LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN, SOLO LA TRAMA ES MIA. QUEDA PROHIBIDO PUBLICAR CUALQUIERA DE MIS HISTORIAS SIN MI CONSENTIMIENTO.

Primer encuentro.

— ¡Isabella! ¡Baja ahora mismo! —gritó mi madre desde el primer piso-es hora de irnos-escuché su voz más cerca, como si se estuviera acercando a las escaleras.

¿Por qué me pasa esto a mí?

Me acerqué al closet y en el fondo estaba mi preciada caja de emergencia, la necesitaría.

— ¡ISABELLA! —gritó de nuevo Renne.

— ¡Ya voy mama! —le contesté enojada de vuelta.

—Te vamos a dejar aquí eh! —puse los ojos en blanco.

Como si quisiera ir…

Si, yo, Isabella Swan, porrista, la más popular de todo el instituto, por algo que cometí en mi vida pasada, estaba siendo castigada cruelmente por mis padres, obligándome a pasar con ellos TODO el verano.

Y eso no era lo peor, si no que tendría que pasarlo lejos de Phoenix, lejos de mis amigos, lejos de las fiestas, el alcohol, el sexo…lloriquee.

El punto es que por más berrinche que hice no pude lograr que mis padres se apiadaran de mi. Intenté de todo, desde amenazas hasta lágrimas y nada funcionó.

Ahora iríamos todos juntos en familia a la casa de descanso de mi tía Esme, que estaba en un lugar tranquilo y apartado de la sociedad, donde tendría que soportar los arrumacos de mis tíos y mis padres, claro, ellos estaban felices porque tendrían sexo, pero ¿y yo qué?

Lo admito, soy una perra. No tanto como mi amiga Tanya. Yo tenía un poco más de sentido de educación, mi vestimenta no era tan vulgar y no me acostaba con cualquiera, pero estaba acostumbrada de tener chicos en mi cama siempre dispuestos.

Y uno de ellos es mi mejor amigo Jasper Hale. Los otros eran chicos que al sobresalir un poco merecían la pena, pero era solo eso, sexo desenfrenado, sin compromisos.

Suspiré.

La bocina de la camioneta de Charlie, mi padre, comenzó a sonar, insistente.

Bajé las escaleras, enfurruñada, arrastrando mi maleta. Mi padre me esperaba al final de estas y la tomo. Salimos de la casa y Charlie metió mi maleta en la parte trasera de la camioneta, caminé directo hacia el asiento trasero y me senté, cruzando mis brazos.

—Vamos Bells, no será tan malo, ahí va a estar tu primo Edward, es un año mas chico que tu. Se llevaran bien.

—Técnicamente no es mi primo, es adoptado—le contesté

—Bueno, pero se llevaran bien, he escuchado que es muy inteligente. —dijó amistosamente.

—Claro—era la reina del sarcasmo.

Genial…

Charlie encendió el coche y manejo hacia las afueras de la ciudad. Suspire por milésima vez. Renne me miro divertida por el retrovisor, le hice una mueca y saque mis audífonos para escuchar a todo volumen las canciones de Muse, esperando que el viaje de 2 horas se hiciera mas corto.

Estaba metida en mis propios pensamientos cuando note que Charlie salió de la carretera, siguiendo un camino empedrado entre los arboles. El camino fue largo, pero cuando vi una casa apareciendo entre los arboles me acomode en mi asiento.

La casa era como una cabaña lujosa, de tres pisos y con muchos ventanales de cristal, hermosa. En el porche nos esperaba Carlisle y Esme, sonrientes, y detrás de ellos pude notar a Emmett y a dos adolecentes más. Supuse que la chica era Alice, y al chico que no le veía el rostro era Edward.

Charlie aparco el coche y rápidamente salieron. Parecían niños.

— ¡Hermano! Cuanto tiempo—dijó la tía Esme abrazándolo.

—Renne, no los hemos visto desde el cumpleaños de Emmett—comento Carlisle.

Renne me lanzo una de esas miradas que matan. Gruñí y baje de la camioneta.

Empezaba el peor verano de mi vida…

Mis padres estaban ocupados con Esme y Carlisle, así que me acerque lentamente y me aclare la garganta.

—Oh Bella, ¡bienvenida! —gritó Esme abrazándome.

—Hola tía—dije tratando de sonar alegre, Carlisle se unió al abrazo, murmurando palabras de bienvenida.

—¿Bella? La flacucha y torpe Bella—dijo Emmett parándose enfrente de mi, sorprendido y con una mueca burlona en el rostro.

—sii, Emmett.

—Pero la última vez que te vi tenias nueve años y te faltaban dos dientes—gritó nuevamente, tratando de avergonzarme, pero con el paso de los años aprendí a devolvérsela, sonreí.

—Emmett, la última vez que te vi tenias doce años y un gran barro en la nariz— dije bromeando, el hiso una mueca.

