Disclaimer: Los personajes y el mundo de Harry Potter le pertenecen a nuestra querida J.K. yo solo los tomo prestaditos…
Un sueño con la sangre pura Granger.
Draco se removía un tanto inquieto entre sus sábanas blancas tratando de controlar el calor que sentía a causa del sueño que parecía quemar su cuerpo por dentro, su pelo empapado de sudor se pagaba a su níveo rostro al igual que su ropa lo hacía con el resto de su cuerpo, y es que a pesar de que su pijama consistía únicamente en una camisa blanca sin mangas y pantaloncillos de franela rojos (como el color de su casa) parecía que su cuerpo se consumiría en fuego en cualquier momento pidiéndole que se despojara de todo rastro de ropa y se diera una ducha de agua bien fría aunque fueran las 4 de la mañana y que sus compañeros se encontraban plácidamente dormidos.
Tuvo que levantarse de manera resignada pateando las cobijas para ir a bañarse como lo había estado haciendo desde hace 3 meses. Ya empezaba a hacerse una costumbre para él.
Pero por más que trataba de distraerse, por más libros que leyera, por más tareas que adelantaba y por más locuras que se le ocurrieran hacer a Harry y a Ron arrastrándolo a él, no había conseguido que el dichoso sueño dejara de llegar cada una de las noches desde que había regresado a Hogwarts para cursar su quinto año.
Hasta había ido a la enfermería para que Madame Pomfrey le dijera de una buena vez el remedio para ya no soñar con esas cosas tan… calurosas que no lo dejaban concentrarse, solo para recibir la vergonzosa respuesta de que esos sueños eran gracias a sus hormonas que según ella había dicho podían estar "alborotándose" por culpa de su edad y que no volviera a preguntarle sobre eso.
¿Cómo no soñar esas cosas después de lo que había visto aquella noche en esa aula vacía?
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Todos los alumnos de Hogwarts habían regresado a continuar con sus estudios después de las vacaciones de verano y cierto trío de oro no era la excepción.
Harry, Ron y Draco habían sido grandes amigos desde que el sombrero seleccionador los había colocado a los tres en Gryffindor hace 5 años. Habían vivido grandes aventuras desde entonces y su amistad se veía reforzada con cada una de ellas. Y aunque Draco era el cerebro del trío de rojo y dorado el niño-que-vivió siempre había destacado más.
También contaban con grandes amigos como Hagrid, Dumbledore, Sirius y el resto de la orden del fénix.
Pero claro que al colegio también regresaban los insoportables Slytherin que creían que eran los dueños de todo el mundo mágico, con su actitud arrogante y su mirada despectiva, sí, ellos también regresaban. Los enemigos públicos de nuestro trío.
Y es que cuando se encontraban en primer año a bordo del tren que los llevaría por primera vez a Hogwarts, una pequeña niña con cabello castaño con leves ondulaciones en el, con ojos color almendra y piel bronceada se acercó a Harry para poder saludarlo e intentar charlar con él pero cuando se percató de que cierto niño pelirrojo se encontraba también ahí, no había dudado ni un segundo en burlarse de él y de su familia entera ganándose directamente el odio de los dos niños.
Y digamos que cuando esa pequeña niña llamada Hermione se había encontrado con Draco (un año después) tampoco había sido amable con él, diciéndole con total desprecio que era un sangre sucia que no merecía estar en el colegio, así que después de esos encuentros se habían hecho enemigos abiertamente.
Blaise Zabini, Theodore Nott y Hermione Granger, los sangre pura más respetados y queridos de su casa recorrían los pasillos con aquellos aires de elegancia y grandeza con los que hacían que todos los alumnos creyeran que eran los más guapos e irresistibles pero también los más insoportables. Y aunque Theodore y Hermione tuvieran una relación desde tercer año, siempre había chicas que suspiraban por él y chicos que coqueteaban abiertamente con ella pero parecía que ni siquiera eso podía separar al trío de plata que se esmeraba en hacerles la vida de cuadritos a todos aquellos que se atrevieran a cruzarse en su camino.
En fin, el primer fin de semana que pasaron en el colegio había sido tranquilo y normal "aparentemente" para todos, para todos menos para Draco.
¿Por qué había tenido que deambular a media noche por los pasillos? claro, había leído un libro muggle que su madre le había mandado para que leyera los fines de semana y se había quedado leyendo en la biblioteca sin darse cuenta de que ya era la hora de ir a los dormitorios pero es que se sentía tan eufórico por leer un nuevo libro que había decidido dar un pequeño paseo para relajarse un poco antes de descansar, ¡Merlín! De saber lo que sus ojos verían se hubiera ido directo a su habitación.
Ya que cuando pasaba junto a un aula supuestamente vacía escucho un pequeño ruido femenino desconocido para él, se acercó lentamente a la puerta para poder oír mejor lo que sucedía adentro, tal vez una chica estuviera herida y él, como todo buen Gryffindor podría ayudarla en cualquiera que fuera su problema.
Grave error.
