Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn le pertenece a Akira Amano
N/T: ¡Holis! Bueno incursionado como traductora esta es mi primera historia y espero que la disfruten. Cuento con la autorización de Metamorcy la autora del fic para su traducción en español.
Titulo: The Forgotten Time
Por: Metamorcy
Traducido por: Mizuki-chan24
Titulo: The Forgotten Time
Por: Metamorcy
Pareja: RebornXTsuna R27
Disclaimer: No me pertenecen y si lo hiciera el mundo estaría lleno de yaoi
N/A: Es mi primera vez escribiendo R27, espero que salga bien. También estoy usando un traductor en línea para el italiano, por lo que si no es correcto lo siente, pondré una nota en el final de lo que significa.
Ha sido beteado por tokyomewmewlvr
The Forgotten Time ~ El Tiempo Olvidado
Capitulo 1: Viaje en el tiempo
*.*.*.*.*
Cuando Tsuna comenzó el día, empezó igual como cada mañana y terminó igual como cada noche. Era una rutina a la que se estaba acostumbrando a pesar de todas las locuras que transcurrían día con día. Casi no sucedía nada nuevo, además de lo usual, desde el incidente con el futuro. Era extrañamente pacífico, pero Tsuna lo sabía mejor que nadie. Él estaba muy familiarizado con ese tipo de silencio, la calma antes de la tormenta, ya que lo había experimentado antes tantas veces y esperaba que lo que fuera a venir en su camino no fuera demasiado grande o mayor. A él le gustaba vivir, muchas gracias.
"Es hora de despertar, Dame Tsuna". Una voz llamó al adolescente antes de que fuera consciente de su entorno.
Sin embargo, una fuerte patada en el estómago lo sacudió hasta despertar. Tsuna dejó escapar un grito y antes de que se diera cuenta, fue pateado de nuevo, esta vez desde el otro lado y fue empujado fuera de su cama, volando en el aire por la fuerza. Su cuerpo cansado se estrelló contra la pared y luego se deslizó hacia abajo, derrumbándose en el suelo con la espalda en primer lugar. Se retorció de dolor, gimiendo a sí mismo, tratando de adecuarse de la incómoda posición en que había aterrizado. "¡Reborn! ¡No hace falta que me patees de esa manera!"
Poco a poco, se dio la vuelta para mirar a su sádico tutor, a pesar de que parecía más un puchero, agarrándose por los codos. El asesino a sueldo solo le devolvió la mirada con León en su sombrero fedora y las manos en los bolsillos, observándolo muy satisfecho por lo que había hecho. Tsuna suspiró en derrota, mirando que no había nada que pudiera hacer y se levantó sobre su trasero con la espalda contra la pared, frotándose con las manos las partes donde había sido golpeado. Estaba seguro de que iba a convertirse en moretones más tarde. Consiguió ponerse en pie, el moreno volteo para ver la hora.
Sus ojos se agrandaron cuando leyó la hora. Gritó."¡Hiiieee! ¡Voy a llegar tarde! ¡Hibari-san me va a morder hasta la muerte!"
Los horribles números seguían parpadeando para él obsesivamente, él sólo tenía quince minutos antes de empezar la escuela. Esa maldita suerte por lo que continuaba su racha de horror en su vida.
"Entonces es mejor que te des prisa." Reborn sonrió, inclinando su sombrero hacia abajo para cubrir su rostro.
"¡Reborn!"
Tsuna se vistió en un tiempo récord y aventó todo junto antes de salir corriendo detrás de la puerta, sin molestarse en tomar el desayuno. No hubo tiempo para nada de eso, había cosas más importantes por hacer. Para la gente que pasaba por allí, parecía una mancha, corriendo por las calles y dejando una nube de polvo a su paso. Reborn vio con diversión desde la ventana del dormitorio, como su estudiante corría con pánico, tratando de llegar a la escuela antes de que sonara la campana. Se rió entre dientes misteriosamente, siempre era divertido ver al moreno de esa manera. Siempre parecía hacer su día.
