… Antes de Leer…
Bien, antes de nada quiero situaros. Nos encontramos actualmente en la temporada tres. Adelanto la entrada a las oficinas tanto de Sturgis como de Coates. El capítulo podría ser el de "A la Deriva I, II", pero sin boda, sin Mic, sin René y sin poder evitarlo, con accidente de avión incluido. Para no variar, sigo con mi manía de Egipto y toda aquella zona, aunque esta vez, prometo que no habrá momias de por medio (pero alguna boda, si). Y lo último, es que me declaro seguidora oficial de los principios de Acinipo (S.O.P.A. –No le veo la gracia al nombre ¬¬), esto quiere decir que puedo hacer cualquier cosa con Mac y con Harm, pero NUNCA, NUNCA, NUNCA los mataré.
Después de este pequeño trocito-sermón de la biblia, os dejo con el principio del capítulo.
………………………
Prólogo
Suena el teléfono, obligando a despertarse a la propietaria. Extrañada, levanta el auricular y con voz somnolienta contesta. Su jefe le pide reunirse con él en la oficina, pese a la hora que es. Lo único que le dice es que son malas noticias, y el tono usado para ello la asusta. Afirma que estará allí y cuando cuelga, comienza a vestirse.
…
Las puertas del ascensor se abren y dejan ver a su ocupante. Cuando Mac sale, observa a todos los presentes. Sturgis, Bud, Harriet, Coates, Gunny y ahora, ella. Se acerca a ellos, que la saludan apenados. Dirige su mirada a Harriet, la cual llora desconsoladamente en brazos de su marido, el cual tiene los ojos cerrados y le acaricia la espalda.
Sin esperar, Coates avanza hacia el despacho del almirante y le avisa. Vuelven los dos juntos y cuando AJ va a llamar a Mac, la televisión capta su atención, quedándose paralizada al escuchar lo que el presentador del informativo comunica.
"Última hora desde el mar Rojo. Continúan desaparecidos los dos pilotos de F-14 que realizaban sus pruebas de vuelo. Halley Swan está en directo desde Safaga. Dinos Halley, ¿alguna novedad?"
"Lamentablemente no, Jack. Continuamos a la espera de que algún miembro de a bordo del USS Sea Hawk haga alguna declaración oficial. Según fuentes cercanas, los dos pilotos de combate, que pilotaban un F-14 Tomcat cayeron al mar hace aproximadamente hora y media. Desde nuestra posición hemos visto pasar varios aviones y algunas cazas más, buscando seguramente a los dos pilotos."
"¿Han encontrado los restos del avión?"
"Tampoco."
"Gracias Halley. Volveremos a conectar contigo en las próximas horas. Ahora vamos con nuestra corresponsal en Washington DC, Michel O'Donell."
"Buenas noches, Jack. Como podéis comprobar, continuamos a la espera de que el Secretario de Marina de una rueda de prensa, en la que aclare las causas del accidente. Según fuentes próximas a la secretaría, los dos pilotos, un comandante y una teniente, salieron eyectados del avión poco antes de que este se estrellase contra el mar. La teniente Elizabeth Hawkes está destinada a bordo del portaaviones y en estas pruebas eral la RIO del teniente comandante Harmon Rabb Jr, actualmente destinado como abogado militar en Falls Church. Esperamos a que el SECNA confirme o desmienta esta información."
"Conectaremos contigo cuando vaya a comenzar la rueda de prensa. Mientras tanto…"
Ch:
Coronel, a mi despacho. –Al escuchar la voz de su jefe, Mac sale de
su letargo y le sigue-. Siéntese, Mac. –Suspira-. Esperaba ser yo
quien le diera la noticia, Mac. El capitán del Sea Hawk ha llamado
al SECNA, y el secretario a su vez me ha llamado a mí.
Lamentablemente todo lo que ha escuchado en la televisión es cierto.
El comandante Rabb volaba sobre el mar Rojo cuando por causas
desconocidas tuvieron que eyectar. De momento es todo lo que
sabemos.
M: ¿Qué van a hacer?
Ch: El SECNA asegura que harán
todo lo que puedan. –Cuando Mac iba a protestar, él la detuvo-. La
respuesta es no, coronel. No puede ir allí. Es una orden.
M: Si,
almirante.
Ch: La he llamado para que lo supiera. Ahora puede
quedarse aquí o marcharse a su casa. El secretario ha dado el día
libre a todo el personal, con lo cual… -Mira su reloj-. Hoy no hay
que venir a trabajar.
M: Prefiero quedarme, señor.
El almirante solamente asiente y Mac se marcha. Cuando sale del despacho, se encuentra con Harriet, la cual continúa llorando. Sin decirse nada, las dos oficiales se abrazan. Bud y Sturgis contemplan la escena, impotentes. Lo único que pueden hacer es esperar.
