Este OneShot es una parida! Creo que lo hice un día que estaba muy aburrida... Esos días en los que suelo leer o escribir xD La cosa es que había perdido este y un Regulus/Sirius que tenía por ahí también. Por suerte Duane los tenía guardaditos a salvo y... kyaa! me los ha enviado!

Y SI ya se que en casa de los Black no habría un telefono, pero es de Sirius... y además esto es un Fic y sin el teléfono no tiene gracia xD

Es una chorrada pero espero que os guste!

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En la habitación de Sirius Black…

- Vamos ¡cuelga ya! necesito ese estúpido aparato - Dijo Régulus aporreando con el puño la puerta de la habitación de su hermano mayor.

- ¡Te he dicho que te esperes enano! - Grito Sirius para hacerse oír por su hermano

- ¡Llevas dos horas hablando imbécil¡CUELGA YA! – Gritó furiosamente Régulus desesperado.

- ¡A mi no me hables así maldito gusarajo!- Sirius se levantó de la cama, en la que estaba tumbado hablando por teléfono, y abrió violentamente la puerta. Tuvo el tiempo suficiente para ver a su hermano correr por el pasillo y encerrarse en su habitación de un portazo.

Sonrió triunfal y volvió a encerrarse en su habitación, se tumbó en la cama, cogió el teléfono y comenzó a enrollarse el cable del aparato en un dedo acompañándolo con un vaivén de piernas.

- Perdona Remsie, como te iba diciendo...


En algún lugar de Grimmauld Place...

- ¡Mamaaaaaaa¡Sirius no me deja usar el teléfonooooo!!– Gritó Régulus con todas sus fuerzas, al cabo de veinte minutos.

- ¡Ya basta Sirius¡ Cuelga ese maldito aparato muggle y dáselo a tu hermano!- Le sermoneó la señora Black.

- ¡Esta bien, ya cuelgo! - Gritó Sirius de mala gana a su madre.

- Bueno Moony tengo que colgar. Volveré a llamarte cuando el pelmazo de mi hermano acabe, espero verte pronto, te quiero… ciao- Se despidió Sirius.

- …

- …

- ¿Porqué no cuelgas?- Preguntó Sirius.

- ¿porqué no cuelgas tú?- Contestó Remus.

- Yo te he llamado, lo más lógico es que cuelgues tú.

- Yo ya colgué la última vez.

- No, Colgué yo- Afirmó Sirius.

- Yo no voy a colgar… cuelga tú.

- Yo tampoco voy a colgar… cuelga tú.

- No, cuelga tú.

- No, tú.

- No pienso colgar, así que cuelga tú- Afirmó Remus.

- No, tú.

- No, no, tú- Repitió Remus.

- Nada de eso, tú.

- Ni hablar, cuelga tú.

- No, no, Cuelga tú- Respondió Sirius melosamente.

Régulus, que había estado escuchando la conversación a través de la puerta, entró en la habitación rápidamente, quitándole el teléfono de las manos a su hermano, sin darle tiempo a reaccionar.

-¡Tengo una idea¡Yo colgaré!- Dijo sarcásticamente colgando el teléfono. -¿Ves Sirius? Tampoco ha sido tan difícil- Se burló saliendo a toda prisa de la habitación de su estupefacto hermano.


En algún lugar de Londres...

- ¡Ha colgado!- Gritó sofocado Remus.- Voy a llamarle…