Stranger Things ni sus personajes me pertenecen, sólo los tomo para divertirme un rato.

Ni un solo murmullo se escuchaba en el Camaro azul, Steve manejaba a una velocidad normal, no había de que preocuparse.

Dustin dormitaba en el asiento del copiloto, Max y Lucas se miraban cada tanto, y Mike se retorcía de los nervios, necesitaba ver que Eleven estaba bien, que no había desaparecido otra vez.

Llegaron a casa de los Byers primeros, un Billy todavía mareado por el sedante intentaba salir por la puerta. Max se bajó sin dudar del auto apenas frenó y caminó con decisión hacía su hermanastro.

Los chicos la observaron hablarle con un tono autoritario al chico que asentía, sólo quería que se callara.

-Todo bien?- dijo Steve acercándose a la chica pelirroja.

-Iremos a casa, nuestros padres deben estar preocupados- Max se giró a los chicos- Tengo un plan, todo estará bien, en cuanto hable con mis padres los llamaré.

Lucas le escribió el número de la casa Byers mientras que Dustin ponía en teléfono de vuelta en su lugar.

Se despidieron de la chica, que tomó de vuelta el volante y se fue con su hermano dormido en el asiento trasero.

-Esa niña es increíble- admitió Steve y los chicos asintieron- Bueno creo que la señora Byers necesitará ayuda con su casa.

Se pusieron a ordenar mientras esperaban que los demás llegarán. Mike retiró todos los dibujos de las paredes, sabía que a Will no le gustaría verlos.

-Dustin, qué haces?- preguntó Lucas mirándolo.

-Estoy alimentándome, acabo de salir de unos túneles con demo-dogos asesinos y D'art ha muerto, déjame en paz- le contestó para luego seguir masticando la barra de chocolate.

Unas luces iluminaron la estancia y fue Mike el primero en salir al patio, se sintió decepcionado al no encontrar la camioneta de Hopper pero aún así corrió al auto.

-Él esta bien!- gritó Jonathan quien cargaba a su hermano débil en brazos- Sólo tiene que descansar.

-Mike…- Will estiró su mano y Mike la tomó- Ya no esta.

-No, no más- Mike sonrió a su amigo- Todo irá mejor ahora, es una promesa.

Will sonrió y le pidió a su hermano entrar ya que sentía frío. Nancy abrazó a su hermano de improvisto, el chico se desconcertó.

-Por qué me abrazas?

-No puedo hacerlo? Pude haberte perdido esta noche, grandísimo idiota!- Mike rió y le devolvió el abrazo- Tienes que llamar a mamá y decirle que te quedas aquí una noche más, que Will te necesita.

Mientras que el chico realizaba la llamada, Joyce le agradecía a los chicos por la ayuda y le daba las llaves de su auto a Steve para que pueda volver a casa y llevar a Nancy también.

-Nosotros nos quedaremos, señora Byers!- dijeron Lucas y Dustin, la mujer ni pudo oponerse, su hijo necesitaba a sus amigos.

-Llenaré las tres cajas mamá, Will esta un poco triste y me quedaré con él, mañana es sábado y estaré en casa para el almuerzo lo prometo, okay… También te quiero, adiós- Mike colgó el teléfono y se giró a su hermana- Dijo algo de que estaba esperando que llegues pronto, así que es mejor que vayas a casa.

-Lo haré- despeino el cabello de su hermano- Mándale mis saludos Jonathan, y a tu chica cuando la veas.

Dustin y Lucas comenzaron a reírse, Joyce sonrió mientras acomodaba unos libros, el chico se había puesto tan sonrojado.

-Quién es esa chica y como mató a los demo-dogos?

-Es una larga historia- dijo Nancy empujando a Steve a la puerta- Te la contaré en el auto.

El silencio reino en la casa, sólo se escuchaban los murmullos de Will y Jonathan en el baño, su hermano lo ayudaba a sostenerse en la ducha porque aún se encontraba débil.

