Los personajes de Naruto, son pertenecientes a Masahi Kishimoto. En esta historia son utilizados por satisfacción personal. Prohibido cualquier tipo de plagio.
..::LA VOZ DEL MAR::..
Capítulo 1: Oleaje mitológico.
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Mar Sulu, Filipinas, 2005.
— Neji, justamente a tus tres, está el arrecife más mítico del mundo, único en su especie, tanto por su profundidad, cómo su regeneración inigualable —Se escuchaba a través del radiotransmisor acuático una alegre voz femenina —. Bienvenido a esta gran misión, Aquaman.
—Sí, ya lo había visto desde que nos sumergimos, Tenten — Respondió burbujeando de su traje la voz masculina de su compañero buzo colocado a su izquierda, mientras se dirigían a las profundidades marinas para poder llegar al arrecife. Ambas respiraciones se escuchaban por la radio.
— Los estaré monitoreando desde aquí, chicos. Recuerden tener su radar, cámara y micrófonos encendidos —Se escuchó la emocionada voz de mando del capitán en turno en todo el radio comunicador de buzos y tripulación del yate.
— Entendido —Contestaron los dos buzos al unisonó, mientras se iban acercando a la flora y fauna marítima. Tenten señaló desde lo profundo del mar para dirigirse al arrecife que los esperaba.
Muy pocos biólogos marinos tenían la oportunidad de visitar, de explorar y de recoger muestras de aquel paraíso marítimo, ya que se les brindaba el permiso con el único fin de investigar su regeneración acelerada y trasladar ese conocimiento a los arrecifes desahuciados o muertos, con el objetivo de reavivar la vida marina. El arrecife del Mar Sulu, se podría restaurar un ochenta por ciento el daño en un lapso de dos años. El descubrimiento de ese arrecife y su valor eran incalculables y muchas empresas, gente con poder y dinero lo quería para enriquecerse ilícitamente con ello. Ese arrecife era la esperanza de lo ya destruido, aparte de tener una fuente rica en petróleo en sus profundidades. Por el cual estaba protegido por el gobierno Filipino y demás organizaciones y asociaciones internacionales.
Los biólogos marinos, a cargo del proyecto de investigación sobre los secretos de la eterna juventud en la vida marina, eran los que podían sumergirse para la obtención de las invaluables muestras.
Llegaron a su destino embelesados al ver tan magnífico espécimen. Era más bello de lo que sugerían las fotos. Sus colores y formas eran más brillantes y contorneados. Parecía hecho por la mismísima mano del Dios Poseidón, para demostrar su poderío en el océano. Era un paraíso acuático, lleno de color y vida. El cielo le podía envidiar el reinado al Dios del Mar.
Fueron recorriendo lentamente la superficie del arrecife, alborotando a centenas de floreciente flora y fauna de diferentes especies que huían de lo desconocido, de la mano humana para su perseverancia en el mar.
Las tonalidades del arrecife eran verdes, cafés y rojas mayormente en sus diferentes tonalidades, junto a la flora y fauna que hacían un festival de la vida marítima.
Algunos aventureros nadadores, que se acostumbraron rápidamente a las extrañas criaturas color sombrío, se acercaban curiosos rodeando su cuerpo y rozándolos con sus aletas constantemente para examinarlas. Otros se pegaban para limpiar su traje de las pocas impurezas del mar. Algunos más se colocaban en posición defensiva esperando el primer ataque para sobrevivir. Los más tímidos y pequeños se refugiaban en las porosidades de la roca y unos cuantos huían despavoridos.
Se vieron ambos biólogos, extasiados por la beldad de tan magnífico espectáculo. Uno de ellos logró visualizar un segmento falto de vitalidad y color, señaló la parte sin vida, donde reinaba el gris oscuro. Se dirigieron donde sugería destrucción, para examinar el ecosistema y tomar muestras, evidencias del antes y después del arrecife. A las muestras las estudiarían para tratar de replicar sus células en arrecifes muertos y que pudiesen darles vida una vez más. Mientras más se acercaban a la parte desolada, los peces se alejaban de ellos, pareciera ser que, para los nadadores era un mortal tabú ir en aquella dirección.
