Hola, aquí Lightningmaster presentando este primer capítulo mi primer fic, espero se entretengan tanto leyéndolo, como yo disfruté escribiéndolo, y me disculpo por adelantado por cualquier error que puedan encontrar.

Aclaración:

"Palabra" = Nada en especial.

— Palabra — = Indican el inicio o final de un dialogo según sea el caso

(Palabra) = Utilizado para aclarar cosas o indicar cambios de escenario.

Palabra = Da a entender un cambio de narrador o punto de vista.

"Palabra" = Pensamientos.

Y ahora sin más preámbulos, demos inicio a esta historia.

Capitulo 0 — Prologo.

(9:02 a.m.) (Carretera en medio de la nada ubicada en alguna parte de Venezuela)

Narrador Omnisciente:

Esta historia empieza en una llanura como cualquier otra, en la que hay una carretera como muchas otras, por la que pasaba una camioneta color blanco que no salía de lo común. se podía ver que el vehículo se dirigía a un bosque que se encontraba a varios kilómetros adelante, y a la distancia podía verse como detrás de este bosque, a una considerable distancia, se encontraba un valle de gran tamaño y que resultaba simplemente hermoso a primera vista. Repentinamente, un auto un poco menos común pasó a una gran velocidad junto a la camioneta, dejándola atrás en pocos segundos, ese auto era un Bugatti Veyron Súper Sport modificado color plateado (Pueden buscarlo en Google si quieren saber cómo es), el cual remolcaba un pequeño remolque que tenia dimensiones similares a las del auto, en el cual se podían ver un par de objetos cubiertos por mantas y bien sujetos al remolque. Y por la rapidez con la que dejó atrás a la camioneta, podemos suponer que el conductor llevaba bastante prisa. Pasados un par de segundos desde que el auto plateado lo rebasase, un par de patrullas pasaron a una velocidad similar, esto le resultó extraño al conductor pero no le prestó mucha atención y siguió con su camino.

(En el Bugatti Veyron)

Quien manejaba el auto que hace segundos rebasó a la camioneta a la que seguíamos, se encontraba hablando por su teléfono el cual sostenía con su mano izquierda, mientras que con la mano derecha se encontraba tecleando en una laptop que estaba en el asiento del copiloto. En la pantalla de la misma era posible ver como con una sola mano el conductor estaba dándole una paliza a sus oponentes en un juego conocido como League Of Legends, pero al tener las manos ocupadas no le quedaba más remedio que conducir con las rodillas, y en el tablero podíamos apreciar como la aguja del velocímetro rosaba e incluso llegaba a superar los 200 Km/h, aunque esto último no parecía molestar en lo más mínimo al conductor, quien seguía con su camino ignorando completamente a quienes lo perseguían. — "Parece que me siguen, pero que flojera me da detenerme. Además, ¿Que se supone que están haciendo estas patrullas en una carretera en medio de la nada? O puede ser... ¿Llevaran desde que salí de la ciudad persiguiéndome? Puede ser… supongo que no debí pasar por en medio de la ciudad a 200 Km/h esquivando los autos como si fuese un video juego…" — se preguntaba a sí mismo el conductor que parecía recién haber notado la presencia de las patrullas tras él.

— ¡ORÍLLESE Y DETENGA EL VEHÍCULO EN ESTE MOMENTO! — grito el "Oficial" con un megáfono desde una de las patrullas, acto seguido, al policía se le cae el megáfono y al intentar agárralo casi se cae por la ventana, para su fortuna atrapó el megáfono, y su compañero lo atrapó a él con unos reflejos que ni él se los cree.

Al conductor del auto deportivo no pareció importarle mucho la advertencia. — "¡Que flojeeeeeeeraaaaaaaaaaaaaa!" — pensaba el conductor al oír al policía. — Hasta luego Mamá, te llamo luego. — dijo quien conducía el vehículo, seguidamente cortó la llamada y colocó su teléfono a su derecha sobre una especie de soporte que parecía estar hecho específicamente para ese teléfono. — "Creo que tendré que sacudirme a estos tipos antes de llegar al valle con los demás." — pensó el conductor antes de acelerar "un poco" y llegar con esto a 270 Km/h, al hacer esto, pudo ver como los que lo perseguían se quedaban atrás, simultáneamente en la laptop en la que se encontraba jugando se podía apreciar la palabra "PentaKill" y posteriormente la palabra "Victoria" esta ultima tras destruir una especie de gran cristal rojo.

