Hola chicos/as! Gracias por los reviews quemandasteis en mi otra historia. Era un one-shot imposible de seguir, pero aqui vuelvo a la carga con un fic. Sera cortito pero apetitoso, jejeje. Asi que ya sabeis a leer y dejad reviews, por cierto, tardare en actualizar, asi que cuanto mas paseis por caja mas ganas tendre de seguir, jajajajaja.
Lo tipico, los personajes no son mios, son de la fabulosa Jo, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
A leer tocan!
QUIERO
Quiero que me oigas sin juzgarme...
Quiero que opines sin aconsejarme...
Quiero que confies en mi sin exigirme...
Quiero que me ayudes sin intentar decidir por mi...
Quiero que me cuides sin anularme...
Quiero que me mires sin proyectar tus cosas en mi...
Quiero que me abraces sin asfixiarme...
Quiero que me animes sin empujarme...
Quiero que me sostengas sin hacerte cargo de mi...
Quiero... que conozcas las cosas mias que mas te disgusten
Que las aceptes y no pretendas cambiarlas
Quiero que sepas... que hoy puedes contar conmigo...
Sin condiciones.
Jorge Bucay
Cuentos para pensar
Curándome de tí
Al fin, después de largos años de incertidumbre y oscura soledad vuelvo a reunirme con él. El sumun de las mas perfectas imperfecciones aparecidas en el inmenso agujero negro en que se convirtió mi vida. Durante este tiempo he tratado en vano de olvidarte, de olvidar tantos momentos juntos, instantes de felicidad que escapaban entre mis dedos buscando, supongo, un cuerpo mas apacible en el que descansar.
Al principio todo fue como siempre, nada había cambiado en ti, aunque si lo había hecho dentro de mi. En el instante en que me reconocí amándote todo pareció girar de nuevo, como si de un infinito circulo se tratara. Un circulo sin inicio ni fin, nacido en mi subconsciente y que florecía cual cálida primavera inundando mis sentidos. Rebosante de felicidad me reunía contigo cada mañana esperando que al fin naciera en ti una palabra, un gesto que revelara que finalmente mi lucha tenia sentido, y cada noche Morfeo me envolvía en su cálido manto permitiéndome vivir de la esperanza un poco más.
Pero el tiempo irrefrenable me devolvía a una realidad que no era la mía, a una realidad en la que no deseaba vivir, a mi realidad de sueños imposibles, sueños que finalmente acabaron consumiéndome.
Me escondía de ti y de tu mirar esmeralda, por miedo a que descubrieses que habitaba en mi corazón, con miedo a que las cosas cambiaran, con miedo a perderte, sin saber que en realidad ya te perdía.
Te perdía en cada momento en que me olvidaba de ti, para pensar en mi, a pesar de que tu sola presencia hacia que mis sentidos danzasen alegres al son de tu esencia, nublándolos. Tu llegada era mi calma y mi tormento, una calma engañosa, pues la calma que precede a la tormenta siempre lo es, y como tal llegaría, aunque de forma sutil y sibilina.
No se cuando empezó este distanciamiento que tan patente queda ahora en mi memoria, pero lo hizo, cada día era mas duro que el anterior, siempre esperando algo que no podía llegar, temiendo y deseando que todo quedase aclarado. Pero al igual que miles de veces antes, mi organizada mente llego a una conclusión que no era la que mi corazón pedía a gritos, decidí no buscarte, esperar a que me redescubrieras, esperar solo que mi espejo de Oesed no se rompiera en mil pedazos dejándome consumida en la nada.
Recuerdo claramente la despedida, que sin ser la ultima era la que cambiaria radicalmente nuestros destinos. El viaje en el tren no fue agradable ni placentero, era mucha la tensión que nos invadía en el pequeño vagón, todos sabíamos que era el final de una etapa, el final de un verte durante todos los días, de compartir aventuras y charlas junto a la chimenea, de esos largos siete años que pasamos juntos.