— ¡Bella! Por fin conozco a mi prima. Nunca te vi porque en los veranos Edward y yo siempre estábamos en los campamentos-dijo abrazándome fuertemente. —No sabes todo lo que aremos. Saldremos de compras, aremos pijamadas, te pintare las..

—Alice…—la llamó una hermosa voz aterciopelada detrás de mi—Calma, la agobias.

Me di la vuelta para ver de donde venia esa voz desconocida. Mi mirada se tomo con unos ojos verdes esmeralda, hermosos. Pero lo que mas me impacto es el dueño de estos, frente a mi estaba un chico verdaderamente ardiente, hermoso, todo un dios Griego.

Era alto y delgado, cabello de un extraño tono cobrizo, pálido, y facciones perfectas, la camisa sin mangas que traía dejaba ver sus bien torneados músculos de los brazos, no era tan musculoso como Emmett, pero estaba buenísimo, no tenia ningún parecido con Carlisle o Esme, y tampoco se parecía a sus hermanos, que tenían los ojos color miel, como Esme.

Así que este es el adoptado-Pensé sonriendo.

El me miraba con una sonrisa tímida y un poco sonrojado por mi inspección.

Con que tímido el chico…

Sonreí con satisfacción. Mi nueva presa, al menos me serviría para distraerme este verano. Sentí mis bragas humedecerse ante a idea.

—Hola, soy Edward—dijo el extendiéndome la mano torpemente.

—Hola Edward, soy Bella, claro que eso ya lo sabes—sonreí estrechando su mano, era aun más hermoso de cerca, el nervioso, retiro su mano y sonrió tímidamente de nuevo. Se veía tan casto.

Ay mi tímido Edward, amare pervertirte un poco…

—Charlie, Renne, los estábamos esperando para ir al supermercado y comprar la despensa, ya que no hay nada de comer en casa. Llegamos para la cena chicos —dijo Carlisle hacia nosotros.

—Yo voy—dijeron Emmett y Alice, subiendo rápidamente a un jeep, Carlisle nos miro interrogante

—Yo me quedo—dije segura, quería desempacar.

—Bella, cariño, no puedes quedarte sola-intervino Esme preocupada.

—Yo me quedare con ella—dijo Edward y Carlisle sonrió.

—Gracias hijo, volvemos en unas horas—y desaparecieron de vista.

— ¿Me ayudas a bajar mi maleta? —le pedí a Edward, mirándolo entre mis pestañas, una táctica de seducción que aprendí ase unos años.

—Claro—murmuro caminando hacia la camioneta- ¿Cual es?-pregunto mirándolas.

—La roja grande—el asintió y la puso sobre su hombro, al cargarla sus brazos de flexionaron, me mordí el labio, deseosa.

—Pesa mucho, pero estaremos aquí todo el verano—trate de disculparme.

—No te preocupes, no pesa tanto—contesto mientras me guiaba al tercer piso de la casa. Ahí solo había 2 puertas. —Según mama esta es tu habitación— dijo mientras abría la puerta, la habitación era amplia y luminosa, decorada de manera muy femenina, había un par de muebles, un sofá individual y una mesita de noche, junto a el tocador.

Edward camino hasta la cama y dejo ahí mi maleta.

—La puerta de ahí—señalo una frente a mi cama—es el baño, es compartido con la habitación de a lado, pero cuando estés dentro pon el seguro—me informo—Te dejo para que desempaque—dijo nervioso y salió rápidamente de la habitación.

Me acerque al ventanal, que daba vista hacia el patio trasero, donde estaba una enorme piscina y unas tumbonas y hamacas, el sol todavía estaba alto y yo necesitaba refrescarme, así que decidida tome el bloqueador solar y baje.

Al caminar por la casa me di cuenta de que Edward no estaba por ningún lado, lo que me decepciono un poco, tenia que llevar a cabo mis planes rápidamente, ya que no estaba dispuesta a permanecer mi estancia sin sexo, y al pensar que el, siendo tan tímido, me costaría un poco mas de trabajo, pero no importaba.

Llegue a la piscina y me agache para meter un pie en ella, para medir su temperatura, cuando vi algo que me hizo sonreír. En la piscina se reflejaba la parte trasera de la casa, y a su ves, en uno de los ventanales del tercer piso, pude ver a Edward reflejado, mirándome.

La seducción empieza…

AVISO IMPORTANTE: Hola chicas, he decidido editar (con ayuda) mis historias, empezando por esta, ustedes se merecen lo mejor, y no quiero que se vean rodeadas de una mala historia.

Tenía grandes faltas de ortografía, que ya han sido corregidas.

Fortaleceré la trama, tomare en cuenta más puntos de vista y le agregare unas cuantas cosas más, también are los capítulos más largos.

Espero que no les moleste, no tardare mucho en subir los demás capítulos ya corregidos, solo aviso para que no se confundan por si le agrego más cosas que antes no estaban.

Esto es para hacer su lectura más cómoda.

Espero que les agrade la idea y no les moleste.

Agradezco su comprensión

Lilit