Tras un par de minutos se percató de que ahora también lo persigue un helicóptero, y al verlo se quedó algo extrañado de que mandaran a un helicóptero a capturar a alguien que va a mucha velocidad. — "¿por qué llamar un helicóptero por alguien que va a alta velocidad en una carretera en medio de la nada? Mmm… es verdaderamente extraño… Ni que estuviera en estados unidos" — pensó el conductor.

— ¡ORÍLLESE Y DETENGA EL VEHÍCULO EN ESTE MOMENTO! — dijo una de las personas que se encuentra en el helicóptero usando los altavoces.

Quien conducía el auto plateado ignoró las advertencias de quienes se encontraban en el helicóptero, y como si no le importase en lo más mínimo las represalias que los policías pudiesen tomar en su contra, aceleró hasta alcanzar los 380 km/h, el helicóptero no fue tan fácil de dejar atrás, en un principio se alejó del helicóptero, pero este volvió a reducir la distancia en cuanto tuvo tiempo de acelerar. — "Esto podría resultar problemático, no puedo acelerar más porque me arriesgaría a que el remolque recibiera algún daño y definitivamente no puedo perder lo que llevo ahí…" — pensó el conductor mientras pensaba en una solución que no lo hiciese detenerse en medio de la carretera.

— ¡DETENGA EL VEICULO, BAJESE DEL MISMO Y ACUESTECE EN EL SUELO CON LAS MANOS DETRÁS DE LA CABESA! — dijo una de las personas que se encuentra en el helicóptero usando los altavoces.

— "De eso si se van olvidando" — pensó el que conducía el auto al oír las nuevas instrucciones, los policías del helicóptero fueron completamente ignorados, el auto no disminuía su velocidad en lo mas mínimo y el conductor no parecía tener la intención de obedecer sus demandas. Dentro del auto, el conductor que ya demostró no tener el más mínimo respeto por las leyes de tránsito (ni ninguna ley en general), miró la hora en el tablero de su auto. — "Son las 9:10 a.m. sigue siendo temprano, Mmm… creo que tengo tiempo para una parada." — pensó el conductor, y al segundo siguiente, de forma repentina se escucha una ráfaga de disparos del lado derecho del auto.

— ¡ESTA ES LA ÚLTIMA ADVERTENCIA, DETENGA EL VEHÍCULO, ACUÉSTESE EN EL SUELO CON LAS MANOS DONDE PODAMOS VERLAS! — dijo una de las personas que estaba en el helicóptero utilizando los altavoces del mismo.

— "¡¿Desde cuándo los helicópteros policiacos tienen ametralladoras instaladas?! No puedo arriesgarme a que dañen lo que llevo atrás… Creo que tendré que usar eso…" — pensó el conductor, acto seguido empezó a disminuir la velocidad del auto, mientras que con su mano derecha desbloqueaba su teléfono el cual seguía en el soporte que parecía estar hecho a la medida y abrió una aplicación un tanto peculiar, seleccionó una opción de decía casa, y la pantalla del teléfono cambió mostrando ahora un mapa de la zona donde se encontraba en la que había un punto titilante que señalaba la ubicación del auto, el conductor dio un par de toques rápidos a la pantalla en dos puntos algo más avanzados en la carretera los cuales quedaron marcados, y seguidamente dio un tercer toque, esta vez en una parte de la pantalla donde estaba un botón rojo que decía inicio.

Tras un rato de constante desaceleración, las patrullas que ya hace rato habían sido dejadas atrás volvían a figurar en la escena, y cuando las patrullas se encontraban a tan solo 10 míseros metros de su objetivo, todos simultáneamente notaron un extraño destello que apareció a un poco más adelante del auto. Los policías frenaron al instante pues no sabían que sucedía, pero por otra parte, la reacción de quien conducía el auto fue acelerar todo lo que pudo en la poca distancia que tenía a su disposición, los policías del helicóptero dispararon. No lograron acertar ni un solo disparo, el auto no tardó ni 3 segundos en llegar hasta ese destello titilante en medio de la carretera, y cuando estuvo a punto de tocarlo, este se transformó en un portal que lo en el que desapareció el auto, según el auto y el remolque que arrastraba pasaron, el portal se cerró con un pequeño destello dejando una mancha negra en el suelo como única prueba de su efímera existencia en el espacio y tiempo.

