Diaries of a Vampire
Yuuki, como siempre, esta haciendo su ronda nocturna, aunque la noche se presenta bastante tranquila. Lo único que hace es pensar en Zero… No quiere que caiga en el nivel E y está dispuesta a darle toda la sangre que necesite. Aun así sigue dándole un poco de miedo, pues se acuerda del terrible incidente que vivió hace 10 años, cuando un vampiro intentó atacarle… Menos mal que Kaname estaba allí para salvarle… Kaname… Plaaaaaaaaaaaaaaaf… Yuuki no había visto la piedra que había en medio del camino y había caído de bruces al suelo…
¡Ay! ¡Que daño! – Dice Yuuki mientras se incorpora
De repente, y entre las sombras apareció Zero:
Es imposible ser más torpe – Dijo él
¡Que susto me has dado, Dios!
Tu puedes llamarme Zero… Será mejor que te cures esa herida. No es muy buena idea sangrar delante de un vampiro.
Zero no dijo nada más, dio media vuelta y se marcho. Yuuki no intento detenerle, pues veía el sufrimiento de Zero en sus ojos.
Una vez se curó la herida decidió ir al despacho del director para presentar un informe de la noche y después iría ha hablar con Zero… Quizás necesitará beber algo de su sangre…
Director, ha sido una noche tranquila. No ha pasado nada fuera de lo normal – Dijo Yuuki
Yuuki, hay algo de lo que quería hablarte – Dijo el director Cross
¿Sí? – Respondió Yuuki
He descubierto una cosa sobre Zero… Nunca le hubiera creído capaz…
¡OH, no! – Pensó Yuuki. Seguro que nos ha descubierto. ¿Qué pasará ahora con Zero?
De escribir un diario… - Continuó diciendo el director Cross
Seguro que le encierra y luego… ¿¿Qué??, ¿¿Un diario??- Dijo Yuuki bastante sorprendida
¡Aaaaaaaaaaaaay! Mí querido hijo… Pensaba que podía ocultarle algo a su padre… Es taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan mono
Eso no esta bien director… Debería devolvérselo
No – Respondió
Démelo – Dijo Yuuki
Nop – Dijo, mientras ponía el diario sobre la mesa
Por favor… Papa…- Intentó Yuuki
Tramposa, sabes que no me puedo resistir a eso… - Dijo mientras cogía el teléfono y empezaba a marcar un número… ¿Sabes? Mi hijita me ha llamado papa… ¡Mi querida Yuuki!
Yuuki, mientras tanto, aprovechó y cogió el diario de Zero. Mientras caminaba por el pasillo camino del cuarto de este pensaba:
- Un diario… ¿Quién lo hubiera dicho? ¿Qué pondrá? No, Yuuki, son cosas de Zero… No puedes leerlo…Pero… Las ganas pudieron con ella… Y abrió el diario de Zero, muerta de curiosidad por lo que podría encontrar dentro de el…