Este Minific participa para el reto de El Amor De Una Estrella del Grupo Rebeldes Kou por el cumpleaños de mi amado Seiya. Espero les guste.
DISCLAIMER: Los personajes no me pertenecen son de la Gran Naoko Takeuchi.
Una Cita A Ciegas
Capítulo 1
Encuentro
En un despacho se encontraba una chica de cabello rubio hasta la cintura, de tez blanca como la nieve y unos ojos de tono azul celeste. Vestía un traje sastre de color negro con una blusa roja de botones enfrente. Era el bufete de abogados Asociación Kou Tsukino pues las hermanas se habían unido en firma con Yaten Kou para asociarse y ser los mejores de la ciudad. Estaba en su escritorio repasando unos papeles de un caso muy difícil e importante para ganar. Son los casos que más le gustaba llevar porque peleaba a muerte por los derechos de sus clientes. Nunca tenía tiempo para disfrutar de su plena juventud porque el trabajo le absorbía toda su energía, pero no se quejaba para nada pues era lo que más le agradaba hacer su trabajo y no le quedaba ganas de salir a pasearse o conocer algún chico. Eso no era para ella, le fascinaba vivir y disfrutar de su soledad sin que nadie le dijera absolutamente nada.
Se hallaba sumergida en esos papeles que no observo cuando alguien abría la puerta de su despacho se llevaba tremendo susto y tiraba los papeles.
Entraba un torbellino rubio de tez blanca, ojos azules, con una coleta levantada para arriba y vestía un vestido de mangas cortas de color violeta hasta las rodillas y zapatillas blancas.
─ Por favor Serena deja esta vida aburrida y vamos al bar a convivir con nuestros amigos. Yaten pasara por nosotras para irnos juntos los tres ─dijo la rubia.
─ Mina ya te he dicho que no me interesa salir a divertirme tengo un caso muy difícil y quiero irme a mi departamento a descansar para seguir analizándolo mañana ─contesto la otra rubia.
─ Lo siento mucho mi querida hermana, pero hoy no te dejare estar en esa vida tan aburrida que te cargas ─la mira fijamente y agregó ─. Por Dios Serena tienes 24 años, te encuentras en la flor de la juventud y ni siquiera en tu vida has tenido un novio ─una enfadada Mina se escucha.
─ Sabes no tienes porque meterte en mi vida privada si yo quiero estar sola es cosa mía. Tu dedícate a ser feliz con Yaten por eso están casados porque se aman y disfrutan al estar juntos.
─ Tienes razón somos muy felices, pero no puedo verte sola hermana necesitas conocer a chicos.
─ Oh y me imagino que piensas en ese Seiya, el hermano de tu esposo que a fuerzas quieren que conozca pues déjame decirte que ese chico no me interesa. Soy feliz así Mina nadie interviene en mi vida y no tengo que estar dando explicaciones de lo que hago no me interesa tener una relación ─replico Serena.
Mina dejaba escapar un suspiro porque su hermana era tan testaruda, pero a la gran Mina Kou nadie le daba una negativa.
─ Perdóname por lo que voy hacer ─se acerca a ella y la levanta de su asiento ─pero que vestimenta es esta parece que vas a un funeral necesitamos ir de compras, pero será otro día ─no lo podía creer porque no se parecía a ella en andar bien vestida a la moda.
─ Es la ropa que me gusta y va acorde a mi trabajo ya que es un lugar de trabajo bastante serio ─se defendió la rubia de pelo suelto.
─ Comprendo que nuestro trabajo es serio, pero no un funeral tienes que vestirte con ropa de tu edad y no de una solterona amargada ─suelta una risotada.
En ese momento Mina recordaba a donde quería mandar a su hermana como era posible que lo olvidara, ese plan de Yaten y de ella que habían planeado desde hace días.
La llevaba arrastras no dejaría escapar la oportunidad de que Serena conociera a su cuñado, por supuesto que no y se tenían que enamorar de él por algo Yaten la llamaba la Diosa del amor. Serena quería replicar por la forma en que la sujetaba, pero Mina le daba una mirada asesina mejor no menciono nada y se fueron a casa de su hermana.