Al cerrarse el portal las patrullas se detuvieron y el helicóptero aterrizó a la derecha de la carretera, los policías se bajaron de las patrullas y el helicóptero, viento una mancha negra en el suelo mientras se preguntaban qué coño había sucedido frente a sus ojos...

— Parece que se nos fue. — dijo el primer policía en hablar.

— ¿Cómo logro escapar? — preguntó un policía que se bajó de la misma .

— Ni la menor idea. — le respondió un tercer policía que se bajo de la otra patrulla.

— ¡¿EL AUTO DESAPARECIO EN EL MEDIO DE LA CARRETERA Y SOLO ESO DICEN?! — exclamó el policía que acompañaba al anterior en la segunda patrulla.

— Que fastidió, escapo… ¿ahora qué hacemos? Montamos toda esta persecución y no logramos nada... — dijo uno de los policías que bajó del helicóptero.

— ¡Esperaremos al siguiente incauto que se aventure por estor lares, y lo capturaremos quinteto de choros! — Exclamó el último choro que bajó del helicóptero. — si no conseguimos nada no tendremos para comer hoy… el combustible de helicóptero es caro…

— Ok — respondieron 4 de sus 5 compañeros choros que se encontraban disfrazados de policías con una cara desganada.

— ¡¿ASÍ DE FACIL DEJAN PASAR EL HECHO DE QUE DESAPARECIÓ COMO SI NADA?! — gritó con el megáfono el cuarto choro que todavía se encontraba impresionado de lo que acababa de presenciar, y de como sus compañeros lo ignoraban.

— ¡QUE SÍ, COÑO! — le respondieron al unísono con un sonoro grito el resto de los choros/malandros/ladrones/etc/XD todos con cara de enfado y con aura asesina.

— Ok — respondió el cuarto choro con un hilo de voz que decía "no me maten plz", y una gota tipo anime cayendo por su cabeza mientras mira al suelo.

En ese momento, como si el universo les jugase una broma, la camioneta blanca pasó junto a ellos y se perdió en el horizonte. — Y ahí se fue otro, dijo el primero de los malandros de forma desganada mientras que todos sus compañeros veían la camioneta con una aura azul sobre sus cabezas. Seguidamente, los desganados choros vuelven a sus vehículos y los conducen hasta sus posiciones originales, para así lograr atracar al siguiente incauto que pase por ese lugar, claro si no es que el siguiente también desaparece sin explicación o escapa de alguna otra manera aún más inesperada.

(Segundos atrás) (Lugar desconocido)

Nos situamos en una habitación en total oscuridad, uno de esos lugares en los que no podrías ver tu mano aún si la pusieses frete a tu rostro. Pero de forma repentina, esa obscuridad absoluta que predominaba en la habitación fue alterada por un pequeño brillo que se hizo presente cerca de una de las paredes, esta luz no era lo suficientemente fuerte como para iluminar la habitación, pero en lo que si lograba era convertir esa obscuridad absoluta en penumbra. Los segundos pasaron y las fuentes de luz en la habitación seguían en aumento, algunas pantallas y pequeñas luces se encendían. En la habitación ya eran visibles varias pantallas y pequeñas luces que indicaban distintas cosas, la luz que se había manifestado cerca de una de las paredes más alejadas de las pantallas se mantenía presente, y había aumentado su brillo considerablemente, aunque no parecía haberse movido o aumentado su tamaño.

De forma repentina la resplandeciente luz cambió de tamaño y forma, siendo ahora un portal que conectaba 2 puntos del espacio y tiempo, portal que velozmente fue atravesado por un auto plateado seguido por un remolque de similar tamaño. Tan pronto el auto abandonó la grieta en la realidad, esta se cerró de forma tan repentina y acelerada como se abrió, dejando como única prueba de su pasajera existencia una mancha de quemadura en el suelo.

El auto se detiene en seco después de avanzar un par de metros, y tras detener el auto de forma algo brusca nuestro posible protagonista/amigo/compañero/personaje/conductor irresponsable con posible desequilibrio mental y gran habilidad para el League of Legends/etc, abre la puerta del conductor y se baja del auto. El conductor mira a su alrededor al bajar del auto, como si estuviese buscando algo en especifico, acto seguido extiende su brazo derecho y chasquea sus dedos. El chasquido de dedos resonó por todo el lugar, y de forma inmediata como si respondiese al chasquido, las luces del lugar se encendieron dejando ver todo lo que se encontraba en la habitación, habitación que se veía bastante más grande ahora que las luces se encontraban encendidas.

