Previo: he de aclarar, no soy autor de esta historia... pero están fabulosa, que merece ser compartida... simplemente gracias a la persona que fue capaz de idear esta trama...

¿Qué es experimentar algo nuevo? Es decir es algo complicado conocer algo desconocido para uno, en ese proceso de conocimiento uno suele temer, o aludir dicho conflicto, podría decirse que la experiencia a lo nuevo es como un reto, es como una aventura, en donde la voluntad y la fuerza de superar los miedos están en el limite. ¿Cómo no demostrar que somos débiles a lo nuevo? Podemos mostrar un rostro erguido dejando en claro al otro que nosotros conocemos y que sabemos a lo que nos afrontamos, pero…. Y si no tenemos esa capacidad de engañar con el rostro o con las actitudes corporales, no nos queda mas q admitir ante nuestros propios ojos que atravesamos por una situación que en todas las pautas nos supera.

Miedo…. es un sentimiento común, es un sentimiento incontrolable, en donde el organismo humano se siente intimidado, en donde sus movimientos tienen un ritmo torpe y confuso, es decir hablamos de aquel miedo que nos deja vulnerable a otros, aquel que nos derrumba…. ¿A qué le tenemos miedo? Pues la respuesta será expresada en base a la primera pregunta planteada, "Experimentar algo nuevo" eso es lo que nos hace débiles, el no conocer, el no saber que pasa o que va pasar, ¿Quien cura eso?, nadie… solo nosotros podemos afrontando la frontera de lo nuevo, no temiendo y actuando.

Crecemos y nos desarrollamos, eso es lo que le pasó a Harry Potter, creció de una manera muy rápida, no era ya un niño de 11, tenía los 16 para los 17 años, los años pasaron, como también el desarrollo físico del muchacho. Ahora su constitución física denotaba que aquel joven que una vez fue una pila de huesos era casi un hombre con firmes proporciones en todo el cuerpo, ¿Cómo lo consiguió? Se preguntaran, y la respuesta es simple, sus constantes actividades con el deporte de los magos, su ritmo de vida frenético, enfrentando todo tipo de males, como también la buena alimentación del colegio y de los manjares de Molly, sin olvidar que su novia Ginny le brindaba también manjares más deliciosos, lo consentía en todo. Internamente a veces pensaba que era un niño de 11, pero las batallas con los magos más malvados y macabros del mundo mágico lo ayudaron a madurar después de todo.

Partimos inicialmente de este joven que va creciendo y conociendo mas la vida. En este momento él, Harry Potter atravesaba un sentimiento raro nunca antes conocido, y eso le daba miedo, lo experimentó con Cho, esa sensación que te deja el estomago hecho revolcones, el frío interno, las sudadas típicas de las manos, sus rostro, su figura tenía miedo a lo desconocido, y eso no era algo normal, el nunca temía, su valentía se ponía a prueba con este sentimiento que le torturaba, quería conocer…. Pero a la vez no sabía, temía conocer y fallar. Estamos hablando que este joven mago, necesitaba una guía en sus actitudes deseo corporal, alguien que le muestre como besar, sentir, tocar, acariciar a la futura madre de sus hijo, sabía que ella era joven mas que el, pero sus hormonas masculinas ya partieron la carrera, y no se iban a detener hasta llegar a la meta. Desconocía eso que le nacía cada vez que el Ginny estaban solos y propinándose tiernos besos, que no pasaban de roses sin malicias, que hace un largo tiempo Harry dejo de sentir lo mismo por esos labios, el quería algo más, él quería, pero a la vez temía a algo más.

Harry se encontraba en la sala común, en ese momento en el sofá de la misma, y besando los labios de su novia, con inocencia. Eran las 12 de la noche y nadie los molestaba. Harry dejó de rozar esos labios y miro fijamente a Ginny a los ojos - ¿Tienes sueño? - le preguntó torpemente, la verdad en ese momento estaba en blanco y esa pregunta fue la que se le escapó de la comisura de sus labios.

-Creo que si- soltó ella, pero volvió a besar al moreno, sorprendiéndolo. Él no pudo detener ese nuevo rose tierno, pero no lo sentía es decir su novia lo estaba besando y el no sentía nada de nada, eso no era posible, no sabía si era por el beso de pajaritos que siempre se daban o porque el y ella no sabía como hacerlo para provocar oleadas de deseo y sentimientos cálidos comunes. Ella dejo de besarlo y lo miro fijo, su mano se poso en el pelo del moreno, lo peino delicadamente - Que descanses… - Soltó la pelirroja, mientras que se levantaba y dejaba a un Harry con ganas de conocer lo desconocido por él. Pensó "Pero…. Noooo, no te vayas todavía", solo lo pensó no lo dijo, ella ya estaba subiendo las escaleras.