-Haré unos sándwiches para todos, deben estar hambrientos y descongelaré unos Eggos para cuando llegué Eleven- Joyce se levantó del sillón hacía la cocina pero Dustin fue más rápido-.

-No querrá abrir ese congelador!- dijo apoyándose en la puerta.

-Dustin, qué?

-Material científico, un demo-dogo… Mañana lo llevaré a mi casa, sólo no abra la puerta- Joyce asintió confundida.

-Los Eggos están abajo, los guarde antes que Dustin los arrojara por ahí- dijo Mike desde su posición en la ventana, trataba de sintonizar su radio con el canal que el jefe había mencionado hace unas horas, cuando logró hacerlo habló- Jefe? Esta allí? Están bien?

Esperó unos minutos y no había respuesta, Lucas se sentó a su lado y buscaron una mejor señal, para ver si el jefe contestaba.

-Jefe?

-Oye, niño… Ella esta bien… Vamos en camino.

Mike sintió que volvía a respirar, cerró los ojos y pudo permitirse unos minutos de paz, escuchó a Dustin y Lucas murmurando pero los ignoró, sólo quería que ella llegará ya. Todavía no podía creer que la hubiera tenido tan cerca todo este tiempo, la creía en el Upside Down o muerta. Un temblor le recorrió el cuerpo ante pensar en esa posibilidad, sí la volvía a perder, no lo soportaría.

-Mike?- la voz de su amigo lo despertó, Will estaba frente a él, todavía un poco pálido y en pijamas- Mamá preparó comida.

-Si, vamos muero de hambre- Mike abrazó a su amigo y fueron a la mesa.

Los amigos narraron a Will toda la situación en los túneles, con ruidos y gritos, las risas se contagiaron hasta Jonathan y Joyce que los observaban apoyados en la mesada. Era increíble la capacidad de esos niños de transformar esa situación del terror en una aventura de niños.

-No estábamos locos- dijo Mike a Will, este lo miró confundido- Tus visiones eran ciertas y lo de Eleven, era verdad.

-Eleven esta aquí?- Will miró a su madre que le asintió.

-Ella logró cerrar el portal, Hop me lo dijo por radio- contestó Jonathan.

-Esta bien? No desapareció otra vez?

Las preguntas fueron contestadas al abrirse la puerta en ese momento, el jefe Hopper llevaba a una niña aferrada a su brazo, tenía sangre seca en su nariz y parecía muy cansada, aunque sonrió al verlos.

-El!- Mike corrió a su encuentro, Hop se apartó, no había caso con ese niño.

Eleven respondió el abrazo con todas sus fuerzas, que aún le quedaban. La chica se había vuelto a equivocar, su hogar no era con sus amigos, era egoísta pero su lugar era con Mike y en ese momento lo había entendido, no sabía que palabras ponerle porque no sabía como se llamaba aquello que sentía en todo el cuerpo al tener a Mike con ella, pero no quería dejar de sentirlo nunca.

-Bueno- Hop se aclaró su garganta luego de ver a los niños abrazados por unos minutos- Creo que es hora de que algunos se conozcan formalmente.

Eleven se separó de Mike sonriendo y miro al chico de ojos claros que se apoyaba en la mesa, tenía unos ojos muy lindos.

Will se sorprendió, los chicos la habían descrito de otra manera, cabeza rapada, muy bajita, algo así como una niña que había padecido cáncer y que llevaba las ropas de Mike, la chica allí era todo lo contrario. Tenía el cabello un poco más largo hasta el cuello y aplastado, con una sombra negra en los ojos, mirada feroz y tierna a la vez, y sus ropas parecía de una chica rockera, como las chicas que escuchaban a The Clash.

-Hola Will.

-Hola Eleven- Will sonrió- Estas bien?

-Un poco cansada, pero bien.

-Quieres eggos?- preguntó Mike y la chica asintió energéticamente.