Empezaron a explorar con una especie de temor al ver la bruma que se creaba por falta de moviento y muerte alrededor.
— Si hiciéramos una comparación, esta parte sería la entrada del inframundo oceánico —Comentó la chica con algo de susceptibilidad en sus palabras. —. Tengamos cuidado.
Estaba desolado, con aires de destrucción y devastación, con la nostalgia de que un paraíso había sido invadido y saqueado de sus riquezas y bellezas, convirtiéndose así en un cementerio de almas y fósiles pudriéndose, dando la evidencia que el ser humano es un demonio que crea infiernos.
— Así que, aquí fue la masacre hace algunos meses… —Empezó a examinar más de cerca la mortal evidencia de la existencia que, sugería fuego incandescente y explosiones—… donde una bomba de prácticas perteneciente a EUA cayó al mar y alcanzó este arrecife, ¿Verdad, Neji?
— Sí — Empezó a explorar más en la dirección que había señalado, suspirando al ver toda la destrucción causada. —, eso decían las investigaciones. El misil se había desviado. Pero creo que lo querían destruir a propósito para obtención de petróleo. Aquí existe un yacimiento sin precedentes — Suspiró una vez más devastado por tan caóticas muertes marinas, solo por el hecho de estúpidos intereses políticos y financieros. Ni siquiera juntando todo lo que podían ganar en poder y monetariamente iba ser suficiente para la recuperación del ecosistema. ¡Era imperdonable! Y su compañera tenía razón, era la entrada el infierno o el valle de la muerte.
Sin embargo la naturaleza era sabia y benévola. En la parte inferior del arrecife muerto, había una especie de estalactitas y estalagmitas. Las impresionantes estructuras eran más parecidas a una fortaleza. Salvaguardando al ave fénix del mar, que resurgía en múltiples colores escondidas entre los filosos y mortales picos, en un difícil acceso empezaban a crecer pequeños grupos de algas y corales. En el inframundo marino, empezaba a crecer un Edén.
— Tomaremos muestras de este lado, donde la regeneración está más avanzada. — Nado hacia las primeras estalagmitas, sus picos mortales de dirigían hacia las profundidades.
La empezó a seguir, sin embargo un color rojizo del lado opuesto donde empezaba a nadar llamó la atención del masculino —De acuerdo, Tenten —Empezó a nadar en dirección contraria. — Iré en aquella dirección, al parecer vi algo interesante. No te separes tanto.
— Tranquilo, Aquaman. Se cuidarme sola.
La bióloga llego en unos minutos donde iniciaron a renacer las cenizas, empezó a buscar las formas de vida más desarrolladas para recolectar muestras y evidencias en diferentes puntos.
— ¿Y bien, Aquaman? ¿Qué es? — Cuestionó curiosa mientras empezaba a sacar su material de muestreo.
— Recién estoy llegando. Se mueve… — Rompió con la mano un pedazo de coral muerto y un pez color rojo salió lentamente de su agónica cárcel. Al parecer llevaba ahí bastante tiempo atorado en el coral. —… era un pez, se ve moribundo —Saco de uno de sus bolsillos un frasco y lo abrió. Vació sobre el mar alimento creado por él. El pez empezó a comer vorazmente el alimento, confirmando las sospechas de Neji. —. Al parecer el alimento que le di le hizo bien, se ve más animado — El pez al recuperar su vitalidad, supo que Neji, le había dado una segunda oportunidad de vida. Nado hasta quedar frente a él y empezó a regocijarse y a rodarlo, por lo menos eso fue su percepción. Después del espectáculo viviente se marchó hacia una nueva vida.