-Que demonios…. - se maldijo, posando sus manos en la cabeza, para luego colocarlas a los extremos de sus rodillas- Bien…. Potter, una vez más no conoces… a tu novia -Tiro un bocanada de aire, con signo de desaprobación. Y sus ojos verdes se posaron en la chimenea caliente de la sala. No supo cuanto tiempo estuvo mirando las llamaradas, pero una mano en su hombro lo despertó de sus pensamiento, volteo a ver quien era el culpable de hacerle regresar al mundo. Su rostro cambio por completo, una tierna sonrisa surco sus labios, la misma fue correspondida, sostuvo la mano de esa persona un rato, digamos unos segundos -¿No deberías estar entre las sabanas? No son horas adecuadas para que estés afuera de ellas- Soltó el moreno, la persona se acomodo a su lado.

-Creo que no estas para regañarme Harry - bufó la joven, con una voz dulce y tierna - soy yo la que te regaña siempre sin más no lo recuerdo…-El moreno sonrío mas ampliamente

-Si, eres Granger, la regañadora mágica-Ella frunció el ceño, pero no porque este molesta- ¿Ah si? Pues bueno…. Así te comportas un poco….-Luego de esa ultimas frases ninguno de los dos dijo nada, un par de veces se miraron de reojos, y en cada mirada una sonrisa surcaba en los labios de los dos, como si estuvieran diciéndose algo que les gustara a los dos- ¿Por qué tan cayado?-Soltó ella acomodándose en el sofá-

-¿Por qué tu… tan callada?-Dijo Harry, levantando las cejas.

-Oh, disculpa señor Potter… pero yo pregunte primero-

-Disculpe señorita Granger pero… me gusta el silencio y ¿usted?-Dijo con picardía, ella soltó una carcajada, que en ese momento Harry se quedo helado al escucharla, era… dulce, como el de una chiquilla pequeña, sus facciones lo dejaron más frío la miro fijo por unos segundos, mientras ella solo lo miraba divertida-

-Yo solo quiero ayudarte… lo sabes-

-¿Con tu silencio?-

-No… con mi compañía-

-Oh -Soltó el moreno-

-No digo nada… porque tu no me cuantas nada - Harry desvió la mirada.

-No tengo nada que contar, Hermione - luego la miro de nuevo - Tu conoces todo de mi… -

-No todo…-

-¿A que te refieres.. con no todo?-

-Dime tú-

-Oh, vamos regañadora…. –

-Dilo Potter-

-Dilo tú-

-Dilo tuuu-

-No! Dilo tu-

-Pues dilo tu..-

-ohhhh, vamos!-Soltó Harry con impaciencia- Dilo

-Soy muda en este momento…. Hasta escucharte - Harry rodó los ojos, y la sujeto de la cintura, para comenzar a hacerle cosquillas, ella trato de safarse, el moreno sabía que su debilidad eran las cosquillas, y que no tardaría en decir o soltar una carcajada.

-A ver si se te quita lo muda-Dijo Harry colocándose sobre ella, no paso ni un segundo que Hermione soltó una carcajada tan dulce, que los tímpanos de Harry lo escucharon como un eco en sus oídos, el se detuvo en el acto. En ese momento se dio cuenta que la posición en que se encontraba no era común entre ellos dos, y sin previo aviso, la mano de Harry acaricio la mejilla de la castaña, desconcertando a la misma, su sonrisa juvenil se borro al ver a un Harry con diferente mirada.

-¿Es esto verdad? - Harry no entendió esa pregunta-

-¿Cómo?-

-Necesitas estar con Ginny de diferente forma-Soltó Hermione, esa palabras lo despedazaron. El se incorporó molesto, nervioso-

-No es eso, no pienses cosas que no son-Dijo mirando a la chimenea, las llamas se estaban apagando.

-Harry, te conozco como a nadie… sé que tu relación con Ginny se esta apagando como las llamas de esa chimenea-El volte.

-Regañadora y también adivina, lo que me faltaba-

-¿Entonces lo aceptas?-

-Si, a ti no te puedo negar nada….-

-¿Ya no te gusta Harry?-Esa pregunta le descoloco-

-Si… yo la quiero…y…-Ella la interrumpió-

-¿La deseas? - Harry trago saliva con dificultad, "Mendiga Hermione, como me pregunta eso" pensó-

-Pues…-Hizo una pausa- me gusta…-

-¿Mucho?-

-OH, vamos... ¿Que es esto un cuestionario?-

-Puede si, ¿Qué sientes cuando la tienes junto a ti Harry? Te hablo de ahora, tus sentimientos de ahora-

-La quiero-

-¿Y el deseo?-Harry la miro con temor, esa no era la Hermione que conocía, bueno… si lo era pero nunca antes hablaron de esos asunto, de deseo o sentimiento de atracción etc, etc-

-¿A que quieres llegar?-Bufo Harry molesto, como defendiéndose del cuestionario-

-¿Qué quieres conocer Harry?-

-Nada…-Bufo él nervioso-

-Quiero ayudarte-Harry solo sonrió de impotencia, "¿Ayudarme?, pues que consigas que Ginny me acaricio y que yo acaricie, el besarle profundamente, conocer las caricias que no puedo brindar por cobarde, por miedoso, como dibujar en el cuerpo de una mujer sentimientos físicos inalcanzables, así me ayudarías" pensó-

