Disclaimer: La serie no me pertenece, evidentemente, es de JJAbrams, Lindelof y compañía.

Spoilers capítulo 21 de la tercera temporada. Para mis lostianas.

AL MISMO TIEMPO.

Levantar la tapa. Bajar el piloto. La luz pasará de verde a roja. Y todo habrá acabado.

Levantar la tapa.

Claire agarra a Aaron con fuerza. Está cansada de la larga marcha, pero no deja que nadie coja al niño. Ahora la necesita, están solos. Echa de menos a Charlie, necesita sus bromas y sus palabras de apoyo. Pero sigue caminando, porque sabe que volverá a verle, que cuando regrese le dirá que nunca más vuelva a dejarlos solos. Espera que no tarden y que se reúnan con Jack y el resto de gente en el punto dónde había escuchado antes decir al médico que podrían encontrarse si todo salía bien. El niño se revuelve y suelta un quejido. "Tranquilo, cariño, ya vamos a llegar, shuuuu". Tiene la sensación de que el niño también le echa de menos, al fin y al cabo, Charlie era la persona que más se había preocupado por ellos. "¿Cuándo acabará esta pesadilla¿cuándo podremos estar los tres tranquilos, para siempre?". Con un peso en el corazón, aprieta con más fuerza al niño contra su pecho y sigue andando.

Bajar el piloto.

Hurley intenta seguir el ritmo de Kate en la cola. Aunque, poco a poco, va siendo adelantado por el resto de sus compañeros. Se para, coge aire y le hace un gesto con la cara a Claire que acaba de adelantarle con Aaron en brazos. Si tan sólo pudiera tener algo de conversación con alguien del grupo. Pero cuando intentaba sacar temas, la gente era reacia a continuar hablando. Entiende que necesitan guardar fuerzas pero, si su colega estuviera allí con él, en ese instante estarían discutiendo acerca de su personaje favorito de X-Men o quizá de su villano preferido en la historia del cine. Con una sonrisa amarga, reanuda la marcha y espera con ansia llegar a dónde sea, y acabar pronto con lo que sea, para poder estar tranquilos una vez más. Y disfrutar de una buena conversación con Charlie.

La luz pasa de verde a roja.

Se despierta con un fuerte dolor en la cabeza. Mira alrededor y tarda unos segundos en darse cuenta de lo que ha pasado. Entierra la cabeza entre las manos y se asoma al borde de la canoa. No hay ni rastro de él. Con pena, regresa a la orilla, ahora tiene algo que entregar a alguien, y además desea con todas sus fuerzas reunirse con el grupo y que todo acabe de una maldita vez, por todos los buenos amigos que estaban perdiendo. Por la valentía de algunas personas. "Descansa en paz, hermano, no todos hubieran hecho lo mismo que tú", dice mirando al mar.

Y todo se acaba.