Hola a todos, bueno volví a redactar esta historia pues sentí que le falto mucho, así que nuevamente aquí la dejare, ahora será más que un one-shot, tendrá unos cuantos capítulos más para plasmar mi idea aquí, espero que la disfruten… que se la pasen bonito
No soy dueña de los personajes de DBZ
La tarde era por completo agradable ese día, y ahí se encontraba esa chica de cabellos azules sentada como casi todos los días en una roca cerca del mar, mirando al horizonte… como si estuviera esperando ver a alguien aparecer de ahí
Tenía varios días que él pequeño niño la había visto en ese mismo lugar, pero la chica siempre parecía estar sola, aunque siempre se le veía con una enorme sonrisa… pero hoy parecía un poco apagada, así que sin pensarlo mucho se acerco a la chica
-Hola… mmm tú siempre estás aquí ¿Por qué?- Pregunto él niño de unos 6 años, tenía un extraño peinado, cabellos alborotados, parecía una mini palmera, pero tenía una sonrisa tan hermosa, tan inocente y llena de ilusión
Ella desvió su mirada, prestando atención al pequeño, quien ahora tomaba asiento junto a ella
-Hola pequeño; bueno yo vivo aquí… ¿pero tú?, dime ¿me estas espiando niño?- Dijo la chica de cabello azul, dejando escapar una risa
-¡No como crees!- Contesto sorprendido – Es solo que mi abuelito vive cerca y te eh visto casi todos los días aquí, ¿Estas esperando a alguien?; si quieres yo podría acompañarte, mi abuelito dice que debo portarme bien con las niñas… y además oscurecerá pronto, no creo que sea bueno que te quedes sola- Dijo el chiquillo – Por cierto mi nombre es Kakaroto, pero me puedes decir Goku, así me dice mi abuelito-
-Bueno Goku, es un gusto conocerte… mmm pero dime Goku, ¿Te da miedo la noche?- Pregunto curiosa a la respuesta del pequeño
-Para nada, yo soy muy fuerte…- Dijo el pequeño con gran orgullo
-¿Entonces a que le temes Goku?- Volvió a insistir
El niño se encogió de hombros, luego miro de nuevo a la chica… -Bueno… te diré, eh escuchado que hay una chica, dicen que ella es muy bonita, pero que es mala, como hombres y secuestra niños… algo así como un alma en pena que mata por placer a todos- Decía lo que la gente comentaba en aquel lugar –Dicen que es un demonio- Comento el niño – Así que no pienso dejarte sola, podría pasarte algo malo-
Ella miro al niño y se rio, era tanta la inocencia que poseía aquella pequeña criatura, que causaba cierta ternura, tenia siglos sin mirar unos ojos tan puros, pensó incluso que no volvería a conocer a alguien así, pero aquí estaba la prueba de su error
-Entonces ¿Ella come y mata personas?- Rio –Bueno Goku dime ¿Conoces su historia?- Pregunto
-No- Dijo el negando con la cabeza
-Y dime ¿Te gustaría escucharla?, claro que es un tanto diferente a la que tú conoces, pero es la verdadera- Dijo ella al pequeño
-Claro, cuéntame por favor- Pidió el niño animado
-Bueno Goku, te contare… todo empezó 500 años atrás…-
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Era un hermoso lugar, había arboles por todos lados… un bello paisaje adornaba todo, la gente vivía sin tantas preocupaciones, algunos incluso cerca del mar… incluso había una pequeña choza, ahí vivía una mujer muy linda, una joven de cabellos rubios, se podría decir que era la mujer más hermosa que alguien jamás hubiera visto. En aquella casa vivía con sus padres, quienes eran muy pobres, pero a ella no le importaba eso, era feliz viviendo cerca del mar, diario salía al mar y ahí se bañaba, con las olas limpias, puras, como ella
Un día conoció a un joven, en extremo guapo, él parecía tan elegante, y casi de inmediato se enamoraron, tanto fue su amor que no esperaron a casarse, y se entregaron en cuerpo y alma, él le prometió que volvería por ella, que se la llevaría para convertirla en su esposa… pero él no volvió por ella
Pasaron los días, las semanas, y meses… cuando se dio cuenta, que su amor había rendido frutos, ella estaba embarazada, al enterarse sus padres la echaron, no querían verle más, pues ella les había fallado, deshonrado; y tuvo que irse lejos…