— Así se hace, Aquaman — Lo felicitó irónicamente. Ella siempre lo apodaba por personajes mitológicos o que tuvieran que ver con el reinado del mar. Neji era un genio en la Biología Marina, también era veterinario y tenía una maestría en biología molecular, estas investigaciones a su vez, le permitieron una tesis y averiguaciones para el Doctorado en fisiología y genética en especies marinas. Inició creando a través de la investigación alimentos, suplementos y medicinas para los animales del mar. Era uno de los biólogos más reconocidos a nivel mundial por la gama de sus investigaciones. Su vida era el mar. —. Poseidón, creo que me amarías más si yo fuera una sirena…
— No digas tonterías, Tenten.
Empezó a reír burlándose de la incoherente idea que se le cruzó — Imagínate, si fuera una sirena, de seguro ya nos hubiéramos casado.
— No empieces —Dijo cortante a su compañera.
— ¿Qué? Es la verdad — Empezó a carcajearse al saber que provocaba incomodidad en las burlas. — Si existieran las sirenas ¿Por dónde se reproducirían? —Empezó a rascar la roca con una especie be bisturí. Cuando tenía suficiente contenido lo guardaba en un muestrario designado.
— Tenten ¿Qué clase de pregunta es esa?
— No lo sé, pero no me imagino metiendo tu masculinidad en una cola de pescado — Se estremeció de tan solo pensarlo —. Sería una especie de zoofilia…
— A veces tienes una mente enferma.
— ¿Enferma? Mi mente es extraordinaria, Hyuga. Esta cabecita con dos maestrías te da para tus ideas. — No escuchó respuesta alguna de su receptor. — ¿Aquaman?
—Shh… algo se acerca a mí, no logro saber que es. Nada extraño…
—De seguro es otro pez — Lo dijo susurrando, para evitar que la onda de sonido no fuera con decibeles mayores y asustaran a la especie. Empezó a trabajar en silencio. Esta vez se dirigió a la parte que se empezaba a regenerar y la que era difícil acceso. Utilizaba unas pinzas largas para arrancar en coral sin lastimar su tierna raíz —. Avísame si necesitas apoyo.
Afiló su mirada para identificar el espécimen. Se empezó acercar lentamente — Es una tortuga marina… ¡Diablos! Esta enredada en plástico —Nado más rápido hasta llegar a ella. La tortuga estaba sangrando por forcejear tanto con el plástico duro. Una parte de su caparazón estaba roto. —. Tranquila, te tengo… —susurró para sí.
— Pobrecilla… Me recuerda cuando liberamos nuestra primera tortuga —Su voz empezó a llenarse de emoción —, era preciosa ¿Te acuerdas, Neji? Lo llamamos Donatello… Por cierto ¿Cómo estará? Activa y se desactiva su radar…
— Supongo que bien, antier estaba en la corriente occidental. Donnie, es un guerrero, no lo olvides, igual que esta que tengo aquí. De seguro tendría la edad y tamaño de este bello ejemplar. —Corto con una navaja el plástico que llevaba enredado en la aleta y su cuello. Empezaba a sangrar la tortuga. Neji, rápidamente sacó un ungüento y lo unto cuidadosamente en las heridas de la tortuga.
— ¡Como olvidar a Donnie! Insisto, creo que te enamoraste de mí porque supiste que mi signo zodiacal es piscis y a ti te encantan los pescados….
Dejaron de sangrar inmediatamente las heridas de la tortuga, saco una cinta especial y empezó a colocarla en un lado del caparazón para unirlo al otro extremo. Unió el caparazón roto, mientras escuchaba a la parlanchina de su novia diciendo incoherencias que le ocasionaban y le hacían menos pesado ver la crueldad del humano. Saco un frasco similar al del alimento de pesado y le dio de comer a la tortuga. Estaba hambrienta. La tortuga tuvo un comportamiento similar al pez rojo, solo que esta vez se quedo viendo fijamente a sus ojos y deslumbró una sonrisa del animal para después marcharse.