Lucas trajo la silla de la habitación de Will e hicieron espacio para que Eleven se siente con ellos. Mientras los adultos charlaban en la sala, el grupo de amigos habló de todo lo sucedido en ese año, Eleven reía ante las anécdotas. Ella les contó de la salida del Upside Down, su tiempo en el bosque y de su hogar con Hopper, de como escapó a buscar a su madre y terminó conociendo a una hermana.

-Fuiste sola a la ciudad? Eso es peligroso!

-Lucas, ella tiene superpoderes!- le replico Dustin.

Mike no podía creer que esa chica a su lado era la niña que había encontrado en el bosque hace casi un año, era diferente pero cuando la vio a los ojos hace unas horas, Eleven seguía allí. Ahora la veía conversar con Will, algo que nunca hubiera creído posible en ese año.

-Hop y Eleven se quedarán esta noche, así que pido tranquilidad ya que somos demasiados- dijo Joyce- Todos tomarán una ducha, se pondrán de las pijamas que dejan aquí en sus reuniones y me darán sus ropas para lavar, quién es el primero?

Lucas saltó en su asiento y corrió a la habitación de Will por su pijama y se encerró en el baño, moría por una ducha y quitarse todo ese olor al Upside Down.

-Iré a casa por algo de tus cosas para que te cambies y ver como esta todo por la estación- dijo Hop a El que asintió- Volveré en cuanto pueda.

Mike había quedado en la cocina con la chica, Lucas ya estaba con Will durmiendo, Dustin en la ducha, Joyce y Jonathan enterrando a los demo-dogos que estaban afuera.

-Así que me escuchaste todo este tiempo?- Eleven asintió- Yo creí que…

-Lo sé, pero no podía decir nada, los malos escuchan.

Mike comprendió lo último, había sospechado de micrófonos en su casa, había sido tan estúpido de tratar de contactar con ella desde su casa.

-Tal vez si lo hacía desde el bosque…

-No hubiera contestado- el chico alzó una ceja- Le prometí a Hopper que no contactaría nunca, hasta que no sea seguro.

-Entonces ahora tampoco podremos vernos? Haré lo que diga el jefe, al pie de la letra, lo juro.

-Una concesión?

-Mmm si algo así.

Eleven se rasco debajo de la nariz, la sangre seca le molestaba y el chico lo notó, fue por un paño húmedo y con la mirada le preguntó si podía limpiarle, ella asintió.

-Sangraste mucho, te sientes bien?

-Cansada, pero estaré bien- Mike limpió algunas manchas de su rostro y ella le observaba con cariño- La chica?

-Qué chica?

-La de cabello rojo, se fue?

-Maxine, se fue a su casa- Mike hizo una mueca- La conociste?

-Preferí ir a abrazar a Joyce.

-Así que no te cae bien? A mi tampoco.

-Los amigos no mienten, Mike.

-No estoy mintiendo- se quejó el chico.

-Los vi en el gimnasio de la escuela- admitió Eleven con vergüenza- Tú le sonreías y la ayudaste a levantarse del suelo.

Mike sabía que ella estuvo ahí, la explicación de Max le había parecido extraña e igual a la de Lucas cuando sintió como Eleven lo empujó.

-Fuiste tú! Lo sabía- el chico sonrió y le tomó la mano- Creí que estaba loco… Le sonreía porque estaba siendo ridícula, yo estaba enojado porque Dustin y Lucas la habían incluido en nuestro grupo y ella buscaba mi aceptación, la ayude por instinto… Por qué la empujaste? Por qué fuiste a la escuela?

-Ella podía estar contigo y yo no- el chico se sonrojo y ella sonrió- Fui porque quería verte, te escuché muy triste los últimos días y me escapé de casa, fue estúpido, Hop me castigó.

- Él te cuida? Es bueno contigo?