Ron miró el reloj, y corrió precipitadamente hacia el pasillo, supongo que en busca de Luna. Estábamos cerca de Londres y también a él se le acababa el tiempo, así que nos dejo solos. Me dejó sola con él, que debía hacer ahora, que decirle, de que hablar? Éramos amigos sí, pero algo nos había cambiado, ya no podía leer en tu mirada que pasaba por tu mente, bloqueabas tus emociones y no sabia si esa mezcla de indecisión, miedo y arrepentimiento que mostraban tus ojos iba dirigida a mi o simplemente era la consecuencia del recuerdo latente de tu ultimo encuentro con Voldemort. Aun ahora no se que ocurrió aquella noche, nunca me lo dijiste¿cuando dejaste de confiar en mi? Desde la perspectiva que da la lejanía y el paso del tiempo igual no fuiste tu, al menos no del todo, yo también tengo mi parte de culpa, decidí dejar de velar por ti, dejar de pasar noches enteras buscando una solución para acabar con tu sufrimiento, un medio de mantenerte vivo. Puede que me cansara, tantas solitarias noches en la enfermería esperando esa mirada que hacia que todo valiese la pena, esperando que todo saliese bien, esperando que el final llegase. Pero como siempre, el final nunca lo es, y pase de esperar a desesperar.
Igual mi decisión fue muy egoísta, día tras día veía el sufrimiento reflejado en tu rostro, ver como tu sonrisa iba desapareciendo, dando paso a un triste y preocupado semblante, algo que muchos pensaban era una muestra de arrogancia y decisión, pero yo sabia la verdad y no podía hacer nada para remediarlo. Pensé que igual mi sufrimiento te estaba contagiando y mas que nunca necesitabas alegrías para iluminar tu camino. Sí, no quería sufrir, en realidad lo que no deseaba era compartir ese sufrimiento contigo.
Cuando finalmente te decidiste a hablar no podía creerlo, como dos personas que han pasado tanto tiempo juntos pueden de repente darse cuenta de que son dos extraños.
Flash back
-Entonces... ¿ya has decidido que harás el próximo año?- comentó Harry con tono inseguro.
-Tras meditarlo un poco llegó la respuesta de ella.
-Aun no estoy segura, hay tantos campos en los que me gustaría investigar...-respondió dubitativa- No estoy segura, creo que me inclinaré por la medicina mágica, mis padres siempre han querido que me interesase por esa rama.
-Ah, con la cantidad de horas que has pasado en la enfermería es normal que te haya picado el gusanillo.
-Para ser amiga tuya son necesarios conocimientos en muchas mas materias.
-Pero vale la pena¿no crees?- sonrió picaramente
-Hombre, si obviamos la parte de estar en alerta permanente todos los días del año, romper un sinfín de normas y temer continuamente por tu vida y la de tus amigos...umm...
-Yo diría que ...
-¿Tan difícil te resulta ser mi amiga?- la cortó Harry de forma brusca
-Oh Harry por Merlin! No me malinterpretes, sabes que no es eso lo que quería decir.
-Ah no, y entonces ¿que es lo que querías decir exactamente Her-mi?
-Hermi?- dijo ella con tono desenfadado- Sabes como odio que me llamen así
-Contéstame¿tan difícil te resulta ser mi amiga?
Su tono de voz y su mirada la hicieron sobresaltarse. Hermione quedó en silencio, su cabeza era un torbellino de ideas, a cual mas descabellada¿que pretendía Harry con aquello? Esa conversación se estaba haciendo muy difícil, si no media sus palabras en cualquier momento metería la pata, y era lo ultimo que buscaba.
-No lo se Harry, no es que sea difícil... es complicado... - quedó callada un momento¿como en un instante se había podido meter en aquel atolladero? Y justo ahora que iban a separarse. Y de repente una idea cruzo su mente - ¿Has empezado a prepararte para las pruebas de acceso del dept. de aurores?- pregunto con una gran sonrisa en el rostro.
Harry la miro incrédulo¿como podía haber cambiado de tema tan descaradamente? Haciendo gala de un gran aplomo tomo aire y respondió de forma pausada:
-Si, llevo meses preparándome
-¿Ya tienes fecha para la prueba?
-Hermione te lo dije hace semanas, el mismo día que llego la carta del ministerio- dijo empezando a perder el control- ¿de verdad me estas preguntando esto? Ron no habla de otra cosa
-Lo siento, lo olvide¿era el 19 de septiembre?- dijo dubitativamente, esa fecha le era muy familiar, y esperaba no haberse equivocado demasiado.
-No es el 19, ni mucho menos de septiembre¿qué te pasa Hermione? El 19 es tu cumpleaños! No se donde tienes la cabeza últimamente.
-Perdona, he estado ocupada, tampoco es necesario hacer un drama de esto
-Vale- dijo asintiendo pesadamente con la cabeza- la prueba es el 14 de agosto, los entrenamientos van bastante bien, Tonks y Lupin han prometido ayudarme este verano.