—…Pero eso fue lo que nos unió cuando yo estaba en investigaciones y entonces fue cuando lanzaste tu tesis para el doctorado… ¿Quién iba a pensar que tuviéramos muchos bebés marinos en cinco años? ¡Ya sé en vez de bebés tengamos un…!
— Tenten, ¿Me copias? Hablo desde control — Interrumpió desde el yate, la agradable anécdota que ella estaba recordando.
— Te copio.
— Gracias al cielo, la señal tenía mucha interferencia, les quedan veinte minutos de oxigeno para regresar. Y supongo que el tiempo nos alcanzará para otra exploración solamente. Se acera una tormenta. Comunícale a Neji, no lo puedo localizar. Tampoco tengo visión desde su cámara.
— Esta con una tortuga entretenido, supongo que sin querer apago su cámara… Le digo en un minuto. Neji, nos tenemos que ir ya, quedan veinte minutos. — Guardo las muestras y empezó a tratar de comunicarse con Neji. No recibió ni siquiera la estática por respuesta. — Neji ¿Todo bien? — Seguía sin recibir respuesta. —. Control, me dirijo a su posición. Su radar me indica que no se ha movido de lugar.
— De acuerdo, Tenten. Con cuidado, deja todas las líneas abiertas —La voz del mando de control se escuchaba preocupada y lo mismo pasaba con Tenten.
Tenten nadó lo más tranquila que pudo para no alterar la calma del lugar, por si había un peligro inminente no alertarlo, probablemente Neji se había encontrado con un depredador por eso se encontraban todos los canales apagados junto con la cámara y se había quedado quieto.
— Llegando a punto de encuentro, cambio.
Se sentía hipnotizado por el suave color, azul florecerte, aún así no se confundía con el mar. No podía pensar en nada más que en la belleza de tan exquisito ser. Ni siquiera era capaz de mover un músculo, el ser era tan bello que había cohibido su habilidad motriz. No sabía de qué forma, pero lo único que quería era hacerla suya. Lo tenía enredado en sus encantos. Ella, porque tenía forma de mujer, a pesar de su extraño aspecto y escamas que recorrían todo su cuerpo, sus dedos pegados con una ligera capa de piel translucida y la unión de sus piernas, formando una aleta grande, le parecía lo más sagrado del mundo. Parecía un homúnculo formado entre pez y humano.
Lo empezó acariciar con suavidad. Empezando por la punta de sus dedos, hasta su pecho. Se sentía estremecer de placer. Jamás había sentido sensación alguna, nisiquiera con Tenten. Reaccionó al recordar a su novia, pero de nuevo esos ojos azules, profundos lo volvían atrapar. Era inútil escapar de la belleza del mar, se empezó a relajar para dejarse llevar.
El ser de agua se acercó a él y lo volvía acariciar hasta llegar a su cuello, y de un rápido movimiento le quito la mascarilla que le servía como protección ante el poco oxigeno del mar. Abrió los ojos y sin ninguna barrera entre sus ojos se flecharon ambos. Inclusive sentía respirar en el mar.
La quimera se sorprendió al ver tan agraciado ser. Su piel blanca, pero sus dos ojos eran perlas brillosas. Su largo cabello se agitaba en el mar. Era delicioso. Desde que lo observo liberar a sus sirvientes le pareció especial, le surgió una conexión intensa. Tenía que ser de ella. Esas dos perlas iban a ser de ella.
Los dos estaban sumergidos en el éxtasis de conocerse y probarse salvajemente, aunque eso significara la muerte de alguno de ellos dos. Se acerco peligrosamente al ser con perlas para seducirlo y besarlo, meterse en su ser y terminar siendo suya hasta la muerte. Empezaba a gemir de placer. Su cola empezaba agitarse descontroladamente. Sus pechos se excitaban.
