Capitulo 1
En una mansión en forma de castillo en el bosque más profundo de la ciudad. Dos jóvenes amigas se encontraban esperando en la parada del autobús, a la orilla de la carretera para dirigirse a su primer día de clase.
-¿Nerviosa Rous? -Pregunto una joven de cabello castaño y ojos amarillos, mirando a su asustada y única amiga.
- Debo de admitir que estoy un tanto nerviosa, Namine. -Admitió la rubia y ojos azules, con un cierto brillo de inseguridad.
- Vamos Rous. Esta es la primera vez que nuestras madres nos permiten salir del bosque. Hay que aprovecharlo al máximo.
El autobús había llegado, por lo que las dos jóvenes deciden subir, siendo Namine la primera en subir seguida de Rous quien tenía su vista en el suelo.
- Sigo sin entender por qué tu madre y la mía decidieron vivir en aquel bosque Namine.
- Vamos, fue divertido en nuestra infancia Rous. Pero ahora somos casi adolecentes.
- ¿Casi? - Pregunto la rubia arqueando una ceja.
- Tú me entiendes. -Respondió con una risita al final.
El viaje no duro mucho, ya que llegaron a su destino, el instituto Sweet Amoris. Esta no era su primera vez puesto que ya vinieron con sus respectivas madres para registrarse, ahora sería su primer día de clase para ambas amigas. Desafortunadamente para las dos no compartían las mismas clases.
- No te preocupes Rous. –Trato de animarla a su amiga.- Nos veremos durante el recesó.
- Esta bien, nos vemos en el receso. -Menciono la rubia dirigiéndose a dirección opuesta a la de su amiga.
Namine se quedo en el pasillo viendo por donde de dirigía su amiga, sabía perfectamente que ella es muy tímida e insegura, mas cuando está rodeada de personas desconocidas, pero sin más ella hace lo mismo al dirigirse a su taquilla, al dirigirse asía atrás inevitablemente choca con un joven de cabello castaño y vestía ropa de militar.
- ¡Oh no, perdona! -Se disculpo la joven levantándose para dirigirse donde se encontraba el joven y ayudarlo a levantarse.- ¿Te encuentras bien?
-Si, gracias. -Cuando el levanto su mirada, Namine se quede hipnotizada por sus lindos ojos verdes. Sentía calor en su cara y no sabía qué hacer en ese momento ya que era muy confuso en ese momento. Miles de sensaciones y sentimientos nuevos que jamos lo experimento lo sintió todo en una fracción de segundos. - ¿Te encuentras bien? Tu cara esta roja.
Namine se quedo shockeada, no sabía qué hacer, quería salir de esa extraña situación.
- ¡Buenos días Ken! -Interrumpió un joven peli celeste emocionado, quien abrazaba emocionalmente al castaño. -¿Me extrañaste?
- ¡Alexy ya te avía dicho que no te me lancé así!
Namine no sabía qué hacer, aquello le resulto divertido pero simplemente se quedo al margen de la situación viendo como un pelinegro quien estaba perdido en su PSP, acercándose a los dos jóvenes.
- Vamos Ken. No seas tímido estas entre amigos.
- ¡Armin deja de llamarme Ken! -Grito el castaño con la cara más o igual de roja que la joven quien seguía mirando toda la secuela. - ¡Alexy ya suéltame!
Si aguantar más, Namine estalla de risa ya que toda esa escena le pareció cómica, sin contar que los tres jóvenes captaron su total atención, provocando que Namine tuviera un leve rubor carmesí.
- Lo siento no fue mi intención reírme. - Comento algo apenada.
- Que linda. ¿Eres nueva? - Comento Alexy emocionado mirando a la chica.
- Eso quería saber yo. - Comento Kentin sobándose la nuca mirando a la joven, estando apenado.
- Perdón. Soy Namine Bathoryn. -Se presento la joven.
- Hola yo soy Armin y mi hermano gemelos Alexy. -Se presento uno de los gemelos.
- Yo soy Kentin. - Menciono el castaño quien estaba curioso por el ovejo de la joven. Un collar en formar de cruz con una bola roja brillante en el centro.- Que curioso collar.
- Gracias, es un regalo de mi madre, la tengo desde que tengo uso de razón.
- Chicos nos toca ir al aula B. Hay que darnos prisa. - Menciono Alexy al escuchar la campana de inicio de clase.
- ¿Qué clase te ha tocado Namine? - Pregunto Kentin.
-Aula B.
- ¡Si estamos juntos! - Grito entusiasmado el peli celeste.
Kentin, Armin y Alexy deciden acompañar a la castaña a su primera clase.