-Oh, eso es fantástico Harry- dijo Hermione, pero al ver el escepticismo en su rostro añadió- En serio, estoy segura de que te ayudaran mucho, aunque no creo que te haga falta, eres un mago excelente.
En ese momento se abrió la puerta del compartimiento, apareciendo una rubia cabellera acompañada por una radiante sonrisa. Hermione nunca había estado tan contenta de ver a Luna. Sin siquiera sentarse les pregunto:
-¿Habéis visto a Ron? Me dijo que quería preguntarme algo antes de llegar a Londres, pero no lo encuentro por ningún sitio.
-Se fue hace un rato, igual se topó con el carrito de dulces- sugirió Hermione sonriente, viendo que al fin su charla con Harry había acabado.
-¿Por que no le esperas aquí, no creo que tarde-dijo Harry con una esperanzada sonrisa que se vio inmediatamente interrumpida por la respuesta de Luna.
-No, prefiero ir a buscarlo, me dejó muy intrigada esta tarde, estaba muy nervioso- y seguidamente les pregunto con un tono de voz inseguro- ¿Vosotros sabéis que quiere?
Harry y Hermione se miraron confusos, tenían una ligera sospecha de lo que Ron quería preguntarle, pero ninguno parecía saber nada. Hermione le respondió de forma resuelta:
-No estamos seguros, pero creo que te gustara.
-Oh! Tu crees? - dijo recuperando su semblante soñador mientras salía a buscarlo- Nos vemos en la estación chicos.
Tras la salida de Luna el silencio reinaba entre los dos muchachos. Harry tenia la vista fija en la ventana, ante él campos y bosques pasaban fugaces. Hermione sin apartar la vista de su serio rostro emitió un sonoro suspiro.
-¿Crees que Ron se atreverÿ- preguntó siguiendo la mirada de Harry.
-Se atreva a que?- respondió distraído.
-A decirle a Luna.
-Bueno, creo que el problema de Ron- dijo volviéndose para mirarla- es que le ha costado demasiado tiempo darse cuenta de lo que siente por ella.
-Supongo que en cierta medida se sentía apabullado y confuso, Luna es una persona muy compleja.
-Igual el problema es que no sabe lo que siente ella por él.
-¿Como que no? No conozco a nadie mas evidente que Luna... ?Weasley is our King¿Eso no te dio ninguna pista?- dijo ella con sorna.
-Pues la verdad no. No todos tenemos la capacidad de leer entre líneas Herm.
-Vamos Harry se la veía venir.
-Bueno igual es que en esos momentos el tenia otras cosas en la cabeza- respondió Harry sin apartar sus ojos de los de ella.
-¿Ron¿qué otras cosas?- respondió risueña.
-A veces las cosas mas simples te desbordan. ¿O vas a decirme que tu nunca te has sentido así?
-¿Así como? No entiendo a que te refieres Harry.
-Confusa. Yo me siento así casi todo el tiempo- le respondió, bajando la mirada.
-¿Te sientes confuso?- pregunto intrigada.
-Solo digo que a veces resulta muy difícil organizar la mente y los sentimientos.
-Obviamente. Ella le dio todas las pistas, el solo tuvo que aceptar lo que sentía- soltó Hermione, haciendo que Harry levantara de nuevo la mirada perplejo.
-¿Como solo¿y porque tiene que ser él quien de el paso? Si tan claro lo tenia ella ¿porque no arriesgarse?
-Si lo hizo, dejó claros sus sentimientos. Se interesó por él, le animó cuando lo necesitaba. Todo el mundo lo veía, todos menos el implicado.
-¿Y no crees que eso fuera suficiente para desconcertarlo? Si sumas el hecho de que le persiguiera por todo el colegio, con lo rara que es, y que además es la amiga de su hermana¿qué se suponía que debía pensar?
-¿Qué estaba interesada tal vez?- dijo ella poniendo los ojos en blanco.
-Entonces eso significa que tu estabas interesada por mi y ahora que apenas hablamos ya no lo estas ¿no?
Hermione palideció al oír sus palabras¿era posible que Harry se hubiese dado cuenta? Sus ojos se encontraron con los de Harry, que esperaba ansioso su respuesta. Pero no lograba descifrar lo que esos obres esmeralda le decían, no encontraba la seguridad para decirle lo que tanto tiempo llevaba oculto, no era capaz de revelarle lo que la hacia sentir y desear. Trato de sobreponerse, y con voz cansada contestó.