-¿Se puede saber como?-Ella se acerco al moreno, lo sujeto de manga del uniforme y lo estiro. Salieron de la sala común, en el trayecto las pisadas hablaban en un compás. Harry no sabía a donde su amiga lo estaba llevando, solo movía los pies, en un determinado momento la joven miro atrás y como viendo si no había nadie en el pasillo, cuando lo hizo luego poso sus ojos en el moreno y le brindo una corta sonrisa, que a Harry le dio escalofrío, "¿Qué es esto?", pensó. Ella después de un rato de caminar, y de que Harry solo la miraba como tonto, se detuvo, él choco con ella, estaban en frente de una puerta vieja y extraña, Harry no recordó verla nunca. Ella abrió la misma-

-Vamos…-Soltó en un casi susurro. Harry la siguió-

-Bueno…. Regañadora, me explica en este momento que se supone ¿que hacemos aquí?-Harry miro el cuarto, detenidamente, mientras esperaba respuesta de la castaña. El mismo estaba en oscuras, lleno de estantes con cosas viejas, como objetos antiguos y pequeños-

-Comencemos quieres-El abrió los ojos de par en par, "¿Comenzar que?", pensó-

-Fíjate… que por primera vez desde que te conozco no puedo saber lo que piensas-

-Yo también quiero conocer lo que tu no conoces y quieres conocer, pero te da miedo-La sangre de Harry se congelo, ahora entendió un poco lo indirecta de su amiga, aunque duela admitirlo era lo que el más temía-

-Estas bromeando, te juntaste mucho con Ron últimamente ¿no?-

-Yo nunca bromeo-Ella se sacó su corbata y desprendió los primeros botones de su camisa, liberando su cuello de la presión, Harry camino dos pasos hacia atrás-

-Sé… Sé un poco mas clara quieres…-Dijo muy nervioso Harry, tratando de fijarse en un objeto en uno de los estantes-

-Estas cansado de besar a Ginny como lo haces…-"Correcto", pensó el moreno- ….quieres conocer más de ella porque tu cuerpo te lo exige…-"Mierda", pensó nuevamente- ….yo estoy casi igual que tu, pero no me preocupan los besos, sino las caricias y llegar mas lejos, en tiendes?-

-ehh… ehhh….-"Esto no esta pasando", se dijo Harry internamente-

-Te voy a ayudar… como tu me vas a ayudar…-Se acerco al moreno, sus manos se colocaron en la corbata del pobre descerebrado de Harry, que no sabía y no podía actuar, era mucha información sorprendente la que su cerebro captaba. Saco la corbata de un tiro, desabotono también los botones del cuello del moreno-¿Quieres que te ayude? Porque yo necesito de tu ayuda…-Le soltó, mirándolo a los ojos-

-Asi… que comencemos…-Ella no pidió permiso de nada, a su parecer no lo necesitaba, así que sus labios los pego al de su amigo, y no solos los pego, si no que casi le come los mismo al moreno, que en ese momento era una estatua de piedra, incapaz de articular movimiento alguno. Dejo de besarlo- No me estas ayudando en mucho, Harry-

-Ehhhh….-

-Se que te sorprende… pero creo que es lo mejor para los dos-

-Yo….-

-Tu me gustas Harry….-Soltó ella- no se si te ame, solo me gusta sentirte cerca, muy cerca…. Sentir tu aliento, solo sentirte junto a mi-"Miércoles, Martes y Juevesss…" pensó Harry, ¿que era eso?, Hermione Jane Granger declarándose de esa forma y a ÉL… La verdad no pensó mucho segundos lo que le dijo la castaña, más bien con esas palabras se sintió libre, así que la agarro de la nunca con las dos manos y la acerco a su labios besándola como nunca antes beso a nadie, es más en su cabeza recorría el pensamiento de que esto no era normal, estaba sintiendo miedo, pero mucho miedo, y el estomago se le revolvía de sensaciones, la piel se le erizaba. El beso no iba a cortarse hasta que uno de los dos muriera en el intento, era como si les quedaba poco tiempo para hacerlo y que nunca más lo iban a hacer, pero el ritmo frenético de labios sucumbió por las dos partes-

-Guauuu….-Dijo Harry en un susurro acompañado de fuertes respiraciones, necesitaba recuperar el aliento, para poder decir o hacer algo más-

-Vez…. –Dijo ella, con cansada voz-no es… tan… difícil…. -Agitada y tratando de recuperar la voz. Ella se separo del moreno y camino hacía uno de los estantes. Harry seguía sintiendo tantas cosas en su interior que no captaba lo que pasaba a su alrededor, acababa de conocer un beso de verdad, no unos simples roces y para mala suerte de el no era con Ginny, sino con su mejor amiga, y para empeorar la situación a tal extremo, querría seguir haciéndolo sin para. Pasaron un par de minutos, no muchos pero los suficiente para recuperar la respiración faltante, ya que su agitación se podía distinguir, a simple vista-

