¡Hola a todos! ¿Cómo están?, bienvenidos a mi nuevo fic. Como creo en el derecho a la igualdad, decidí que sería interesante ver la contraparte femenina de Steve y espero mantener la esencia de su personalidad. A diferencia de Holografía, he decidido que este si se ambientaría en la época actual. Espero que lo disfruten.
Por cierto, si alguien no lo sabe lampo significa: resplandor pronto y fugaz, como el del relámpago.
Sobra aclarar que solo me pertenece la historia. Lo demás a sus respectivos dueños.
Fic dedicado a July, eres un amor de persona.
He found her most beautiful not when she was all fancied up, but she wasn't. When she was lying on the carpet, her hair all a mess, laughing about something that happened years ago. When she wasn't trying to impress anyone and taken down that wall she had built for most people. That's when he couldn't take his eyes from her.
Stephanie Georgiana Rogers había sido una chica pequeña y enfermiza a principios de la segunda guerra mundial. Por circunstancias de la vida había participado en uno de los experimentos y había sido la única superviviente. La habían convertido en una superhumana. Una que había durado congelada en el hielo durante más de cincuenta años.
Hasta que él, Tony Stark, había ayudado a Coulson contactando con la doctora Helen Cho para descongelarla.
Al principio no se habían llevado nada bien. Ella lo consideraba un granuja y él la consideraba una mojigata. Pero no mucha gente la entendía, esa sensación de no pertenecer a ninguna parte pero estar en el ojo del huracán, y como él se contaba entre las excepciones, habían terminado volviéndose amigos.
Esa noche, ella tenía una cita.
Con Rumlow, de todas las personas.
Y si el sonido del ascensor era un indicativo, la cita había terminado.
La vio entrar. La mujer era absolutamente hermosa, casi metro ochenta de estatura, ojos azules, tan claros como los de un bebé y cabello dorado que caía en ondas perfectas hasta su cintura. Y su sonrisa era capaz de poner a hombres de rodillas.
Esa noche usaba un elegante vestido rojo y parecía maquillada por una profesional. Estaba casi irreconocible. Se veía tan perfecta que en parte le disgustaba. Estaba acostumbrado a verla con el cabello trenzado, unos vaqueros y ropa deportiva. Él era la única persona que la había visto vestida de forma tan informal.
Le sirvió una copa de vino y empezaron a hablar. Ella le hablo de lo caballeroso que era Rumlow, aunque en su opinión no era más que un idiota, y como había tratado de comportarse para no espantarlo. Luego pasaron a temas aleatorios, pasaron del vino al whisky y ya iban por la segunda botella, se comieron casi dos pizzas.
No sabía cómo habían terminado así. Ella acostada sobre la alfombra y con las piernas apoyadas en el sofá, descalza y con el cabello hecho un desastre, su maquillaje desaparecido hace mucho. Él sobre el piso apoyando la cabeza sobre uno de los cojines que Steph le había tirado, con la camisa arrugada, su chaqueta y corbata en alguna parte.
Se estaban riendo de quien sabe qué tontería y que lo condenaran si le importaba.
Así, sonrojada y con los ojos brillantes por el vino, Steph se veía perfecta.
