Hola a todos estoy aquí con una nueva historia, espero que os guste mucho.

Es un Gelius o Ice y Caty o Hitomi. Espero que os guste.

Utilizaré los nombres: Gelius en vez de Ice. Lavana en vez de: Keino. Silvano en vez de: Deser. Silvio en vez de: Dazzle. Ritmi en vez de: Rizumi. Profesor Gobios en vez de: Profesor Shinbara. Óseo en vez de: Mirakado. Adulio en vez de: Wheeler. Presidente Bruno Haz o Albo Haz en vez de: Black Hole Presidenta Edna en vez de: Presidenta Sasako. Sete en vez de: Seven. Isaac en vez de: Brook Iori. Ribero en vez de: . Hilario en vez de: Keramu. Elisa en vez de: Elaine y Gasofo en vez de: Ollie.


Primera Fase: Negación

Recordó todos los detalles de aquella chiquilla. Sus ojos azules grisáceos, su rostro no muy blanco, esa sonrisa y esa decisión en su rostro. Su cabello amarrado en dos coletas bien puestos dándole un aire infantil. Aunque no lo era. Era toda una mujer, su cuerpo contorneado y delgado, debido a la cantidad de ejercicio físico que hacía, a pesar de que siempre comía mucho y a prisa para poder comer más, era imposible que engordase. Los kilómetros y kilómetros que hacía para proteger a la ciudad de él y sus subordinados. Era increíble, simplemente increíble. Soportaba los estúpidos deseos egoístas de la gente y traía Pokémon sin rechistar, ayudaba a los demás para no recibir nada a cambio. Tan dulce, tan sensual y tan buena.

¿Pero en que demonios estaba pensando? Ella era una simple niña estúpida que solo se entrometía en sus planes, y él debía pararle los pies.

Gelius avanzo hacia la fortaleza donde su jefe le esperaba.

-Gelius, te mando una misión- dijo el presidente Bruno Haz.

Gelius miro decidido a su jefe, estaba dispuesto ha hacer de esa misión la mejor, asintió como aceptando la misión.

-Bien, debes mirar a ver si esta en esta época, Celebi el Pokémon viaja tiempo- hablo el presidente de ALTRUS S.A.

-De acuerdo- afirmo Gelius con una gotita de esperanza de no encontrarse con Katy, pero siendo una de las mejores Top Rangers de Almia, seguramente la vería por todos lados, seguramente ya estaba investigando como ellos. -¿Y donde se encuentra el Pokémon, según los rumores?- pregunto Gelius mirando a su jefe.

-En el bosque Vento- respondió simplemente para darse la vuelta -Puedes irte- respondió simplemente. Gelius obedeció su jefe tenía muy mal humor y no deseaba cabrearlo. Suspiro y se encaminó escaleras abajo, los reclutas comenzaron a seguirlo, necesitaba a alguien que le ayudase para distraer a los Ranger de la base Ventópolis, caminó a fuera de la base y miro a los reclutas.

Tan ineptos, no podían ni parar a un Ranger local, por eso el no estaba contento con el servicio. Entendía que no pudiesen con un Top Ranger, ¿pero con uno local?

-Bien. Yo me voy ya, id viniendo y cubrid todo el bosque lento mientras yo me acerco a las profundidades- respondió cortante el peliazul.

~0~0~

Suspiró pesadamente, se dirigía a una misión con el charlatán de Sete, que no paraba de alardear sobre su increíble racha de victorias y triunfos en las misiones. Odiaba ese lado chulito, sobre todo cuando solo se trataba de impresionarla.

-Bueno, Cat- abrevió su nombre, cosa que no le gusto, así solo la llamaban Silvio y Ritmi.

-Caty- le rectificó al Top Ranger.

-Caty...- dijo cambiando el nombre con una mirada extraña -Recuerdas cuando nos conocimos?- pregunto con galanura, Caty le miro un poco asustada.

-Eh... sí...- respondió de forma pausada con un poco de miedo en su voz por su significado. Ya había salido con Ritmi y Linda a la vez, ella no iba a meterse en medio. Oh, no! Claro que no.

-Pues nunca había conocido a una chica tan guapa como tu... Una rosa que cualquiera envidiaría- respondió extendiendo una rosa roja, del mismo color de su uniforme, aunque Caty sabía el significado de las rosas rojas, AMOR. Caty lo miro de reojo y se empezó a poner nerviosa ¿que iba ha hacer si el intentaba besarla? De pronto como un rayo se le ocurrió un plan perfecto para evadir los besos y hacerse la inocente, dándole a entender que todavía era una niña y no entendía de eso.

