Los siguientes personajes de Naruto pertenecen a Kishimoto, yo solo los tomo prestados para esta historia.
Esta idea comenzó a rondarme últimamente y antes de que la olvide pensé en compartirla, es más oscura y violenta de mis otras historias, por lo que si no gustan de este genero mejor no lo lean.
Puse a Naruto como un lobo, ya que con el zorro no me quedaba muy bien que digamos.
Espero que les guste
Primera Noche
Me pregunto si hubiera sabido todo lo que iba a ocurrir aun lo hubiera seguido, si hubiera sabido todo el dolor y sufrimiento que tendría que pasar lo hubiera seguido, no lo se…todo se nubla, mi cuerpo no me responde, estoy muriendo…
Noche 11:00 PM
Mi nombre es Hinata Hyuga y tengo veintidós años, este es mi primer año como maestra en la preparatoria Konoha, y estoy bebiendo como si no hubiera un mañana, a mi lado se encuentra un compañero del trabajo, el maestro Kakashi quien solo me mira divertido por mi estado.
-Que se ha creído el director – azotando fuertemente el vaso que acabo de terminar de un solo trago sobre la mesa.
Estoy furiosa
- Calma Hyuga Sensei, no veo que deba preocuparse demasiado
Miro aun más furiosa a Kakashi.
-Es que ese nuevo alumno Uzumaki, es verdaderamente raro y buscapleitos, y con el Uchiha que ya tengo en clase no tardara mucho en haber problemas.
-Mmm..., tiene apariencia de ser delgado y alto, y aun así no se ve débil debido a una extraña aura que le rodea, algo difícil de describir, bueno eso dicen-
Mire a Kakashi furiosa por su comentario burlón
-Me estas ayudando o me estas terminando de rematar. – La verdad el comentario me puso más los pelos de punta -.
Solo sonrío mientras me veía tomar otro vaso de un solo trago.
- Solo lo conozco por los rumores, el llegara mañana luego de ser transferido
Estaba deprimida, el trabajo como maestra no era lo que esperaba, por ello había dejado el dulce hogar que una chica podría desear, nunca carecí de nada, lo tenia todo, pero quise ser profesora y por ello ahora vivo sola, pero mi situación económica no es muy alentadora que digamos, y el ambiente que se esta tornando en la escuela es mucho peor.
La ultima copa y dejamos el sitio.
Kakashi tomo su camino
Yo me despedí agitando mi mano graciosamente.
-Tomare un taxi – le dije sonriente
El se despidió mientras tomaba su camino.
Me maldecía a mi misma, no tenia dinero para regresar así que comencé a caminar mas deprimida, los tacones no ayudan mucho, sobre todo cuando ya estas demasiado bebida.
Me preguntaba si fue mala idea el haber dejado mi casa, casi nunca tenía dinero y lo poco me lo iba a beber para desahogarme del stress.
Comencé a atravesar un parque para ahorrar camino.
De repente tropecé y justo cuando iba a caer alguien alcanzo a sostenerme evitando que cayera.
- Ah… muchas grac…me quede helada, la persona que estaba ahí era un chico rubio alto y de mirada fría, me hizo sentir escalofríos.
A pesar de ser un estudiante era más alto que yo, su cabello rubio y despeinado, su piel bronceada y sus ojos, esos ojos tan azules como el cielo.
Pero…
Esa mirada fría y lejana,
Creo que sintió mi miedo ya que de repente soltó su agarre y se alejo.
Tarde unos minutos en reaccionar, pero creo que mi lado de maestra salio.
-¡Oye tu eres un estudiante de preparatoria, que demonios haces a estas fuera ¡ ¡Donde tienes tu sentido común¡
Volteo y su mirada había cambiado, estaba muy divertido.
- Y el tuyo donde esta, estas ebria y apenas puedes sostenerte, y todavía dándome un sermón a un chico, y envuelta en ese trapo.
