~волк по имени Гажил~
-Un remoto lugar. #1
En las más frías y remotas tierras de la Siberia Oriental, existía un pequeño poblado, la mayor parte del tiempo todo lo que se veía era color blanco por siete u ocho meses aproximadamente. Aunque el sol se encontrara en un lugar equivocado en el cielo, este les alumbraba, en cambio en los otros meses donde reinaba la oscuridad, los pobladores fácilmente solían deprimirse, claro estaba que no a un mismo nivel de depresión, a algunos les afectaba más que a otros, la mayoría prefería tener esa luz débil, aunque a veces fuera de alguna manera molesta.
Durante esos cortos meses que les alumbraba el astro rey, solían hacer sus recolectas de hierbas, así como de pieles de los animales que por ahí rondaban, los más típicos del lugar, como zorros blancos, lobos, el único animal que se abstenían de matar, era el oso, al ser considerado un animal sagrado, aunque si este atacaba a alguien entonces si se le podía matar, mientras tanto no. También solían abastecerse de pescado, mantenían una estrecha relación con una aldea cercana, con la cual practicaban el trueque, realmente decir que aquellas localidades estaban cerca no era lo correcto, porque había muchas leguas de distancia entre una y otra. Solían intercambiar hierbas curativas o pieles por aceite de foca. Así mismo en esa temporada celebraban fiestas típicas del lugar para festejar el verano, convivir y conocerse más, también era típico el realizar bodas en esa temporada.
Pero todo cambiaba cuando venían los arduos meses de oscuridad, las temperaturas eran muy bajas, los pobladores solían confundirse entre la noche y el día, llegando hasta alterar sus horas de sueño. Unos días eran más difíciles que otros, a veces hasta más de lo normal, solo pocas noches la luna salía y alumbraba el paraje blanquecino, en esas noches se oía aullar a los lobos, a veces cerca a veces muy lejos.
El invierno comenzaba, y lo hacía con un tono bastante sombrío. Los lobos solían venir cuando llegaba la media noche, ponía bastante nerviosos a los habitantes de esa pequeña localidad así mismo, a la mayoría de espantaba el sueño, los nervios se intensificaban cuando se oía su aullar dentro de la zona poblada, poco descaro parecía provenir de esos extraños lobos.
Durante todo lo que duro el invierno no dejaron de tener esas "visitas", pero el verano estaba próximo ya, la oscuridad dejaba de ser menos larga, la calma parecía llegar a los moradores del lugar, pero no por mucho tiempo. La primera desaparición comenzó con un joven bastante conocido, no solo por su forma de ser, si no por el color de su pelo, el cual era de un color rosáceo. Su hermano Zeref, un joven que en poco se parecía al menor, junto a su padre Igneel habían salido en su búsqueda, en un principio habían pensado que había huido con su amada, una chiquilla rubia que no tenía demasiado tiempo que había llegado a instalarse en el poblado con sus dos hermanas menores, las cuales vivían a las afueras del mismo.
La preocupación los consumía al darse cuenta que habían pensado mal, pues la joven se encontraba en la pequeña cabaña donde vivía con sus hermanas, así mismo, se podía ver la preocupación en el rostro de la joven rubia al enterarse de dicha noticia.