Por suerte para Tsuna, logró entrar en el momento justo cuando escuchó el toque de campanas. Se dejó caer contra la pared para recuperar el aliento, usando el marco para sostenerse. Algunos de sus compañeros de clase lo miraron y se echaron a reír un poco por su apariencia, haciendo evidente lo que había sucedido. Usando la poca fuerza que le quedaba, se tambaleó hacia su escritorio y se derrumbó sobre él, gimiendo, y colocando la cabeza sobre su mesa. Hundió la cabeza entre sus brazos, con ganas de volver a dormir. Estaba taaaan cansado. Toda esa carrera en la mañana no era bueno para él, sabía eso o pensó eso, pero no podía ser ayudado. Prefiere no pensar en qué pasaría si Hibari se enterara de que había estado faltando a clases luego de llegar tarde. Tsuna se estremeció ante la idea.
Reborn tuvo la culpa también, él no estaba haciendo las cosas más fáciles.
'¿Qué pasa con Reborn? ¿De verdad tiene que despertarme de esa manera? Sería bueno si él me despertara como una persona normal lo haría...' Tsuna suspiro consternado y miró alrededor de su salón mientras se encontraba en clase, el profesor hablando sobre algo desde el frente, escribiendo algo en el pizarrón. No tenía ganas de prestar atención. Era la misma cosa aburrida como de costumbre para él. Nada nuevo. Sus ojos color miel dan una mirada a Gokudera y Yamamoto, que discuten en voz baja entre sí, y se volvió para ver al maestro ahora hacer un escándalo sobre como algún pobre estudiante hizo un comentario en su contra.
El abrir de la puerta corrediza le llamó la atención mientras su mente vagaba por todos lados. Vio entrar a los estudiantes que llegaron tarde, todos agotados con la ropa toda rasgada y cubierta de sangre. Cada uno de ellos luciendo peor que el otro, mientras que algunos tuvieron mala suerte. Hibari había llegado, obviamente atrapándolos.
Tsuna estaba muy contento porque se las había arreglado para salir de eso. Las cosas en la clase continuaron como siempre. Llamado su atención el profesor, por echarse a reír, teniendo que forzar a Gokudera de no volarlo al aula de arriba.
'Realmente no se puede obtener de un día tranquilo. Probablemente nunca...'-gimió Tsuna. 'Mi vida es tan complicada.'
El día terminó con el toque de campana como de costumbre y se fue con sus dos mejores amigos. Sin embargo, no llegó muy lejos antes de que las fans comenzaran a arrastrarlos, más bien, a los dos adolescentes mayores. Tsuna negó con la cabeza por las respuestas de afecto que estaban recibiendo y sonrió. Siempre había sabido que los dos eran muy populares y le hizo sentir un poco desanimado que nunca nadie le siguiera a todas partes a excepción de Haru y la gente que lo quería muerto. Cuanto realmente podía prescindirlo.
A pesar de que deseaba que hubiera una persona en algún lugar de este mundo loco que lo entendiera y quería que sólo tal vez, sólo tal vez, esa persona sería la única para él.
'Ah... pero eso es sólo un sueño. No soy tan afortunado.'
"Juudiame!" Gokudera gritó, todavía irritado de que la mitad de la población femenina de la escuela estaba detrás de ellos. Él habría sacado su dinamita (Tsuna todavía se sorprende de dónde vienen) si Tsuna no lo hubiera detenido. "¿Todo este bien en casa? ¡Volare a cualquiera si te están causando algún problema!"
"¡Hiiiieeee! ¡Gokudera-kun, no! ¡Todo está bien! ¡Perfectamente bien! ¡No hay nada fuera de lo común!" Tsuna replicó rápidamente, palideciendo. "Si vuelas algo, ¡Voy a ser el único en problemas!"
"Ma, ma, Gokudera, no quisiste decir eso. Solamente vas a lanzar los fuegos artificiales alrededor, ¿verdad?" Como de costumbre Yamamoto malentendió.
Los dos comenzaron a discutir de nuevo. Bueno, Gokudera lo hacia y Yamamoto sólo quedaba allí sin pestañear. Estaba empezando a convertirse en casi una rutina para ellos.