O.O.O.O.O.O.O.O. Mientras con Rous.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O
La rubia camina con la cabeza agachada hasta llegar a su taquilla, pero al abrirla ve apoyarse un brazo con una pulsera, cerrándole la puerta. Rous se viro encontrándose a una mujer rubia y ojos azules junto a dos chicas más.
-Eres la nueva alumna ¿verdad?- Pregunto con superioridad.- Yo soy Amber, la chica más guapa de todo Sweet Amoris.
-Ajam, por ese motivo vas vestida de ese modo...-Dijo Rous con tranquilidad pero eso fue molesto para Amber.
-¡¿Cómo se...?!- La oji azul levanto su mano izquierda, dispuesta a darle una bofetada a la nueva.
En ese instante, llegan dos chicos. Uno pelirrojo de ojos grises y ropa de rockero, mientras que el otro era peli gris con las puntas negras y los ojos amarillo y verde vistiendo ropa victoriana. Las dos rubias se quedaron embobadas ante el pelirrojo, Rous no se creía que en un día llegara a sentir atracción por alguien.
-¿Que le están haciendo a la señorita?- Interrumpió el victoriano mirando con seriedad.
-El primer día de las clases y ya te metes con alguien, Amber.- Dijo el rockero con burla.- Así, no conseguirás tener amigas.
La mencionada se fue refunfuñando con sus dos amigas, en eso Lysandro se acerca a la joven para ayudarla.
-¿Se encuentra bien?
-Si, gracias por ayudarme.- Agradeció levantándose y mira a los dos.- Me llamo Rous Abadeu.
-Es un placer de conocerla, yo soy Lysandro y él es Castiel.
-Hola.- Saludo el roquero sin interés, hasta que escucho sonar la campana de inicio de la primera clase.- Vamos Lysandro, ya es la hora.
-Señorita Rous, ¿Qué clase le toca ir ahora?- Pregunto el victoriano mirando a la rubia que miro el papel de su horario.
- Aula A.
-¡Que coincidencia, nosotros vamos al mismo aula!- Comento Lysandro con una radiante sonrisa.- Vamos juntos.
Al principio la rubia estaba insegura de seguirlos o ir por sí misma, pero tras ver que la defendieron no podía negar su petición. Mientras iban caminando por el pasillo principal, Castiel no quitaba la vista a la extraña pulsera de la joven. Un brazalete azul zafiro en la que colgaba una figura pequeña de cristal.
-Es curioso tu brazalete pero mola.- Comento, llamando la atención de Rous.
-Oh, g-gracias. Es un regalo de mi madre, me lo dio cuando comencé a tener razonamiento.
-Bueno, ya hemos llegado.- Dijo el peli gris entrando en el aula seguido de Rous y Castiel.- Y parece que Rosalya también está aquí.
-¡Hola chicos!- Saludo una chica peli plateada llegándole hasta la cintura y ojos dorados. Pero su mirada va a la oji azul.- Veo que venís acompañados.
-Rosalya, te presento a la señorita Rous. Rous, ella es Rosalya.- Presento el victoriano a las dos chicas.- Es la novia de mi hermano.
-Encantada de conocerte Rosalya.- Saludo con timidez al verla con una radiante sonrisa.
-Lo mismo a ti, Rous.- En ese instante se percata del brazalete de la rubia. Rosalya sentía un escalofrió por la espalda.- Rous, ¿esa pulsera…es tuya?
-Sí, ha sido un regalo de mi madre y lo aprecio mucho. ¿Por qué lo preguntas?
-Pues…
En ese momento, se escucha al profesor Boris entrar a la clase interrumpiendo la conversación de las dos jóvenes. Se sentaron juntas y detrás los chicos, mientras que Rous atendía a la explicación del profesor Boris, la oji amarillo miraba disimuladamente a la rubia.
O.O.O.O.O.O.O.O. Más tarde .O.O.O.O.O.O.O.O
Llego la hora del recesó y todos se reunían en la terraza mientras comían y se contaba sus vacaciones de verano.
-Entonces, ¿pasaste todo el verano en la escuela militar?- Pregunto Alexis mirando al castaño que estaba sentado al lado de Namine.
-Sí, la verdad es que fue muy duro pero dio fruto.
-¿Y tu Namine?- La chica casi se atraganta con la manzana que estaba comiéndose en ese momento.- Nos gustaría conocerte más profundamente.
-Bueno, vivo en una mansión que se encuentra en lo más profundo del bosque de la ciudad con mi madre.
-¿¡Te refieres a la mansión medieval!?- Gritaron los tres chicos poniendo nerviosa a la castaña.