-Eso es totalmente diferente Harry. Estas sacando las cosas de contexto.
-No lo hago. Según tu si una chica se interesa por un chico implica que le gusta ¿no?
-No es lo mismo, nosotros somos amigos.
-Querrás decir éramos amigos porque de un tiempo a esta parte apenas se nada de ti- dijo Harry con cierta amargura en la voz.
-Ya te he dicho que he estado muy ocupada
-¿Ocupada en que?- pregunto el muchacho molesto - Nosotros siempre hemos estado juntos en todo, pero empezaste a evitarnos.
-Yo no...- trató de decir ella, siendo interrumpida por un enfadado Harry.
-No digas que no nos evitas Hermione! Lo haces, y negarlo es una tontería.
-¿Eso crees, que te evito?- pregunto incrédula y empezando a molestarse por el curso que estaba tomando la conversación.
-Si, eso es exactamente lo que pienso.
-Perfecto... –soltó un bufido exasperado- pues si es eso lo que piensas no voy a defraudarte
-Genial! te has convertido en una persona totalmente desconocida para mi.
-Probablemente pero no he llegado sola hasta este punto- Hermione empezaba a perder el control.
-¿Eso es todo lo que tienes que decir? – la increpo incrédulo.
-Mira Harry no voy a perder el tiempo explicándote algo que ni quieres ni puedes comprender.
-?FABULOSO! Siete años de amistad tirados a la basura!- Gritó Harry. Hermione no podía creer lo que estaba oyendo.
-¿Amistad? La amistad es reciproca y aquí siempre soy yo la que da, la que aguanta! Eso NO es amistad.
-?De que estas hablando! Eso no es cierto.
-¿A no? Veamos... Cedric, Sirius, la profecía... tu siempre te encierras en ti mismo, sin pensar en que los que te queremos también sufrimos, y no solo sufrimos por ti. ¿Cuándo has tenido tu que estar para mi? Nunca te has dado cuenta de lo que me pasaba. Yo también he sufrido, no sabes cuanto... pero entendía que de alguna manera tu sufrimiento... tu sentimiento de culpa superaba todo lo que los demás pudiéramos sentir.
-Yo...- trató de excusarse Harry.
-TU! el gran Harry Potter!- ya era demasiado tarde, Hermione había explotado- Aun no entiendes que los demás también sentimos. Me has tratado siempre como un medio para lograr salir de tu pozo negro. Soy un fin, no el medio para alcanzarlo.
-Pero yo no...
-Déjalo Harry, en realidad no me conoces, no sabes absolutamente nada de nadie que no seas tu mismo.
-Quizá eso se deba a que nunca has querido que te conociese realmente.
-Quizá tengas razón, puede que nunca haya dejado que me conocieses, puede que ni yo misma me conozca, he pasado tanto tiempo pendiente de ti que me olvide de mi misma, pero eso se acabó.
-¿Y ya esta¿Te alejaras de mi y con eso lo solucionaras todo?
-No, no voy a alejarme de nadie, solo voy a anteponerme a los demás, voy a ser egoísta al menos por una vez, pero jamás podría dejaros de lado, sois una parte muy importante de mi.
Fin flash back
Al llegar a la estación todo el mundo parecía feliz, Ron y Luna estaban exultantes. Intente hablar con ellos pero su felicidad me provocaba un dolor profundo en el pecho, me sentía desvanecer. Intentando sobreponerme me acerque a mis amigos para despedirme, me puse mi mejor mascara, cubriendo con ella el dolor y desasosiego que la conversación en el expreso me había provocado, y avance hasta ellos, pero mi mirada solo buscaba la de Harry. Tenia el semblante duro y serio, apenas levantaba la vista del suelo, me acerque a él y con un austero abrazo me despedí. Un escalofrío recorrió mi cuerpo al ver el dolor en sus ojos, solo era comparable al que yo estaba sintiendo, nos habíamos hecho daño, mucho daño. Con pasos temblorosos me aleje de él, sabia que nada volvería nunca a ser igual, el dolor pasa, pero no se olvida.
Nada de lo que a mi alrededor sucedía me importaba, solo quería salir de allí para liberar el grito que pugnaba por salir de mi garganta. Busqué a mis padres con la mirada, allí estaban, corrí como una posesa a su encuentro y me abrace a ellos. Lagrimas silenciosas empañaban mis ojos, lo había perdido, en un instante había perdido aquello que mas me importaba.