Y es que volvió a escuchar aquel sonido pero este era más como un pequeño gemido prolongado que Draco creía era de puro dolor. Se paró con la espalda recta frente a la puerta y alzó su mano derecha para girar lentamente el picaporte, no quería asustar a la chica que se encontrara dentro.
-Theo.
Escucho una voz que se le hizo familiar y es que a pesar de que solo había sido un suave susurro pudo reconocer a la chica que con cada oportunidad que tenía lo hacía sufrir y lo insultaba por su sangre…
Granger.
Pero entonces recordó lo que había escuchado antes.
¿El novio de Granger estaba haciéndole daño? ¿Por qué Nott lastimaría a su novia a esas horas de la noche?
Era verdad que él y la Slytherin eran enemigos desde hace años, pero ¿entonces iba a dejar que mataran a la chica? ¿La ayudaría a pesar de sus constantes burlas o dejaría que siguiera sufriendo?
No, ante todo él era un Gryffindor y ellos nunca se daban media vuelta y se alejaban de los problemas aunque eso significara ayudar a su peor enemiga.
Terminó de girar el picaporte y empujo la puerta suavemente para que no hiciera ningún ruido y Nott lo descubriera ahí tratando de ayudar a su novia serpiente. Ni siquiera la abrió totalmente, solo lo suficiente para que la mitad de su cuerpo entrará y pudiera echar un vistazo a lo que sea que estuviera pasando allí adentro.
Pero se quedó congelado, con los ojos totalmente abiertos, las mejillas sonrosadas y sin saber muy bien cómo reaccionar cuando vio lo que realmente estaba pasando en esa aula.
¡Merlín!
¡Sus grises y hermosos ojos tuvieron que ver como Granger y Nott estaban teniendo sexo!
Pero vaya forma de hacerlo tenían.
Tal vez hasta a el mismo Zabini el insaciable le daría envidia de ver qué posición tan… caliente usaban esos dos.
Trato de irse y cerrar la puerta fuertemente para que se sintieran descubiertos y les diera un poco de vergüenza hacer eso un donde todos podían verlos pero aun no podía ni quería dejar de observarlos.
A pesar de que Draco era un chico adolescente y con necesidades físicas, se sentía orgulloso de no ser tan hormonal y no querer llevarse a cualquier chica a la cama como lo hacían los otros chicos. El prefería pasar el día en la biblioteca en vez de dejarse llevar por aquel deseo carnal. Porque sí, Draco Malfoy sí era virgen todavía y no tenía ninguna prisa por quitarle la virginidad a ninguna chica de su casa, sin mencionar el hecho de que ni siquiera tenía novia.
Pero ahora tal vez se lo pensaría dos veces. Y es que de solo ver a Granger así, hacía que su cuerpo sintiera un inmenso calor y que cierta parte de su anatomía empezara a despertar. No tenía total visión del cuerpo de ella, solo del Sly que estaba situado entre sus piernas, pero aun en el ángulo en que se encontraba viendo resultaba muy bueno.
Granger se encontraba sentada en diagonal a la puerta en el escritorio de madera de algún desafortunado profesor, con un brazo levemente flexionado y la mano aferrándose a la orilla del mismo para darse impulso mientras que con el otro brazo rodeaba el cuello de Nott para sostenerse mejor, no tenía sujetador solo una simple camisa blanca de seda que no le cubría realmente nada, sus pezones estaban rosados y se alzaban orgullosos gracias a su excitación, no podía ver su vientre ya que un Nott con los pantalones y bóxer en sus pantorrillas y sin camisa recargaba sus manos a cada lado de ella mientras entraba de una manera salvaje y profunda en ella contrayendo de una manera brusca los músculos de sus nalgas, las rodillas de la castaña estaba enrolladas en las caderas de él para alcanzar una mayor profundidad con cada embestida.
Granger tenía el rostro escondido entre el espacio del cuello y el hombro de él con los ojos cerrados a causa del placer que sentía y él besaba su cuello con posesividad y hambre dejándole pequeñas marcas que estaba seguro se pondrían moradas después.
Los dos parecían absortos de todo lo que pasaba a su alrededor, solo existían ellos en ese momento, solo existía ese vaivén que parecía volverlos locos mientras decían el nombre del otro con voz entrecortada y llena de pasión. Era algo íntimo y algo que Draco estaba contemplando.
Se sentía como un intruso pero su cuerpo se rehusaba a dejar de ver tal acto.
Y fue cuando pasó.
Vio como ella alzaba su cabeza después de haber mordido el hombro de su acompañante, con los labios rojos e hinchados pero curvándolos en una sonrisa pícara y clavó sus ojos almendrados claramente oscurecidos por el deseo en los grises de Draco, mirándolo de una manera tan fija e intensa que hizo que las mejillas de él volvieran a enrojecerse, como si ella fuera la cazadora y el la presa la cual devoraría en otra ocasión.
