Disclaimer: Los personajes le pertenecen a J. K. Rowling.
Este fic participa en el minirreto de enero para El Torneo de los Tres Magos del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.
Y no es rojo, ¡es naranja!
Palabras: 347
Cliché: Ron Weasley infantil
―Y ahí van de nuevo ¿Acaso nunca se van a cansar? ―preguntó Parkinson con resignación; desde la mesa verde todos eran capaces de apreciar la escena.
Era la misma discusión un día sí y otro también, estaban seguros ya de poderla repetir palabra por palabra. En la mesa de los suicidas con complejos de héroe, estallaban en gritos de nuevo, siempre a la misma hora y en el mismo lugar.
―¡Eres un infantil Ron!, ¡No piensas más que en ti mismo…! ―empezó a decir Blaise con despecho fingido y llevándose una mano a la frente mientras veía con expresión sufrida a un Malfoy atragantándose con el cereal.
―¡Yo no soy infantil! ¡Es que eres tú, que no entiendes! ―soltó Nott imitando un tono chillón e inflando los cachetes todo lo que podía. Malfoy ya sin cereal que estorbara tomó el papel del más útil de todos―: Chicos por favor, ¡griten más alto! Todos aman escuchar sus voces en el desayuno.
A su alrededor se empezaban a escuchar risillas en un arrebato de inspiración Pansy transformo un plato en una peluca rojo cereza, Nott la tomó y volvió a hablar.
―¡No te metas! Que tú siempre estás de su parte, ¡soy yo sólo contra el mundo! La víctima, el que todo lo hace mal. ¡Todo yo! ―lloriqueo unos segundos intentando aguantarse una carcajada.
―Pues entonces explícame Ronald, ¡tienes los sentimientos de una cucharilla de té! ¡Y no piensas en nosotros! ―gritó Blaise, mientras golpeaba la mesa con un puño cerrado y hacía una mueca con los labios.
―¡Es que tengo hambre! No es mi culpa que sólo sirvan un plato de jarabe ―gimoteó Nott, mientras el resto de la mesa estallaba en carcajadas.
Dos de los protagonistas originales tenían el rostro enrojecido de vergüenza, mientras el tercero lleno de una furia típica de él con el rostro rojo se levantó a quitarle la peluca a Nott y gritarle antes de irse a zancadas
―¡No discutimos así! Y no es rojo, ¡es naranja!
En la mesa nadie se dio cuenta de que la comadreja se había llevado su jarabe.
Nota: como escribir del trío es una tortura para mí, me fui por la tangente. Tenemos unos Slytherins parodiando una discusión clásica: Granger vs Weasley, en esta ocasión por un jarabe para hot cakes… y como es obvio el humor /parodia no se me da.
