Mi querido Ciel Yandere

(CielYandereXFemAlois)

Mansión Trancy

La condesa Aloise Trancy y su hermanito Luka recibirían la visita del conde Ciel Phantomhive, un amigo de la condesa Trancy y por quien ella tenía sentimientos, por lo que le dio a Hannah y a los trillizos para que todo fuera perfecto, ella quería causarle una buena impresión al conde Phantomhive. Mientras Luka de ya casi 10 años parecía no estar muy contento con la visita de Ciel y Aloise noto el estado de animo de su hermanito.

—¿Que pasa Luka? ¿Porque pones esa cara? – pregunto Aloise

—No…es nada

—Anda dímelo

—No quiero que ese conde venga aquí – dijo Luka mirando al piso

—¿Porque?

—No me agrada, es malo, yo lo se

—Tranquilo, nada va a pasar y nos divertiremos ¡Olé!

—Como usted diga, su alteza

Luka no entendía porque su hermana no veía como era realmente ese Conde, a Luka no le agradaba hasta muchas veces le dijo que era malo pero su hermana hacia oídos sordos a lo que decía su hermano. A las 4 de la tarde llego Ciel Phantomhive con su mayordomo Sebastian y un ramo de jacintos azules, la flor favorita de la condesa Trancy la cual se emocionó al ver el regalo que le traía Ciel.

—Aloise, hoy te vez más hermosa que de costumbre

—Ja,ja! Gracias, tu también te vez bien

—Traje jacintos azules, sé que te gustan mucho, Aloise

—Muchas Gracias Ciel, me encanta

Ambos condes entraron a la mansión pero aun así a Luka no le gustaba la presencia de Ciel y menos la de su mayordomo pero su hermana le dijo que todo estaría bien aun así no le gustaba la idea de que su hermana mayor pasara tiempo con ese conde Phantomhive, él le daba mala espina pero cuando el niño pelirrojo se disponía a subir la escalera para entrar a la mansión junto con su hermana y su invitado, Sebastian, el mayordomo de los Phantomhive lo detuvo.

—Espere, amo Luka

—Q-que quiere?

—Mi joven amo a notado que usted no simpatiza con el

—Se nota mucho?

—Si pero mi joven amo quiere hacer las paces con usted, amo Luka

—En qué forma?

—Tiene un regalo para usted

—No me interesa, él no me agrada – dijo Luka retirándose

—Espere amo Luka, tan solo vea el regalo

Al demonio no le costó mucho convencer al niño y Luka fue con él a pesar de que no estaba muy seguro de lo que estaba haciendo. Mientras tanto Ciel y Aloise cenaban juntos y reían, en un momento Aloise se dio cuenta que su hermanito no estaba y le hizo una seña a Thompson para que se acercara.

—Ve a buscar a Luka – le ordeno la rubia

—Sí, su alteza

Ciel noto que Aloise parecía preocupada y se acercó a ella.

—Que pasa mi princesa?

—Mi hermanito Luka no está, estoy preocupada

—Tranquila le dije a Sebastian que jugara con él. Quiero que estemos solos

—Solos? – dijo Aloise con los ojos bien abiertos

—A si es, mi mariposa

Ciel tomo uno de los mechones del cabello de la condesa Trancy entre sus dedos, aunque Aloise le gustaba tenerlo cerca había un problema y ese era que Ciel estaba comprometido con Elizabeth, una cabecita hueca, pero se lo había dicho miles de veces y se lo iba a decir una vez más.

—Estas comprometido, Ciel, y te lo he dicho miles de veces que si quieres algo conmigo ¡deja a Elizabeth!

—Dejar a Elizabeth, le he pedido miles de veces a Elizabeth terminar pero ella se reúsa

—Ese no es mi problema – dijo Aloise inflando los cachetes

—Pero, mi mariposa, tengo una sorpresa para ti – dijo Ciel

—¿una sorpresa para mí? – la rubia estaba emocionada

—Sí, mi mariposa, está allí

Ciel señalo una caja de regalo color rosa con una cinta roja, Aloise se emocionó cuando la vio y fue corriendo a abrir el regalo pero su sonrisa de felicidad cambio a una mueca de terror al ver que eran huesos humanos, Aloise totalmente aterrada tiro la caja y los huesos cayeron al piso, Ciel se rio psicóticamente.

—Qué significa esto?! – pregunto Aloise ofendida

—Son los huesos de la familia Midford, Lizzy incluida

—Que?