-Gra-gracias…-Soltó el moreno-

¿Cómo borrar el sabor y le recuerdo de algo q te descoloco para toda la vida? Eso se preguntaba Harry, mientras caminaba por los pasillos de Hogworts, la noche anterior había probado los labios de su compañera, amiga, y confidente de una manera indescriptible, toda esa noche después de ver partir a su amiga del recinto en donde conoció el sabor y la calidez de un beso intenso; esos que son venenosos, ya que los mismos te atrapan a morir en el intento de seguir disfrutando de los mismo, había perdido el apetito, el sueño, y se podría decir q la razón. De su mente no salía el pensamiento de mandar todo al demonio, e ir a plantarle cara a esa joven, q ahora no lo miraba mas a los ojos, solo sonreía cuando sabía que los ojos del moreno estaban posados en ella, eso lo mataba, lo impacientaba más. Era definitivo Harry Potter probo el pecado del deseo y quería, mas… El Harry inocente y miedoso de experiencia se fue y para siempre, lo q paso solo fue un beso, pero ese beso era el comienzo de algo imparable, había tantas cosas que le agradaba conocer, que antes temía realizar, pero la guía a la realidad lo despertó por completo de su miedo a lo desconocido, esa noche en su alcoba se propuso llegar mas lejos, y no precisamente con Ginny, sino con la castaña que en este momento se apodero de su cuerpo, no podía creer que lo que sentía era deseo…. Era fuerte, muy fuerte, sus hormonas estaba a mil, es decir la luz del camino fue a lumbrada y ya no se iba a apagar más, no quería esperar nada… no tendía porque, ella le dejo en claro que lo ayudaría, porque ella misma necesitaba de esa ayuda, ella quería conocer, y lo mejor era que los dos eran amigos y se conocían bien, era bueno experimentar con alguien que te conoce y que tu conoces como nadie. Todo estaba a su favor, excepto por el pequeño detalle que su dulce Ginny tendría unos cuernos mas grandes que un alce, pero todo era por ella, bueno eso es lo que él pensó, es decir, Harry adquiría experiencia, con eso podía concegir confianza y asi actuar mejor con Ginny, sin miedo, si tapujos, Hermione podía se la clave de su problema, su pensamiento era egoísta, porque se fundamentaba en la mentira, el engaño y el pecado de desear a una persona que hace unos años atrás era como su hermana, "Soy egoísta", se dijo, "Solo veo mi necesidad, pero ella necesita lo mismo", volvió de decirse.

No se fijo en su camino y en quien estaba en el, así que choco con un alumno de cuarto año, q llevaba unos libros a la biblioteca.

-Mierda!-Bufo el muchacho-

-Oh, disculpa-soltó Harry mientras se agachaba a recoger los libros y así ayudar al joven, q estaba nervioso y ofuscado-

-Voy a llegar tarde!-Dijo el muchacho mientras estiraba con brusquedad el libro de la mano de Harry-

-¿Tienes clases?-

-¡Pues no es obvio! fijate mas en tu camino Potter-Se levanto de golpe- tendré q devolver después los libros-Eso lo dijo mientras caminaba hacia la dirección contraria del moreno-

-Oye!-le grito Harry-

-Y ahora que!?-Dijo el joven volteándose- no ves q estoy retrasándome…?-

-Dame los libros…-Soltó Harry mientras q se acerco al joven, estiro las manos para pedir los libros- Yo los llevare si quieres…-El joven frunció el seño levemente, dos segundas después le paso los libros a Harry-

-Siento lo que te dije potter, pero…-Harry hizo un geste de que todo estaba bien- Gracias… -El joven se marcho rápidamente, digamos que corriendo. Harry volteo hacía la dirección donde se estaba yendo hace un rato hasta que choco, en su rostro se dibujo una sonrisa picara y casi malévola "Una excusa Granger", se dijo internamente-