-Oh, a juego con mi uniforme!- Respondió con alegría fingida -Impresionante Sete, seguramente quedase bien en el pelo, pero tengo miedo de romperla, así que la dejaré aquí- se agacho y la colocó en el suelo alejado un poco de todo. -La recojo después, venga dividamosnos, tu por la derecha y yo por la izquierda, ya sabes hay que mirar si es cierto que Celebi el Pokémon viaja tiempo está aquí- Caty salió corriendo sin dar tiempo a reaccionar a Sete, aunque Sete sabía que eso había sido un rechazo, posiblemente tuviese sentimientos o por Silvio o por Isaac, el no tenía posibilidades, así que fue por el camino de la derecha intentando buscar y concentrarse en Celebi aunque después de un rechazo no tenía muchos humores.

~0~0~

Gelius avanzaba a gran velocidad por el cielo, montado en su Staraptor. La verdad es que estaba esperando a encontrar alguna señal de un pokémon rápido y ágil. Nada. Normal, demasiado verde para su gusto. Mando a su Staraptor que lo dejase en el suelo y esperase ordenes que ya lo llamaría él.

Gelius avanzo por el bosque, cuando el caminó se dividía en dos. Sabía que por el derecho estaba el Ferro Mirador, y que allí mucha gente los vería y Celebi se asustaría, así que opto por el camino de la derecha, pero en ese momento se fijo en una rosa roja.

-Una rosa...- la olió, un dulce aroma, suave con un perfume nunca olido en una flor, era el de Caty. Miro atento la flor, sabía que significaban las rosas rojas. Amor. La furia ardía en ella, no soportaba esa idea, no soportaba que alguien se hubiese declarado a Caty. Un ruidito en el comunicador de su brazo derecho hizo que desviase su mirada a él. Lavana lo llamaba.

-¿Qué?- respondió seco, no tenía humor para juguetear y tontear con Lavana.

-Oye, que soso- se quejo la chica, sabía desde hace mucho que Lavana se moría por sus huesos, pero él ya no estaba interesado en ella, aunque sí, se acostaban varias veces, pero en su mente solo estaba su preciosa Caty, un momento ¿qué acaba de decir? Se pego unas bofetadas y desperto con la voz de Lavana -¿Ya no me llamas nena o qué?- respondió con tono molesto.

-Apresúrate a decir lo que quieres, tengo una misión- se quejo Gelius mirando el comunicador, no podía estar pensando en esa Ranger de tres al cuarto.

-Te llamo por la misión! Imbécil, te quería decir que han detectado dos Top Rangers, la mocosa está por el sendero que estas siguiendo y el top Ranger que tiene un Luxray con él por el de la izquierda, los locales están en la zona sur, donde están los reclutas- dijo la chica.

-Gracias- colgó sin despedirse. La rabia ardía en él, así que ese era el que había regalado la rosa a Caty. Cambio de sendero y se dirigió al izquierdo, ese desgraciado se arrepentiría de haber intentado algo con SU Caty.

Cuando reacciono se paro en seco. El no quería nada de ella, pero por que se sentía tan furioso entonces? Seguramente era porque no le había sentado bien ver que Lavana estaba tanto con Óseo, si posiblemente fuese eso.

Miro los dos senderos, ya no sabía cual coger, por un momento deseo no haber sabido por cual sendero estaban los Rangers, pero por otro se alegraba, quería arreglar los asuntos con el pijo del Luxray.

Miro el izquierdo, se iba a cagar. Nadie, se declaraba así a Caty, seguramente le había dicho que la quería, la había besado de improvisto y ella se habría asustado y habría salido corriendo.

Si esa era la verdad... lo mataría, lo mataría, miro a su Froslass que lo acompañaba.

-¿Que tal una tormenta helada?- pregunto sonriendo.

Su Froslass obedeció y creo con gran maestría una tormenta helada, helando el bosque Vento con esta suerte, podría localizar los Pokémon.

-Staraptor, busca a Celebi- ordeno Gelius y se dirigió sendero derecho, para buscar a ese Ranger.

~0~0~

-Correo de voz, correo de voz- sonó la voz de Ritmi en el capturador.

-Caty al habla, ¿sucede algo?- dijo a la par que se frotaba los brazos, empezaba a hacer gran frío, por no hablar de que a su impresión había un poco de nieve. Y eso era raro en Ventópolis siempre hacia buen tiempo.

