar cuando la vida me lo arrebato todo, pero, ¿tú tienes a alguien que te espera en casa? — busco la mirada de la chica.
La mirada se palmo con la del chico de cabellos despeinados —porque e de abrirme con un vagabundo que hace preguntas fuera de lugar. — dio un fuerte suspiro y siguió su camino andante.
—se supone que eso lo digo yo. — el peli naranja siguió de nuevo con paso acelerado ya que le llevaba una considerable ventaja.
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10 de Julio 12:58 am Ciudad Sakurami "Residencia Kuchiki"
Ambos llegaron a su destino, juntos, algo que percato Rukia al entrar al distrito que ella habitaba, fue que el peli naranja se notaba muy inquieto, cada 5 minutos revisaba el lugar con cautelosa habilidad espía, cada vez que se encontraban gente en la calle se ponía él peli naranja nervioso metida sus manos a la chaqueta y caminaba un poco erguido, mirada perdida en la acera gris, ojos que despertaban desprecio alguno, una risa un poco macabra en su rostro se acomodaba de oreja a oreja.
—y ahora a ti ¿qué te sucede? — lo miro con cara de mala gana un poco inquieta por la actitud repentina del chico peli naranja. — no dejare entrar a un loco maniático a mi casa.
—No hay nada que temer o acaso me tienes miedo. —la mirada despreocupada y algo montañés del peli naranja daba clara confianza y dominación sobre Rukia.
—para nada. — abrió la cerradura de la puerta con las llaves donde colgaban varios peluches de un conejo de nombre chappy y una fotografía de una familia feliz. —deja de mirarme como un idiota y date prisa en entrar si no quieres dormir en la calle como un vagabundo.
—si está bien, ya me doy prisa. — subió un par de escalones entro y cerró la puerta principal sin mucho cariño. —así que era verdad que nadie te esperaba en casa tan tarde.
—con que simpleza puedes decir esas cosas sin importancia, idiota. — dijo Rukia con rudeza por la gran incoherencia que le broto de la boca al peli naranja. —hay cobijas en el sofá o... ¿quieres dormir en una habitación?
Una sonrisa pícara se formó en su rostro—eso no importa yo quiero dormir contigo. — esa sonrisa pícara cambio a una honesta la cual tapo con un almohadazo estampándole en la cara. —maldita.
—buenas noches, pervertido. — dijo Rukia echando un bostezo al aire seguido a un camino a las escaleras, rumbo a su preciada habitación.
—rara. — dijo mientras extendía la almohada y la acolchonaba un poco ya que se encontraban un poco tiesa por dentro. —tontas almohadas de plumas. Las odio.
10 de Julio 2:10 am Ciudad Sakurami "Residencia Kuchiki"
Una nada adormilada chica se encontraba rebozando en su cama y moviéndose como lombriz por no poder dormir más que una mísera hora y despertar por extraños ruidos en su cocina sin recordar lo que había sucedido 1 hora con 12 minutos atrás, la mala memoria para recordar lo que hizo ese día antes de dormir no le servía de mucho en casos como esos. Bajo se su cama con los pies descalzos ya que sus zapatos provocaban bastante ruido, tomo un machete que se encontraba descansando bajo su cama y camino cautelosamente bajando por las escaleras y mirando a su alrededor hasta llegar a la cocina donde aprecio las luces encendidas.
Corrió por el pasillo andante de la muerte. — ¡a recorrer el pasillo de la muerte! quien anda hurgando en mi fruta merece morir ¡AARRGG! — dio un machetazo a la pared viendo que cuya persona intentaba matar era el peli naranja con vaso de leche en mano y un pan dulce.
—enana, ¿qué carajo estás haciendo? — viendo el nuevo estilo recién cortado de su cabello en el reflejo del micro.
— ¡Oh! Pero si eres tú. — dijo Rukia mientras escondía el machete tras su espalda riendo de manera temerosa.
—sí que, ya no estas acostumbrada a vivir con la compañía de otras personas verdad. — la forma divertida en que sus labios se retorcían y hacían muecas para poner de mal humor a Rukia.
—calla, pervertido en primera yo dirían lo contrario de ti ya que no tienes respeto alguno por las cosas ajenas. — tomo la fruta y empezó a masticarla ferozmente.
— ¿Qué estás haciendo ahora? — sus ojos empezaron a tener un tic nervioso y algo confundido pregunto pensando que de nuevo ese machete rebanaría su cabeza con estruendo y dulzura.
—comiendo mi fruta antes de que tú te la comas. — sus cachetes están llenos de comida saludable mientras comía a diestra y siniestra su preciada fruta.
—la locura esta en ti.* — hacia un rápido rape con sus manos y movía divertido sus pasos al son de la canción.
