Continuación de "Insomnio". Danny Phantom es propiedad de Butch Hartman, ésta historia es de mi autoría y sólo uso a los personajes para intentar entretenerlos :)
Y pues... me tardé por que no surgía la historia. Y bueno ha surgido de forma de drabble el primer chap. Aún no sé como va a terminar. Gracias a los que siguieron Insomnio y pues la simbología sigue igual.
Cursiva pensamientos, recuerdos y al inicio del cap, es como una enfatización de alguna parte del capítulo. "Entre comillas" recalcar alguna palabra, y negritas los títulos.
Bueno, a leer :)
¿Qué le pasó a mi hermana?
La veía ojerosa, cansada, siempre con sueño, taciturna y más irritable de lo normal. Algo no andaba bien con Jazz, y Danny lo quería averiguar.
Danny había bajado justo a tiempo para desayunar su cereal. Su padre se encontraba más entusiasmado con su nuevo "Ectotriturador de Fantasmas" que en los waffles verdes que le había servido su mujer.
— Danny, observa el nuevo Ectotriturador de Fantasmas Fenton — anunciaba su padre con emoción.
— Eh, papá ¿podría observarlo mejor de lejos, no crees?
— ¡Jack Fenton ¿Qué te he dicho de probar armas fantasmas cerca de nuestro hijo mitad fantasma?! —replicó Maddie.
— Lo siento Maddie; Danny, a veces me olvido de que eres fantasma— se disculpó, y decidió prestar atención a sus waffles.
Danny continuó con su cereal, desde que supieran su secreto al salvar el planeta, escenas como esas, eran habituales. Aunque a veces, sus padres lograban inventarle buenas armas para él.
No tuvo mucho tiempo para pensar en ello, pues su hermana llegaba a la cocina, sin mucho ánimo.
— ¡Oh cariño, buenos días! —saludó su madre.
— Buenos...— contestó desganada.
— Ya está el desayuno— continuó su madre— puedes servirte cereal, o waffles.
— Sí, gracias mamá.
Sus padres comenzaron a desayunar mientras conversaban sobre los nuevos inventos que harían, fuera para eliminar fantasmas o para que ayudaran a su hijo en sus cacerías de fantasmas. Aunque, desde que Danny y los fantasmas salvaron al planeta, los ataques fantasmas eran más una rutina amistosa entre Danny y los fantasmas, que un peligro para la humanidad. De cualquier modo, en esa charla, ya sólo existían Jack y Maddie.
Jazz decidió servirse sólo un vaso de leche.
— Hey, Jazz— le habló.
Jazz volteó a verlo sin contestarle.
— ¿Estás bien? — apenas lo susurró.
Jazz asintió y terminó su vaso de leche, se levantó de la mesa, lavó su vaso y se despidió de sus padres, aunque estos siguieron enfrascados en su conversación.
Danny no estuvo conforme con esa "respuesta", hacía tiempo que veía actuar raro a su hermana; para ser exactos, desde que se acercaran las fechas para que recibiera respuesta a las solicitudes que Jazz enviaba a las universidades en las que quería entrar.
Quizá fuera el estrés, sabía que su hermana había elegido ser neurocirujana, y como decían sus amigos, tenía que esforzarse más, a pesar de haber aprobado la prueba de aptitud. Tal vez se estuviera preocupando de más, pero no era normal verla tan desgastada cada día, casi podía asegurar que no dormía.
Jazz regresó a su habitación, y se tiró en la cama. Afortunadamente era fin de semana y fin de curso, ya no tenía que preocuparse por los exámenes o tareas. En realidad, la escuela había acabado para los de su grado desde que comenzaran a hacer las solicitudes para la universidad. Sólo debía esperar para que la entrevistaran, y deseaba con todo su corazón quedarse en Yale.
Apenas su cabeza tocó la almohada y sus párpados comenzaron a sentirse pesados. Se dejó llevar por el mundo de los sueños. En verdad lo necesitaba, sus noches de insomnio no habían terminado.
Danny decidió hablar con su hermana, aunque esto no fuera lo que normalmente haría. Pero la veía ojerosa, cansada, siempre con sueño y más irritable de lo normal. Algo no andaba bien con Jazz y lo quería averiguar; aunque al ver la puerta de su habitación entreabierta y encontrar a Jazz durmiendo, lo hizo elegir dejarla descansar y hablar con ella más tarde.
Entró volviéndose intangible y la tapó con una manta.
— Descansa Jazz.
Continuará...