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Hermione estaba revisando unos estantes, observando cada tomo, cada titulo de los mismo, buscando un libros que le ayudaría a su ensayo de pociones, pero por extraño que parezca la joven cerebrito no encontraba nada, estaba como ida, la verdad era que prácticamente había perdido el juicio de la razón, es decir actuó por atracción la noche anterior, vio o imagino una posibilidad de conocer lo que la intrigaba desde lo de Krum, y sin mas preámbulos se lanzo al abismo de las posibilidades con su fiel y único amigo Harry, la verdad era que la misma nunca comprendió ese calor que sentía cuando estaba junto a Harry, hasta que lo experimento con el acercamiento en cuarto año del búlgaro, desde ese momento supo que Harry no era solo un amigo, sino un amigo q deseaba físicamente, podría estar confundida o equivocada, pero de cierto forma Harry despertaba hormonas en ella, desde hace un par de años, solo que era muy joven para saber que era eso, podía maldecirse por a ver actuado como lo hizo la noche anterior pero lo que pasó le salio espontáneamente, es decir ella negaba que sea Hermione Jane Granger, la que actuó así era Hermione despreocupada, esa parte no la conocía y el culpable de esa nueva parte en ella, era un joven moreno de ojos verdes intensos, con un cuerpo envidiable para su tan corta edad. "Eres una atrevida Granger", se dijo mientras sus mejillas se sonrojaron un poco, y una de sus manos sacaba un tomo del estante, lo abrió y empezó a leer o mejor dicho a mirar, porque no captaba nada. No duro mucho su estado de miramiento y cero lectura, cerro el libro de una, cuando lo iba alzar y colocar en el estante de nuevo, una mana se estiraba enzima de la de ella, y comprendió que era él, tenía que ser el, era su olor no cabía duda de ello. El libro fue colocado, las manos seguían juntas, y Hermione sintió el primer escalofrío, Harry respiro en su oído-

-Ayúdame… y te ayudo-Le susurro cargando su respiración en el oído de ella-

-Esta noche a la misma hora-Dijo ella cuando se volteo sin míralo a los ojos y tratándose de marchar de ese rincón. Pero como dije tratándose, quise denotar que no pudo retirarse rápidamente ya que un Harry diferente y más confianzudo la sujeto del brazo y la jalo hacía si. Ella miro al final de pasillo, por si nadie venía, se preocupo por el lugar y la situación en que se encontraba, era obvio que ahora la que temía era ella-Nos pueden ver…-Susurro delicadamente siempre mirando el pasillo y no a los ojos de Harry. Este se acerco al cuello de la castaña y lo beso, respiro y olio- Nooo… Harry-Soltó susurrándole. Pero algo en ella le hizo cambiar de parecerá, mas bien se debió a que el moreno volvió a besar su cuello despertando algo en ella, así que la misma aparto de un fuerte empujo al ojiverde que choco fuerte mente con el estante del frente, pero automáticamente el cuerpo de la castaña se coloco junto a él, pegándose a Harry lo mas que podía, y fue ahí donde Harry nuevamente se quedo rígido y fuera de combate, nuevamente no sabía que hacer, Hermione se apodero de la situación en un abrir y cerrar de ojos. Los miel de la castaña tenían un brillo especial diferente, distinto, ella bajo sus manos al abdomen del joven y levanto levemente el pulóver que el mismo tenía, luego desprendido dos botón de la camisa de Harry, metiendo asi su mano y tocando la piel del moreno, él se movió, ya que la mano de ella estaba fría, todo esto lo hizo mirando lo a los ojos, y brindando un seriedad abrumadora. Harry se inclino para besarla, pero ella lo aludió. No se si eso ofendió al moreno o no, pero automáticamente una de sus manos bajaron por la cintura y levantaron la falda de la joven, que le dibujo una pircara sonrisa, mientras que detenía al joven en su intento, él solo le brindo una mirada de mando y de posesión digna de un ofendido, que esta dispuesto a adueñarse de lo que cree es suyo-

-¿Porque no?-Le pregunto autoritariamente-

-Paciencia…-Soltó ella-

-No pretendas que la tenga… cuando me provocas-

-No pretendas… que lo aremos aquí-Dijo seca, mientras se apartaba del joven en un rápido movimiento, él nuevamente la iba a sujetar, pero Hermione actuó mas rápidamente y estiro una de sus manos para tirar unos 3 tomos de libros en el suelo, deteniendo al moreno. No volteo a mirar a Harry siguió su camino- Álzalos…-Dijo mientras se alejaba y dejaba a un Harry molesto-

La batalla que uno enfrenta a veces es tan intensa que nos deja indefensos, aquella lucha de fuerzas, q no tiene limites y q alienta sentimientos de impotencia, temor, desconfianza, valor, etc. Es como un juego de poder, quién esta bien plantado es el ganador de la misma, quien no… solo lucha para luego caer, en muchos casos es un juego de doble filo, q nos gusta decir y aventúranos como una batalla. Las personas estan dispuestas a afrontar todo, con tal de salir victoriosos, pero… ¿Y si las dos fuerzas son iguales? ¿Quién gana? ¿Quién pierde? Preguntas que tienen q ser cuestionadas… Hablamos de fuerzas que chocan por similitud de poder, aquí ahí un empate? Oh, claro q no… en un juego de poder no excite igual, solo el ganar o perder, es simple, se supone q el débil es la victima del juego, pero a su vez el debil tiene lo que el fuerte no… y el fuerte tiene un punto débil, pero es fuerte por naturaleza, asi que su posibilidad de ganar esta latente. Estas dos partes son equitativamente diferentes pero en su esencia no, aquí la ley esta planteada al mas astuto, no importa si es débil o fuerte, la cuestión esta en tener fe, fuerza y entrega.

