Hola! Bienvenidos a esta pequeña serie de viñetas, participante en el I Fest del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black. A disfrutar!
Diario de Myrtle, 3 de Septiembre.
"Querido diario:
Hoy he visto por primera vez al hombre de mis sueños, el caballero que me rescatará de esta triste muerte y vagará conmigo por las tuberías. Sus cabellos son como hebras de trigo reluciendo en el campo. Sus ojos, bueno, aún no los he visto de cerca, pero estoy segura de que serán azules como el cielo. Ays, querido diario, estoy enamorada de este hombre. ¡Y qué decir de su personalidad! Es un auténtico caballero, de los de verdad. El otro día escuche como retaba a un muchacho, seguramente insignificante, a un duelo a medianoche, seguro que lo hizo por defender el honor de alguna de sus compañeras de casa, pero no porque tenga algún interés amoroso, claro está. Él me está esperando. A mí. A la granos, la fea, la gorda (Palabra ilegible, seguramente emborronada por las lágrimas) por eso sé que es el hombre de mi vida. Ojalá Olive estuviera aquí para ser testigo de nuestro amor por siempre jamás. Porque claro, voy a tener que matarlo. ¿Cómo sino va a compartir mi retrete por toda la eternidad? Querido diario, le quiero tanto, tanto, que sólo quiero meterle la cabeza en el retrete hasta que se ahogue. He llegado a la conclusión, después de mucho pensar, que esa va a ser la mejor opción. Verás, querido diario, hay un pequeño detalle que no me gusta mucho de mi gran amor, un detallito sin importancia, fácilmente subsanable; el caso es, que lleva una de esas pociones para el cabello masculino, de esas que hacen que el pelo quede todo aplastado y brillante. No me gusta.
Pasan las horas y me doy cuenta de que aún no he reflejado en estas páginas nuestro primer encuentro, ese instante en que nuestras miradas conectaron y supe que estábamos destinados. Verás querido diario, ¡fue tan romántico! Yo estaba en mi wáter, lamentando mi existencia vacía y triste, con las lágrimas como única compañía -está claro que aún no le había conocido ¿vale?- y entonces, un grupo de chicos de primero entraron en mi baño, comenzaron a llamarme, y algo en mi interior supo que había llegado un momento decisivo en mi vida (tachón) muerte. Salí del escusado y algunos de ellos, eran todos Slytherins, comenzaron a lanzarme bolas de papel al grito de ¡Dos puntos al que le de en los pies! ¡Cuatro al brazo derecho! ¡Cincuenta entre los ojos! Entonces, todos abrieron paso para dejar espacio a su líder, mi amor, ¿he mencionado ya que sus dotes de liderazgo me inspiran una gran fascinación? Sea como fuere, él, avanzó lentamente entre sus compañeros, mirándome a los ojos formó una bola de papel entre sus blancas manos, gritó ¡A la cabeza! pero al lanzar su proyectil, éste me atravesó justo por el corazón. Sus compañeros hicieron algún comentario jocoso, pero mientras se retiraba para dejar lanzar a otros del grupo, me dirigió un guiño furtivo. ¿Te das cuenta? ¡Siente lo mismo que yo! Claramente el guiño y la bola de papel a través del corazón eran una señal de que aún sin conocerme, ya estaba prendado de mí. Estoy segura también de que en aquella pequeña bola de papel había escrito una carta de amor, o mejor, ¡un soneto! Seguro que era poesía, tiene cara de poeta, dulce y tierno. Probablemente se pase los días escabulléndose de su sala común, sólo para poder sentarse en el alféizar de algún gran ventanal y contemplar las puestas de sol. Mi amor, ¡es perfecto!
Querido diario, siento dejar mi relato a medias, pero Olive Hornby sale de trabajar en un rato y quiero ir a contarle mis novedades. ¡Besotes!"
Poco a poco la infantil caligrafía de Myrtle va desapareciendo para dar lugar a otra, más estilizada
"Querido diario. Mátame ya, si lo llego a saber no le azuzo el basilisco a esta pedorra"
