DISCLAIMER: Todo es creación, imaginación y exteriorización de JKR, nada me pertenece, solo la idea.
SUMMARY: ¿Qué tan mal tiene que estar tu relación? para llegar a pedir consejos matrimoniales a la desequilibrada pareja de los Black… SS/HG SB/BL.
La idea para este fic surgió en uno de esos momentos en que tratas de despertarte, pero simplemente quieres seguir soñando. Y pues aquí la tienes chicos. Espero que les guste y no olviden dejar review…
Sé que esta corto el cap, y que nunca he escrito algo tan corto antes, pero es viernes después de una semana pesada y ahora solo estoy pensando en ¿qué demonios hago aun despierta?
TERAPIA DE PAREJA
Chapter 1: Desesperante monotonía.
Diez de la noche, después del trabajo el matrimonio Snape arribaba a su casa, en la noche oscura y silenciosa lo único que se oía era el chasquido de la cerradura a medida que la llave giraba en su interior, Severus bufó, Hermione chasco la lengua en respuesta, solo llevaban quince segundos allí pero para él ya era toda una eternidad. Ya casi estaba, solo faltaba una vuelta.
−¿sabes que pueden matarnos solo por estar aquí parados no? – Severus susurró al tiempo que agitaba la varita y la puerta se abría por magia.
−si, tal vez en otra época si− Hermione se interpuso entre la puerta y el hombre− ahora que sabes que tengo claro ese punto, si no te importa estaba abriendo la puerta. La castaña cerró la puerta nuevamente de manera obstinada.
−Si lo sabes, entonces no entiendo por qué te empeñas en conservar esa idiota costumbre muggle.
− Porque no es idiota, porque soy de descendencia muggle, porque no pienso olvidar mis orígenes y porque simplemente no me da la gana. –otra discusión, ¿Por qué siempre terminaban discutiendo, ¿mi culpa?... Claro que no… − si tanto te molesta puedes aparecerte directamente dentro de la casa.
− ¿y dejarte muriendo aquí afuera? Además no sé si lo sabías pero también tengo orígenes muggles y aun así, no me vez todos los domingos sentado en un sillón rascándome la barriga, mientras veo un partido de futbol en el felevisor.
− Primero ya no estamos en guerra, no me van a matar por dos segundos que este en la puerta de la casa, − la puerta estaba nuevamente abierta− y segundo se nota como tienes de arraigadas las raíces− terminó sarcástica.
Ambos entraron en la casa y la discusión se dio por acabada al instante, subieron las escaleras y se pusieron sus pijamas casi por inercia.
Severus se metió en la cama y se puso a leer un poco antes de dormir, mientras tanto Hermione se desmaquillaba en el baño, la castaña levanto las cobijas y se acurruco dentro de ellas, dándole la espalda a su marido.
Que vida tan monótona, trabajaban todo el día para llegar a dormir, dormir para poder volver a trabajar al día siguiente, en serio ya no recordaba cuando era que había tenido un cambio en aquella rutina, hace unos dos meses que no tenía sexo con Severus, sí, tal vez era poco delicado decirlo de ese modo pero… cuando eran recién casados ni siquiera dormían cogían como conejos, mañana, tarde y noche , como si no hubiera un mañana, en cualquier lugar y a cualquier hora, luego se fue sosegando su pasión, lo hacían día de por medio, cada tres días, una vez a la semana y ahora cinco años casi seis después, nada, absolutamente nada.
Hermione se giró lentamente, miró a su esposo, el hombre leía con el seño fruncido en un gesto de concentración, era el mismo gesto que ponía cuando aún era su profesor y la besaba en su despacho, cuando quería hacerlo y a la vez sabía que no debía, cosa que le recordó…
− ¿sabes qué día es hoy Sev? –ronroneó la castaña, rompiendo el silencio.
−Hmm… no, sorpréndeme− contestó Snape, tras dejar el libro que leía, suavemente sobre la mesa.
−hoy hace unos cuantos años, cuando aún eras mi profesor, me presente en tu despacho de Hogwarts, para una de mis frecuentes detenciones, ¿recuerdas como me besabas en esos castigos?, pues ese mismo día, fue la primera vez que hicimos el amor. – relató la castaña evocando sus años de relación prohibida.
− Hmm, pues siendo así, feliz día amor – la beso en la frente y se giro sobre sí mismo, para acostarse dándole la espalda.
Tal vez si sería otra noche de trabajar para poder dormir y de dormir para poder volver a trabajar.
Hermione se volvió a acomodar en la cama y se quedo dormida minutos después.