Es un juego que comienza con actitudes… ¿Quién actúa?

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Harry se sintió indignado cuando recogía los tomos pesados, que hace un par de minutos una castaña había lanzado al suelo y a su vez apagado el incendio interno de hormonas de él. Cuando logro salir del pasillo la busco con la mirada, tenía que estar todavía en ese sitió y asi fue, la joven se encontraba recogiendo sus materiales con movimientos delicados, depositando todos ellos en su mochila. Harry se acerco a la mesa, carraspeo para llamar su atención. Hermione lo miro fijo por un par de segundos, luego cerro su mochila y se la coloco en su espalda ignorando a Harry para luego marcharse sin decir nada, el moreno asumió que ella no iba a decir nada por el momento, así que la siguió, en todo e trayecto de pasillos no dijeron nada hasta que ella soltó un suspiro.

-¿Tienes novia no?-Dijo ella, siguiendo su marcha, Harry estaba atrás miraba el moviendo de la tela de su falda, sorprendentemente creyó distinguir q la misma estaba más corta de lo normal -

-La respuesta es obvia no…-

-Entonces… ve y ponte detrás de ella y observa su falda como lo haces con migo, y no me sigas más-Harry se detuvo en seco, no pudo responder, sus mejilla estaban coloradas y se sintió a avergonzado, "¿Como supo q miraba eso?", se pregunto, mientras ella se retiraba y doblaba en una esquina.

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El plato de comida de Harry estaba intacto por el momento, no quería probar bocado, alzo su mirada al frente y vio a ese lugar vació, sintiendo frustración de no ver la. A su costado se encostraba su dulce y tierna novia; Ginny (futura Miss cuernos de alce), platicando animadamente con unas compañeras, Ron que se sentaba enfrente del moreno, masticaba apuradamente su comida, mientras escuchaba a Neville y trataba de hablar con el, con su típica voz con comida en la boca, era Ron y eso no iba nunca a cambiar. De repente una joven aparecía en el salón, caminando en dirección a su mesa, era ella, la nueva y misteriosa Hermione Granger. Al llegar coloco su libro en la mesa y se sentó.

-Se me hizo tarde-Soltó antes de que Ron le preguntara o cuestionara algo. Se sirvió la comida con delicadez, mirando luego al moreno, Harry no supo porque pero esa mirada lo incomodo, no era la mirada normal, era mas provocativa, y eso hizo que él sintiera vergüenza y mirara rápidamente a Ginny, se sentía observado por su novia, sentía que ella sabía lo que estaba pasando entre el y la castaña, pero eran suposiciones. Lo que realmente pasaba era que Harry sentía miedo de que Hermione empezara a actuar con derecho sobre su persona, es decir los dos estaba juntos y liados en algo nuevo, q esa misma noche iba a comenzar y Harry solo pensaba que Ginny podía captar cualquier actitud sospechosa, total era Ginny y no era tonta en lo absoluto. Harry miro luego su plato, no sabía que decir a ninguna de las personas a su alrededor, excepto a la niña de la falda corta, tenía unas ganas de mandarle al demonio por dejarlo así en la biblioteca, como podía ser tan mortífera su actitud de niña provocativa, para luego entonar esa voz dura común de Hermione Granger, aquella voz que muchas veces lo regañaba para no hacer estupideces. Pero al carajo todo, cuando terminara la cena la iba afrontar en el pacillo, acorralándola y robándole un merecido beso, bueno… eso después de que no hubiera nadie en la redonda, no iba a esperar para la noche, eran muchas horas para los deseos de Harry, demasiadas diría yo, en todo el maldito día la observo en las clases, las actitudes de la misma eran muy llamativas, sin durar Harry sabía que ella incitaba a provocarle un tsunami hormonal en proceso de llamarada, cada vez le gustaba mas esa castaña; la forma en que movía sus labios, aquellos que le enseñaron un beso de verdad, le gustaba sus ojos, especialmente cuando lo miraba fijo, le gustaba su aroma, su sonrisa malvada o provocativa, esa era nueva, antes sonreía con ternura y ahora Harry conocía una sonrisa de doble filo, se pregunto miles de veces como no la noto antes. Sin seguir agobiándose más con las belleza de esa joven misteriosa para el, agarro sus cubiertos y comenzó a comer, aunque de cierta forma no tenía apetito, excepto el apetito de la lujuria del deseo de conocer un cuerpo, en ese mismo instante estaba frente suyo, levanto su mirada hacia ella. Hermione seguía comiendo tranquilamente, mientras que debes en cuando ojeaba el libro que trajo a la mesa, parecía que las palabras escritas en esas hojas eran mas importantes que mirar al frente o pronunciar palabra alguna.