—Tuve que hacerlo mi mariposa, Lizzy no entendía razones y los Midford te hubieran maltratado, yo impedí todo eso

—Yo…no quería esto

—Pero mi mariposa, era necesario

Aloise estaba paralizada y pudo ver los ojos opacos de Ciel, este no era el Ciel que ella adoraba era un loco y si fue capaz de hacer eso, que le haría a ella si lo rechazaba, Aloise se puso a llorar del miedo. Al verla llorar Ciel abrazo a Aloise.

—Mi mariposa, mi Aloise, ya no llores. Nunca perdonare a mi tía Frances y a Elizabeth por hacerte llorar

—Suéltame! – exclamo la rubia empujando a Ciel

Aloise como pudo corrió a la puerta para salir de allí, estaba aterrada y no quería estar cerca de Ciel pero Timber y Canterbury le impidieron el paso; este acto de sus lacayos desconcertó a Aloise, ellos eran sus sirvientes demonio ¿Por qué la estaban traicionando?

—Salgan de mi camino! – exclamo Aloise

—No podemos, su alteza – dijo Timber

—Usted, debe hacer caso a su prometido – dijo Canterbury

—Pro-prometido?

—Así es Aloise, ya que Elizabeth no está, tu eres mi prometida ahora

—Que?

—Estaremos juntos – dijo Ciel abrazando a Aloise

La rubia estaba aterrada, este definitivamente no era su Ciel y lo que le profesaba no era amor sino obsesión, posesión y locura.

—¿Y si me niego? – pregunto la rubia

—No te negaras, te conozco

—No es verdad!

—Claro que te conozco, mi mariposa

En eso las puertas se abrieron y apareció Sebastian con Luka, el mayordomo le tapaba la boca al niño el cual lloraba y con la otra mano apretaba el cuello del niño amenazándolo con romperle el cuello.

—Odio todo lo que se interponga entre tú y yo, aunque sea el aire – dijo Ciel

—No! Suelta a Luka!

—Porque debería dejar vivir a ese mocoso grosero? – pregunto Ciel con los ojos opacos

—Porque seré tu prometida si lo dejas vivir!

Hubo un silencio incómodo y Luka lloro más pero era lo que Ciel quería escuchar.

—Me lo prometes mi mariposa? – pregunto Ciel tomándola del mentón

—Si,si,si….pero deja a Luka en paz, es todo lo que tengo

—Ven conmigo a la mansión Phantomhive y tal vez lo dejare vivir

Aloise acepto irse con él y dejar a Luka solo en la mansión, aunque al cuidado de Hannah quien recibió la orden de cuidar y proteger al nuevo conde Trancy, Luka, ya que puede que nunca más la rubia lo volviera a ver.

—¿Que va a pasar con Luka? – pregunto Aloise

—Ese niño insolente vivirá si haces lo que te digo

—Luka no es insolente

—Claro que lo es! He intentado ganarme su afecto solo por ti pero ese niño solo me ignora pero no importa, ya nunca más lo volveremos a ver

Aloise aguanto unas lágrimas de terror y tristeza: terror por conocer al verdadero Ciel y tristeza de ya no volver a ver a Luka, quien noto la reacción de la joven rubia y sonrió.

—Cuando lleguemos a la mansión ¿le gustaría comer algo? Señorita Aloise – pregunto Sebastian

—No - dijo Aloise mirando al piso

—Oh, mi bella mariposa, todo estará bien. Nos casaremos y tú pasaras a ser la condesa Phantomhive

—Como digas, Ciel

Aloise estaba cada vez más asustada y más al ver los ojos opacos de Ciel, completamente loco de amor por ella. Cuando llegaron a la mansión Ciel presento a Aloise como su nueva prometida y que desde ahora en adelante viviría aquí, Aloise, luego fue llevada a su nueva habitación decorada con rosas rojas y jacintos azules.

—Mañana la señorita Nina vendrá a hacerte su vestido de compromiso, descansa mi amor – dijo Ciel

Ciel le pidió una sonrisa y Aloise sonrió como pudo, Ciel la besó y con esto Aloise lo entendía todo. Ahora era suya y estarían juntos por siempre. Ahora era su mariposa, de él y de nadie más.

Porque pone esa cara, su alteza? Rescate lo positivo

Dijo una extraña araña en un rincón de la habitación.