¡Hola! Esta es mi primera historia de LOT y también mi primer Avalance. Y mi primer fic mujer / mujer. Y mi primer AU ... Muchas primeras veces jejeje. Espero les guste.

Obviamente no soy dueña de nada salvo la historia.

Será una historia de dos capítulos.

Sin mas, aquí está la historia.


Sara se dejó caer en su cama suspirando exageradamente. Miró el techo tratando de llegar a una solución a su problema ya que sus amigos, a los que acabó echando de su casa unos minutos antes, no habían sido de ayuda alguna.

Estirando la mano alcanzó su celular que estaba sobre su almohada celeste y lo tomó. Desbloqueó con la clave la pantalla sonrojándose al recordar cual había puesto hace relativamente poco tiempo. Por mucho que intentó pensar otra, la fecha del cumpleaños de esa chica no se movió de su cabeza y luego de olvidar las últimas 10 lo intentó. Como resultado no había necesitado la ayuda de Ray para desbloquear su teléfono desde entonces, ella era completamente incapaz de olvidar nada con referencia a ella.

Suspirando de nuevo se movió por la galería de imágenes hasta una foto que había tomado ese mismo día. Ava Sharpe aparecía sentada en el piso junto a los ventanales de la escuela leyendo un libro bañada con la luz del sol. Sara había pensado que parecía una diosa griega de las que habían hablado en su clase de historia con sus cabellos rubios brillando como oro ante la luz y sus ojos azules que encerraban los secretos del universo. Jamás había sido una persona de pensamientos como esos y la asustaba un poco el impacto que esta chica tenía en ella. No había podido impedirse tomar la foto y luego se pasó el resto del día sintiéndose una acosadora.

Ella era una persona segura y coqueta, siempre lo fue. Ella era la Lance que causaba problemas, que hacía frente a los adultos con respuestas engreídas o enojadas, que no había tenido nunca problema en guiñarle un ojo a un chico o chica de camino a sus castigos. La primera foto que había sacado de su ex novia la tomó de frente, básicamente sorprendiéndola antes de empezar a coquetear con ella y terminar con una cita programada para esa noche misma. Ahora se escondía en los rincones espiado como una niña asustada.

Ava había movido todo su mundo de cabeza y ahora estaba completamente enamorada. Y se sonrojaba... JAMÁS SE HABÍA SONRROJADO ASÍ DESDE SU FRACASO COMO PETER PAN. Sus amigos disfrutaban tanto con esta debilidad encontrada en su líder que apenas tenía un respiro.

Desde que Sharpe había llegado a la escuela a principio de año nada volvió a ser igual.

Se había mudado a la ciudad con su madre tras el divorcio de sus padres y había llegado a la preparatoria Starling con excelentes notas, un ejemplo de conducta y premios varios. Sus maestros se sorprendieron de sus capacidades y rápidamente se estableció como una alumna modelo. Podía competir en lo académico con Nate y Ray y no se dejaba amedrentar por las tonterías de Damien Darhk, lo que había impresionado a su hermana Nora con la que la joven Sharpe entabló amistad de inmediato. Nora Darhk detestaba a su hermano.

Sara no había prestado mucha atención a la chica, bueno a nada mas allá de su despampanante cuerpo al menos, hasta que se vieron enfrentadas en una situación. Ni siquiera era enfrentamiento, sino una Ava muy enojada gritando y ella escuchando con la cabeza agachada.

Ella y las Leyendas, como les gustaba llamarse a su grupo de amigos inadaptados, habían tratado de jugarle una broma un tanto pesada a Gary Green, el chico raro del curso. En retrospectiva, dejar que sus amigos planificaran una broma en ausencia de Amaya, que era la brújula moral del grupo había sido una mala idea porque las Legendas tendían a exagerar y de la mala manera. No lo pensó bien, lo tomó como una simple e inofensiva broma, pero no lo fue.

Cuando vio a Gary correr llorando supo de inmediato que debió parar esto antes. Habían hecho algo muy malo.

Fue durante el almuerzo de ese mismo día que Ava, con fuego en los ojos, los encaró frente a toda la escuela y les gritó lo inmaduros y pendejos que habían sido. En pocos minutos consiguió lo que ningún profesor había conseguido nunca, tener a las Legendas calladas, avergonzadas y arrepentidas de sus acciones. Sara había sentido doble vergüenza al notar que no solo sentía lo que sus compañeros en ese momento sino que sumado a eso un cosquilleo interno le advertía del peligro inminente. Ava Sharpe era más que una cara bonita y ella tenía muchas posibilidades de caer vencida ante eso.

El descenso desde allí fue inevitable.

Ella misma había ido a disculparse ante Gary esa tarde antes de abandonar la escuela. Lo hizo de forma pública, cuando los pasillos estaban abarrotados de adolescente y todos podían verlos. Gary siendo el chico bueno y dulce que era había aceptado de inmediato su disculpa y había olvidado todo con una sonrisa. Eso le había valido una oportunidad de acercarse a Ava que había visto todo desde la puerta.