-Amor..-Dijo Ginny, Harry miro a su pelirroja- me pasas la sal...-Harry lo hizo en el acto, como un relámpago derramando su jugo en la mesa-

-Oh, lo siento-Miro como una auto reflejo a la castaña y esta no se inmuto en nada, seguía entre tenida en las paginas de ese libro. Mientras que Harry secaba el jugo de calabaza, Ginny lo ayudaba-

-Oye, Harry-Lo llamo Ron-Parece o sigues nervioso-

-¿Por qué estas nervioso amor?-Soltó Ginny casi un mili segundo después de que Ron terminara de hablar-

-¿Nervioso? Yo?…. No, no creo que aya algo que me ponga nervioso hoy-Finalizo Harry. Ginny le dio un besito en la mejilla, y siguió su conversación, Ron lo miro dubitativo, para luego sonreír y se enfrasco nuevamente en la conversación que tenía con Neville. Harry suspiro, miro su plato, y luego levanto su vista nuevamente a la joven que lo tenía alborotado desde hace un día, sorprendente mente ella lo estaba observando con el ceño fruncido y cierto aire de molestia, carraspeo girando la hoja de su libro, fue en ese segundo que Harry dejo de mirarla, para comenzar a comer, ella lo ignoraba, entonces el aria lo mismo, pero eso estaba por verse, ya que Harry salto de golpe, todos voltearon a mirarlo extrañados.

-¿Estas bien?-Le pregunto Ginny-

-Si… si..-Volvió a acomodarse en su asiento, miro furioso a la causante de esa distracción, ella sonrió levemente. Lo que pasó fue que una traviesa Hermione había tocado la entrepierna del moreno, asuntándolo. El acto travieso no se repitió hasta que Ginny empezó a hablar con Harry, la joven pelirroja le digo algo en el oído al moreno, esta charlita hizo que la traviesa vuelva a actuar, lentamente acaricio la pierna de Harry con su pie, para luego colocarla entre la entrepierna de el moreno, este se encontraba en un estado de desesperación, por un lado Ginny le ofrecía mimos y le decía al oído que lo quería, por el otro lado o mejor dicho enfrente, una joven lo miraba con picardía mientras una de sus piernas estaba incrustada en esa parte sensible para la especie masculina-

-Ginny… yo también-Le susurro a su novia, mientras tragaba saliva con mucha dificultada, y respiraba pesadamente por las sensaciones-

-¿Qué pasa?-Le pregunto extrañada su novia-Estas nervioso…-

-Te lo dije-Dijo Ron volteando y metiéndose en la conversación-

-Ehhh…-Suspiro pesadamente- no… estoy bien-El interrogatorio se iba a cortar porque Luna se acerco la mesa-

-Ginny-La pelirroja volteo a mirar su amiga-

-Me olvide por completo Luna-Se levanto rápidamente, le dio un beso a Harry- Tengo q hacer algo…-Le dijo a su novio, que en ese momento estaba pálido y con cara de idiota-

-Ve!-Grito Harry, después de sentir un leve masaje ahí abajo-

-Nos vemos esta noche-Harry afirmo con movimientos torpes de cabeza. La pelirroja se marcho, cuando su melena rojiza se perdió del salón, Harry suspiro un aire de alivio y fue ahí conde sus manos entraron en acción, atajo el pie travieso de su amiga con fuerza, para luego sacarle el zapato de un tirón, todo paso en un abrir y cerrar de ojos, la castaña se asusto, quedándose rígida en su asiento-

-Chicos… yo me voy con Neville, me tiene que mostrar unas plantas rascadoras-Fue lo ultimo que digo Ron, cuando se levanto junto con Neville, alejándose de la mesa-

-De vuélvemelo-Sentenció con voz baja la castaña, con una mirada asesina. Harry agarro su tenedor y pincho una patata, para luego metérsela en la boca con indiferencia- Sabes que no me gusta repetir las cosas…-Enfatizo la joven, tratando de serenar su mal humor de ahora-

-Primero que nada… Granger, no me gusta ese tonito, como también… no me gusta que me utilicen… y lo sabes bien-Lo pronuncio con calma y en voz baja, para que solo ella pudiera escuchar; los dos estaban rodeados todavía por alumnos así que era mejor no armar ningún tipo de problema-

-Entonces piensas que te utilizo… -La joven se mando la melena hacia atrás- interesante punto, y… tu no lo haces?-

-Pues… -Ella lo interrumpió-

-Yo hago lo que se me cante-

-Y yo no te detengo… es solo… que… Por Merlin! -Se apoyo en la mesa y acerco mas a ella- como se te ocurre… -Miro a sus costados previendo que algún curioso escuchara- …hacer eso! Enfrente de Ginny…-

-No lo pude evitar…-Hermione tomo un sorbo de su jugo y ojeo su libro-

-¿Eso es una excusa?-

-No, es la verdad-Ojeo otra hoja, era tonto hacer eso porque Hermione no estaba leyendo nada desde que se sentó en esa mesa, fingir algo es bueno debes en cuando, a Harry le sacaba de quicio-

