Avisos previos:
*Los personajes y la trama de "the Twilight saga" son propiedad de Stephenie Meyer
*La trama y los personajes de "Doña Bárbara" son propiedad de Rómulo Gallegos
*Inspirada en el tema "Can't be Tamed" de Miley Cyrus.
*Las canciones mencionadas pertenecen a sus respectivos autores
Mi Luz
Cap. 1: Cambios
El Eclipse, Valle de la Luna, 10 años atrás.
Como siempre, otra vez estábamos en una nueva ciudad por el trabajo de mi padre. No importaba cuánto tiempo lleváramos en un sitio, siempre terminábamos partiendo a otra ciudad o región.
Lo peor era que ahora viviríamos en una provincia campestre. No es que odiara el campo, pero sí odiaba mudarme.
Mi nana Esme y yo viviríamos en la casona después de la muerte de mis padres. Me había acostumbrado a disfrutar de la quietud de la naturaleza, la vista del valle, ver a los caballos trotar en los campos y salir a cabalgar de vez en cuando en mi querida Aura. Aura era la yegua que había recibido como regalo por mis 14 años; era blanca con unas manchas grises en sus patas. Estar con ella me hacía sentir que estaba con mi madre y me ayudaba a no sentirme tan sola.
Toda mi vida, mi alegría y mi optimismo se fueron por la borda esa fría noche cuando cumplí los catorce años.
Me quedé a ver el atardecer en la colina más cercana a casa y cabalgué lo más rápido posible al ver lo oscuro que estaba. En el camino, encontré una víbora que asustó a Aura, la cual me botó de su lomo. Al sentarme me vi rodeada de 5 hombres que me miraban fijamente. Me rodearon y no me dejaron vía de escape alguna. Estaba asustada y choqué contra un árbol. Ellos se acercaron más y sonrieron de una manera que me heló la sangre.
-miren, chicos. Es la damita del rancho. – dijo uno de ellos, mirándome fijo.
-trae un bonito vestido... pero estoy seguro que se ve mejor sin él – insinuó otro
-de-déjenme, por favor – supliqué en vano ya que me desnudaron
-ah, lo siento pero no podemos…- me taparon la boca y me ataron al árbol
Sin decir más, me violaron. Los cinco esperaron su turno. Cuando se aburrieron, se fueron. Esme me encontró tirada allí y me llevo a la casona.
-oh, mi pequeña.
-…- no recuerdo haber tenido el más mínimo pensamiento coherente luego de eso…
-Bella… ¿estás bien?
-…- la fulmine con la mirada - ¿¡Cómo crees que puedo estar bien! Asustaron a mi caballo, me arrinconaron, me desnudaron, me ATARON y se divirtieron a mi costa… esos desgraciados van a sufrir las consecuencias de lo que me hicieron…
-Bella… mi niña… no hables así...
-¿quieres que lo deje pasar?
-no digo eso… pero ¿no podrías ver otra forma de resolverlo?
-¿Crees que me voy a quedar como si nada? Ya van a ver quién es Isabella Swan… no los voy a dejar tranquilos, yo ya no soy una tonta como solía serlo… van a sufrir lo que yo sufrí y van a suplicar para que no los mate… pero luego van a suplicar que los deje en paz matándolos… pero si lo hacen, no voy a ser dulce ni piadosa con ellos… ¿querían diversión conmigo? Pues YO me voy a divertir matándolos… busca las armas de mi padre, necesito registrarlas para luego aprender a usarlas…
-¿vas a resolverlo todo con un arma? No caigas tan bajo
-yo era buena, pero ellos borraron esa carita buena de mi vida… ahora YO mando aquí…. Y al que no le guste o me desafíe, se va a llevar una linda balita… Esme, haz lo que te mando
-sí, querida.
Desde ese día, dejé de ser la misma chica y, según todos, me convertí en una desalmada fiera que nadie podía controlar.
No dejaría que mi amado valle se contaminara más de gente tan asquerosa como aquellos. Durante los siguientes diez años, me dedique a ubicar a cada uno de los idiotas que me habían dañado. La gente me temía y me respetaba porque sabían de lo que era capaz de hacer en caso de robos, violaciones y otros crímenes. Yo era la única autoridad luego de la muerte del dueño del rancho vecino al Eclipse, el Claro de Luna.
El señor Masen era viudo y tenía un hijo. Eran dos personas muy unidas y supe que su hijo era abogado, contando su amor por la justicia y por su rancho. Esto no me gustaba nada. El rancho y el valle eran mi vida y no me gustaba para nada la idea de que un niñito de ciudad se viniera a meter en mi territorio.
Con el tiempo, reuní a los mejores ayudantes y trabajadores para que el rancho funcionara perfectamente. Entre ellos, encontré al que sería mi mejor amigo y mi casi hermano. Jacob era mi fiel aliado en cuanto a la administración y el cuidado de los ganados. El personal del rancho estaba compuesto por Esme, mi mano derecha, los guardias Alec, Félix y Demetri Vulturi; Leah Clearwater, la veterinaria del pueblo, y principalmente de mi rancho, Jane, Renata, Gianna, Victoria – las encargadas del ganado – Rosalie Hale, mi abogada, y mis fieles peones; Sam Uley, Quil Ateara, Embry Call, Alec, Jane y Félix Vulturi y los hermanos Black; Rachel, Rebecca y Jacob.
Rosalie estaba en la ciudad en trámites con respecto a su familia y con respecto a la situación económica del rancho y del pueblo.
Mi madre era completamente diferente a mí. Cuando era joven, era una mujer fría y no se preocupaba por nadie que no era ella. Al conocer a mi padre, ella cambio y se volvió una mujer dulce, amable y muy atenta con la gente del pueblo. Al morir mi padre, ella me llevo con ella a la casa de su familia y viví con ellos. Al fallecer ella, mi madre ha sido mi fiel Esme. Ella y su familia me acogieron en su casa y me trataron como una más de ellos. Alice y Emmett eran cercanos al hijo del señor Masen, por lo que este estaba contando con ellos para que trabajasen con él en el futuro. La encargada de criar al chico era la señora Elizabeth, su tía.
Su padre había muerto en un accidente de avioneta, dejando a su único hijo solo en el mundo, al igual que a mí, pero mi vida era aún más dura que la suya sin mis padres.
Él había heredado su rancho y ya tenía su futuro asegurado en la Universidad. Yo aunque también tenía mi rancho, había sido ultrajada apenas había llegado al valle.
La gente de la ciudad no sabe lo que es la vida en la realidad. La ciudad tiene todas las comodidades para sobrevivir. La gente del valle hace todo lo que está a su alcance para sobrevivir y poder darle de comer a sus familias. Yo me había hecho respetar castigando a todos aquellos que desafiaban mi autoridad
Él, según sabia, llegaría pronto al valle… la gente que pensaba que yo lo recibiría feliz, estaba muy equivocada. El valle necesitaba a alguien firme y un abogado no era lo mejor para este lugar