Disclaimer: Soul Eater no me pertenece, es de Atsushi Okubo. "Te amo" es una canción de Rihanna. Lo único mío es este intento fallido de fic y el nombre de Fem!Soul.

Título: Te amo.
Pairing: MakaxFem!Soul
Advertencias: Yuri (si no te gusta, no leas). Genderbending. Uso del nombre femenino de Fem!Soul (Soun).

Mi primer intento frustrado de Yuri. Orz, me quedó del asco xD Y lo peor es que no sé si tengo faltas de ortografía o no, el maldito Word Pad no me las muestra e.e Anyways, este fic salió de un momento de total randomess. No sé si tendrá segunda parte o no, por lo que mientras le dejaré en "Complete". De antemano, ¡muchas gracias por sus reviews!


Te amo

"That doesn't mean that you want"

— Te amo — me susurró, mientras que sus ojos brillaban de una manera que me hizo estremecer.

Sujetó mi mano con fuerza, para luego entrelazar nuestros dedos. Y me sonrió. Correspondí el gesto, con otra sonrisa. Pensé ciegamente que ella se refería a ese cariño que nosotras nos teníamos. El de un par de buenas amigas. El de una Técnico y su Arma.

Soun para mí era más que una compañera. Era alguien en quien podía confiar, en quien podía desahogarme. En quien podía depositar toda mi fé. Era mi mejor amiga.

Pero... ¿yo era lo mismo para ella?

— Te amo — repitió, pasando su mano libre por mi cabello, mientras que ambas nos acurrucábamos mejor bajo las sábanas de mi cama. Hacia frío afuera, y la tormenta hacía vibrar las ventanas de mi habitación.

Soun le temía a las tormentas, y cada vez que llovía como si el mundo se fuese a acabar mañana, ella entraba a mi cuarto y se metía en mi cama. Y yo la abrazaba entre sueños, queriendo decirle que no la dejaría sola.

— Yo también — dije sin pensar. Para mí, "te amo" era como decir "te quiero". Te quiero por ser una gran compañera. Te quiero por ser mi mejor amiga. Te quiero.

Ella lo sabía, y por eso sus ojos siempre brillaban llenos de tristeza. No sabía que pasaba por su cabeza, y realmente no quería saberlo. Me dolería. Me lastimaría saber que mis sospechas eran correctas y que la estaba lastimando con mis palabras.

Pero Soun sonreía, y aquello me decía que no le importaba lo que significasen mis palabras. Que estaría junto a mí, a pesar de todo. Me sentí la peor amiga del mundo.

— Lo sé — sonríe.

— Lo lamento.

— No tienes porque hacerlo — cerró sus ojos, cansada —. Mejor hay que dormir, ¿de acuerdo?

Asentí, de manera inocente, e imité su gesto. Cerré los ojos y pegué mi frente a la de ella para poder conciliar el sueño de una vez, mientras que en mi interior me regañaba a mí misma por darle estas falsas iluciones.

Su "te amo" no significaba un "te quiero". Ella me amaba, y yo lo sabía. Pero nunca sería capaz de corresponder a ese sentimiento, por mucho que quisiera hacerlo.