Por siempre a tu lado.
Disclaimer: Los personajes pertenecen a Nickelodeon y Stephen Hillenburg
Había pasado un año desde el regreso de Arenita al Fondo de Bikini, Bob Esponja no podía estar más feliz con Arenita como su novia.
— Arenita, no sabes cuanto te extrañé. — dijo la esponja en un momento profundo entre ellos dos.
— Puede que yo te haya extrañado más. — dijo la ardilla sonriendole al chico.
— Arenita, nunca te lo había dicho pero me enamore de tí en el primer instante en que te vi. Y entre más te conocía más crecía este sentimiento. Y cuando te fuiste me deprimí, pero has vuelto, has vuelto por mi. — dijo Bob, triste y feliz a la vez.
La ardilla se sentía muy bien, el saber que el muchacho de sus sueños la amaba desde el primer día que la conocía.
— Estaré siempre a tu lado, y espero que tu siempre estés junto a mi. — dijo el muchacho de ojos azules tomando la mano de Arenita.
— Ay Bob Esponja, no te pongas de cursi. — dijo la chica sonriendole a la esponja.
— ¿No te gusta? . — preguntó la esponja.
— Si me gusta, solo que me siento culpable de que por mi culpa, por mi ignorancia te hayas deprimido. — dijo la ardilla mirando los ojos azules del muchacho.
— Jejejeje, nada de eso importa ya, eso es pasado, no podría estar triste si estas a mi lado, te amo y nunca dejaré de hacerlo. — dijo la esponja dándole un beso en la mejilla a la ardilla.
— Sabes, el mejor experimento que he hecho es el de el respirador, así no tengo que usar ese molesto casco ni el traje y... — dijo Arenita mirando a Bob Esponja.
— Y...¿que? — preguntó el rubio, curioso.
— Porque puedo hacer esto. — dijo la ardilla, besando a la esponja.
— Jejejeje, oye Arenita... — dijo la esponja, algo sonrojada.
— Sip. — respondio la chica.
— Bueno, hemos sido pareja desde hace un año, yo te amo, eres la mejor chica que haya existido, eres linda, amable, divertida, eres genial. Asi que yo... quiero preguntarte si tu...
— Sólo dilo y ya. — dijo Arenita algo impaciente.
— Arenita, ¿quieres casarte conmigo?. — dijo Bob, rojo como un tomate.
Arenita estaba algo sorprendida, pero aún así le sonrió.
— Si, Bob Esponja, si quiero casarme contigo. — dijo Arenita, abrazando a Bob.
Continuara...