Un joven de tez bronceada, su cabello de un tono plateado atada a una coleta baja y unos ojos color esmeralda se encontraba en la oficina de la empresa de su hermano lo estaba esperando desde hace un rato. Recorría con su mirada la enorme oficina de su hermano tenía bastantes planos de edificios, mansiones y casas. También algunas maquetas arquitectónicas de como serian unas obras que estaban por realizarse. Tenía un escritorio, dos sofás medianos para sus clientes o visitas y ese lugar donde le gustaba perderse en el estar haciendo los planos de proyectos e ideas nuevas.
Se abría la puerta, entraba un joven alto de tez morena, con una coleta baja atada de color azabache y unos ojos zafiros realmente hermosos.
─ Yaten vaya sorpresa de que vengas a visitarme ─le daba un abrazo.
─ Si Mahoma no va a la montaña la montaña se derribará ─dijo el peliplata.
─ Veo que Mina ya te enseño a decir sus malos dichos ─el pelinegro empieza a reírse.
Yaten comenzaba a reír.
─ Bueno a lo de mi visita es porque hoy quiero que vayas a este lugar, me costó bastante reservar un lugar para ti ─le extendía un boleto con una tarjeta donde tenía la dirección.
─ ¿Que es ese lugar? ─pregunto el ojiazul muy confundido.
─ Eso lo sabrás en la noche.
─ No tengo tiempo para una vida social, el trabajo me absorbe y prefiero usar mi tiempo libre en avanzar con mis planos.
─ Seiya tienes 24 años, eres muy joven para estar solo necesitas conocer a chicas y salir de vez en cuando a divertirte.
─ Como esa tal Serena que tanto Mina y tú me la mencionan a cada momento ─argumento Seiya.
─ Soquete recuerda que esa Serena es mi cuñada ─menciono un enfadado Yaten.
─ No me gusta perder mi valioso tiempo buscando el amor verdadero eso es una ridiculez.
─ ¿Acaso eres gay? ─preguntó el peliplata.
─ Maldición pero que estupideces estas diciendo. Claro que no lo soy solo que no me interesa tener pareja eso es todo ─un molesto pelinegro contesto.
─Está bien para que me recompenses por no haber asistido a mi boda y para no pensar que eres un feminista debes asistir me explique bien ─respondió un orgulloso ojiverde.
─ No tengo de otra ─mira la tarjeta detalladamente y frunció el ceño ─. Tu mi Complemento mi Media Naranja que nombre tan ridículo y cursi a que persona tan idiota se le ocurrió este espantoso nombre para un negocio.
Yaten suelta una carcajada ─ pues a quien más a tu hermano el gran poeta Taiki Kou. Él no tiene nada que ver, pero Darien Chiba más bien conocido como la Mariposa Rosa como le gusta que lo llamen se lo puso ya que es el dueño.
─ La Mariposa Rosa es el dueño más bien la dueña de ese lugar, pero si es un pervertido siempre andaba detrás de mí. ¿Acaso se pusieron de acuerdo para que me vea con él? ─ Seiya pregunto con coraje.
─ Para nada él ya tiene pareja se llama Jedite. Son unos locos enamorados que les dio por abrir ese lugar.
─ ¿De que se trata acaso es un bar gay?
─ No, ya lo sabrás en la noche así que vámonos porque no iras vestido de esa manera ─dijo Yaten saliendo de la oficina de su hermano.
Iba a responder, pero Yaten salió sin darle tiempo de decir nada se dirigieron al centro comercial a comprar un atuendo que estuviera a la edad de Seiya y se marcharon al departamento lujoso del pelinegro.
Era de noche, Seiya se dirigía a ese lugar en su auto porche color rojo de último modelo. Llevaba una camisa roja muy pegada a su cuerpo que enmarcaba su bien formado abdomen, unos vaqueros negros que dejaba ver sus perfectos glúteos, una chaqueta de piel y botas negras. Se bajaba y le daba las llaves al chico que se encargaba de llevarse los autos.
