Disclaimer: Rurouni Kenshin no me pertenece, esta serie es de su respectivo autor y sólo tomé prestado a este lindo personaje sin fines de lucro
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Lumus
Miró una vez, luego otra y una más.
Nada, nadie, mas insistía en mirar de rato en rato por las pequeñas rendijas que la madera podrida tenía, sólo el silencio de la noche y él. Como siempre desde que tenía memoria, salvo las veces que su familia le hablaba no con buenas palabras.
El mar miró una vez más hacia fuera, desde su descuidada habitación, que no era más que un lugar para juntar polvo y artefactos inservibles. Hace varias noches que Soujiro sueña con un extraño samurai vendado, no le habla ni se mueve, nada más se limita a sonreírle sarcásticamente.
Sabía que esa era su llave para escapar de ese lugar, sólo esperaba verlo llegar. Pero nada, quizás el destino le jugaba una antipática jugarreta…
Él no llora, no se agobia ni se derrumba.
Acomodó la paja para cubrirse, dándose por vencido por esa noche, como todas las anteriores. Dejó que el sueño lo dominara, mientras su psique viajaba a encontrarse con ese extraño hombre de piel lastimada, aquél que poseía una miraba de fuego.
Afuera comenzaba a llover, marcando el inicio de una historia.
Una leve risa, tan suave como el susurro del viento, se escuchó entre la lluvia.
-Al fin te encuentro, niño…-
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:D ¿comentarios?.
