Skip Beat! no me pertenece.
SIEMPRE TÚ.
PRÓLOGO.
Volver al país que alguna vez consideré mi hogar, en donde nací, crecí y en donde viví tantas cosas... Pero no así. Sola. Volvía a Japón sola...
Ya en el aeropuerto, después de terminar todo mis papeles, me dispuse ir a buscar un taxi... No hizo falta, allí estaba Sebastian esperándome y en una limusina. El presidente nunca cambiaría, no sé por qué aún me sigue sorprendiendo.
El viaje por la ciudad fue en un cómodo silencio, no quería escuchar palabras de consuelo, no quería, no las aceptaba... Jamás las aceptaría...
Tokio era el mismo; yo no era la misma. Vivir por cuatro años en Estados Unidos fue una gran experiencia y crecimiento personal.
«Kyoko...»
No podía ser, esa voz en su cabeza, me había perdido completamente en mis recuerdos y en su voz. Como siempre me pasaba. De nuevo no... No podía seguir así...
Necesitaba volver en sí, ese momento llego al llegar a la agencia...
Fuimos directamente a LME, estaba igual a como la recordaba... Que nostalgia, volver a mi hogar.
La puerta de la limusina se abrieron ante mis ojos que involuntariamente se encontraban llenos de lágrimas.
— Kyoko-chan— Gritó el presidente, lleno de emoción, al verla llegar...
Había muchas preguntas a las cuales no estaba dispuesta a responder, la atención de las personas de LME era abrumadora. No quería la lastima de nadie. Volvía por trabajo y para tratar de olvidar...
Continuará...