Eleven le contó de Jim, aquella parte que nadie conocía, el hombre que parecía ser estricto pero no era más que un oso de felpa gigante. Como la había cuidado los primeros días juntos cuando ella no tenía fuerzas y lloraba siempre, como le enseñaba cosas nuevas cada día, las tres reglas y el código morse.

-Es como un papá, verdad?

-Papá? Él no es como Papá- negó la chica.

-Papá como los demás, uno que te quiere y vela por tu seguridad- Mike suspiro pensando en que él querría un padre así- No como tu verdadero papá.

-Oh, entiendo, es como un segundo papá, mejor.

Dustin apareció en la cocina ya en su pijama de Cazafantasmas, le señaló a Mike que ya era su turno de una ducha y deseando buenas noches se fue al cuarto de Will.

-Estarás bien aquí?- preguntó el chico- Puedo llamar a Joyce para que esté contigo.

-Estaré bien.

Eleven sonrió, Mike acaricio su pelo y rió.

-Tienes gel, como el que usan los hombres, como es tu cabello natural?

-Rebelde!

-Mmm okay- rió el chico junto a ella- Ya veremos como es.

En cuanto Mike se metió en el baño, Eleven fue a la sala de la casa Byers, a pesar de estar desordenada le parecía un lugar acogedor, como la cabaña donde vivía con Hopper, había muchas fotos, parecía que Will ni su hermano mayor, Jonathan, tenían un papá, ya que sólo había fotos de quienes ella conocía. También otras vio a Will de más pequeño con otro niño, Eleven sonrió al reconocer a Mike, en una estaban recostados en el suelo dibujando con crayolas, había otras fotos de a medida que iban creciendo donde aparecían Dustin y Lucas.

Algo acaparó su atención, era una televisión, había extrañado tanto ver la suya, ni dudo en encenderla, aunque sólo le apareció una imagen de Dustin, Lucas y Mike con disfraces, como los de la película que promocionaban en la televisión. Vio que el televisor estaba conectado por cables a una maquina rara con botones, comenzó a tocarlos hasta que la imagen de los chicos comenzó a moverse. Los veía y escuchaba, la chica se alegró de escuchar a sus amigos divertirse, pidiendo dulces como ella quería hacerlo, se asustó ante el grito de los chicos cuando apareció alguien con una máscara, era la chica Max.

Tal vez había actuado mal al tirarla de la cosa de ruedas, también cuando la chica la saludó, debería pedir perdón pero no sabía como ni cuando, lo haría alguna vez.

Siguió mirando el vídeo, Mike estaba enfadado, tenía esa voz que escuchaba los últimos días que lo vio en su mente, era tristeza. Will había quedado sólo y gente disfrazada lo asustaba, hasta que el vídeo se pierde y queda en el suelo, Will llamando a Mike y ahí lo ve, en el cielo.

El Mind Flayer como los chicos lo llamaron, se notaba en el vídeo, la piel se le erizo a Eleven. Hace unas horas había sentido el odio que ese ser poseía, el enfado que tenía al saberse derrotado por culpa de ella al cerrar el portal a esta dimensión.

Apagó la televisión y caminó a la puerta de la casa, quería olvidarse de ese ser para siempre, no quería que lastime más a Will ni a ninguna de las personas que ella conocía. Abrió la puerta y se encontró con Hopper y Joyce charlando.

-Llegaste… Esta todo bien?

-Claro, niña- rodeo los hombros de la niña cuando se acercó a ellos- Las personas llegaron al laboratorio, el doctor esta en el hospital siendo atendido, dicen que no es muy grave.

-Mis cosas?

-Oh si- le entrega una mochila azul que había visto en la cabaña- Esta todo allí.

-El cariño, entra antes que Mike coja gripe por culpa de llevar el pelo mojado en este frío- le dijo Joyce al ver al chico en el porche a unos metros de ellos, en pijama y cabello goteando. La chica asintió y camino a la casa.

-Tendrás gripe, Mike.

-Me asusté al no encontrarte- susurró el chico al entrar de nuevo a la casa.