Ahora que la habitación se encontraba debidamente iluminada, se podía apreciar con más detalle todo la que se encontraba en la habitación, en una de las paredes se encontraba una enorme pantalla en la cual se podía ver el escritorio de una pc y tenía como fondo de pantalla una letra "A" en cursivas elegantes (estas letras que te imaginas pero que sabes que jamás dibujaras), bajo esta pantalla se encontraba una mesa de escritorio con algunas cosas que encontrarías en cualquier escritorio de estudio. A la derecha del escritorio, a un par de metros se encontraba otra pantalla, pero a diferencia de la anterior, esta lo que mostraba era un mapa del todo el mundo, en el cual se encontraban señaladas una serie de ubicaciones con puntos blancos, además de estos puntos, también se podían ver triángulos aunque estos ultimo en mucha menor medida que los puntos, aun que estos también poseían otra característica, y era que se movían, a una velocidad casi imperceptible, pero se movían. En otra de las paredes de la habitación se encontraba una especie de laboratorio tecnológico muy avanzado, y algunas cosas parecían sacadas de la ciencia ficción, aunque la mayoría de las que se encontraba dentro de esta clase soltaban chispazos de manera ocasional. Adjunto a todo lo ya mencionado, en el lateral restante de la habitación, el cual supera con creses en tamaño al resto de la habitación, pues en este último se encontraban una serie de vehículos nada convencionales, estos iban desde autos modificados a tal punto que ya ni eso parecían, hasta aviones cazas que más parecían nave espaciales.

En medio de todo la ya mencionado, se encontraba el sujeto que conducía el auto plateando junto a su vehículo, el conductor era un joven de aproximadamente 20 años, que lleva puesta una chaqueta negra sobre una camiseta blanca, también llevaba puesto un pantalón de mezclilla y zapatos Nike, el hombre tenía una altura de 1,89 metros, pelo castaño medio largo y perfectamente despeinado, con ojos del mismo color, no era ni un alfiler ni un balón, su contextura era promedio, aunque se notaba que se encontraba en forma a simple vista. El humano que se encontraba parado junto al auto sacó su teléfono y revisó un par de cosas. — Parece que todo funcionó bien, en un par de minutos estará listo el informe. — dijo con cara de alivio el conductor el cual ahora parecía relajado. El personaje empezó a caminar en dirección a la enorme pantalla que se encontraba frete al escritorio. — Computadora, pásame un refresco frio por favor. — pidió el conductor mientras caminaba.

— Como desee señor. — respondió la computadora con una vos femenina y muy educada, acto seguido una botella de Pepsi Cola bien fría fue lanzada desde una nevera que se encontraba a la izquierda del escritorio.

El hombre que caminaba en dirección de lo que pareciese ser una supercomputadora atrapó la botella de vidrio y la destapó con un rápido movimiento de manos, la chapa salió disparada hasta chocar con una pared y caer en una papelera que se encontraba en una de las esquinas del lugar, y por último se dispuso a guardar en su bolsillo el teléfono que sin miramientos había utilizado cual destapador de botellas, con tal facilidad que pareciese ser cosa de todos los días.

— Gracias. Pero… ¿qué te he dicho sobre llamarme señor? — dijo el humano que ya se encontraba frente al escritorio.

— Que no lo haga… — respondió la computadora con tono de regañada.

— exacto, me hace sentir viejo… — dijo el sujeto y tomo un trago de la botella.

En eso el teléfono suena y el sujeto lo saca de su bolsillo, ve quien lo llama y lo deja sobre la mesa. — Llamó más rápido de lo que me esperaba… — dijo el humano con desanimo como si supiese que lo que le van a decir no le va a gustar, seguidamente contesta su teléfono y lo pone en altavoz, claro no sin antes tomar un poco más del refresco.

— ¡¿QUE ESTÁS LOCO O BUSCAS TU MUERTE?! — grito la voz al otro lado del teléfono.

— ¿Que ya no recuerdas como saludar? No sé… ¿Un "hola primo" o un "buenos días" es mucho pedir? Y en respuesta a tu pregunta, loco… Mmm… puede ser, pero no te preocupes no busco mi muerte, Ricardo — dijo el sujeto con una voz calmada y un tono algo burlón.