Pasaron los meses, ella tenía ya 8 meses de embarazo, pero comía muy poco, estaba muy descuidada, su belleza parecía apagarse… pero una mujer la encontró en ese estado tan deplorable, le llevo a su casa… le proporciono comida, un techo, lo necesario para terminar su embarazo, y ella no sabía cómo agradecer a esa mujer que le había ayudado… paso un poco de tiempo y nació su hija, era una niña hermosa, de ojos y cabellos azules… algo muy inusual para aquel tiempo; pero ella decía que su hija nació así por que era la hija del mar, que esta se la había mandado, pues su piel era blanca como la espuma del mar, y su ojos azules y claros como las olas mismas
La llamo Bulma, y vivieron con aquella familia que les había acogido, durante largo tiempo pertenecieron a ese lugar, incluso le dieron un trabajo ahí, así logro mantener a su hija, mientras la pequeña mostro ser muy inteligente, llegando así a impresionar al señor de la casa, quien era un viejo inventor de aquel tiempo, pues en una ocasión con tan solo 5 años la niña desarrollo un reloj pequeño poro funcional, lo hizo desde cero, ganándose así el respeto del inventor, quien se ofreció a enseñarle más a la pequeña mente brillante
La familia se apellidaba Briefs, eran conocidos por ser inventores, tenían un hijo quien había muerto años atrás, la pareja no tenia fotos visibles del hombre… pero para ellos, aquella pequeña niña, Bulma lleno el vacio que la muerte de su hijo había dejado, incluso llegaron a pedirle a su madre que les diera el derecho de criarla como su hija, tendría sus apellidos, sería una niña de buena familia, no sería más pobre, seria tratada como su nieta; y su madre accedió pues solo deseaba lo mejor para la pequeña, y claro que no la dejaría sola, pues ella seguiría ahí, solo que ahora pasaría como nieta de los Briefs, dirían que ella había nacido poco después de la muerte de su hijo, que se había casado y su esposa había dado a luz a la niña, muriendo en el parto
Y asi pasaron los años… la pequeña niña tenia un carácter dulce, sus ojos eran inocentes, puros. Sin embargo su coloración especial provocaba que la niña fuera tratada en ocasiones mal por otros pequeños
A los diez años, la llevaron a un evento importante, la niña se arreglo como todo una dama, y en aquel lugar había muchos otros niñas y niñas, y la pequeña se quiso acercar para jugar con ellos
-Hola, mucho gusto mi nombre es Bulma Briefs- Se presento la peli azul, a una niña de cabellos castaños, linda, de cabellos ondulados
-No me interesa niña- Respondió la pequeña, entonces la miro como si fuera Bulma un bicho raro - Pero que rara eres niña… y ese color, pareces un mal experimento- Dijo con desdén
-No, yo no soy rara- Dijo ella con una lagrimita, que salía de sus hermosos ojos
-Pues no conozco a nadie como tú, tienes un color de cabello tan extraño, seguro que eres un monstruo- Decía la niña
La pequeña salió corriendo de aquel lugar, no quería escuchar mas insultos, fue a donde su abuelo, el viejo Briefs, quedándose a su lado hasta que el evento termino, no quería regresar, pues con los demás niños fue lo mismo, todos la trataban mal… eso paso durante toda su infancia, hasta llegar a los 17 años
Ella creció para ser como su madre, pues amaba el mar, lo amaba… y solía ir a pasar en ocasiones días enteros ahí… cuando iba y no había gente, se desvestía y se metía al mar, solo quedando en sus ropas intimas, pues su gran vestido era estorboso para poder nadar. Pero un día noto aquella vieja choza, así que por curiosidad fue a verla, pero no había nadie viviendo en ella, así que entro… había varias cosas, trastos viejos, una pequeña mesa, y un par de sabanas tiradas en el suelo que ella supuso eran las camas para quienes habían vivido ahí… pero parecía que nadie la había habitado en muchos años
