Bueno, este es mi primer intento de yaoi… con intención. Jaja, quiero decir que, en mi otro fic, "¿Romeo y Julieta?" técnicamente solo estaban "actuando", así que he decidido no contarlo como yaoi… jeje.

En fin, esta pareja me gusta mucho, mucho, así que espero no arruinarla. Ojala les guste.

Yugioh y todos sus personajes son propiedad de Kazuki Takahashi.

Aclaración rápida, cuando Bakura y YB están hablando entre ellos ""lo que esta entre comillas es lo que dice Bakura y lo que esta en cursiva es lo que dice YB

Capitulo 1

¿Terapia?

Si alguien, alguna vez, le hubiera dicho a Seto Kaiba que se encontraría en esa situación, probablemente se habría reído. O quizás le hubiera lanzado una mirada asesina. O tal vez, simplemente lo habría ignorado.

Pero lo cierto era que jamás se hubiera imaginado estar ahí. El joven clavo su vista en el techo, de color azul y decidió ponerse a contar manchas. Después de unos minutos, miro en reloj. Genial, ya había desperdiciado media hora de su día y aun faltaba hora y media más.

El silencio era muy denso y solo era roto por el ocasional golpeteo de una pluma contra el escritorio. Kaiba volteo los ojos. Comenzaba a desesperarse. Pero¿qué hacer…?

-Podemos seguir así toda la vida, Seto-chan. O, podemos comenzar con la terapia. Realmente no me importa. A mi me pagan lo mismo si hablas o no.

Kaiba se levanto y miro a la chica. ¿Seto-chan¿Quién demonios le había dicho que podía dirigirse a él de esa manera?

-No te pongas agresivo, Seto-chan- continúo ella, sonriéndole- o todo irá a dar a tu reporte. Y no queremos eso¿verdad?

Kaiba suspiro y volvió a recostarse. Un día de estos cobraría venganza, pero por el momento, era mejor seguir la corriente.

-Buen chico, Seto-chan. Ahora¿en que estábamos?

-Solo deja de llamarme "Seto-chan"¿de acuerdo?- murmuro el CEO, apenas despegando los labios.

-Umm… lo pensare- anuncio la sicóloga. Kaiba volvió a suspirar. Le esperaba una larga tarde…

A las 5 de la tarde, Kaiba finalmente abandonaba "la sala del terror", como había decidió llamar al consultorio de su terapeuta.

-¡Cuídate mucho, Seto-chan!- se despidió la muchacha, besándolo en la mejilla, como si se conocieran de toda la vida- ¡se un buen niño y te vera la próxima semana!- continuo, pellizcándole la mejilla.

-Esta loca…- murmuro Kaiba, para si, mientras esperaba a que llegara el elevador- alguien debería haberle examinado el cerebro antes de dejarla trabajar aquí….

-Buenas tardes, Kaiba-kun- lo saludo una educada dama, en cuanto las puertas del elevador se abrieron.

-Buenas tardes, Haru-san- contesto él, olvidándose por un segundo de la sicóloga y subiendo al elevador en el mayor silencio posible.

-¿Qué tal van sus terapias?- pregunto la mujer, en cuanto las puertas se cerraron.

-Hmph- fue toda la contestación del joven.

-Tan mal¿eh?- murmuro ella, suprimiendo una carcajada- tenga paciencia. La señorita Hoshi es muy joven aun… no tiene idea de cómo tratar a los pacientes…

-Es demasiado "igualada", para mi gusto- comento Kaiba, sin poder contenerse- además, sigo sin ver la utilidad de todas estas tonterías…

-Usted no quiere perder la tutoría de su hermano menor¿o si, joven Kaiba?

-No…

-Entonces entenderá que debe cumplir con los requisitos que le exija la ley. No podemos dejar a un menor de edad al cuidado de otro menor de edad a menos de que nos aseguremos que es lo suficientemente responsable y sin problemas de salud mental…

-Lo se- murmuro Kaiba, de mala gana- es solo que tengo mucho trabajo y esto solo me quita el tiempo.

-Ya vera que con el tiempo, incluso usted se sentirá mejor que antes. Siempre funciona.

Kaiba no contesto, pues temía decir algo inapropiado que complicara aun mas las cosas. Después de todo, era su "mal temperamento" lo que lo había puesto en esa situación.

Las puertas se abrieron y Kaiba se apresuro a bajar. Después, salio del edificio y se dirigió a su auto a toda velocidad. Mientras mas distancia pusiera entre él y aquel "edificio de la tortura", mucho mejor.

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Ryou Bakura se recargo contra la puerta de una tienda, que ahora estaba cerrada. Pero en realidad, la única intención del muchacho era protegerse de la lluvia. Comenzaba a hacer mucho frío y había olvidado llevar consigo una chamarra o un paraguas.

