EL CUARTO DEL REQUERIMIENTO
DISCLAIMER: No poseo a ninguno de los personajes que aparecen en los libros de la saga de Harry Potter, esos pertenecen a J.K.Rowling. Ya quisiera tener algo tan bueno. Si de casualidad hay algo que se parezca a la realidad u otros libros o hechos ya existentes, es pura coincidencia, y por lo tanto tampoco los poseo.
Espero que les guste, manden sus reviews.
Esta historia empieza luego de Halloween, pues en esa fecha Harry logró derrotar a Lord Voldemort finalmente. Es así que el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería reabrió sus puertas para empezar un año escolar atrasado y jorobar el año sabático que creyeron conseguir los estudiantes.
En sexto año, Harry empezó a salir con Ginny, y Ron con Hermione. Pero ninguna de estas parejas funcionó por más de dos semanas, cada uno sentía que algo no iba bien y todo terminó sin romper su amistad. Además, si no hubieran ido mal ¿Cómo lograría contar una historia de amor entre Harry y Hermione?
Para este 7º año, Ginny comenzó a salir con Neville Longbottom, y por lo visto les iba bastante bien.
Yo: ¿Raro no?
Pero los 3 amigos seguían solos.
Una semana después de Halloween, Neville y Luna conversaban mientras que Ginny iba a sus clases de Aritmancia. Cuando ella se perdió de vista apareció Draco y comenzó a molestar a Neville, ¿Qué otra cosa si no? Pero no se dio cuenta que alguien llegaba justo cuando planeaba lanzar un hechizo.
Draco: Cru…
Ron: ¡EXPELLIARMUS!
Justo a tiempo, para evitar que Draco dijera su hechizo, pero Draco esquivó el Expellilarmus y este reboto en un espejo que se encontraba tras de él haciendo volar a Ron por los aires.
Draco estaba más satisfecho que si hubiese molestado a Neville y se fue riendo abiertamente.
Luna corrió a ayudar a su valiente Ron.
Yo: Sí, se enamoró de él así de rápido, no puedo perder mucho tiempo con ellos, la relación principal es la de Harry y Hermione.
Bueno, como iba diciendo, Luna se lanzó hacia su Ron, y lo abrazó consiguiendo que él se pusiera tan rojo como su cabello, soportando hasta que no pudo más con el dolor y se desmayó.
Luna y Neville lo llevaron a la enfermería. Según la Sra. Pomfrey, el hechizo de Ron había sido mal hecho y había tenido ciertos efectos secundarios que lo harían dormir toda la noche.
Yo: Tenía que ser Ron.
Antes de esto, Harry iba corriendo por los pasillos para encontrase con Ron. Se le había hecho un poco tarde por haber estado discutiendo sobre Quiditch con un Ravenclaw.
Sin darse cuenta, giró a toda velocidad por una esquina y tropezó con Hermione, derribándole de las manos todos los libros que recién había sacado de la biblioteca. Afortunadamente ninguno de los chicos recibió un golpe directo, lo cual hubiese sido muy doloroso… y gracioso, pero se supone que es una historia de amor.
Los dos se agacharon para recoger los libros y en un momento dado, ambos pusieron sus manos en el mismo lugar al tratar de recoger el último libro que quedaba en el suelo. Al contacto, ambos retiraron rápidamente sus manos y se vieron directamente a los ojos.
Harry y Hermione (para sus adentros): ¿Qué es esto que siento?
En ese momento apareció la señora Norris dando un leve maullido. Con esto, los dos recordaron a donde iban y salieron apresurados en distintas direcciones diciendo unas rápidas palabras.
Hermione: Ya es tarde para mi clase de Runas mágicas.
Harry: Ron debe estar queriendo matarme.
Yo: Seguro se preguntarán que pasó con el libro. Bueno, como es de suponer en Hermione, ella no lo había olvidado y se agachó justo antes de salir corriendo.
Harry corrió rápidamente y cuando llegó al lugar donde debía estar Ron escuchó.
Alumno de Hufflepuff: Fue muy gracioso.
Alumno de Ravenclaw: Pero ahora Ron está en la enfermería.
Al escuchar esto, Harry tenía toda la información que necesitaba y salió corriendo en esa dirección. Cuando llegó encontró que Hermione ya estaba ahí, con Luna y Ginny. Ron estaba durmiendo.
Hermione (respondiendo a la pregunta que se formó en lo ojos de Harry): Ginny me encontró camino a mi clase, ella venía para acá y me dijo lo que pasaba.
Harry: ¿Y cómo está Ron? ¿Qué le pasó realmente?
Luna contó lo que había pasado, pues Hermione y Ginny recién habían llegado y tampoco sabían mucho.
Sra. Pomfrey (entrando de repente): No se preocupen, él va a estar bien, pero ahora tiene que descansar, así que por favor, retírense.
Hermione: De todas maneras tenía clases.
Y con esto, todos se fueron del lugar, ya regresarían después de clases a verlo.
Cerca de las 6 de la noche, Harry y Hermione fueron a visitarlo, Luna había ido un momento al baño.
Yo: Sí, estuvo a su lado todo el tiempo.
Ron seguía dormido, y se hizo un silencio incómodo entre ellos.
Harry (pensando): ¡Oh, Hermione! No puedo dejar de pensar en ti. Pero no se si tu sientas lo mismo por mí.
Hermione (también pensando): ¡Harry! ¿Cómo sé si tú sientes algo por mí? No quiero que nada le pase a nuestra amistad, la verdad tuve suerte con Ron al terminar tan bien.
De pronto entró Luna, y les dijo que parecía que iba a dormir toda la noche por la poción que la Sra. Pomfrey le había dado, así que ambos se fueron.
En la noche ya muy tarde, Ron se despertó un momento, y se quedó muy asombrado cuando vio que Luna seguía allí, a su lado. Se había quedado dormida en su silla. Se veía tan hermosa y serena. Nunca creyó que alguien pudiera hacer algo parecido por él. Pero, ¿por qué lo hacía? Y ¿qué era eso que sentía crecer en su pecho?
Yo: No, no le crecía vello.
Ron (pensando): ¿Estaré enamorándome de "Lunática Lovegood", no puede ser, ¿o sí?
Después de pensar esto se agachó y besó a Luna en la cabeza, ella sonrió entre sueños. Él se quedó muy sorprendido por lo que acababa de hacer. Se volvió a echar pensando en esto hasta que se quedó dormido.
En la mañana, temprano. Luna seguía sentada ahí, a su lado, y lo miraba con una gran sonrisa.
Luna: Esperaba que despiertes para acompañarte al comedor.
Ron, en un impulso se le acercó y la besó. Ella solo se dejó llevar rodeándolo con sus brazos.
En ese momento se oyó un - Ehem -. Eran Harry y Hermione que justo llegaban para ver a su amigo. Ron y Luna se separaron casi de inmediato.
Ron: Les presento a mi enamorada… Claro, si ella acepta.
Luna (muy emocionada, algo poco común en ella): ¡Claro que sí! (Y saltó de su silla para abrazar a Ron).