— ¡¿Por qué usaste los portales si sabias que no los habíamos probado todavía?! — exclamó en forma de pregunta la voz al otro lado del teléfono.

— Me perseguían unos policías con un helicóptero, eso me dio a entender o que de verdad no hay nada que hacer por aquí o que esos eran choros muy bien preparados, y me daba flojera detenerme a averiguarlo. — le respondió el joven a su primo.

— En tu auto tienes de todo… ¿Y no te pudiste ingeniar nada para perderlos? — dijo Ricardo calmado pero con notoria molestia.

— Bueno, no creo que hubiese sido mejor bajarme y caer a tiros a los policías, detenerme y tener que dar explicaciones hubiese sido demasiado tardado, y supongo que usar armas EMP en un helicóptero está descartado ¿no? — se excusó tranquilamente el sujeto y tomo otro trago de refresco.

— ¡Yo te conozco Andrés, tu tenias mínimo 5 formas de salir de ahí sin recurrir a los portales ni hacer nada de lo que dijiste! Y aunque no tuvieses más opciones. ¡¿En qué momento pensaste que era buena idea usar un sistema experimental de portales que está en alfa y jamás había sido probado en un ambiente no controlado?! — exclamó Ricardo preocupado por el bienestar de Andrés.

— Los portales fueron mi idea, entre todos logramos que funcionaran, estoy seguro de que no hay de qué preocuparse. ¿Y qué mejor forma de comprobarlo que probándolos yo mismo? Claro que esto sería en condiciones poco favorables, pues la idea es probar si hay alguna falla. — dije calmadamente y tomé otro trago de me refresco.

Ya más calmado, Ricardo dijo. — Como de costumbre, sería más fácil hacer a una piedra sangrar que lograr ganarte en una discusión, sigo sin saber de dónde sacas tanto artificio argumental… Pero dejando eso de lado y viendo el lado positivo, ya probamos que los portales funcionan fuera del laboratorio.

— Así me gusta Ricardo, viéndole el lado bueno a las cosas, por cierto. ¿Cómo te enteraste tan rápido de que usé los portales? — preguntó Andrés con tono curioso y algo acusador.

— He… Pues… Es que estaba realizando algunas pruebas en los laboratorios ayer, y me llegan los reportes al teléfono cuando se realizan las pruebas. — respondió Ricardo omitiendo algunos detalles que el espera nunca salgan a la luz.

Ok, confió en que no es por nada más. — dijo Andrés con tono despreocupado. — ¿Los demás ya llegaron al valle? — preguntó Andrés mientras terminaba de tomar su refresco.

— No creo, la idea era llegar a medio día, ¿podrás llegar a tiempo? — respondió Ricardo con otra pregunta.

— Yo creo que sí, y si no, usare los portales y listo — le respondió Andrés con simpleza.

— Como digas, ten cuidado con esos portales, recuerda que siguen en beta (β) — dijo Ricardo preocupado por su impredecible familiar.

— ¿No estaban en alfa (α)? — pregunto Andrés con un tono de duda.

— Estaba en alfa hasta que lo probaste — me respondió Ricardo.

— ¿Enserio? ¿Y con solo una prueba lo pasa de alfa a beta? — preguntó Andrés con tono de incredulidad.

— ¿Estás seguro de que eres la persona más indicada para cuestionar una decisión que es claramente imprudente? — Preguntó Ricardo con un tono de "¿Vas a hablar tú?"

— Pues claro que soy el indicado, más imprudente que yo no hay. — respondió Andrés como si fuese lo más lógico del mundo.

— Eso es discutible… — dijo Ricardo mientras recordaba al resto de su grupo de amigos.

— Eso no te lo discuto… — dijo Andrés ahora también pensando en sus amigos. — Bueno, si eso es todo nos vemos en el valle, Adiós Ricardo — se despidió Andrés.

— Chao Andrés – dijo Ricardo.

Acto seguido Andrés cortó la llamada y vio cuanta batería le quedaba al teléfono. — hace tiempo que no pongo esto a cargar. — dijo Andrés al notar que le quedaba 17% de la batería, seguidamente, colocó el teléfono sobre una parte de la mesa que era algo diferente, y este se empezó a cargar de forma algo acelerada. Mientras esto sucedía, Andrés se sentó en un silla de oficina que se encontraba frene al escritorio y jaló un teclado retro-iluminado en blanco, el cual se deslizó desde debajo del escritorio asomándose lo suficiente como para escribir cómodamente en él.