Eleven dejó la mochila en el suelo y lo tomó de las manos, como lo había echo hace unas horas antes de cerrar el portal. Sabía que él necesitaba esto más que ella, saber que era real, había escuchado a Will decirle a Joyce que Mike había estado muy deprimido esos meses, porque la había perdido. Eleven había aprendido que era la depresión, lo escuchó en la televisión y Hopper le explicó lo que significaba, era algo que ella misma había sentido un tiempo, pero tuvo a Hopper a tiempo para que no sea peor, él la ayudó a distraerse y no caer en pensamientos feos ni tristes, le entendía su dolor aunque no le contará, y sus abrazos la reconfortaban aunque el dolor disminuía un poco. Mike no le había hablado a nadie, excepto a ella por el radio y tal vez a Will, pero los demás lo veían como una etapa rebelde de adolescente, nadie vio lo realmente mal que la pasaba el chico.

-No me iré a ningún lado, es una promesa… Todo irá bien.

-Lo sé es que…- él chico resoplo sin poder explicarle a Eleven todo lo que sentía, el temor a perderla.

-Lo entiendo, no necesito que me lo expliques, Mike- lo soltó para abrazarlo, Mike la abrazo con fuerza y apoyó su mentón en la cabeza de la chica, cerró los ojos y disfruto el momento al fin a solas que tenían, sin nadie mirando- Iré a bañarme, es demasiado tarde y tengo sueño.

-Oh, de acuerdo… Te veré en la habitación- Mike la dejo ir y fue a la habitación de Will, los chicos ya se encontraban durmiendo, Dustin roncaba como de costumbre. Sólo había una bolsa de dormir y unas cuantas mantas más, era una noche de bastante frío y él no permitiría que Eleven pasara frío. Ya que su bolsa era lo bastante grande para ambos, abrió el cierre por completo, improviso con las mantas un colchón y trajo de la sala unos almohadones, era lo mejor que podía hacer.

Cuando Eleven salió del cuarto de baño, Hopper estaba apoyado en la pared esperando a su salida, le dio una pequeña sonrisa.

-Se fue la chica de MTV?

-No más alucinante- se encogió de hombros, no le molestaba volver a ser normal, todo lo que podía ser, su pijama blanca le traía recuerdos de la cabaña- Nos iremos temprano?

-Nos quedaremos en el desayuno, tenemos que hablar de unos asuntos…

-Mike- el jefe asintió- Lo podré ver más seguido? Y a los demás?

-Ahora es muy tarde, lo negociaremos después de café y eggos, de acuerdo?

-Esta bien, buenas noches- se paró enfrente de su ahora papá, esperaba su beso en la frente, como en las anteriores noches.

-Buenas noches, niña- le beso la frente sonriendo y acariciándole el cabello- No te madrugues con Wheeler, de acuerdo? Estaré durmiendo en el sofá.

La chica asintió y entro al cuarto, Mike estaba sentado con la espalda apoyada en un armario y con un Yoda entre sus manos, le sonrió al verla y le pasó la figura de acción.

-Yoda- le susurró y él asintió- He visto las películas en la televisión... Mike? Tengo sueño.

-Oh sí!- susurró y se levantó para correr la bolsa de dormir- He preparado esta especie de cama para ambos, te molesta si duermo contigo? Debería haberte preguntado.

-No, vamos a dormir…

Se acomodaron entre las mantas y quedaron mirándose frente a frente.

-Mike?- el chico asintió en su dirección- No fui al baile de invierno.

-No te preocupes, yo tampoco, ninguno de nosotros fue, El… El señor Clarke comenzó a hablar del próximo baile.

-Oh, podremos ir a ese?

-Si Hopper te permite ir, podemos.

-En los bailes se usan vestidos, verdad?- la chica lo había leído en uno de los libros que encontró en la cabaña, eran unos cuentos de princesas.