Se miraron unos segundos más antes de que Draco por fin decidiera salir del aula e ir a tomar un baño de agua fría, sin saber que un sueño donde él y su enemiga de toda la vida hicieran cosas más interesantes que pelear lo esperaba impacientemente.
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De eso ya habían pasado meses, y él seguía soñando con ella.
Con Hermione Granger, la sangre pura más deseada de toda la escuela y la que jamás se rebajaría a estar con un sangre sucia como él, ¿no?
Pero aún no podía olvidar la forma en que lo había mirado cuando estaba con Nott y la sonrisa burlona que aparecía en sus labios cada que sus miradas se encontraban solo lograba inquietarlo más. Y aunque ella estuviera acompañada de Nott la mayoría del tiempo siempre lograba lanzarle sonrisas picaras cuando se separaban por algún motivo.
No podía olvidar la manera en que ella gemía, ni en como sus ojos desbordaban deseo, ni la manera en que sus torneadas piernas se habían aferrado a las caderas de Nott solo para poder disfrutar mejor de la unión de sus cuerpos.
Hasta se había sorprendido al notar como su mirada buscaba a la Slytherin en sus clases compartidas, como quería cambiar de lugar con Zabini que parecía ser el chico más gracioso del mundo mágico cuando estaba con ella, como se encelaba en ciertas ocasiones cuando la veía de la mano con Theodore o cuando lo veía a él envolver sus brazos en su cintura para acercarse más a ella y besarla como si no existiera un mañana.
Draco ya no sabía qué hacer, sentía que se volvería loco en cualquier instante y sabía que la obsesión que tenía por la chica estaba mal, siempre se habían odiado y ahora se encontraba deseándola de una manera casi enferma solo porque la había descubierto en una situación tan incómoda con su novio, pero parecían tan entregados que no pudo evitar querer estar en el lugar del Sly y la única opción confiable que encontró para para de alucinar con ella de una buena vez fue que él mismo iba a tener que "tranquilizar" a su cuerpo y sus necesidades dando un poco de atención.
Así que una noche se aseguró de que sus amigos y compañeros de habitación durmieran profundamente y tomando prestada la capa de invisibilidad de Harry se dirigió al baño de los prefectos en el quinto piso, nadie podría molestarlo ahí.
Se escabullo ágilmente tratando de no hacer mucho ruido en el camino, pero cuando se encontraba en las escaleras no pudo evitar tropezarse con la capa mientras pisaba el siguiente escalón, afortunadamente no hubo caída alguna pero perdió el equilibrio un momento dejando caer la capa durante 2 segundos y poniéndosela de nuevo rápidamente una vez que la recogió.
Cuando iba a adentrase en el baño oyó un pequeño ruido que hizo que sus sentidos se pusieran en código rojo, pero al no ver a nadie trató de decirse que solo había sido algún estúpido Slytherin que estaba en esa estúpida cosa de la Brigada Inquisitorial De Umbridge.
Cuando llegó a los baños, dejo la capa a un lado de él y se fue quitando su pijama hasta quedar completamente desnudo, se metió lentamente al agua, no quería hacer demasiado ruido para que a Myrtle no se le ocurriera aparecer y se sentó haciendo que el agua le quedara a la altura del pecho, cerró sus ojos mientras que los recuerdos de Granger llegaban a él y cierta parte de él empezaba a alzarse impaciente por un poco de cariño y atención.
Llevó su mano a su miembro pero no hizo ningún movimiento, fue hasta que se imaginó en el lugar de Nott, con ella entre sus piernas y él embistiéndola de manera casi animal mientras que ella le mordía el hombro por el placer que él, Draco Malfoy, le proporcionaba que empezó a recorrerlo en toda su magnitud, de arriba abajo con movimiento firme mientras su respiración empezaba a acelerarse y el calor llenaba todo su cuerpo.
Respirar le estaba costando más trabajo pero vaya que lo estaba disfrutando.
¡Merlín! Sí así se sentía con su mano no se quería ni imaginar cómo era estar de verdad con una chica…
¡¿Por qué nadie le dijo de lo que se perdía durante todos estos años sin novia?!
Definitivamente tenía que hacer eso más seguido.
No puedo evitar dejar escapar un gemido con el nombre de su enemiga.
-Hermione…
Estaba por acelerar el ritmo que su mano había tomado cuando escucho una suave risa.
Abrió los ojos de golpe encontrándose con Hermione Granger viéndolo a los ojos mientras enrollaba un mechón de su castaño cabello en su dedo índice y le sonreía coquetamente
-¿Necesitas ayuda Malfoy?
¡Qué Merlín y Gryffindor se apiaden de él!
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Espero que les guste este.. no sé qué va ser todavía esto solo que no va a ser muy larga xD pero espero que les guste como a mí, es mi primer Lemmon y claro que todas sus quejas o sugerencias serán bienvenidas, trate de explicar el hecho de que Hermione sea mala sangre pura cde esta historia…
Como ya se dieron cuenta es un Theo/Mione/Draco jejejeje.
Nos vemos en el próximo cap.
¡Saludos!
(editado el 17/02/2016)