En esa casa definitivamente todos se volvían algo alocados, pero divertidos siendo esto una causa de que se les fuera el sueño a ambos rápidamente, decidieron ver un par de películas que Rukia había rentado días anteriores: Terror en Silent Hill y El perfume: historia de un asesino. Ambas muy buenas películas con mentes retorcidas y mensajes ocultos sin olvidar el horror que se presenta en ellas.
—yo pondré la video, tu busca las películas. — el chico fue directo frente al televisor de la sala de star con la intención de programarla.
—ya que, de todos modos las películas están en mi recamara.
Subió las escaleras, llego a la habitación y arriba de una silla las empezó a buscar con tantas cajas de películas de aventuras en su colección y una que otra sobre documentales sobre pueblos fantasmas o islas encantadas. Al descubrirlas en un siéntanme bajo con las películas dando aviso de su retorno al peli naranja pero noto que se encontraba distraído con la mirada perdida en un cuadro que posaba en su mano.
—oye. — intento llamar su atención. — ¿estás bien?
—por supuesto que estoy bien. — hizo una pausa incomoda. — ¿ellos son tu familia?
—era mi familia. — la melancolía entro por las ventanas convertido en viento helado.
—sigue siendo tu familia, no digas esas cosas. — dijo el peli naranja acercándose y arrebatando ambas películas de las pequeñas manos de Rukia.
Una atontada Rukia quedo paralizada por las palabras incomodas del peli naranja, el viento susurraba aun sus palabras como ecos en sus tímpanos, no dejaba de pensar que lo que había dicho era cierto seguiría siendo su familia de eso no había duda. Le gustaron unas palabras de apoyo de una persona que recientemente había conocido y durante años de personas y en especial hombres que solo buscaban lo que cualquier hombre sínico esperaba de una mujer y no precisamente la compañía de un para siempre hasta la muerte. Primera persona que la apoyaba con palabras sin buscar algo especial.
Recordó aquel día que tomaron la fotografía, ella tenía 14 una preadolescente su familia era pequeña en aquella época. Su familia era su hermana y su cuñado Kuchiki quienes ese día habían tenido varios problemas por parte de la pequeña en la escuela por conducta y sus calificaciones, por otra parte económicos ya que la compañía que trabajaba Byakuya no se elevaba por ningún lado y la aseguradora no les ayudaba de mucho, Hisana como apoyo moral y autoestima los animo mucho dándoles alientos de poder ganar con sus problemas, ese día en la foto nadie estaba contento pero al plasmarla y encuadrarla en marcos bellos de madera con figuras en los extremos se podía ver a una familia unida y feliz en esos días duros sin logros. Eso demostraba.
Una fotografía es un secreto sobre otro, cuanto más te dice menos sabes.
Algo la saco de sus pensamientos.
—muévete que ya empezó, enana del demonio. — el muy comodín ya comía palomitas de maíz sobre el sofá de cuero frio.
— ¡mis palomitas!
Así transcurrieron 2 horas en ver películas de terror con escenas demasiados explicitas de contenido que debes en cuando encendían al peli naranja de las mejillas y de otras partes de su cuerpo y esto no pasaba de desapercibido para Rukia quien miraba disimuladamente de vez en cuando a su derecha. Algo un poco fuera de lo común era las opuestas personalidades de ambos ya que la chica miraba con entusiasmo la película, mientras el peli naranja se asustaba hasta con el chirrido de las puertas similares a los sonidos de un caballo llevándolo al punto de acompañar a Rukia por mas palomitas a la cocina con la excusa de que había fantasmas en el pasillo acechándola. Y las películas dieron fin dando a una cansada Rukia y a un asustado peli naranja.
10 de Julio 4:12 am Ciudad Sakurami "Residencia Kuchiki"
—bien yo me voy a la cama. — Se levantó del sofá de tirón —buenas noch... — un brazo la tomo con fuerza tirándola de nuevo al sofá.
—duerme esta noche conmigo, me haría muy feliz. — una voz seductora y pidiendo ayuda a gritos se dedujeron con esa simple aclaración y confesión.
—d-de que estás hablando, pervertido — las manos pequeñas de Rukia empezaron a temblar como los vibradores de los teléfonos.
—mi nombre no es pervertido, mi nombre es Ichigo. — de un momento a otro sus labios posaron y controlaron los de la chica dejándola sin armas con que defenderse. — pero los que no me conocen me llaman ''el silencioso''
Sus ojos se abrieron como un par de platos — eres el asesino de esta ciudad. — se rompió un cuadro al intentar retroceder unos pasos.
—deberías fijarte por donde caminas. — sus ojos dejaron de tener un brillo noble y de confianza convirtiéndose en colores amarillentos, recogió el cuadro y miro de nuevo el retrato mirando con nostalgia. — ¿tú crees que alguien te extrañe?
— ¿de qué estás hablando? — algo confundida avanzo dos pasos poniendo sus rostros muy cercanos, demasiado fría le pregunto. — ¿a ti alguien te extrañaría?