-Hemos detectado que hay una gran nevada en tu zona, ¿habéis descubierto algo, mi Setecito y tú?-

Caty sintió un escalofrío, sin duda no quería contarle lo de la rosa a Ritmi, pero por otra debía hacerlo. -Sete y yo nos hemos separado para buscar mejor, y si. Yo también noto que hace más frío, seguramente coja un buen resfriado... o una pulmonía.

-No deberíais separaros, la Presidenta Edna me ha dicho que shkjbdjasqbkaswjhqdjhnsqksnk qnskjq- dejo de tener señal y Caty se cago en todo, ahora tenía un recado de Edna, aunque seguramente fuera una pregunta de las suyas, siempre se preocupaba por sus "tesoros" y entonces, le preguntaría y te diría si quieres continuar la misión, pero Caty nunca se rendía.

Siguió caminando rastreando la zona, hasta llegar a un punto sin retorno, el rió estaba congelandose, pero estaba demasiado frío para probar a pasar por el. Miro a su acompañante Pachirisu.

-¿Estas bien, pequeño?- pregunto Caty, Pachirisu temblaba de frío. -Toma mi chaleco- Caty envolvió a su Pokémon con su chaleco, quedando en manga de sisas, se frotó los brazos. -Debemos buscar a Sete...- miró la tormenta de hielo -Esto no me gusta, demasiado hielo... y si le ha pasado algo a Sete...-

Caty siguió andando más rápido preocupada por su compañero.

~0~0~

Gelius se topo con el ranger del Luxray al fin, estaba furioso, y la gran tormenta solo le hacía más fuerte.

-Vaya, vaya, vaya- dijo Gelius sosteniendo la rosa en sus manos, Sete se giro tiritando un poco, sus ojos se fueron a la flor, con la que Gelius jugaba.

-¡¿Que demonios?!- grito furioso aun tiritando -Esa rosa no es tuya, es de Caty-

Caty... claro que sabía que era de Caty. Normal saberlo, tenía aun su dulce olor imprignado, suspiro con superioridad. -Lo sé, por eso he cogido la flor de mi querida Metepatas- se burlo de él.

-Dame esa rosa- exigió Sete con mucho malhumor.

-Pelea- reto con superioridad Gelius. Pero antes de que este último pudiera ordenar a su Froslass atacar, el Ranger de nombre Silvio compañero de Equipo de Caty apareció.

-¡Sete!- grito Silvio mirando alertado al Ranger mayor.

-Que haces aquí Silvio?- pregunto.

-Estela y yo hemos venido a buscaros, la tormenta de nieve es muy fuerte y ninguno de vosotros respondía al capturador, a ti te localizamos, pero hemos perdido la señal de Caty. Estela ha ido a buscarla!- la voz de Silvio estaba asustada y con miedo, temblaba de frío, pero los nervios eran mayores.

Gelius se paralizó su Caty había desaparecido ante todo este embrollo, quería salir corriendo y buscarla. Estaba deseando hacerlo, pero entonces se acordó ella era una simple enemiga y NUNCA, podrían estar juntos.

Apretó sus puños, hasta que el ruido de un Staraptor hizo que se girase, la chica de pelo verde estaba allí y traía a Caty en brazos.

-Chicos la he encontrado, es hora de salir de aquí!- respondió Estela, echo una mirada a Gelius. -La Ranger Ariadna- dijo con cierto mal humor -Traera unos pokémon de fuego para eliminar la tormenta, así que ya da igual, al parecer Celebi, no está asi que, no perdamos el tiempo, Caty tiene el pulso muy bajo!- Dicho esto Estela salió volando hacía la unión Ranger, Sete se subió al Staraptor de Silvio, todos los Rangers se fueron.

Gelius apretó la rosa, contra sus dedos, provocando un corte, debido a sus espinas, estaba furioso consigo mismo, Caty había resultado dañada en un ataque de furia de él, observo la rosa y la pisoteo.

-Staraptor, llévame a cerca de la unión- dijo Gelius a grito pelado, saliendo de aquel bosque helado.

Su intención era colarse en la habitación de Caty como muchas veces había echo solo para molestarla. Pero esta vez, sería de disculpa.

~0~0~

Despertó en su cuarto y miro a ambos lados, su habitación en la Unión Ranger. Estornudo fuertemente.

-AAAATCHÍÍÍÍÍS!-

-Salud- La voz suave pero intensa a sus oídos, se giro a verlo, Gelius, de nuevo en su habitación, frunció el ceño y colocó las manos en sus caderas, se sentó en pose indio y le miro seriamente.