A partir de ese día solo le veía cuando esporádicamente Ron lograba reunirnos, yo siempre esperaba esos encuentros con ilusión, con esperanza, con impaciencia, pero al verlo de nuevo todo volvía a mi mente, como si de una horrible pesadilla se tratara, tus ojos aun mostraban esa tristeza al mirarme, esa certeza de que el dolor seguía presente, y yo no sabia como enfrentarlo. De este modo una vez mas me refugie en el estudio. En apenas tres años acabe la carrera de sanadora. Ginny fue de gran ayuda, ingresó nada mas acabar Hogwarts, y a través de ella podía saber de ti, saber cosas que no me atrevía a preguntar a Ron, y mucho menos a ti.
Pero al finalizar los estudios ya nada me ataba a Londres, no quería ni podía recuperar la pasión que había sentido mucho tiempo atrás, la pasión que aun vivía en mi a través de los recuerdos, de las vivencias a través de los años, y soñaba con volver a verte, con recuperarte de nuevo, pero solo eran sueños. Pensé en mis contradicciones, en mi continua lucha interior, y decidí emplear todas mis fuerzas en ayudar a alguien. Recordé las noches a tu lado tejiendo gorros y bufandas mientras conversábamos animadamente, recordé tus ojos a la luz de las chispeantes llamas y en ese momento decidí que era hora de volver a lo que fue mi lucha, mi lucha en muchos sentidos. Recorrería Inglaterra, esparciría así la semilla de la revolución de los elfos, ese era el castigo y la recompensa, el castigo de recordarte, de recordar tus bromas, de recordar las esquivas caricias y halagos que nunca fructificaron, y así esperaba que también la recompensa llegase, necesitaba pensar que nos ocurrió, saber en que momento se enredaron los hilos del destino, cuando mi mundo y mi felicidad se tiñeron de rojo arrastrándote a ti en mi camino.
Y aquí sigo, en una lúgubre cabaña en medio de la nada, esperando que al fin mi cabeza y mi corazón trabajen al unísono, como siempre debieron estar. Esperando a que el futuro nos devuelva al camino.
De repente un suave aleteo la devolvió a la realidad, una lechuza blanca se acercaba a ella. El corazón le dio un vuelco, conocía a ese animal, era Hedwig, la lechuza de Harry.
Cuando llegó a ella la abrazo como si del mismo Harry se tratase. Unos minutos después, se dio cuenta de que traía un mensaje. Con las manos temblorosas desato el pergamino de la pata del ave. Con algo de miedo lo abrió, una fragancia familiar la embargó dejándola de nuevo sumida en sus recuerdos, como extrañaba ese aroma, como lo extrañaba. Dejo la carta sobre la mesa de su habitación sin leerla, y caminando como una autómata se metió en la ducha. Si, eso era exactamente lo que necesitaba, el agua caliente caía sobre ella, y una reconfortante sensación de tranquilidad la envolvió, logrando al fin que su mente empezase a trabajar. Nuevas dudas la asaltaron, y con paso decidido salió del baño dispuesta a resolverlas.
Hola Hermione;
Que tal estas? Hace meses que no se de ti, se que es algo que te resultara extraño pues tu y yo dejamos de tener contacto hace mucho mas tiempo, pero ahora tampoco escribes a Ginny. Estoy preocupado, tus continuos viajes por los confines de la isla y los nuevos ataques de mortifagos me hacen pensar que igual algo no anda bien, he dejado pasar demasiado tiempo hasta conseguir reunir el valor para hablarte, para explicarte la razón de mi ausencia en tu vida, y para que tu me expliques tu decisión de alejarte de mi, de nosotros. Creí que dejándote marchar lograría al menos que fueses feliz, aunque lejos de nuestro lado. Pero no puedo mas, necesito verte, tengo mucho que contarte, quiero tratar de recuperar ese "algo" especial que nos unía, que nos hacia inseparables, solo espero que tu también lo desees. Mandé a Hedwig a entregarte este mensaje, ella te encontrar� te extraña tanto como yo Herms, como todos, y no se ira de tu lado hasta que decidas contestarme, solo trata de que sea una respuesta afirmativa.
Muchos besos, Harry.
Ahi lo dejo, espero tomatazos, vociferadores y demas. Un muxu a todos, Netzach