--Que se estaba burlando de mi ropa ahora el muy desgraciado--
Me enfurecí más de lo que ya estaba como se atrevía a burlarse de mi
-¡no…no...No es un trapo ¡
-Jajaja, ah no, entonces que es, por que no le veo forma, si fuera un trabajador ebrio como tu estaría luciendo algo mejor,
-Ya basta, soy profesora y…
-Profesora, si que es buena broma.
No me creyó, no me ve como una profesora sentí una enorme vergüenza, bueno en estas condiciones tal vez no lo parezca.
Se quedo mirando a la lejanía y volvió a poner esa mirada fría que me da escalofríos.
- de todos modos, es mejor que corras, te lo advierto.
Me ha dado la espalda y comienza a retirarse.
-Oye, espera- trate de alcanzarlo aun con la dificulta que mis tacones me permitían, creo que no debí haber traído esta falda tan corta, solo me trae problemas.
-Espera ¡ - seguía corriendo lo mas rápido que podía.
-Deja de seguirme ya te lo advertí –El continuaba caminando sin siquiera voltear a mirarme.
-A donde crees que vas ¡- le había dado alcance, se había detenido en la plaza y parecía mirar algo en la lejanía.
Alce la vista en la dirección que el miraba.
Tres sujetos estaban ahí de pie, me dio mucho miedo, esos tipos eran peligrosos, llevaban Bats de béisbol y palos de metal no creo que estén ahí por pura casualidad.
-Por eso te dije no me siguieras… el me miraba de reojo.
Yo no podía dejar de temblar.
El chico de en medio dio unos pasos al frente como cerciorándose de que era la persona que buscaba.
-Maldito lobo, cambiándote de escuela y sin avisarnos –
-Eres muy persistente, Izuka - le miraba mas con tristeza que con furia al chico plantado ahora frente a el.
-Es correcto, pero esta vez no podrás escapar tan fácilmente, además no es lugar para que andes paseándote con una lindura…
No me gustaban las miradas que esos tres me daban, como decía esta falda corta solo me trae problemas, pero lo mas preocupante es que ahora nos tenían rodeados.
Para sorpresa de los presentes el tipo de enfrente saca una sirena y comienza a sonarla.
Luces de todos lados comenzaron a deslumbrarme.
Había cerca de cincuenta chicos, en auto, moto y a pie, todos bien armados con palos y artículos cortantes, todos venían hacia nosotros.
Estábamos totalmente rodeados, el miedo me venció y termine en el suelo mirando a todos esos sujetos, definitivamente no sabia que estaba pasando y por que estaban tras este chico.
La risa divertida del joven rubio me saco de mis pensamientos, pero la respuesta de este me dejo mas helada acaso no tenia idea de lo que estaba pasando.
-Así que, que planeas hacer – Divertido veía hacia el líder de todos esos pandilleros.
Si estaba helada por su respuesta.
Antes de que diera cuenta una vara de metal golpeaba su cabeza, solo vi. como la sangre salía a borbotones de su rubio cabello y el caía al suelo.
-Oye Izuka, nos trajiste para matar a este escuincle – le decía otro chico.
Este sonreía mientras se colocaba unos metales entre sus dedos.
-Lobo no morirá con eso.
Nos sorprendimos, por que de pronto el se ponía de Pie y con su rostro ensangrentado volteaba a verme sonrientemente, esa sonrisa me erizo, la sangre continuaba saliendo sin parar.
Izuka comenzó a moverse mientras los otros chicos lo imitaban, al mismo tiempo su grito fue escuchado por todos.
- ¡De lo contrario ya estaría muerto hace mucho¡¡
Eso era una carnicería, de todos lados comenzaban a lloverle golpes , patadas, puntapiés, la sangre corría aun más.
No era posible, no creía todo esto, una pesadilla, lo estaban matando a golpes. El no podía responder a ninguno de sus ataques, bueno contando que le superaban en número.
Comencé a llorar, no sabia que hacer así que comencé a gritar desesperada, clamando por su vida.
-¡Basta¡ ¡Detengan esto, llamen a una ambulancia¡
Ninguno me hacia caso, solo escuchaba los gritos de aquellos tipos, dos me tenían agarrada para que no escapara, pero aunque quisiera no podría hacerlo, el miedo me tenia paralizada.