Baka hikari…- murmuro Yami Bakura (YB) a través de su conexión mental- ahora moriremos de neumonía y será tu culpa.

"Me sorprendes, yami"- le contesto el hikari- "¿Dónde has aprendido tantas palabras nuevas?"

No te pases de listo conmigo, pequeño-mascullo YB, en un tono muy amenazador-un día podrías despertarte y descubrir que tu diario paso a ser propiedad publica de la preparatoria de Domino…

"No te atreverías"- sentencio el chico.

Oh… ¿quieres apostar?

"Nooo…" -murmuro un muy aterrado Bakura, mientras su yami lanzaba una carcajada.

Bien, deja de quejarte niño y vámonos de aquí- alego YB, sin dejar de reír

"Pero yami… esta lloviendo y…"

Eres tan melodramático- se quejo el yami, antes de tomar posesión del cuerpo de su hikari.

"¡Espera¿Qué crees que haces!"

Nos llevo a casa- anuncio YB, antes de iniciar su camino, sin importarle la lluvia torrencial que caía sobre la ciudad, empapándolo.

"Definitivamente, moriremos de hipotermia…"

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El semáforo cambio a rojo, lo que forzó a Kaiba a frenar bruscamente. La lluvia caía con fuerza, así que realmente no había nadie en la calle, pero decidió no arriesgarse. Si lo multaban en ese momento… bueno, no quería que esos sicópatas de trabajo social quisieran quitarle la custodia de Mokuba…

Algo llamo de pronto su atención. Por la acera, corría un chico de cabello blanco. Su ropa estaba empapada, pero no intentaba protegerse de la lluvia.

"¿No es ese uno de los amigos de Yugi?" pensó Kaiba, para si "Umm… si, Bakura, me parece..."

Y así, sin pensarlo ni un segundo, en cuanto el semáforo cambio a verde, Kaiba se adelanto un poco, acercándose a la banqueta y esperando a que Bakura llegara.

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Hey… ¿no ese Kaiba?- pregunto YB, al ver un auto deportivo que se estacionaba a unos pocos metros de él.

"Sigue corriendo¿quieres? Nos enfermaremos"

¡Pero hikari! ¡Esta es nuestra oportunidad para "conocerlo mejor"!

"¿Eh?"

¿No era eso lo que escribías ayer en tu diario? Si, decía algo así: "querido diario, me gustaría conocer mejor a Kaiba-kun, me parece que es un chico adorable y guapo y…"

"¡YO NO ESCRIBI ESO!"

¿Entonces fui yo? Umm… no recuerdo… padezco de lagunas mentales… En fin¡vamos a saludar¿Qué dices?

"¿ESTAS LOCO!" pero YB ya no escuchaba, al contrario, en ese momento corría a encontrarse con Kaiba.

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-¡Kaiba!- saludo YB, abriendo la puerta del auto, del lado del pasajero- ¿qué andas haciendo por aquí?

-Hmph- fue la contestación del CEO, que comenzaba a cuestionarse que lo había motivado a esperar al chico.

-¡Oh, claro, debí suponerlo!- exclamo YB, sarcásticamente- ¿me das un aventón a mi casa?

-¿Por qué crees que detuve el auto?- pregunto Kaiba, de mala gana.

-¿Cómo voy a saberlo?- pregunto YB, subiendo y encogiéndose de hombros- quizás tienes problemas mentales…

Kaiba le lanzo una mirada asesina. No necesitaba que le recordaran aquella "sala del horror".

-¡Woa¡Alguien esta muy susceptible hoy!- exclamo YB, sonriendo sarcásticamente.

-¿A dónde vas?- pregunto Kaiba, decidido a terminar con esa situación lo antes posible.

-Sigue derecho, yo te aviso en donde damos vuelta.

El CEO volteo los ojos, pero obedeció. Después de todo, también ese era el camino a su casa…

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"¡ Va a matarnos, yami¡puedo sentirlo!"

No dramatices, hikari. Además, todo esto es tu culpa.

" ¿Mi culpa¿de donde sacas eso?"

Bueno, si tu no hubieras olvidado traer un paraguas…

" ¡Oh¿en serio¡de cualquier manera hubieras subido al coche de Kaiba¡estas completamente loco por él!

¿Yo! No te proyectes en mí, Ryou-chan…

" ¡No me llames así! Y no me proyecto¿Por qué no lo admites? No es como si no compartiéramos mente…"

Umm… pero debes admitir, que tengo excelente gusto, hikari.