-Tradicionalmente si y los chicos trajes, o al menos algo formal- Mike sonrió- Nancy podría ayudarte con el vestido o lo que necesites, le gustan los bailes.

-Esta bien, le preguntaré a Hopper si podemos ir.

Se sonrieron una vez más, Mike cerró los ojos y trató que su respiración se normalizara. Eleven a pesar del cansancio no podía cerrar los ojos, tenía a el chico tan cerca y observaba lo mucho que había cambiado en ese año. Lo veía en su mente pero ahora podía ver bien como sus rasgos estaban más definidos, hace unas horas le había sorprendido la altura, le llegaba al cuello y tenía que ponerse de puntitas para abrazarlo bien, hasta su voz había cambiado, ya no era la de un niño. Mike comenzó a roncar suavemente e hizo que ella sonriera, tomó la mano que el chico tenía apoyada en la almohada y cerró los ojos, durmiéndose al compás de los ronquidos de sus amigos.

Fue la última en dormirse y la primera en despertar, se peino el cabello con las manos y observó a los chicos dormir, Will tenía mejor pinta y a Dustin se le caía la baba por la comisura de los labios. Se levantó tratando de evitar hacer ruido, después de un momento en el baño fue a la cocina, donde Joyce y Nancy hablaban en susurros.

-Buen día, estás mejor, cariño?- asintió en dirección a Joyce y le sonrió a Nancy, esta le devolvió la sonrisa- Quieres desayunar?

-Esperaré a los chicos- miró a la sala y se encontró el sofá vacío- Y Jim?

-Fue de compras, somos muchos para desayunar- dijo Joyce- Iba a ir en su lugar pero dijo que se las arreglaría sólo, es bueno en eso?

-Mmm algo así- sonrió y les contó lo que comían diariamente. Joyce se alarmó al saber la chatarra que comían, le prometió que le enseñaría algo de cocina a Hop y ella.

-Mike se durmió tarde? Le prometí a mamá que lo llevaría para el mediodía y faltan dos horas.

-Un poco sí- respondió ella- Hablamos un poco antes de dormir.

Joyce en ese momento se levantó para ir a ayudar a Hopper que recién estaba estacionando la camioneta, Nancy jugó con su taza de café un poco.

-Fue difícil?- preguntó la hermana de Mike- Digo, ver a Mike siempre y no poder decirle nada.

-Muy difícil, discutí muchas veces con Jim por eso… Nancy?

- Si, Eleven?

-Con Mike intentaremos ir al baile de invierno, si Jim lo permite, Mike dijo que podrías ayudarme.

-Oh con el vestido y maquillaje? Si, claro! Mientras que Hopper lo permita.

Nancy le contó sobre una tienda de la ciudad que vendería los vestidos para el baile en un mes. Le prometió que le prestaría de su maquillaje, y que además, le daría la ropa que ella usaba hace unos años y estaba guardada en perfecto estado en el sótano de su casa, le dijo que no podía seguir usando toda esa ropa grande que Hopper le había conseguido.

Joyce y Jim entraron con varias bolsas, con ayuda de ambas chicas comenzaron a preparar el desayuno, Eleven preparó el café que Jim le había enseñado a hacer y Nancy puso en la mesa tazas de leche caliente para todos. Las sillas se amontonaban una a la otra alrededor de la mesa del comedor y había comida para un gran batallón.

Cuando Jonathan se levantó, se acomodó en la mesa junto a Nancy compartiendo una sonrisa cómplice que Eleven no ignoro.

-Will! Vamos tienen que despertarse todos! – fue el grito de la señora de la casa y Hopper rió con su apreciada taza de café en mano- Qué?

-Esos niños no durmieron nada, pretendes despertarlos con un solo grito?

-Iré por ellos- dijo Eleven dejando el Eggo que estaba por comer.

Los chicos estaban como la última vez que los vio, fue primero por Mike, le sacudió el hombro, que no tardo más de unos segundos en abrir los ojos.

-El? Qué sucede?