-No puedes estar aquí- dijo con voz cabreada pero suave.

-Me parece que sí puedo- respondió burlándose de ella.

-No, Gelius, tu no puedes estar en una base del bien- se quejó ella.

-Ah y tu puedes colarte en la nuestra, pero no en la vuestra-

-Yo no me he colado en vuestra base- se defendió Caty.

-El carguero, la plataforma petrolífera- dijo con una sonrisa al salirse con la suya.

-PERO YO NO HE ENTRADO EN TU CUARTO!- se ruborizo Caty tapando su rostro.

-Se que no te molesto, no finjas- se burlo sonriendo. Cuando estaba con ella se olvidaba de negarse que no sentía nada, ella era tan... ideal. Perfecta. No hay palabras para describirla.

Al final Gelius terminó riendo ante el rubor de Caty y ella se sumó a él, cuando las risas acabaron, ambos se miraron a los ojos. Gelius fue acercando su cara para besarla pero en el momento de rozar sus labios, Caty se aparto y comenzó a estornudar ruborizada, Gelius no sabía si lo había echo por no besarlo o por que de verdad tenía un fuerte catarro.

Posiblemente era un rechazo, sabía de los admiradores de la joven y no eran pocos. El tipejo de hoy, Silvio Despitadón y el Profesor Isaac, además el era mayor que ella, tenía 25 años y ella 17, era mucho más mayor. Y esa era una razón, aunque Caty estaba ruborizada y eso podía ser que solo era por el catarro.

-Y a que has venido?- estornudo de nuevo y lo miro, ya con su rostro nada ruborizado -Siempre vienes con motivos, bien sea para fastidiarme o te apetece contarme cosas pero dejarme en lo mejor sobre vuestros planes. Hoy por que es?-

-He venido a pedirte perdón- hablo Gelius con pesar.

Caty puso una cara rara, sin entender el por que, gesto que fue entendido por Gelius.

-Yo he sido quien causo la tormenta de hielo-

Caty le miro con una sonrisa, eso era lo que le parecía encantador, sonreía sin importar que alguien se confundiera, mostraba esa preciosa sonrisa sin importar el que y el donde.

-Ya lo sé, y no debes preocuparte, el uniforme es corto y como no pensé que fueses tu quien haría la misión me deje el térmico aquí, asi que no te culpes-

Por que era así?! Siempre autoculpándose y dejando que no sufrieras, solo echándose a ella misma las culpas, mientras que el culpable fue él, por no pensar en ella, a pesar de que sabía que estaba ahí.

-Porqué?- se pregunto en bajo y se lanzo a ella, quedando encima de ella, el rubor volvió a Caty.

-Ge...Gelius...- dijo ruborizada.

-Porque siempre te esfuerzas por escucharme!? Porqué? Porque no me echas la culpa o me pegas? Desquítate conmigo!- grito esto ultimo, quedándose al fin a gusto, pero aun así, quería escuchar una respuesta -Porque?-

-Desde ese día...-

Gelius abrió los ojos, ese día, ese día. Sabía de que hablaba. Se levanto y extendió las rosas rojas, con una colada azul por el medio.

-Verás, tu siempre vistes rojo al ser Ranger y yo azul, las rosas rojas, significan tu vestuario y la azul, yo. No vayas a pensar mal...

Dicho esto se escapo por la ventana, dejando sola a Caty.

-No vayas a pensar mal...- repitió sus palabras. -Se que no aceptas los sentimientos, ninguna clase de ellos, pero yo he aceptado que eres especial cuando estas conmigo...- resoplo y se apoyo en la pared cerrando lo ojos, Gelius, siempre sería un tempano frío que no podría sobrevivir en un desierto como era ella.

~0~0~

Siempre se había negado a sí mismo que ella no significaba nada, pero cuando estaba con ella, todo cambiaba, ella era de él y solo lo miraba a él, siempre sonreía y le escuchaba a pesar de que eran enemigos, las dudas llegaban a su cabeza y la llenaban sin poder aclararse nada de eso.

Suspiro hondo.

-Debería aclararme ya esto...- miro la ventana del cuarto de Caty y salió en su Staraptor. Hoy no lo haría, tendría que alejarse una temporada y descubrir que sentía...

Final del capítulo, el segundo se llamará Segunda Fase: Deseo.

Espero reviews.

Y lo sé, es una pareja curiosa y rara, pero es que Gelius es tan mono! *3*

Espero que os haya gustado. Nos leemos

REVIEWS, y gracias :)