—es obvio que nadie me espera en mi casa inexistente, pero yo quiero que tu vivas en ella desde ahora. — saco un cuchillo del sofá. —Rukia en estas horas que hemos estado juntos me di cuenta de que te convertiste en alguien con quien puedo contar además de ser una persona bella... por favor, vive en mi desde ahora hasta la muerte.
—Ichigo eres un pervertido. — sonrió mientras sentía el objeto pulsante en su cuello clavarse.
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10 de Julio 8:12 am Ciudad Sakurami "En las calles, fuera de un local de televisores"
''...En ultimas noticias por fin se ha dado a conocer que el asesino de esta ciudad mejor conocido como ''el silencioso'' se a declarado como muerto cometiendo suicidio sin antes cometer homicidio a una joven mujer de 21 años encontrada en su casa con múltiples heridas provocadas por un arma blanca concretamente un cuchillo, hasta el momento se desconoce el nombre del apodado ''el silencioso'', esperamos más informes por parte de la policía estatal de la ciudad de Sakurami y en otras Noticias...''
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17 de Noviembre 9:10 am Ciudad de Karakura ''Lugar desconocido''
Lugar espacioso, una cama, una ventana a la calle donde al apreciar un bello jardín con varias personas, una jarra de agua en un escritorio con una libreta en un cajón entreabierto y una puerta cerrada con llave, ese lugar era totalmente blanco y armoniosos, demasiado hueco para el gusto de los que lo habitaban. En la cama reposaba un cuerpo con cabellos naranjas viendo del techo colgar ese minucioso foco tan en paz.
Un cuerpo de un enfermero entro por la puerta vestía de blanco — Kurosaki Ichigo tienes visitas, acompáñame. — se retiró de la entrada dejando ver un espaciosos pasillo.
—Tengo una visita. — bajo de la cama con su vestimenta tan rara y blanca, poniendo en sus pies descalzos unas pantuflas. Vio el pasillo. — ¡un pasillo de la muerte! — grito al contemplarlo ampliamente.
—lo que digas Kurosaki, ahora camina hasta la cafetería ¿quieres? — señalo el final del pasillo sin tomar mucha importancia a las palabras del peli naranja.
—sí, está bien. — hasta alejarse lo suficiente de su guardián encabezo una gran incógnita. —será ella quien venga a verme hoy. — una sonrisa seguía en su rostro con entusiasmo contagiaba hasta los de la misma cafetería.
Contemplo con sus ojos ámbar la estancia donde consumía sus alimentos cuando no eran trasportados a su habitación por una de esas personas vestidas de blanco, sentado en una de esas mesas espero a su visita pasando por lo menos 48 minutos sin saber nada, pero si ese hombre le indico que tenía visitas. En una esquina varias enfermeras cuchicheaban por aquel tipo esperanzado.
—hay está de nuevo. — dijo una de ellas.
—si lo sé, desde que llego a este lugar todos los días el enfermero Shiba Kaien juega con él diciendo que tiene visitas.
—sí, pobre ¿tú crees que él no se dé cuenta?
—no lo creo, ya que siempre se sienta en esa mesa de cafetería solo esperando a que alguien venga.
—supe que su único familiar falleció y es por eso que termino en este lugar tan desolado para gente como él.
—pobre. Oye quieres tomar café ya que aún es temprano en aquel lugar llamado ''Cronos''* es nuevo en el lugar.
—claro vamos.
Siguió esperando, pero al parecer de nuevo lo engañaron vilmente con mentiras aunque él quisiera que fuera verdad no lo pudiera, quería creer en una hermosa mentira. Una persona se sentó enfrente de él tomándolo de las manos, esto no pasó de desapercibido para el chico que rápidamente voltio a ver el rostro de esa persona, su emoción fue una clase de victoria articulando el nombre de ese ser enfrente.
— ¡Rukia!
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NOTAS DE LA AUTORA
Glosario
Números Generadores: es el documento mediante el cual se lleva a cabo la cuantificación ó volumetría de un trabajo ó concepto de obra.
Cronos: es una cafetería de otra historia en proceso que tengo en mi computadora, también de un videojuego para el nintendo DS.
La locura Esta En Mi* nombre de una canción de Santaflow que habla sobre cómo vive su vida un loco, demás me gustaría que la escucharan para que sepan como la canta en esta historia.
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¿Y bien? ¿Qué les pareció? Espero sus opiniones no importa como sean negativas o positivas, tomates o lechugas, pero esos reviews son el carbón del tren de la autora así que aliméntenla bien.
¿Quieren saber que paso en ese lapso de tiempo? ¿Por qué Rukia sigue viva? ¿E Ichigo como llego a ese lugar? Yo si quiero y puedo escribir un Two-shot. Ustedes solo pídanlo :)
A Beautiful Lie - 30 seconds to mars.
Se despite: LaBev713