Tsuna vio como sus dos amigos fueron atacados por la multitud de chicas, esta vez desapareciendo con ellas. Trataría de ayudarlos, pero las chicas parecían feroces, listas para la sangre. Así que deció que no había nada que pudiera hacer ya que por el momento las chicas se habían disipado, sus dos mejores amigos habían desaparecido de vista. No tenía más remedio que regresar el resto del camino por sí mismo. Justamente vio la parte superior de su casa, un grito agudo le llamó la atención y la reconoció al instante.
Tsuna parpadeó y levantó la vista para ver a un niño con ropa de vaca derrumbarse delante de él. Una nube de polvo cubrió el área pequeña y tosió un poco en ella. Suspiró, ya que se calmo y se golpeó a sí mismo por lo que veía enfrente, antes de dirigirse a ayudar al niño de cinco años.
"Lambo... ¿Estás bien?" Tsuna miró al fondo del hoyo en el centro y suspiró una vez más. El llanto llegó a sus oídos, y como el polvo desapareció por completo, podía ver al niño sentado en el suelo. Lambo lloraba y lloraba, frotándose los ojos en respuesta. "Hey, no llores".
Lambo no lo escuchaba.
Sus ojos se perdían en el arma familiar que estaba tendido al lado del niño, la bazuca de los diez años. Un dispositivo que siempre causó problemas cada vez que se utilizó, la mayoría de las veces... Tsuna sacudió la cabeza y se acercó más, yendo a ayudar al pobre niño. Mientras, algunas chispas salían de la bazooka, pero él no prestó atención.
Más llanto se escuchó y fue cada vez más fuerte. Las lágrimas brotaron en cascada más alto y se agruparon en torno al centro del hoyo.
Tsuna se frota la parte posterior de la cabeza y se arrodilló. Llegando, le dio unas palmaditas a Lambo en la cabeza, con la esperanza de que ayudará a calmar al pequeño niño. "No, no, no hay necesidad de llorar. Todo está bien ahora." Lambo se calmo para respirar. "Vamos, vamos a entrar. Apuesto a que mamá tiene algo bueno para que comas".
Pero antes de Lambo volviera a ser el quejoso que era normalmente, se levantó y cogió la bazooka, apuntando hacia el mismo. Tsuna suspiró por enésima vez en el día, debería de haberlo visto venir. Lambo pronto desaparecería de nuevo y luego el Lambo adulto aparecería para tomar su lugar. Pero justo cuando Lambo iba a apretar el gatillo, I-Pin vino saltando desde el cielo, aterrizando en el de cinco años. Esto hizo que el arma diera la vuelta y en su lugar apuntara hacia...
Tsuna.
"¡E-Espera un momento!"
Pero ya era demasiado tarde, el disparo había sido lanzado. Una nube de humo de color rosa rodeaba la zona. Los dos niños estaban corriendo, jugando y sin darse cuenta de lo que había sucedido.
Cuando se disipó el humo, no había nadie en su lugar.
Tsuna tosió violentamente el humo que había inhalado accidentalmente. Cerró los ojos, tratando de esperar a que se aclarara de modo que pudiera ver dónde estaba.
'¿Por qué yo...? ¿Por qué siempre tiene que pasarme a mí...?' Él se quejó mentalmente y esperó pacientemente.
Eso fue hasta que un extraño olor llenaba su nariz, sacándolo de su estado de relajación.
Sus ojos se abrieron en estado de shock, pero sigue sin poder ver ni siquiera cuando el humo se fue disipando. El lugar en el que había llegado era oscuro y sombrío y tenía la iluminación limitada, casi ninguna. Había algo en el suelo por todas partes, pero no lo pudo saber y cuando él dio un paso, su zapato se hundió un poco en el líquido. Hubo algunos sonidos familiares como una especie de chirrido metálico. También puede escuchar algunos sonidos de goteo en la distancia y el olor que había sido débil debido al humo de antes era más fuerte. Tuvo que adaptarse a la iluminación, tomó ese tiempo para oler de nuevo el aroma. Era un poco un familiar, uno que no tenía ganas de oler... uno que sólo se le ocurría pensar cuando estaba en una batalla.
Luego hubo un clic cerca de su cabeza.
Tsuna se congeló. Se estremeció llenándose de miedo.
