¿Quién soy? ¿De donde vengo? ¿A donde voy? ¿Que soy yo? La lluvia cae a cantaros mojando cada parte de mi cuerpo no tengo frio, ni miedo, ni tristeza ya no tengo nada, mi mano se posa distraida en mi hombro derecho.
Si lo supiera loki, pero no le he dicho la verdad, si se lo cuento como lo tomara. miro la luz de las farolas no me puedo quedar algo me dice que tengo que seguir.
Camino sin sentido por inercia o costumbre llegue afuera de la mansion la miro, si atenea me pasó algo de sabiduria por que no fui lo suficientemente sabia para manejar la situacion, por que no le dije todo desde el principio a lo mejor para este momento lo unico que loki siente por mí otra identidad es odio y uno muy fuerte.
Miro la casa, no puedo, es algo muy dificil de decir, por eso el nunca me lo dijo pero yo nunca se lo reproche mas bien respete su silencio el de el, y el de todos.
Trate por todos los medios que todo siguiera igual pero mis esfuerzos fueron en vano.
Ase unos meses cuando todo era normal, mi grupo de la escuela salio de escurcion hacia una a lejana montaña, al parecer fue sitio donde se acentaron varias culturas, las casas estaba construidas en medio de una cueva enorme que apenas si se alcanzaba a ver el techo de la misma.
Yo estaba muy emosionada era algo misterioso. Fue entonces que la escuche era la voz de una mujer, no cantaba nada mas mantenia una nota en el aire, yo me separe del grupo tenia que saber de donde provenia esa voz.
La voz provenia de una casa vieja muy apartada y abandonada entre una mujer joven de pelo corto y negro vestia una tunica blanca con muchas joyas de todo tipo y estaba sentada en una silla enorme echa de piedra.
-Has venido finalmente- me dijo al verme- me alegro, sabes, te he estado esperando mayura
-¿a mi?- la mujer sonrio y se paro de la silla y se aserco a mi
-si por mas de 800 años he estado esperando este momento, sabes yo tube una vida como la que estas teniendo tu, por eso es hora de que mi papel lo tome una nueva, de que tu tomes mi lugar en este mundo- yo la veia, era el misterio mas grande con el que me he topado
-¿pero quien eres?- le pregunto ella sonrio
-yo soy una bendecida por los dioses, al igual que tu- me mira y me da la mano- zeus padre de los dioses, dios griego del rayo, atenea diosa de la sabiduria, ares dios de la guerra, hecate diosa de la magia, eris diosa de la travesura, poseidon dios del mar, hades dios del inframundo, afrodita diosa de la belleza, era diosa de la tierra - me enseño una caja de madera negra y me la extendio yo la tome
- todos y cada uno de ellos nos bendicieron pero mi tiempo en esta tierra se me ha hecho cansado perpetuo por eso te llame, por eso veniste es la hora de que tu seas, ahora abre la caja- yo no se por que pero algo me huele mal.
-disculpa – levante la vista y habia desaparecido, yo mas por curiosida que por otra cosa abri la caja en su interior se encontraba una piedra en forma de octagono de color verde esmeralda, todo brillo era una fuente de luz blanca en eso vi una mano que me tomaba del hombro derecho, sentí otra en la parte baja de la espalda y despues la luz seso. Yo estaba parada en medio del cuarto la piedra y la caja habian desaparecido
-¿aquí estas daidoji?- me voltie era narugami- te estabamos buscando ya vamonos- me indico yo lo segui, habra sido un sueño.
Era noche y caminaba en una gran montaña llena de casas construidas muy curiosas, en eso me alcanzo una joven de pelo largo y de color blanco vestia regiamente
- es bueno verte mayura- me dijo yo le sonrei por que sentia que la conocía, ella se alejo corriendo, de frente de mi venia un hombre muy guapo, alto moreno, con una barba cuadrada y vestia una armadura de guerra
-yo sere el primero- me dijo estendiendo la mano hacia mi yo la tome- yo te enseñare todo hacerca de la guerra –yo asenti siguiendolo.
Entonces como si todo se moviera me llevo por campos de batalla algunos cuando aun no empieza la guerra, otros en plena lucha y otros cuando esta termino, mientras el no me soltaba de la mano y me explicaba tacticas, ataques, tipos de lucha, yo estaba horrorizada.
-¿qué te pasa?- me pregunto sin soltarme la mano
-esto es demasiado horrible, yo no se si pueda...- me llevo de regreso donde llegue
-por ahora se te hase horrible- me tomo del mento y me obligo verlo a los ojos- pero con el tiempo y las distintas lecciones, mias y de los demas, te parecere natural, nos vemos mañana lo de hoy solo fue un repaso general, mañana nos especialisaremos en un tipo de batalla, hasta mañana mayura-
"bipp" "bipp" el despertador sono yo me pare que sueño mas raro, misterioso como es sabado me diriji a la ducha para bañarme, me quite la pijama y abrí la llave del agua esperando a que la tina se llenara.
De reojo alcance a mirar algo en el espejo y en mi hombro derecho habia una clase de simbolo negro era un rayo saliendo de una nube. Me voltie en la parte donde la espalda pierde su honroso nombre tenia otro simbolo era como dos crestas de ola una encima de otra y dos circulos de cada lado.
"esto es definitivamente un misterio" me bañe y tañe muy fuerte esperando que se me calleran esos simbolos extraños pero nada.
Me vestí con ropa norma y me fui corriendo hacia la oficina, las calles se me hicieron enormes y el camino larguisimo cuando llegue, toque, pero nadie abria la puerta paso mucho rato y yo tocaba y tocaba. En eso yamino abrio la puerta
-señorita mayura ¿sucede algo?- me pregunto
-necesito hablar con loki- le pedi, el se hiso un lado yo entre a la oficina, loki como siempre sentado en su sillon viendo por la ventana
-loki algo extraño me esta pasando- el me miro de lado indiferente
-mayura para ti todo es extraño, raro y/o misteriosos- el pánico se empezó a apoderar de mi
-no, fui a unas cuevas entonces algo raro paso- el me miro algo aburrido
-podrias ir al grano por favor- me pidio impaciente.
-bueno vi desaparecer una piedra, y luego soñe con ese hombre, que me llevo por campos de batalla y solo habia sangre- el me ve fastidiado
-fue solo un sueño mayura, nada de que preocuparse- no fue solo un sueño
- pero tambien esta mañana...-
-YA BASTA MAYURA- me grito dando un fuerte golpe con el puño al escritorio- CUANTAS VECES TE TENGO QUE DECIR QUE LOS MISTERIOS NO EXISTEN- el nunca me habia gritado haci me siento mal, siento las lagrimas salir de mis ojos, me duele el pecho, el me sigue mirando muy enojado, yo solo me gire y sali corriendo sin volver la vista atrás, corri con todas mis fuerzas hasta que ya no pude mas.