Prologo.
La científica Jane Foster lloraba acurrucada en el sofá, con una manta envuelta a si misma se veía como la científica lloraba por el corazón roto en su interior.
Estaba sola, en su casa en Nuevo México .Darcy se había ido hace tiempo con su novio Ian y Selvig estaba en sus propios proyectos en dios sabe dónde. Estaba comiendo helado de vainilla directamente desde el envase cuando su mano con la cuchara llena de un trozo del helado comenzó a temblar, Jane abrió y cerró los ojos rápidamente antes de correr dejando caer el helado con la cuchara incluida en el sofá.
Abrió la tapa del inodoro y vomito con violencia. Hace como varios días que le pasaban, Jane había estado tan absorta del mundo desde que Thor la había dejado que no se había dado cuenta de los síntomas.
La científica no era tonta.
Después de buscar y buscar, encontró 5 pruebas de embarazo .Leyó las instrucciones e hizo las 5, había solo ahora que esperar.
"Bebes" pensó la castaña sonriendo, nunca estuvo en sus planes ser madre. Sus padres no eran muy buenos que digamos pero si estaba embarazada, lo iba a tener aunque sea sola.
Una a una, todas las pruebas dieron positiva antes los ojos sorprendidos de Foster. Fue a su cuarto donde tenía un espejo largo colgado en donde una doble de la castaña la miraba con miedo.
Lentamente como si quisiera capturar ese momento: se levantó la camiseta gris junto a la de tirantes rojo oscuro de debajo, se colocó de lado y puso una mano en el pequeño vientre que se estaba formando, en donde antes estaba el vientre plano de la científica.
Los castaños ojos de la científica se llenaron de lágrimas mientras una decisión, que su corazón roto y una mente científicamente inteligente congeniaban.
"Este es mi bebe y lo criare sola, este es mi pequeño secreto" pensó la chica sonriendo.
9 meses después.
-¡Vamos señorita Foster, empuje! .- La doctora Evans la apremiaba mientras la mujer castaña trataba de hacer lo que la doctora decía.
"Yo puedo, ya no soy la que era antes. Soy mejor que la Jane pequeña de antes" pensó la mujer antes de con grito incluido un grito de un bebe llorando llenara la habitación.
-Felicitaciones, es una niña hermosa y ahora...- se la entregó a un enfermero quien la iba a limpiar para entregárselo a una feliz Jane que sintió que alguien estaba tirando de ella desde su vientre, justo como su bebe.
-Señorita Foster, viene otro. Esta lista?.- Dijo la doctora preparándose para recibir al otro bebe.
-¿Qué?- Dijo sorprendida la científica hasta que sintió la presión dolorosa de su otro hijo. Se suponía por los ultrasonidos que solo iba a tener un bebe, no dos.
Jane sin embargo era valiente así que reuniendo todas sus fuerzas, empujo mientras un grito salía desde el fondo de su garganta. Cayo rendida en la cama cuando un sonido de llanto diferente al otro, este era más bajito, inundo la habitación.
-Felicidades señorita Foster.- La doctora le había pasado al bebe varón a una enfermera que ya llevaba en brazos a la bebe femenina de Jane.- Son gemelos, la bebe fue la mayor por exactamente 18 minutos. Guag .- dijo la doctora arreglando un mechón de su pelo rojo que se le escapaba y se le pegaba a la frente.
Una enfermera le paso a su bebe envuelta en una manta roja, que la castaña traía con la otra manta en su bolso. Jane aparto la manta para ver el bello rostro de su hija. Era muy hermosa, tenía los castaños ojos de ella y una sombra rubia le adornaba la cabeza de la niña pero a Jane no le hizo un nudo en la garganta ver algo que relacionaba su niña con ese desgraciado. No le importaba en el momento simplemente.
¿Tiene un nombre ya pensado para la niña?- Dijo la doctora Evans recibiendo al varón de Jane, envuelto en una manta blanca similar pero diferente a su hermana.
Ella es Laura.- dijo la científica sonriendo a la pequeña de ojos idénticos a los de ella.
¿Puedes con los dos a la vez?- Pregunto la doctora Evans haciendo un gesto que le quería devolver su hijo a la reciente madre.
Claro .Pásamelo.- sonrió la castaña y con cuidado la doctora Stephanie Evans le paso él bebe a la científica que ahora era madre de gemelos.
Jane miro los ojos azules de su hijo, eran los de él. Los de su padre pero no le importó, ya no le producían lo mismo que antes: odio y tristeza, ahora los miraba con una felicidad enorme. Los ojos azules del bebe y lo que sería su cabello castaño le hizo pensar en el nombre ideal para su hijo;
-Ethan.- susurro y él bebe ahora con nombre, la miro con interés antes de sonreír. – Se llaman Ethan Gabriel y Laura Katherine Foster.
Días después.
-Doctora Jane Foster, ¿está segura que quiere aceptar trabajar para nuestra Institución? ¿Sabiendo que deberá renunciar a su otra vida, a su identidad y pasar por muerta?- Lydia Strevaff le daba la última oportunidad a la mujer castaña de aspecto serio con esa vestimenta oscura, que la hacía parecer peligrosa y afilada como un cuchillo a esa mujer diminuta.
Jane Foster pensó en todo lo que deberá renunciar: su mejor amiga Darcy, aquel Erik Selvig que era su mejor amigo y lo más parecido que tuvo durante mucho tiempo a un padre desde la muerte del suyo biológico pero sus bebes, sus niños eran más valioso que todo eso.
Además según lo que había podido saber por haber hackeado a SHIELD: Thor se había casado con Lady Sif e iban a tener un bebe. El maldito del Padre de Todo había ganado en convencer a su hijito querido de que se juntara en alguien parecido a él. Inmortalidad. Jane odiaba esa palabra.
Cerro los ojos y los abrió rápidamente, ya había tomado la decisión .Jane Foster, la mortal que se había enamorado de un Dios estaba muerta.
Esta Jane Foster nueva iba a ser diferente.
-Acepto Madame Directora. – La voz de la científica anteriormente no sonaba como ahora .Si antes tenía un tono claro y definido, amable...el de ahora era tan frio como la inteligencia junto a un corazón roto podía volver a una mujer.