Algo helado se apretaba contra su espalda, donde su columna vertebral y los hombros se encuentran.
Y con un jadeo respira, Tsuna sabía que no estaba solo.
En ese momento, el humo desaparecido por completo.
Los grandes ojos miel se ampliaron con lo que veía delante de él. Sintió la tentación de vomitar cuando se dio cuenta de lo que había estado oliendo todo el tiempo. Su piel palideció a un blanco puro y le temblaba el cuerpo. Un sudor frío corría por todo su cuerpo.
Delante de él había cuerpos entre cuerpos apilados a sus pies y pudo ver que había agujeros en el centro de dos pares de frentes. La sangre fluía de los cadáveres y podía saber a simple vista que había sido muy reciente. Sus ojos se perdieron hasta sus pies en un charco rojo que lo rodeaban, un poco había llegado a sus zapatos. Tsuna tragó grueso, el miedo pulsaba más rápido en su ser. Con sumo cuidado se dio la vuelta y se quedó temblando con la pistola que estaba apuntando a su pecho, justo en su corazón que latía en lo más profundo. Tsuna se quedó mirando el cañón del arma subiendo hasta las manos después a la cara.
Él parpadeó por un momento. ¿El hombre lucia... familiar...? ¿Era eso posible?
"¿Chi la sono?" La persona preguntó, ojos negros estrechándose peligrosamente, y empujó el arma más fuerte en la suave y carnosa piel. La frialdad de ambos del arma y la voz, hizo temblar de miedo al adolescente
"¿Qué dijo?" Tsuna alcanzó a pensar. Sus ojos estaban muy abiertos. "¿E-e-eh?"
El hombre levantó una ceja y le habló en Inglés, algo que Tsuna pudo distinguir como."Nombre".
"Oh-Oh, yo-soy Sawada TT-Tsunayoshi..." El guardián del cielo tartamudeaba en japonés. Sus ojos no dejaban de mirar su reloj, esperando a los cinco minutos para volver. ¡El no quería morir! ¡Tenía que salir de allí con vida y con la cabeza de regreso a su propio tiempo!
El hombre parpadeó con la frase, que no lo entendía, antes de reducir sus ojos ante la información una ve que tradujo las palabras en su cabeza. "Usted habla japonés..." Murmuró en voz baja antes de pulsar el arma más fuerte. "No importa, necesito que digas la verdad. No soy un hombre muy paciente y no me gustan las mentiras."
"¡Pero es verdad! ¡No me dispare!" Tsuna se desplazo un poco hacia atrás para llegar a cierta distancia. Sus pies salpicaban en la sangre que tenía debajo, creando ondas en el calmo líquido. A pesar de que el terror corría por sus venas, miró por encima de la persona y vio el conocido sombrero fedora.
No podría ser...
"¿R-Reborn?"
Las cosas de repente cambiaron a lo peor con solo una palabra.
El hombre apretó el gatillo y la bala fue disparada justo al lado de la cabeza de Tsuna, apenas rozando la piel. La bala impactó en un cadáver detrás, chorreando más sangre por el orificio adicional. Esa oscura mirada tan penetrante y si las miradas mataran, Tsuna sería un hombre muerto ahora mismo."¿Cómo sabes mi nombre? ¡Respóndeme o bien la siguiente bala será la última!"
"¡E-Espera!" La cabeza de Tsuna daba vueltas, agitando los brazos frenéticamente delante de él para protegerse. '¿Cómo es esto posible?' Él gritó en su cabeza. Reborn debe ser capaz de reconocerlo. Diez años en el futuro no debe hacer esto una gran diferencia... espera... ¿no debe Reborn ser un bebé? 'No debe ser un adulto... a menos que...' Tsuna recuerda que la bazooka de diez años lanzaba chispas después de haber caído. 'A menos que... esto no es diez años en el futuro... ¿estoy? ... ¿Estoy diez años en el pasado o en algún lugar en ese sentido?' Tsuna palideció aún más, su mente rápidamente ponía las cosas juntas dadas las circunstancias. '¿Podría realmente haber sido enviado al pasado?'
Sus ojos dan una mirada a su reloj con cuidado, siendo consciente de la mirada ardiente que estaba sobre él.