-Entonces… cuando se me de la gana… voy a subir tu falda en clases… -Ella levanto su mirada y la poso en esos ojos verdes, que tenían un brillo pícaro-…es más, creo que no puedo evitar en este momento… -Una mano de Harry acarició la rodilla de la castaña por debajo de la mesa, la misma estaba lista para subir mas, hasta que ella le metió un golpe a la mano del moreno-

-Cuidadito… Potter, que ese privilegio no te lo doy todavía. -Estiro la mano-Devuélveme lo que me robaste-

-Prométeme que no actuaras de esa forma cuando Ginny este cerca-

-El zapato-Sentencio ella moviendo la mano como exigiéndole la devolución del calzado. En su cabeza rodaba la idea de que si Harry seguía así ella iba a tener que caminar sin un calzado hasta llegar al dormitorio, y sin falta todos la iban a interrogar-

-Promete-Afirmo un Harry firme y seguro-

-Te la voy a dejar fácil, Harry-

-A ver…-

-¿Qué prefieres más… mi zapato o mi cuerpo…?-Harry se quedo helado como el polo Sur o el polo Norte, o los dos juntos mejor, sus ojos se abrieron enormemente, trago saliva, mientras q Hermione le brindo una amplia sonrisa Definitivamente Harry estaba perdiendo el primer juego de palabras, lo primero que hizo después de un larga asimilación a lo que sus oídos captaron fue soltar el zapato y estirarlo con su pie hacía la dirección de Hermione, quien sintió el movimiento por debajo de la mesa- Me halagas… -Agarro su libro y se levanto. Harry también hizo lo mismo, ya era casi costumbre seguirla y así fue, la siguió hasta esperar el tiempo justo para atacar, si ella juega sucio el también lo iba a hacer sin tapujos, pero para mala suerte del moreno los pasillos de la institución a esa hora estaban casi repleto de estudiantes que se iban a sus salas comunes a descansar. Harry tiro un suspiro de rabia, la paciencia no era su compañera esa noche- Podría decir que eres mi sombra…. – -Soltó ella-

-Y yo podría decir que eres una tramposa-Enfatizo el moreno con erguido semblante

-¿Eso es… mmm… algo como un insulto o q?-Pregunto mientras los dos doblaban en una esquina, y sorprendentemente ese pasillo estaba despejado, oscuro y libre de miradas curiosas. Harry miro atrás de su espalda para ver si nadie los seguía, luego sonrió divertido para el y en su cabeza se dijo BINGO!-

-Jamás te insultaría-La sujeto del brazo, jalándola hacía su cuerpo con brusco movimiento-

-Ni lo intentes…-Puntualizo la castaña poniendo su manos en el pecho del joven para que el mismo no intentara acercarse mas de lo debido-

-¿Tu juegas y yo no juego?-

-¿Qué juego?-Ella le contesto con una pregunta-

-El de… niña mala y niña buena-Ella se rió-

-Ah, y tu quieres jugar al niño malo?-

-Si me dejas y no me cortas la inspiración si-Ella se rió mas fuerte-

-Iluso… hasta el fondo-

-Ah, si?-

-Si-Una mano de Harry subió por la cintura abriéndose paso por ese cuerpo hasta posarse por el mangar de cuello dulce que tenía tan cerca- Detente… o serás castigado-Le advirtió la castaña-

-Lo siento pero… no importa…-Y sin mas preámbulos y vueltas al asunto, la jalo por el cuello y le planto un flor de beso. El calor broto por los poros de la castaña como también del moreno, sus cuerpos ser juntaron y las manos de la joven dejaron de detener a ese cuerpo y subieron por la nunca el moreno, despeinándolo, Harry mientras degustaba ese dulce sabor en sus labios, empezó a perder el juicio de movimiento de sus manos, bajaron hasta el muslo de la mucha y la levantaron, haciendo que la misma colocara sus piernas alrededor del cuerpo del moreno, camino desesperado buscando un respaldo, en este caso la pared, y cuando lo consiguió el beso se corto-

-Te…. Advertí… -Le susurro la castaña que a duras penas respiraba, el moreno ya le había robado el aliento, y en ese momento estaba tratando de respirar para no morir-

-Wauuu… q castigo-Beso el cuello de la joven-

-Este… no es… el castigo - Afirmo ella-

-¿Y… cual … es?-Volvió a besar ese cuello-

-Se… suspende… lo… de esta noche-Hizo un movimiento para bajarse. Harry al escuchar eso no lo creyó, había estado imaginando todo el día que le iba a esperar esa noche con una Hermione como ella, misteriosa y traviesa, y ahora nada…¿Cómo?, se pregunto en su cabeza- Baja me!- Así lo hizo el moreno. Ella se acomodo sus vestimenta, en este caso el uniforme, mientras que Harry estaba navegando en la nube de ¿Cómo mierda pasa esto?- Castigado hasta tiempo indefinido…-Mando su melena atrás y lo dejo solo, en el pasillo y con deseo por ella irrefrenable-