-El desayuno esta listo.

-Oh genial! Muero de hambre- se sentó en la cama improvisada y bostezo- Despierta a Will, yo me encargo de estos dos.

-Esta bien- iba a levantarse cuando Mike la llamo de vuelta- Si?

-Tu cabello es lindo, tiene rulos, rebelde.

-Eso fue lo que dije- le sonrió y fue a por Will, a este no le costo mucho despertarlo, sólo decir su nombre.

El chico le sonrió dándole los buenos días, sus ojos estaban brillosos, como en las fotos que había visto anoche, eso le causo una gran felicidad a Eleven.

-Santísima mierda, Mike!- chilló Lucas que aplastó un brazo de Dustin al levantarse.

-Lucas!

Eleven dio por finalizada su tarea y volvió al comedor, dejando a los chicos peleando como de costumbre.

-Cómo puedes tenerlos todos juntos una vez por semana?- le preguntó Hopper a Joyce cuando al fin todos estaban en la mesa y discutían por el desayuno.

- Adoro a estos niños con todo mi corazón, Jim- la mujer le sonrió bebiendo su café y mirando a los chicos con ternura.

Eleven reía entre Mike y Will, quienes disputaban quien era un mejor interpretador de Yoda, Dustin y Lucas hacían de jurado, Jonathan y Nancy compartían una charla en susurros. Era como si los días anteriores nunca hubieran sucedido, como si Eleven nunca hubiera desaparecido ni Will siendo poseído por una entidad maligna.

-La cabaña ha quedado muy destruida?- preguntó Joyce a Jim.

-Nada muy complejo que El y yo nos podamos encargar, ya pudimos una vez, cierto?- la chica asintió sonriendo, recordó la música de ese día y el baile de Jim.

-Los chicos podrán ir?- Eleven preguntó y Hopper bebió de su segunda taza de café antes de hablar.

Los menores esperaban impacientes lo que diría el jefe, todo dependía de él.

-La gente del gobierno está en Hawkins, tendrás que quedarte como antes, sin comunicación- un resoplido general se escuchó por parte de los chicos y Mike estaba por reclamar- Sh, hasta navidad, después haremos lo siguiente.

El jefe les explicó que no podían desaparecer todas las tardes, que podrían intercalarse las visitas y que sólo en sábado podrían estar todos juntos. Eleven no saldría a más allá de unos metros de la cabaña, excepto a casa de Joyce, alguna tarde cada tanto, por lo menos hasta que él pudiera hablar sobre Eleven con el doctor.

-Max podrá ir?- dijo Lucas y Hopper miro a Eleven.

-Quién es ella?

-Es la chica pelirroja, Maxine- bufo Mike.

-Si Eleven quiere, estaré de acuerdo.

Dustin y Lucas miraron a la chica que suspiró. No conocía bien a Max pero no podía negarle eso a sus amigos, eran un grupo y las decisiones las tomaban juntos, aunque no este del todo de acuerdo.

-Puede ir, si ella quiere- tomó la mano de Mike debajo de la mesa y la apretó, él la miro y entendió. Quería que ambos le den una oportunidad a Max.

-Bueno todo esta arreglado, es hora de ayudar a levantar la mesa- dijo Jonathan, levantándose.

-Mike tiene una pregunta!- chilló Nancy y todos miraron a Mike, que sin saber porque se puso rojo, miró a su hermana y entendió la palabra muda que le decía- Baile.

-Yo, mmm- titubeo y busco a Hopper con la mirada- Jefe, con El nos preguntábamos, si es posible, sólo si lo permite, que nosotros…

-Si podemos ir al baile de invierno, eso quiere decir Mike.

-INVITASTE A ELEVEN AL BAILE DE INVIERNO?- Dustin y Lucas chillaron entre risas.

-Eso si que fue rápido- rió Will.