Unos minutos más tarde cuando Sara se dirigía a su auto mientras escribía al resto de las Legendas para instarlos a disculparse con Gary, notó que el auto de Ava estaba aparcado junto al suyo y que su dueña estaba sentada a punto de salir. "Quizás no seas la cretina que pensé, Lance" habían sido las únicas palabras que dejó salir antes de alejarse en su vehículo. Sara había suspirado por primera vez por esta chica y se había propuesto demostrarle que más había en ella, que valía la pena conocerla.

No creyó que este camino la llevara a su situación actual pero así fue. Acercarse a Ava había mostrado no solo lo que ella podía ofrecer sino que había abierto a los ojos de Sara todo lo que la otra chica también podía ser. Habían salido mucho juntos ambos grupos aun mas desde que Nora y Ray habían formalizado su relación, por decirlo de alguna forma. Ellas se habían acercado demasiado y cuando vio a la otra chica empujar a Damien a la fuente del centro comercial luego de que insultara a Ray fue el momento en que se dio cuenta de cuan enamora estaba de la muchacha. Esa misma noche lo había confesado a su hermana Lauren que no había parado de reírse de ella por horas.

Y aquí estaba, llegando al final del año escolar, con el baile a la vuelta de la esquina y ella sin encontrar la forma de invitarla como su pareja. Ella sabía que a Ava le gustaban las chicas y que había notado la creciente tensión entre ambas. A Sara la asustaba no estar a la altura, no poder mostrarle a la chica de sus sueños lo seria que era y lo importante que era ella. Quería mostrar que esto era algo único, maravilloso y que ella no era otra de su lista, era especial. Demostrar que movería cielo y tierra por ella.

Sus amigos habían venido para ayudarla con eso pero no sirvieron de mucho. Mientras los muchachos tiraban ideas, una más ridícula que la otras, Zari peleaba con Charly por cada cosa y Amaya descartaba con muy buenas justificaciones sus propios planes. Frustrada por todo comenzó a molestarse cuando Nate y Mick desviaron la conversación para burlarse de ella y su desesperación. Veinte minutos después todos eran echados de su casa a los gritos y con un portazo que retumbó por toda la cuadras. La sorpresa en la cara de la mayoría solo era superada por las muecas de decepción y disgusto que tanto Zari como Amaya les daban al resto.

Ahora, una hora después aun no sabía qué hacer. Molesta y sintiéndose perdida se levantó, salió de su casa y se dirigió a su cafetería favorita.

La "Waverider", como había nombrado el dueño a la cafetería, se había convertido en la guarida de su grupo por la preferencia de varios de ellos a la ciencia ficción y a los superhéroes. Rip Hunter, el dueño, había diseñado todo para que pareciese una nave del tiempo y tenía carteles, señales y hasta los menús con temas de superhéroes. Además Gídeon, la mesera principal, era la mejor a la hora de escuchar y aconsejar. Ella era la razón por la que Sara había ido en primer lugar.

"Buenos días señorita Lance" había sido el saludo de Gídeon, acompañado de una sonrisa cuando Sara se sentó en la barra. La rubia suspiró exageradamente antes de asentar la frente con parsimonia en la lustrosa madera ante ella. La mujer se rió de su dramatismo y se asentó esperando a que la más joven hablara.

"Sálvame, por favor Gídeon, sálvame" rogó sin levantar la cabeza. Un gemido de sufrimiento poco característico de la líder de las Leyendas se escuchó tras la súplica. Gídeon sonrió tratando de no reírse de la pobre niña.

"¿Aun no has resuelto que hacer?" preguntó, ya a sabiendas de cual había sido el tema constante de Sara en el último mes. La pobre parecía ya rayar la desesperación. "Vamos, dime cual es el problema."

Sara levantó la vista y suspiró. "No consigo pensar en cómo invitarla"

"Solo ve y hazlo Sara, solo pregunta" le sugirió Gídeon mirándola con simpatía. Ella había observado las interacciones entre las dos niñas y estaba segura de que Ava respondería con un si de inmediato.

"No es tan simple, ella no es como cualquier chica o chico con quien saliera antes, es especial y quiero que entienda eso" espetó alterada Sara. Ella quería más que una noche con Ava, quería una relación real, algo duradero.

Gídeon sonrió aun mas mirando a la oven con ternura la cual se sonrojó ante esto. Sara cerró los ojos y gimió internamente ante lo que Ava había hecho con ella.

"Bueno señorita Lance, en este momento no creo que nadie conozca a la señorita Sharpe mejor que usted. Sabes que hacer, solo no te acobardes ni te lleves por lo que los otros dicen. Sabes lo que quieres. Ve y consíguelo".

Las palabras de Gídeon se hundieron lentamente en la mente de Sara. Antes de darse cuenta una sonrisa se formó en su rostro y se levantó de un salto. "Tú eres una genio. Rip no te paga lo suficiente" dijo antes de voltear y correr fuera del local. Gídeon rió por el comentario y procedió a limpiar la barra.

La cabeza de Sara volvió a asomarse por la puerta. "Gracias, serás la primera en saber cómo me fue" y antes de que Gídeon pudiese responder ya se había ido de nuevo.

"Como si eso fuera una sorpresa" exclamó la mujer sonriendo feliz por la muchacha.


- / Lyrio / -

Edit: sin querer tenía el traductor de google activado al subir la historia lo que modificó y hasta borró varias líneas sin que lo notara.

Espero se corrija ahora.