Andrés estuvo por algunos minutos revisando una variedad de archivos y sistemas, y tras algunos minutos termino llegando a la información sobre los portales, al parecer todo estaba en orden, pues después de leer un par de archivos algo cortos, dio un suspiro de alivio y se recostó en la silla. — Perfecto, no pasó… Supongo que después de todo no era tan probable que "eso" pasare. — dijo Andrés antes de pararse y notar que su teléfono solo había cargado hasta el 38%. — "lo cargaré en el auto" — dijo el humano de forma mental sin ganas de esperar a que su teléfono cargase. Andrés caminó hasta su auto y subió en este, a continuación colocó su teléfono en su "pedestal", y prosiguió a encender el auto.

Dio un par de toque en la pantalla de su teléfono y un portal se abrió en el mismo lugar que el anterior, avanzó, retrocedió, giró, y aceleró. — Adiós computadora. — fue lo último que se le escuchó decir antes de salir.

— Hasta luego Andrés — dijo la computadora antes de que el portal se cerrase y las luces se apagasen.

(9:27 a.m.) (Carretera en medio de la nada ubicada en alguna parte de Venezuela)

En medio de una carretera se hace notar una mancha de color negro en el suelo la cual no parece tener razón de ser. De forma repentina sobre esta mancha aparece una luz muy brillante, la cual ni bien pasan 3 segundos se convierte en un portal, el cual deja ver una habitación con una serie de pantallas, algunos artilugios peculiares y un auto de color plateado que se dirige hacia el portal a gran velocidad.

El auto y el remolque que este lleva, atraviesan el portar sin mayor dificultad, y este último se cierra dejando como única prueba de su existencia su ya clásica mancha en el pavimento que suele quedar a término medio, el auto continua acelerando por la carretera hasta llegar a su velocidad crucero de 200km/h, momento en el cual el conductor sin ningún reparo empieza a jugar con su laptop.

(30 minutos después)

Andrés seguía conduciendo por esa carretera poco transitada, no había sucedido mucho en la última media hora, el único cambio notable era el clima, el cual pasó de un cielo despejado iluminado por un sol resplandeciente, a una casi obvia amenaza de diluvio. Sí, solo amenaza, porque no había llovido una sola gota desde que el cielo se ennegreció, lo único que permite que a esto se le llame tormenta en estos momentos es que a pesar de carecer completamente de lluvia, la cantidad de rayos que han caído desde su inicio casi rosan con lo ridículo por no decir que claramente lo supera.

A lo lejos, a aproximadamente 2 kilómetros de la posición actual del auto se podía ver un puente construido sobre una enorme grieta en el suelo que pareciese no tener fondo, este puente se encontraba en deplorables condiciones, amenazando con caerse a pedazos en cualquier segundo, cosa que cada vez parecía más probable por causa de algunos vientos huracanados que recientemente se habían hecho presentes. Pasado poco más de medio minuto Andrés ya se encontraba cerca del puente, y sin detenerse ni disminuir la velocidad se desvió un poco a la izquierda, quedando alineado con uno de los soportes del puente, aparentemente, con la idea de usarlo como rampa y de esta manera evitar pasar por el puente que a esta distancia más parecía estar construido con láminas de zinc oxidado. Pero al parecer el destino no estaba muy de acuerdo con este plan, dado que al estar a escasos metros de la destartalada estructura, esta cedió ante la gravedad y los vientos huracanados, cayendo en el abismo para nunca más ser vista.

Al ver esto, Andrés frenó y giró el volante tan rápido como pudo, en un desesperado intento por detener el veloz auto, el cual para la fortuna de su conductor derrapó y se detuvo a menos de 1 milímetro del profundo precipicio. — Uff, eso estuvo demasiado cerca. — exclamó Andrés a ver cómo había esquivado la muerte por muy poco.

— Crac… — Se escuchó este sonido salir del suelo. — No me jodas. — dijo Andrés de forma apesadumbrada.

— Crac… — se escuchó nuevamente, y esta fue la señal para que el auto acelerase a toda velocidad, sin importar que llevaba un remolque a rastras. — ¡BROOM! — fue lo que se escuchó mientras un buen pedazo de tierra se desprendía del precipicio para perderse en la infinita negrura de la abismal grieta. — Debo recordar no cantar victoria antes de estar seguro de que el universo un puede hacer que me trague mis palabras… — dijo Andrés quien milagrosamente había escapado del derrumbe en el último segundo.