Por alguna razón que de momento desconoció, se entristeció por las personas que había vivido ahí, sentía un nudo en su corazón… no tenía idea de que eran sus abuelos, los padres de su madre, poco después se enteraría
Ese día regreso a donde su madre, le conto todo lo que había visto, la choza, las cosas, y que parecía que nadie vivía ahí durante un buen tiempo, y ella se hecho a llorar de manera inconsolable, Bulma no sabía por qué, o que decirle
-Madre… ¿Qué pasa?, no pensé que te pondrías así; yo también me sentí mal y triste, pero tal vez… bueno se veía que ahí vivían de manera muy humilde madre- Decía Bulma sin saber qué hacer con la reacción de su madre
-Hija… es que no tuve el valor, no lo entiendes hija…. – Sollozaba –Estos 17 años, no tuve el valor de volver a aquella casa, pues ellos eran mis padres, tus abuelos hija- Decía su madre, pues sabía que había otra choza cerca del mar, y como Bulma la describió supo de inmediato que era la de sus padres
Bulma se tenso en esos momentos, no tenía idea de todo el pasado de su madre…
-Pero… mamá nosotras siempre hemos vivido aquí, dime… ¿Por qué?- Pregunto con una lagrima resbalando de su rostro
Su madre le conto toda la historia, le conto como había conocido a su padre, y que este había prometido volver por ella para hacerla su esposa, pero nunca volvió… y esto hizo que Bulma se enfadara mucho, no sabía cómo reaccionar ante tal información, que hacer o decir… así que salió de su casa, quería tiempo a solas, y fue al único lugar donde podría, el mar
Estuvo ahí durante un tiempo, sentada en la arena, pensando en todo lo que ahora sabía de su familia, y no noto la presencia de un hombre que llego por detrás de ella o que ya se estaba oscureciendo el día
-Hola, que tal señorita… disculpe pero ¿Qué hace sola a esta zona?- Pregunto –Acaso no sabe que es peligroso estar de noche cerca del mar, y sola- Decía el hombre de cabellos negros
El chico era muy guapo, realmente agradable, su cabello negro largo, y tenía una esplendida sonrisa, y en su rostro dos cicatrices, pero no le hacían ver menos atractivo, si no todo lo contrario
-¿Ah?- Pregunto Bulma un poco sobresaltada – Disculpe, no me fije lo tarde que se estaba haciendo… creo que debo irme- Dijo tímida Bulma mientras se ponía en pie para retirarse
Pero antes de que pudiese partir, el hombre se levanto
-Mi nombre es Yamcha, al menos podría decirme su nombre bella dama- Dijo él, de manera caballerosa, galante
Bulma se sonrojo de inmediato, nunca antes nadie le había dicho bella, pues solían criticarla y hacerle sentir mal por sus colores exóticos, solo su madre y los abuelos Briefs le mostraban este tipo de cariño, así que cuando este chico lo dijo… bueno fue maravilloso para ella
-Mi nombre es Bulma- Respondió, pero salió corriendo después de eso, pues estaba nerviosa
El joven grito -¿Te volveré a ver Bulma?- Pregunto
Ella solo dio un breve vistazo al chico, pero siguió su camino sin decir nada en respuesta
Cuando llego a su casa, había cambiado algo en ella, tenía una gran sonrisa, felicidad marcada en su rostro, muy emocionada… ese sentimiento que te indica que te estás enamorando
Y para su madre no paso desapercibido, lo noto de inmediato…
-Ese joven debe ser muy apuesto- Comento su madre, haciendo a Bulma sonrojar –Veo que te puso muy feliz mi niña… ya decía yo, que por algo ibas tanto tiempo al mar mi pequeña- Decía su madre con una leve sonrisa saliendo de sus labios
-No sé de que hablas madre, no se a que chico te refieres- Dijo de inmediato en modo de defensa
-Como tu digas mi niña- Contesto su madre con una risita
Bulma solo resoplo y se retiro a su habitación, quería estar sola y poder pensar en aquel joven apuesto, pues le había llamado mucho la atención…