- E-El mismo. ¿Qué tiene de malo esa casa?
-Se dice que esta maldita por un vampiro.- Respondió el pelinegro jugando con su consola.- O por la historia que me contaron.
-¿Qué historia os referís?
-Se cuenta que hace mucho tiempo, los humanos vivían en paz con las criaturas mitológicas. Sin embargo, algunos no los aceptaban con lo que se hicieron cazadores mitológicos con el objetivo de que humanos y criaturas se volviesen enemigos.- Contaba Alexis causando intriga a Namine. Acto seguido, continúo el militar.
-Pero hace casi diecisiete años un humano y una vampiresa se enamoraron mutuamente hasta llegar al matrimonio, los dos dieron luz a un bebe con la sangre de ellos. Cuando los humanos comenzaron a odiarlos y descubrieron la relación del matrimonio, quemaron la casa junto con ellos… Desde aquel entonces, las criaturas mitológicas nos tienen maldecidos por la muerte de la vampiresa.
-Vaya…así que hubo un amor que influyo.- Dijo la oji amarillo con tristeza en su voz.- Es una historia muy triste…
-No me digan que le habéis contado la historia de la vampira y el humano.- Los chicos dirigieron sus miradas hacia el dueño de la voz, para ver que es un chico pelirrojo y al lado un peli gris.
-¡Castiel y Lysandro! Justo habéis llegado al terminar la historia.- Saludo el peli azul con entusiasmo.
-Es similar a la mujer de las nieves. La verdad, me hubiera gustado conocer a alguien que tuviera la mezcla de las dos razas.- Comento Castiel con una sonrisa mirando a Kentin.- Y parece que no soy el único.
- Parece que os gusta las cosas mitológicas.- Los miraron a la joven que se encontraba sentada.
-¿Y tu quien eres?
- Se llama Namine Bathoryn, es una alumna nueva.
-¡Que coincidencia, nosotros también os queremos presentaros a una señorita!- Comento el victoriano tomando la mano de una chica rubia que sorprendieron a la todos.- Ella es…
-¡Rous!
La castaña se lanzo directamente a abrazarla quedando boquiabiertos los chicos ante la escena. Al poco rato, las chicas se percatan de que tenían que explicar el motivo de esa actitud.
-Perdonen por mi reacción.- Se disculpo Namine un poco ruborizada, al igual que su amiga.- Os presentare a mi mejor amiga de la infancia, Rous Abadeu.
- H-Hola a t-todos.
-Encantado de conocerte Rous. Yo me llamo Alexis y el otro que esta con la consola es mi hermano gemelo, Armin.
- Yo soy Kentin. Me alegro de conocerte.
- I-Igualmente chicos.- Sonrió con timidez la joven mientras jugaba con sus dos dedos índices.
-¿Y vosotros, cuales son vuestros nombres?- Pregunto Namine llamando la atención de los dos mencionados.
-Castiel.
-Yo me llamo Lysandro, es un gran honor de conocerla Señorita Namine.- Coge la mano de la joven con delicadeza y le deposita un beso haciendo que se sonrojara.
Ese acto no fue desapercibido para el oji verde, sintiendo como si la sangre le hirviese hasta llegar a la cabeza pero le sacan de sus pensamientos al oír abrirse con fuerza la puerta entrando dos chicas. Una chica morena, cabello castaño oscuro y ojos azul zafiro mientras que la otra es de piel más clara y los ojos azules con una línea rosa.
-¡Kentin!- La morena se dirigió corriendo al mencionado, dandole una abrazo.- ¡Te he estado buscando!
-Eh…esto…perdona por hacerte preocupar…- Se disculpaba incomodo con la joven.- No era mi intención Priya…
-No te preocupes, cielo. Después de clase nos vamos a cenar fuera.- En ese momento une los labios de Kentin con los suyos, causando que Namine se frustrará.
Namine sentía como si una espada le hubieran clavado en el corazón, y sin pensárselo dos veces se fue corriendo de allí. Kentin aparto rápidamente a Priya para seguir a su nueva amiga hasta alcanzarla.
-¡Namine, espera!- Grito el castaño agarrándola de la mano, este contacto causó que en el interior de la chica se despertara. En ese segundo, la esfera roja de la cruz comenzó a brillar más intenso.
Sin embargo, no era la única que sintió despertarse algo dentro de ella misma. Rous sentía como sus latidos fueran fuertes mientras que la figura de su pulsera se está rodeando de hielo, al ver como la otra chica se aferraba al roquero como si fuera su novio.
Continuara…
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