Capitulo 1:
Hola! Bueno, yo soy la "creadora" de una historia que 7 años después del nacimiento de Rennesme. Pondré algunas partes (las iniciales) en las que hablare por parte de todos los personajes, mostrando todas las cosas que han pasado. Los únicos que han sido un poco aburridos son Esme y Carlisle, ya que se incluyen hasta a los quileutes. Espero que les guste…
Prologo:
Rosalie POV:
Iba corriendo por el bosque de Forks, con Emmett atrás mío. Debo admitir que algunas veces soy mucho más rápida que él. Cuando casi llegue a casa, escuche un latido de corazón bastante raro, luego escuche un segundo corazón, igual al otro. Me era muy familiar ese ritmo, pero no lograba recordar de quien los había escuchado.
-¡Emmett!- Grité y luego pare en seco.
El paro a mi lado y me miro preocupado.
-¿Qué pasa, cariño?- me preguntó.
-¿Escuchas eso?- le dije e indique la dirección en la que provenían los latidos.
El escuchó con más atención y luego asintió.
-Suenan como unos raros latidos- respondió- similares a los de Nessie.
Mis ojos se abrieron ante la sorpresa y el reconocimiento. ¡Nessie! ¡De ella provenían esos latidos! Lo más probable es que esas dos personas fueran híbridos. Me vino la curiosidad, así que decidí ir a verlos.
Corrí hacia donde los latidos provenían y luego pude oír como Emmett corría atrás mío. Cuando llegue al lugar, no pude creer lo que mis ojos veían. Habían dos bebes de aprox. 1 año. La niña tenia el pelo de un rubio bellamente dorado, de tez pálida (lógicamente) y ojos grises, pero muy brillantes. El varón tenía el pelo negro como la noche, la tez muy pálida y los ojos azules brillantes. El niño me recordó al hijo de mi ex-amiga difunta, y también a Emmett. La niña podría pasarse, bastante bien, como mi hija, al igual que el niño.
-No puede ser- murmure, completamente sorprendida.
- Son hermosos- dijo Emmett, en el mismo nivel de sorpresa mío.
- Son híbridos- dije.
Una idea alocada cruzo mi cabeza, pero conociendo a Emmett, supe que quizás podría hacerse realidad. Voltee a verlo, con una sonrisa esperanzada en la casa.
-Se parecen mucho a nosotros- comente.
En el momento que dije eso, Emmett supo a lo que me refería. El sabia que lo que siempre quise tener fue bebes, pero por mi maldito status de vampira, no podía concebir hijos.
-¿Qué pasan si tienen padres?- me pregunto, sonando, por primera vez, realista. Yo solo enarque una ceja.
-¿Crees que un vampiro elegiría a una humana? Lo más probable es que el vampira la hubiera abandonado al enterarse de que estaba embarazada- le respondí. Edward fue un vampiro idiota al poner en riesgo a Bella, pero ahora me arrepiento de haberle reprochado por su enamoramiento, ya que ambos son felices y tienen a Nessie, quien esta en sus perfectos 6 años, pero aparentes 17.
-¿En serio quieres adoptarlos?- Me pregunto, serio.
-Si- respondí, con una sonrisa- ¿Y tú?
-Lo que te haga feliz, también me hace a mí-
-Es un hecho, serán nuestros hijos- dije, lo mas contenta posible.
Nos abrazamos y luego fuimos donde los bebes. Yo tome a la bebita y Emmett al varón, ninguno de los dos hizo líos ante nuestro acercamiento.
-A ti te pondré…- le dije a la bebe, pensando un nombre femenino, hasta que se me ocurrió uno muy apreciado por mi- Anette… Anette Amelia Cullen Hale.
Sonreí ante el nombre y luego mire a Emmett.
-Y tu serás Matthew Steve Cullen Hale- le dije al bebe.
Emmett me sonrió y se me acerco para besarme.
-Tenemos que decirle a Carlisle- dijo, después de cortar el beso.
-Tienes razón- admití- Vamos.
Giramos y empezamos a correr hacia la casa, cada uno con un bebe en brazos. Estaba tan contenta que si pudiera llorar, en este momento lloraría de alegría.