-No pudimos ir al anterior baile y entonces pensábamos…

-Anterior baile?- le interrumpió Hopper a su niña- Entonces no es la primer propuesta?- Eleven negó y Mike se hundió más en su silla de la vergüenza- Es complicado lo que piden, no prometo nada, lo hablaré con el doctor, de acuerdo?

Ambos niños asintieron y los demás los miraron con cariño, Dustin se dedicó a burlarse un poco más hasta que Nancy dijo que era hora de ir a casa.

Dustin y Lucas se habían despedido con un gran abrazo de su amiga, prometiendo que le dejarían unas cosas en casa de Will para que Hopper pase por ellas.

Estar tanto tiempo encerrada y sin juegos debe ser muy aburrido. Argumentó Lucas y Hopper aceptó la idea, no quería ver más triste a Eleven.

Los dos chicos fueron acompañados a sus casas por Joyce y Jonathan, que fueron en busca del auto de la primera a casa de Steve. Los demás seguían en la casa Byers, Nancy insistiendo a Mike que debían irse ya.

-De acuerdo! Vamos ya…- Mike tomó su mochila con enojo, pero no pudo contenerlo al ver a su amigo- Regresaré mañana, traeré unos cuadernos nuevos y dibujaremos toda la tarde.

-Estaré aquí hasta que mamá decida dejar de sobreprotegerme, de nuevo- Mike abrazó a su amigo- Nos vemos mañana.

Eleven veía a los chicos despedirse, un nudo se le formó en la garganta al saber que no los vería en mucho tiempo. Cuando el chico se giró a ella, se arrojó a sus brazos, tratando de conservar su calor y aroma tanto como pueda, él también le abrazo.

-Pasarán rápido las semanas, nos veremos muy pronto, okay?- la chica asintió- Mandaré alguno de mis juguetes contigo, así me tendrás cerca.

-Los cuidaré, lo prometo.

Hopper rodó los ojos ante la escena dramática que armaban esos niños, pero no podía evitar sentir un poco de lástima, se notaba a leguas que se querían demasiado, y aunque peligraba un poco lo que iba a hacer en ese momento, no pudo evitarlo, no quería verlos sufrir.

En cuanto se despidieron de Will que quedó en la casa y Nancy buscando las bicicletas de ella y su hermano, Jim le pidió al par de chicos que se acercarán.

Tomó el radio que colgaba de uno de los bolsillos de la mochila de Mike, que este reclamó al segundo, pero le pidió silencio. El hombre desarmo el radio y reviso que no tuviera ningún tipo de micrófono, estaba limpio, lo armó y lo devolvió al chico.

-Usa el canal 11, de acuerdo?- dijo el jefe y Eleven sonrió al instante.

-Podré hablar con ella?- Jim asintió- Muchas gracias, Jefe!

-No lo uses en casa, aléjate lo más que puedas, y no lugares públicos, debes ser cuidadoso.

Mike asintió energéticamente, Jim Hopper no era tan malo como creía.

Eleven se despidió de él con otro gran abrazo y se subió a la camioneta, Hopper estaba por subir cuando Mike lo intercepto.

-Quiero pedir perdón por mi arrebato de anoche, me enojé demasiado y…

-No lo debes pedir- Hopper puso su mano en el hombro del chico- Se que fue difícil, también para ella y para mí, me dolía saber que ambos sufrían… Ahora todo irá mejor.

-Gracias, por cuidarla y todo lo que hiciste estos días para salvarnos.

-Tu también te llevas el crédito, fuiste de mucha ayuda para todos- Mike sonrió ante las palabras del jefe, este se montó en la camioneta y bajo la ventanilla- Nos veremos pronto, Wheeler.

Mike vio la camioneta alejarse hasta que se perdió en el camino, su hermana le gritó que era hora de irse y emprendieron camino a casa, entre discusiones claro.

Esta es la primera parte de tres del mini fic, todavía no sé si incluiré más. Espero que lo hayan disfrutado y si hay reviews, publicaré la segunda parte muy pronto. Saludos!