La dama del bosque de Alacuervo

Prologo

Existe un lugar en el que, según narran antiguas leyendas relatadas por los ancianos, nadie en su sano juicio debe entrar. Espíritus o humanos; maestros o no maestros; animales salvajes o domesticados… no importa, si te adentras en él, nunca podrás regresar. Porque nadie, ni siquiera el Avatar, ha logrado volver jamás.

Este diabólico lugar es llamado el bosque de Alacuervo, porque la oscuridad impenetrable que reina en él, nacida bajo las ramas de sus retorcidos y tupidos arboles, provocan una noche eterna sin estrellas, solo comparable con la negrura de las alas de este pájaro de mal agüero; porque la maldad que este bosque rezuma parece venir del mismo infierno.

Entre las muchas leyendas que se cuentan sobre este bosque maldito, existen varias muy conocidas.

Una relata la desaparición de una partida de caza de la Nación del Fuego, compuesta por veinte hombres, maestros y no maestros; cuarenta animales de presa y veinticinco bestias de carga, que se adentraron en el maligno bosque, para no regresar jamás. Cuenta que fueron presa de los demonios que allí habitan y que sus almas vagan por el bosque, tratando de escapar de los terribles tormentos que sufren.

Otra leyenda narra como el Avatar, en una de sus primeras reencarnaciones, se atrevió a entrar para salvar a un campesino y su hijo, los cuales habían entrado a buscar leña. Nunca se supo mas de ellos. Y, aunque se sabe que este avatar existió, ninguna de las reencarnaciones siguientes guardan algún recuerdo de esa vida pasada. También se cuenta que el siguiente Avatar nació una década después de la desaparición del otro, como si su alma hubiera estado atrapada en alguna parte, sin poder escapar.

Sin embargo, la leyenda más antigua que existe sobre el bosque de Alacuervo es una de las menos conocidas, pero también la más extraña y misteriosa de todas ellas.

Dice esta leyenda que en una noche sin luna ni estrellas, una luz plateada apareció en una de las lindes del bosque. Unos jóvenes, queriendo saber su procedencia, se acercaron al lugar para investigar la extraña luz. Hasta la mañana siguiente nadie supo de ellos y cuando al fin los encontraron, todos parecían haber perdido la cabeza. Tan solo uno parecía lo bastante cuerdo para hablar, por lo que le pidieron que les relatara lo ocurrido.

Él les contó como fueron hacia aquella luz plateada y lo que habían visto. Todos esperaban un espíritu o alguien gastando una broma, pero no era nada de eso. La luz brotaba de una joven de apariencia frágil que miraba hacia el bosque con una expresión vacía. Aquella doncella les pareció el ser más hermoso que ninguno de ellos había visto jamás: su rostro parecía de porcelana, adornado con unos rasgos dulces e infantiles; su fino cabello se asemejaba a hilos de plata pura; plateado era también su vestido, que se ceñía de los hombros a la cintura y caía suelto y liviano hacia abajo, cubriendo sus pies, pero otorgándole un aspecto celestial, y sus ojos que tenían un bello brillo argentino.

Todo en ella era perfecto, hasta que los vio.

Sus finos labios mostraron una sonrisa diabólica, mientras que sus ojos brillantes se tornaban tan oscuros como el bosque en el que se hallaban. Ese rostro tan bello, de rasgos infantiles y delicados, mostraba una mueca de maldad absoluta. Él les contó como en ese instante el terror los invadió y echaron a correr hacia fuera del bosque, pero lo que antes eran unos pocos metros, parecían entonces kilómetros.

Mientras huían escucharon la hermosa voz de la doncella, que cantaba una macabra canción que solo hizo crecer su miedo y pánico. Relató como las ramas parecían garras tratando de atraparles, como la macabra canción se les clavaba en el corazón como un puñal e intoxicaba su mente como el peor de los venenos. Lo último que el joven recordaba era el rostro de la hermosa y diabólica doncella, su macabra sonrisa y sus negros ojos.

La leyenda dice que todos los jóvenes que estuvieron en el bosque enfermaron y murieron pocos días más tarde, entre gritos de horror y agonía.

Nadie sabe quien era esa doncella. Algunos dicen que es un alma perdida y corrupta; otros dicen que es un monstruo que cobra forma humana para atraer y atrapar a sus victimas; que es un demonio; la muerte personificada. Muchas hipótesis, pero aún no se sabe nada de ella, salvo que, cuando aparece, causa la locura y la muerte a aquellos que la contemplan.

Sin embargo, las últimas palabras que brotaron de los labios del joven de la leyenda le dan a este diabólico ser su nombre más conocido: La Dama de Alacuervo.


Me gustaría agradecerle a Marianita-Chan que me ayudara como beta en este proyecto :D Sin ella no me habría quedado así de bien ni de broma.

Un saludo,

Violeta del cielo