— ¡ZAP! — cayó un rayo a un par de metros del auto, en respuesta Andrés se bajó del mismo y gritó. — ¡¿ES EN SERIO?! ¡¿UN MALDITO RAYO?! ¡¿Un poquito más cliché o así está bien?! — tras esperar un par de segundos como si esperase algún tipo de respuesta. — A veces creo que mi vida es una caricatura… ¿Qué estoy diciendo? El que dijo: "La realidad supera la ficción" estaba en lo cierto y mi vida lo demuestra. — dijo Andrés mientras miraba el puente algo pensativo. — Supongo que toca usar portales y listo… ahora que caigo… ¿Por qué ando hablando como si alguien me escuchase? … … … Da igual… — dijo Andrés y se alejó de donde antes estaba el ahora inexistente puente, al estar a aproximadamente 50 metros del precipicio se detuvo y empezó a toquetear su teléfono, tras algunos segundos de configuración, un par de brillantes luces aparecieron en lo que debería ser principio y fin del derruido puente. — Ahí vamos otra vez. — dijo Andrés y aceleró a gran velocidad dirigiéndose directo al precipicio sin la menor duda.

Estando a apenas un par de metros de la brillante luz, pero en el segundo exacto en el que este debería haberse convertido en portal, un rayo cayó sobre este, dando como resultado que se abriese de forma repentina y que el que se encontraba al otro lado del precipicio desapareciese sin dejar rastro, al pasar el auto por el portal, este se desestabilizó y empezó a absorber todo lo que se encontraba cerca, atrayendo grandes rocas e incluso llegó a arrancar el pavimento del suelo hasta que repentinamente se detuvo por algunos segundos, y de forma repentina explotó destruyendo todo en un radio de 20 metros, dejando en el terreno un espacio esférico completamente vacío y carbonizado en lugar del pronunciado precipicio.

Fin del prologo

Agradezco a todos aquellos que se hayan tomado la molestia de leer este prólogo y espero les haya gustado, si les gustó les agradecería que dejaran su opinión en un Review o P.M. , y si no pues también me gustaría que me dejaran su opinión para saber cómo mejorar.

Lightningmaster fuera.

P.D: Importante… He hecho algunos cambios al prólogo, pues un buen día me levanté de la cama con ganas de leer mi propia historia, y al leerla me percaté de que ni rosaba los escalones más bajos de mis estándares, simplemente no podía creer que yo hubiese escrito ese prólogo, pero al ponerlo en perspectiva, me doy cuenta de que esto es completamente lógico, de hecho, lo que realmente hubiese sido preocupante seria que ese prologo estuviese dentro de mis estándares. Me explico, el prólogo lo escribí ya hace un año, en este año he mejorado como escritor en gran medida, cosa que era de esperarse, pues ese prologo fue mi primer intento de escribir una historia, escrito y subido en una noche, sin revisión, ni corrección. "Ya tengo la historia en mente, solo tengo que escribirla" pensé en el momento en el que comencé, y efectivamente, gran parte de la trama principal estaba lista, esto debido a que tenía el pasatiempo de inventarme historias cuando ocurrían fallas eléctricas (Muy seguido), pero lo que no tome en consideración fue la forma en la que plasmaba mis ideas, no importa que tan buena sea una idea si no sabes cómo expresarla, eso lo aprendí leyendo algunos fic, en ocasiones encontraba algún fic que aunque gozaba de una gran narrativa carecía completamente de trama, y por supuesto el caso inverso también, y este es mucho más triste que el anterior, un fic que definitivamente tiene una traba bien planeada y elaborada, pero al momento de expresarla falla de forma catastrófica, espantando en los primeros capítulos a la mayoría de los lectores, los cuales pierden el interés en continuar leyendo por considerarlo una pérdida de tiempo. En un principio no quería cambiar los episodios, para en un futuro poder leer mis fics y observar mi progreso como escritor de FanFiction, pero me he dado cuenta de que los primeros capítulos de este Fic no están a la altura de los que actualmente escribo (capitulo 19 en este momento), y por esta razón he tomado la decisión de reescribir los capítulos que me parezca necesitan ser modificados, pero sin alterar la historia en el proceso.

P.D.2: Estos mensajes serán borrados una vez se complete la reescritura de los capítulos seleccionados…