Antes quisiera decir que estos personajes no me pertenecen (lamentablemente), son de S. Meyer y yo solo los tomo prestados para complicarles la existencia un poco xD
Mi hombro en donde llorar.
Carlisle POV
Llegué temprano del hospital, fue un día normal. Había comenzado a llover, por lo que decidí suspender mi lectura y salir a entrar mi auto. Sin embargo, no estaba listo para lo que sucedería en ese momento.
Esme POV
Para empeorar la situación, comenzó a llover. Solo ahí me di cuenta de que no tenía a donde ir, no tenía un hogar.
Logré llegar hasta una casa con un techo sobre su puerta, por lo que decidí quedarme allí hasta que la lluvia disminuyera.
No pasaron ni 5 minutos, cuando la puerta se abrió. De ella salió un hombre (más bien ángel), el propietario de la casa supuse.
-Perdóneme-Me disculpé incorporándome.-, ya me iba.
-No.-Exclamó él tomando mi mano.- ¿Se encuentra bien?
Quizás lo preguntaba por el hecho de estar sola bajo la tormenta, o por mis ojos rojos de tanto llorar. Sea cual haya sido la razón, no tuve tiempo de responder.
-Por favor, pase.-Dijo envolviéndome con su chaqueta e invitándome a pasar. Era muy caballeroso, sin mencionar la infinita belleza que poseía.
Una vez dentro de la casa (o mansión), ambos nos sentamos en el sofá. Él me preparó una taza de té, a pesar de que le aseguré que no hacía falta.
-Perdone el atrevimiento, pero ¿Qué hace una mujer tan bella como usted sola bajo la lluvia?-Dijo penetrándome con sus ojos dorados como el sol. No respondí, por lo que cambió de táctica.-Me llamo Carlisle Cullen ¿Usted?-Me tendió la mano.
-Esme.-Susurré mientras la estrechaba.-Esme Even… ¡Platt!-Decidí suprimir el apellido de mi esposo.
-Ok, supongo que el hecho de saber nuestros nombres nos da derecho a tutearnos, ¿No?-Preguntó alzando una ceja.
Reí, la verdad es que ya me incomodaba seguir tratándolo de usted.
-Ok, ¿De dónde eres? No eres de Forks, ¿No?-Dijo con mirada expectante. En un pueblo tan pequeño todos ya se conocían las caras.
-No-Hice una pausa y miré por la ventana detrás de él.-Digamos que hui de lo que era mi casa.
Me miró sorprendido, decidí explicarme mejor.
-Yo… hui porque mi esposo me golpeaba.-Agregué fijándome nuevamente en él.
Carlisle, que en ese entonces bebía un poco de té, casi se ahoga al escucharme. Colocó una mano sobre mi hombro.
-¿En serio?-Preguntó extrañado.
Asentí apretando mis labios, tratando de contener unas lágrimas que aun así bajaron, dejándome en vergüenza frente a Carlisle.
-Lo lamento.-Susurró Carlisle mientras acariciaba mi cabello. Sentí como una descarga eléctrica me recorrió el cuerpo, era la primera vez que sentía algo así.
-No importa-Dije mirando hacia el suelo, no quería que siguiera viéndome llorar.-, no es lo peor de la situación.
Se quedó observándome, esperando una explicación de mi parte. No hizo falta, no después de que notó que me llevé la mano al vientre.
-Oh.-Exclamó mientras apoyaba su mano sobre la que yo tenía libre.-Por eso huiste…
Asentí con lágrimas en los ojos. Me sentía la peor madre del mundo en ese momento, quizás no debí haber huido… ahora ya no tenía ningún lugar a donde ir.
-Tranquila.-Dijo secando una de mis lágrimas.-Seguramente lo hiciste para protegerlo de los posibles golpes de su padre… y eso te hace una gran madre, Esme.
-Lo único que quiero es que ellos sean felices.-Dije entre sollozos, él me miró con ternura.
-¿Ellos?-Preguntó con tono amoroso.
-Si-Dije medio sonriendo.-, son mellizos. El problema ahora es que no tengo adonde ir. Tendré que conseguir empleo para pagar un departamento y…
-No.-Dijo Carlisle apretando mi mano.-Durante el embarazo debes descansar.
-Pero no tengo en donde quedarme.-Agregué susurrando.-No tengo ningún amigo capaz de hospedarme… y menos en la situación en la que estoy.-Dije tomando mi barriga con ambas manos.
-¿Por qué lo dices? Somos amigos ahora… por lo que yo te invito a quedarte aquí.-Dijo señalando toda su casa con su mano.
Antes de pudiera oponerme, agregó:
-Es bastante grande para mí solo. Arriba tengo una habitación con baño y lo bastante grande como para que te quedes durante los meses de gestación y unos días más…
-No lo sé, Carlisle.-Dije mirándolo a los ojos.-Me parece algo extraño… apenas nos conocemos.
-Lo se.-Dijo peinándose el cabello.-Pero soy confiable… o al menos ese es el cuento que les hago creer a mis víctimas.-Agregó con voz maliciosa, levanté la mirada sorprendida.-Estoy jugando contigo.-Dijo sonriendo.
Sonreí con él, aunque aún dudaba sobre si quedarme o no.
-Venga Esme-Dijo al notar que seguía en duda-, ¿No harías lo que fuera por tus hijos?
Suspiré, ese era mi punto débil: haría cualquier cosa por mis hijos.
-Está bien, me convenciste.-Dije apartando mi cabello.
Mi único objetivo sería proteger a mis bebés, sin importarme que Charles fuera el padre. Los amaría… por encima de todo.
Esta es la primera historia larga que escribo, ¿que les pareció el primer capítulo? Pronto subiré el capítulo siguiente, se que es corto, tenganme paciencia. Por favor dejenme un review con sus opiniones (insultos, criticas, tomatazos, rosas... lo que quieran) Los quiero! :)