Y así pasaron los días, ella seguía siendo educada para ser una joven de sociedad, una de las nietas de las más prestigiosas familias de aquel tiempo, así que asistía a muchas clases de etiqueta, y demás, con maestros particulares, los Briefs la querían hacer una gran dama, y no reparaban en gastar en su educación, de verdad la amaban y ella los amaba
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-Qué bonita historia… pero ¿Por qué es mala?, no dices que se enamoro- Interrumpió el pequeño de cabellos alborotados
Ella lo miro con una sonrisa triste… -Bueno, tengo que contarte toda la historia para que entiendas, además después de escucharla Goku, tu sacaras tus propias conclusiones, y sabrás si ella es mala o no- Dijo mientras veía como todo a su alrededor ya estaba oscuro, iluminado solo las estrella aquella noche un poco fría
-Me encantaría terminar de escucharla, pero… ya es muy tarde, seguro mi abuelito me debe estar buscando… pero, ¿Mañana estarás aquí?- Pregunto el pequeño con una sonrisa
-Claro Goku, siempre estoy aquí… puedes venir temprano, o en la tarde para que te siga contando pequeño- Contesto ella
-Bueno me parece bien, pero ahora debo llevarte a tu casa, vamos te acompaño para que no vallas sola- Se ofreció Goku, con solo 6 años, podía ser un niño muy valiente y protector
Solo sonrió, y negó con la cabeza –No voy a mi casa aun Goku, estaré un rato mas aquí… yo…- No sabía cómo continuar
-Ya entendí- Dijo el pequeño, con alegría como si hubiera descubierto algo importante –Seguro esperas a alguien… ¿Tienes novio?, porque eres muy bonita- Dijo el pequeño
Ella rio… -No, no tengo novio Goku; pero si estoy esperando a alguien… así que no te preocupes… no pasara nada- Dijo ella mientras se levantaba, sacudiendo un poco de arena de sus ropas
-Bueno, pero volveré mañana, para que me sigas contando… nos vemos- Dijo en un despido el pequeño
Ella lo vio corriendo a lo lejos, hasta que desapareció, rumbo a su hogar
-Es un niño muy lindo, tiene esa alma pura que ya no existe en el mundo… hasta se preocupo por mí, que tierna criatura, ¿No lo crees?- Pregunto al aire, aparentemente
-Valla, hacia mucho tiempo que no hablabas tanto con una persona, y le contabas… hasta parece que te agrado mucho el niño… me da gusto, debes hacer amigos- Contesto detrás de ella, un gato azul flotante
Puar, era un gato flotante que convivía con ella todos los días, su amigo inseparable… pero mientras estaba con Goku él pequeño gato decidió que lo mejor era dejarla sola, y ver qué pasaba, y la reacción fue favorable
-Bueno, vamos a dar una vuelta Puar… la noche ya llego, y tú sabes lo que eso significa, ¿Vienes conmigo?- Pregunto la chica
El gato cambio su semblante, por uno de disgusto… -No, esta vez no iré, ya te he dicho que esto no es lo correcto… vamos regresemos a casa, tienes que descansar, seguro que ese pequeño niño vendrá temprano, le agradaste mucho- Decía tratando de persuadirla
-Estaré aquí temprano, pero iré Puar, sabes que nada puedes hacer para detenerme… así que si quieres puedes venir o quedarte aquí- Sentencio
...
Dejando al pequeño gato viendo como ella se alejaba, caminaba con gracia, en su vestido blanco… descalza por la arena, a la orilla del mar, con una gran sonrisa de sus labios rojos… tan seductores como ella misma, dispuesta a atrapar a un incauto que la encontrara… atrayéndole a ella, llevándole a adentrarse al mar… pensando que recibirían de ella mas… una noche llena de lujuria y placer; sin saber que lo que en verdad tendrían seria una muerte atroz, lenta y dolorosa… ahogándose en aquel enorme mar, viendo por última vez un par de ojos azules, que parecían el cielo, pero en realidad eran el infierno
Un anima, que vaga por las noches… entre la oscuridad, buscando a los hombres mas despreciables, esos que suelen romper el corazón de jóvenes inocentes, que destruyen vidas por placer… que lastiman a otros, solo por el simple gusto de hacerlo, esos son a los que ella se lleva para no verles mas
Su belleza le ayuda para atraerlos, con sola una sonrisa los atrapa, y nunca más dañan