— ¡Neji! —Cuando la imagen desapareció abruptamente de sus ojos, se dio cuenta que no podía respirar, que todo lo que había respirado era agua, sus pulmones estaban llenos del liquido salado. Empezó a manotear tratando de salir desesperadamente del agua. Conteniendo sus últimos respiros de supervivencia.
— ¿Qué demonios? ¡Maldición, Neji! — Lo tomo del brazo como pudo y empezó a nadar por su vida. Estaba asustada, no sabía que había sido ese encuentro con ese monstro y encima Neji se había perdido en conocimiento. Volteó y vio el mismo monstro reincorporándose del golpe dado por ella, el golpe fue tan efusivo que lo hizo chocar con una parte del arrecife muerto.
Algo lo jaló hacia la salida del arrecife. No podía enfocar imágenes, todo lo daba vueltas y lo único en que pensaba era respirar.
Empezó a nadar de donde venía, sabía que si subía a la superficie "eso" los atraparía, volteaba constantemente y vio como los seguía. Estaba a punto de alcanzarlos y Neji ya estaba totalmente inconsciente por la falta de oxigeno.
— ¡Maldita sea, alguien que nos ayude! MANDEN AL CR-4 NOS PERSIGUE, NO VAMOS A SALIR DE ESTA ¡LEE! ¡AYUDA! — Una parte del arrecife golpeo su hombro, haciendo que el traje se rompiera y ella sangrara. Aletargo su huida.
— TENTEN, ¿QUÉ DEMONIOS PASA?
— NOS PERSIGUE, LO HICE ENOJAR. NEJI ESTA INCONSCIENTE LO NECESITO PARA MANIOBRA DE RCP —Estaba al límite no podía aguantar mucho más tener ese ritmo de nado, mucho menos con alguien inconsciente. Volteo por última vez y ese ser ya no estaba, había desaparecido. Para fortuna de ambos el mini submarino los había abordado. Acomodó a Neji en la parte superior y ella se sentó a un lado mientras subía a la superficie.
Se arranco la máscara de un solo tirón y la aventó a una dirección que no estorbara. Rápidamente lo empezó envolver en una fajilla para asegurarlo. El mini submarino era especialmente creado para emergencias. Estaba acondicionado para dar primeros auxilios.
Tenten empezó a dar maniobras de reanimación. Se recargó en su pecho y con la fuerza que le permitía empezó a presionarlo rítmicamente, empezando un conteo. Llegaron las compresiones a treinta y se dirigió a los labios, tapó la nariz del masculino para darle respiración de boca a boca. Siguió hasta completar cinco series.
Sus manos le temblaban y sus lágrimas se confundían con el agua que escurría de su cabello. Susurraba palabras de aliento y no respondía a los llamados de la torre. Se sentía morir por la impotencia y desesperación. Neji, no podía morir. No había pulso y tampoco respiración. Insisto en otra maniobra, era la tercera.
De pronto a mitad de maniobras, Neji tuvo un arco reflejo y empezó a expulsar agua. El agua que había en sus pulmones estaba saliendo en pausas. Ella fue lo más paciente que pudo y dejo de realizar maniobras hasta que Neji dejo de sacar agua, solo se dedico a las respiraciones de rescate. Fue cuando su corazón y alma tranquilizaron. Ahora sus lágrimas escurrían de alivio y agradecimiento.
— Lee, entre en maniobras de RCP por ahogamiento. Neji se encuentra inconsciente y estable, nos dirigimos hacia la embarcación —Lo decía llena de sosiego, un sentimiento extraño se formo en su pecho. Estaban a salvo.
— Copiado — Se escuchaban algunos festejos — Están a unos minutos de llegar al yate. Tendré dos equipos listos para auxiliarlos.
— Copiado
Neji recobro la consciencia súbitamente, asustando a la chica. Sentía asfixia, empezó a recuperar la cordura entre respiraciones rápidas. Susurró el nombre de quien estaba ahí con él, cerrando los ojos, se sentía mareado. Se trató de tranquilizar pero no podía, era mucho el oxigeno faltante. Solo sentía las caricias en su cabeza y susurros amorosos.