Entraba al local y miraba para todos lados el lugar era agradable. Era bastante amplio con una pista de baile, un bar al centro, el lugar donde la música tocaba y al fondo un pasillo largo con habitaciones especiales. Estaba oscuro solo las luces muy bajas dejaban ver el camino para no tropezar.
Se acercaba un pelinegro alto de pelo corto, con una blusa muy ajustada a su pecho color blanca, unos pantalones rosas y portaba unas alas de mariposa color rosa con brillantes.
─ Pero mira nada más a quien tenemos por aquí al chico de mis sueños ─se escucha una voz masculina media rara.
Seiya daba media vuelta sabía muy bien de quien se trataba.
─ Darien ─fue todo lo que dijo.
─ Me choca que me llamen por mi nombre. Sabes muy bien cómo me llamo soy la Mariposa Rosa te lo diré en silabas cariño Ma-ri-po-sa Ro-sa lo captaste verdad mi amor ─lo mira con los ojos brillosos.
─ No me gusta que me llames así soy Seiya de lo diré de igual manera Se-i-ya lo captaste verdad Mariposa ─un enfurecido ojiazul se oía.
Empezaba a llorar pues era bastante sensible.
─ Tu eres un malvado conmigo yo tanto que te quiero.
─ ¿Pasa algo amor? ─ dijo una voz atrás de la Mariposa Rosa.
─ Nada amor mío te presento a Seiya Kou un gran amigo.
─ Mucho gusto Jedite ─le ofrece la mano para saludarlo.
─ Un gusto ─le aceptaba el saludo.
La Mariposa Rosa tomaba un antifaz y se lo daba a Seiya.
─ Póntela es la primera regla de este lugar tu rostro tiene que ser un secreto y cuando conozcas a la chica de tu vida ya no la usaras. Pues significara que encontraste al amor de tu vida ─lo dijo con una voz de ensueño.
─ Esto es una locura, Yaten me las pagara ─refutó Seiya.
─ Ya te lo dije póntela y vete a sentar en esa mesa a la derecha enseguida van para que ordenes algo de tomar.
Seiya se colocaba el antifaz no tenía ánimos de pelear y se iba a sentar a donde le había mencionado. Pidió una bebida para tomar.
En la entrada se dejaba ver a una rubia despampanante con su pelo suelto ondulado, con un vestido negro a medio muslo. con la espalda descubierta y entallado a su cuerpo, dejaba ver su escultural cuerpo y con unas zapatillas rojas.
Darien al observarla se daba cuenta de quién era.
─ ¡Oh por los cielos! ¿Serena eres tú mi niña? ─pregunto anonadado.
Ella lo miraba con una sonrisa.
─ Hola Mariposa Rosa, si soy yo ─lo dijo apenada.
─ Pero te vez hermosa ─le daba vueltas.
─ Gracias es obra de mi hermana no pude escaparme de sus ideas locas.
─ Es lo mejor que ha hecho Mina Kou ─tomaba un antifaz y se lo daba mientras agregaba ─colócatela nadie debe ver tu rostro hasta que encuentres el amor me escuchaste.
Ella solo asintió y se la ponía.
─ Vamos te llevo a tu mesa y conocerás al primer chico.
Ella al girar para ser encaminada por la Mariposa se topaba con unos hermosos ojos penetrantes que se encontraba hacia una mesa que estaba al fondo. Quedaba paralizada al observar que la miraba intensamente.
Él al levantar su rostro quedaba maravillado por la chica rubia que estaba cerca de la entrada. Sus ojos lo hipnotizaban y no dejaba de verla, al observar que se dirigían hacia él se ponía nervioso. Jamás había mirado a una chica que le robara su atención.
Llegaba la Mariposa con Serena a su lado y se la presentaba.
─ Te presento a Serenity ─dijo la Mariposa.
─ Serenity te presento a Fighter.
CONTINUARÁ….
Aquí les traigo el primer capítulo de este Minific para el Grupo Rebeldes por el cumpleaños de mi amado Seiya.
Este Fic será de cuatro capítulos.
Espero les haya gustado.
¡Que las Estrellas Fugaces iluminen su camino besos!