-¡Cállate¡
-¡Te vamos a violar¡
Lloraba con fuerza, suplicando aun más, pero todo era inútil.
-¡El va a morir , detengan todo esto¡
Se hizo el silencio.
Se habían detenido, el estaba tirado en el suelo en un charco de sangre, mientras los pandilleros agotados veían que ya no se movía.
De un salto se puso en pie, la sangre salia volando manchando a los presentes que le tenían rodeado.
Con su sonrisa les miraba.
-Acabamos ya con el calentamiento. Dijo como si nada pasara.
No era posible, el después de esa golpiza estaba de pie, no podía emitir ninguna palabra, aunque no era la única, nadie de los presentes pudo hacerlo.
Izuka molesto comenzó a abrirse paso, mientras llegaba a su auto.
-Muévanse, estorban ¡- Gritaba furioso.
Encendió el auto y todos salieron fuera de su paso, solo el chico rubio estaba quieto como si nada pasara.
-Los humanos son… - alcance a escuchar que decía algo pero no termino de decirlo.
Mire como salía su cuerpo volando, arrollado por el auto, la sangre salpicaba el pavimento mientras el caía
Su cuerpo todo retorcido ahora yacía en el suelo, mientras Izuka salía del auto maldiciendo al chico.
Yo estaba más petrificada que nada, como era posible que ellos hubieran hecho algo así, escuchaba todo lo que decían pero no podía moverme, las piernas me temblaban.
-Bien chicos tomaremos a la mujer para cambiar de ánimo
-Claro Izuka –
-Súbanla al auto.
-Vamos levántenla,
Las imágenes comenzaron a llenar mi cabeza, lo que estos tipos querían, lo que me harían fue demasiado para mi solté un grito de terror tan fuerte y caí desmallada.
-Izuka esta tipa se desmayo,
-No importa solo súbanla al auto…
Algo pasaba los chicos que ya habían dado la espalda, volteaban sorprendidos, varios chicos habían salido volando, y de pronto el auto cayó varios metros impidiendo el paso para salir.
Izuka solo miro que este había caído sobre varios chicos, quienes habían muerto instantáneamente, volteo hacia atrás, una masacre estaba pasando frente a sus ojos.
Todos los chicos estaban siendo descuartizados, veía caer partes de cuerpo por todos lados, y una enorme figura se comenzaba a distinguir entre las sombras que se habían formado.
Estaba estático, todos corrían pero no llegaban muy lejos, que demonios era esa cosa, no lo distinguía muy bien, las luces al igual que todos iban muriendo poco a poco.
Ahora frente a el, lo vio, tan definidamente.
Un lobo…así como su apodo, que ironía.
El sonido de patrullas y ambulancias comenzó a despertarme, estaba sobre una chamarra, no recuerdo que haya caído sobre una.
Alzo mi vista y puedo ver con claridad el terrible paisaje.
Fuego, y una gran cantidad de cadáveres a lo largo de la plaza, la visión es terrible, muchos están irreconocibles, han sido masacrados, el olor a carne quemada es demasiado fuerte.
No se si llorar o gritar de desesperación, estoy sin movimiento, el viento sopla y siento el roce de algo, alzo la vista, es algún tipo de cabello de color dorado que cae lentamente, al mismo tiempo me percato enorme luna que hay esta noche.
La mañana llego muy rápido no dormí nada, la patrulla me deja frente a la escuela, mientras Kakashi me mira sorprendido.
-Gracias por su cooperación –
Solo asiento al policía.
Kakashi se me acerca.
-Paso algo Hyuga Sensei.
-Ah…si pero no tiene que ver con ninguno de mis estudiantes- conteste a duras penas.
Cerré los ojos como si todo aquello fuera una pesadilla, de pronto lo veo venir, levanto la vista y puedo apreciarlo por completo, el chico de la pelea llegaba a la escuela y no presentaba ningún rasguño, nada que lo delatara de anoche.
El me mira
Vuelvo a temblar tan solo de recordarlo.
Muchas gracias por haberse tomado tiempo de leer esta historia