Al fin había llegado a la embarcación, se le había hecho eterno el traslado de minutos. Salto hacia el agua para ayudar al CR-4 llegar más rápido. Cuatro buzos estaban esperándolos. Dos aseguraron a Neji a un arnés, lo subían con cuidado. Los otros se sumergieron en el agua para dirigir al CR-4 en su aparcamiento. Tenten esperaba desde la superficie su turno de ser subida a la embarcación.
Una vez que Neji estaba fuera de peligro, empezó a bajar el arnés, el capitán al mando, llamado Lee, intimo amigo de la pareja, estaba al pendiente de todo lo que pasaba. Ya habría tiempo de aclarar la situación. Se asomó para vigilar a Tenten.
— ¿Estás bien, Tenten?
— Si, Lee… —Aún seguía agotada por el esfuerzo que había hecho — Sólo que rompí el traje — le enseño la herida hecha—, y las mascaras no sé donde quedaron. Lo siento, amigo — Realizo una mueca suplicando perdón.
—Lo importante es que están bien — Le sonrió conforme. ¿Qué importaba? A veces Tenten le daba mucha importancia a cosas inútiles, pero era cuando estaba nerviosa. Desde ahí podía ver que no podía asegurar el arnés.
Había hablado demasiado rápido. Algo jaló a Tenten súbitamente de los pies. Lee grito su nombre desesperado al ver como su amiga salía y volvía a sumergirse violentamente, estaba luchando con algo. Tomó vuelo y se lanzó al mar sin pensarlo dos veces. Neji se precipito al suelo al no poder caminar aún cuando escuchar lo que estaba pasando, se arrastro donde tuviera visión. Utilizó los tubos de contención para mantenerse de pie. Iba seguir a Lee, pero uno de los tripulantes impidió que se lanzara al agua.
— ¡Sueltame! —Forsejeo con todas sus fuerzas, pero era inútil, la falta de oxigeno había hecho estragos. — ¡Lee y Tenten están en peligro!
— Doctor, no puede… ni siquiera se puede poner de pie ¿Cómo espera nadar?
Ambos cayeron al suelo, Hyuga estaba impotente ¿Cómo demonios había pasado todo aquello? No recordaba nada después de salvar aquella tortuga, y después sentir ahogarse. Se volvió a reincorporar lo más rápido que su cuerpo le permitía. Sus piernas temblaban, hincado alcanzaba a ver a través del barandal. Y veía a Lee saliendo y volviendo a sumergirse con otros buzos, gritando el nombre de su novia/prometida.
¿Por qué no recordaba nada? Sus ojos empezaban arder demasiado. La opresión de su pecho de nuevo no lo dejaba respirar. Sentía ahogarse en dolor, rezumbando en su cabeza el nombre de ella dicho por los demás. Perdió la visión de todo.
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¿Qué tal amigos? Después de un tiempo he vuelto con una idea, tan fresca como la mañana (?)
Pues este pequeño fic se me acaba de ocurrir, cuando vi unos videos de avistamientos de sirenas. Como ya saben todos los fics son NT :) Me pareció la idea interesante, la v edad ignoro si hay algún NejiTen enfocado en este tema, aunque tampoco quiero que sea tan fantasioso la trama. Jajajaja o me imagino a Sebastián cantando "De bajo del mar con Neji" xD
De ante mano una enorme disculpa si encuentran falta de ortografía o sitos de puntuación mal empleados. Tuve un problema con mi computadora y las correcciones las empecé hacer desde el celular.
Me encantaría saber su opinión acerca de este nuevo fic. ¿Qué les pareció? Me encantó Neji como biólogo marino :3 Espero que haya sido de su agrado este primer capítulo.
¿Reviews? Me harían muy feliz :3 Ayudan al NT para su inmortalidad.
QUE EL NEJITEN SIGA EN SUS CORAZONES.
Gracias por leer.
DDKG