" ¡Claro, salvo por el delicado hecho de que a Kaiba le gustan las chicas, creo que has hecho una excelente elección…"

¿Y tu como sabes eso?

"Bueno… lo supongo, pero…"

Deja todo en mis manos, querido hikari. Yo haré que Kaiba caiga rendido a nuestros pies… o prometo que dejare de intentar matar al faraón.

"No puede creer que estemos teniendo esta conversación…"

¡Yo tampoco! Deberíamos estar usando nuestro "encanto natural" para conquistar a Kaiba…

"¡No me refería a eso!"

Silencio, niño. Deja que los grandes hablen¿de acuerdo?

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Kaiba había pasado los últimos minutos arrepintiéndose de haberse ofrecido a llevar a Bakura a casa. El chico era extraño, definitivamente y sin duda, podría serle de gran utilidad una sesión terapéutica. ¿Siempre parecía estar en otro mundo? Kaiba nunca le había puesto mucha atención…

-Así que, Kaiba-kun¿que hacías en la calle a estas horas de la tarde¿No deberías haber estado trabajando?

-Tenía un asunto que resolver.

-¡Oh¿Qué asunto podría requerir de la presencia del gran Seto Kaiba?

-No es de tu incumbencia.

-¡Pero quiero saber!- se quejo YB, con mirada de "borreguito a medio morir"

-No- contesto el otro joven, concentrándose en el camino y tratando de ignorar la adorable mirada que le dirigía "Bakura"

-¿Por favor?

-No

-¿Porfis?

-No

-¡Porfitas?

-No

-Anda¿si?

-No

-¡Dime!

-No

-¡Si!

-No

-¡Si!

"¡VA A MATARNOS!"

Tranquilo, hikari, tengo todo bajo control.

-¿Siiiiiiiiiiiiiiiiiii?

-Tenía que ir al psicólogo¿de acuerdo?

El silencio que cayo dentro del auto era espectral. De todas las respuestas posibles, esa era la que menos esperaban Bakura o YB. Bakura hubiera guardado un educado silencio y se hubiera disculpado por insistir en saber, para luego mostrarse empatico. Pero, para su desgracia, YB era quien tenía el control de su cuerpo. Y su reacción no fue una muy…umm… positiva.

-¡JAJAJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJAJA¡TU¿AL SICOLOGO! JAJAJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJA ¿POR QUE!

-Resulta que es un requerimiento legal, si quiero conservar la custodia de Mokuba- murmuro Kaiba, en voz muy baja. Estaba tan concentrado en sus problemas, que ni siquiera estaba mirando con odio al yami.

-Lo siento mucho, Kaiba-kun- murmuro Bakura, retomando control de su cuerpo- no era mi intención…

-No importa. Pero pase lo que pase, mas te vale no decirle nada a nadie¿entendido?

-Claro, yo jamás… ¡espera¡da vuelta a la derecha!

Kaiba dio un violento volantazo, para no equivocarse de calle. Sin embargo, el concreto mojado provoco que el auto derrapara… para después estrellarse contra un poste de luz.

-¡Maldición!- exclamo un muy molesto Kaiba, bajando del auto, para examinar el daño- ¡justo lo que me faltaba!

-¡Lo siento muchísimo, Kaiba!- exclamo Bakura, bajando del auto, sumamente sonrojado. Definitivamente, Kaiba iba a matarlo en cualquier segundo.

-Llamare al seguro- anuncio Kaiba, volviendo al auto y buscando su celular- ¡Oh, dios¿Por qué me odias!- continuo, mientras buscaba en su portafolio, sin éxito. Al parecer, lo había olvidado.

-Puedes llamar desde mi casa- ofreció Bakura, sintiéndose apenado- esta muy cerca de aquí…

Kaiba asintió con la cabeza, derrotado. Bakura le sonrió levemente, tratando de darle ánimos, mientras iniciaban el camino rumbo a su casa.

¡Oh, hikari¡Nos ganamos la lotería¡Llevamos el premio gordo a casa!

"Ahora no, yami. No es un buen momento para bromear…"

Pero no estaba bromeando…- murmuro YB, mas para si mismo que para su hikari- realmente creo que llevamos un progreso…

¡Listo¿Qué tal¿Horrible¿no sirvo para esto¿Qué opinan? Personalmente, me gusto el capitulo. Aunque es largo, siento que no es pesado de leer y creo que logre poner una buena "atmósfera romántica" Jaja, respecto a la idea de mandar a Kaiba al psicólogo… bueno, no se, últimamente me dio obsesión con los sicólogos y me pareció divertido…

Jaja¡espero que les haya gustado, déjenme saber si creen que debo continuarlo o abandonar mi intento de escribir yaoi por la paz.

Ciao!