Cinco minutos ya habían pasado.
'Esto... Esto no puede ser... yo no estoy atrapado aquí, ¿lo estoy?' Tsuna estaba en pánico, mirando hacia el Reborn adulto. El hitman era más serio y peligroso que cuando él era un bebé. Un hecho que el sabía faltaba ahora, prefería al que le encantaba tortúralo al que estaba a punto de matarlo. Tsuna no tenía ninguna duda de que este Reborn no titubearía, la prueba estaba a su alrededor.
"Estoy esperando..." Reborn disparo otra bala, esta vez en el lado opuesto. Sin embargo, ese disparo realmente rozo a Tsuna en la mejilla izquierda. Un rastro de hilo de sangre corrió hacia abajo y un par de piezas de pelo volando. Esto golpeó a Tsuna de vuelta a la realidad.
"¡N-no hagas eso! ¡Y si lo digo, no me vas a creer!" Tsuna gritó, llegando a frotar el punto que sangraba y cerró los ojos apretándolos. Eso dolió muchísimo, casi como un corte de papel, pero peor y sintió el líquido caliente correr entre sus manos. Esta situación desesperada, adiós a la vida, fue bonito mientras duró. Graciosamente, el arma bajó ligeramente, Tsuna abrió los ojos para mirar hacia el hombre con incredulidad.
"Inténtalo."
El guardián del cielo parpadeó sorprendido, estaba recibiendo una oportunidad. Justo cuando estaba abriendo su boca, se oyó un clamor de voces en la distancia. Se volvió hacia la dirección en que había oído, su pelo en punta se giro con fuerza. Reborn se dio cuenta también y dejó escapar un "TSK", su pistola se transformó en León, el pequeño lagarto verde.
Reborn se quejó. 'Supongo que encontraron los cuerpos. No pasará mucho tiempo antes de que vengan aquí a investigar.' Sus ojos negros se perdían en el…niño... y se gruñó a sí mismo por lo que estaba a punto de hacer. No podía permitir a persona que conocía identidad vivir y no podía dejar a esa persona aquí, ya que podría hablar al enemigo de lo que había pasado aquí. Aunque el niño hizo despertar su curiosidad, sobre todo por la forma en que había aparecido. Él acababa de hacer su trabajo cuando una nube de humo apareció en el centro y apareció el niño. Él había estado pensando en interrogar al chico, pero por alguna extraña razón, no podía llegar a lastimar al niño (excepto por el corte que le había dado)... y eso era extraño. No va con él, se agachó, agarrando la camisa de Tsuna y tiró al adolescente más cerca de su cuerpo. Miraba estúpidamente los ojos color miel de Tsuna, sin estar seguro de lo qué estaba pasando. "Vamos a salir de aquí... y si intenta escapar. Te pego un tiro."
Tsuna trago, temblando de nuevo por la crueldad en el tono. Él habría llorado en ese mismo momento, si esa mirada penetrante no lo hizo quedarse quieto. Estaba tan asustado, tan asustado, pero obligó a sus pies moverse y asintió con la cabeza. "No voy a... te lo prometo."
Reborn, que dio un paso hacia atrás, miró detrás, con las cejas hacia arriba y luego subió su mano hacia el sombrero bajándolo para ocultar su expresión. Tuvo que admitir que su curiosidad hacia ese... ese chico, no era como si eso ocurriera regularmente, no es que lo quisiera. "Eres un… niño extraño."
El moreno, que había estado esperando una respuesta insultante, se sorprendió. No, este sin duda era Reborn, aún cuando no lo había conocido, era el único y el mismo incluso si el asesino a sueldo era más serio. Él esbozó una sonrisa como respuesta. "Lo sé, no necesitas decirme eso".
El hombre de pelo negro, resopló. "Vamos".
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Chi la sono = ¿Quién es usted?
N/T: Que tal les pareció, espero recibir el apoyo de ustedes con los reviews para esta historia que en lo personal es genial. Si gustan leerla en inglés en mi perfil esta la historia. Estaré subiendo aproximadamente cada semana o cada 10 días un nuevo capitulo así que nos seguimos leyendo.
Matta ne
